Obviando absolutamente todo lo que Ryan dijo, se quedo quieta y helada al escuchar la puerta.
-¿Crees que es el animal intentando entrar donde están ellos?-Le susurro oído un tanto asustada, aunque sin querer demostradlo.

—Yo qué se, Flo, pero no hemos dado una imagen muy estelar precisamente ahí abajo. Denis tiene el pie destrozado, Ursula ya va más fumada que en una fiesta universitaria, y Rick perdería un pulso contra un yorkshire, así que, o hacemos algo, o va a ser una muerte segura, pero estoy acojonadísimo.

La mente de Ryan, normalmente suspendida en una suave ensoñación, ahora se debate entre bajar y ayudar a sus colegas o simplemente coger a Flo y saltar por la ventana. Pero en ese momento, a su cabeza acude la imagen de Tannia. Por ella había aceptado unirse al programa de los cojones, y por ella sería capaz de bajar al infierno.

Traga saliva. Y reza porque los de abajo se hayan puesto a salvo.

—Mira, tenemos que bajar de todos modos si queremos salir de aquí, y parece que el bicho tiene problemas para entrar en el vestíbulo.

Rick pregunta algo pero no me da tiempo a contestar antes de que la puerta empiece a sacudirse ante las embestida de lo que sea que hay al otro lado de la puerta. Aguardo un momento de silencio, y es cuando me fijo que yo tengo el walkie de la jefa en la mano. Así se lo indico a Rick. De momento no hago ruído, intentando escuchar algo fuera, pisadas, la respiración de aquel bicho, lo que fuera que delatara que seguía ahí esperándonos.

-¿Morir?-La redactora no comprendía las palabras del músculos del grupo, aun quería saber que le había pasado realmente durante esas dos horas desaparecido, porque era evidente que algo lo había traumatizado a un nivel importante, pero no era el momento.

-Espera Ryan, vamos a bajar pero lo hacemos lentamente y nos asomamos con el mayor sigilo posible, no quiero que esa fiera nos ataque a nosotros al asomarnos, eso si es de locos.-Comento desde su espalda.

Sacudo la cabeza, mientras miro fijamente a los que estamos allí encerrados. 

De pronto la puerta comienza a sacudirse con violencia, y doy un respingo. Tras unos segundos de tensión todo vuelve a la calma.

- Eso no era un perro... - alcanzo a decir, mientras aferro con mis dedos un cascote lo suficientemente grande como para ser arrojado y causar daño.

Rick quedo en completo silencio sin importarle la respuesta de Ursula cuando escucho los golpes con violencia contra la puerta del comedor. Solo cuando hubo paz miro al resto, observando como Ursula sostenia el otro Walkie. Suspiro al saber que en algun lugar la jefa posiblemente lo este puteando.

Se fue retrocediendo de la puerta, por si acaso. “Cierto, parece mas grande y veloz.” Agrego a lo que decía Denis. Mientras empezó a buscar si habia otra salida o entrada a este comedor.

Ahora mismo me importaba poco si me había quedado con el walkie de la jefa o no. Había otras prioridades para mí. Mire la zona de escombros.

-  ¿Se podrá colar por los escombros? Muy pequeño no parecía...- luego miro la puerta- Y creo que nos estará esperando...

La habitación no tiene más salidas. Los escombros cubren el resto de la sala, no permitiendo que entre o salga nada. Solo tenéis una ventana con barrotes que da al exterior. Al otro lado ya no oís nada, ni esa cosa vuelve a cargar contra la puerta.

Florencia baja un par de escalones para asomarse a recepción, con tan mala suerte que el último cruje. La madera de las escaleras es vieja y se resiente con su peso. Los pasos pesados, que son del dueño del grito que os hizo huir, comienzan a subir las escaleras. A cada movimiento suyo, las maderas crujen delatando su posición cada vez más próxima.

-¡Esta subiendo! Vamos a escondernos.-Flo demostrando que aun tenia un miedo primario a ese animal, agarro del brazo a Ryan y lo empujo con ella, hacia una de las habitaciones mas cercana que pudiera cerrar su puerta.

—¡JoderJoderJoderJoderJoderJoder Mierda Flo, un poco más de sigilo y estarías protagonizando un Metal Gear!— Ryan, apurado, suelta la perorata mientras la sigue al despacho del director a toda prisa.

Cuando entran los dos, rápidamente cierra la puerta a sus espaldas y dirige una mirada hacia sus preciosos amigos, los armarios de metal.

—¡Va, échame un cable con esto!—Dice mientras se abalanza sobre el más cercano y comienza a empujar, apretando los dientes por el esfuerzo.

Flo no entendió el símil y menos que quisiera su ayuda par mover esas cosas, pero hizo lo que pudo por trabar la puerta.

Sin apenas esfuerzo y sin necesitar la ayuda de Flo, Ryan coloca el pesado mueble frente a la puerta. El momento justo antes de que algo tope con fuerza y violencia contra ella. Golpea un par de veces más y suelta ese mismo aullido que os puso los pelos de punta.

Oís el mismo aullido de aquella cosa, pero viene del piso superior. Aunque no de muy lejos.

Luego de asegurar la habitación contesto a Ursula. “Al parecer no hay más entradas o salidas. Lo que debería ser bueno ahora mismo.” Comento pidiendo algo de silencio luego que hablara.

“Me parece que fue para arriba, deberíamos esperar un poco mas y luego salir de esta habitación.” Propuso mirando a los demás. “Alguien tiene una idea para salvar a la jefa y a Ryan, porque si no me parece que lo mejor es volver al auto en seguida…” no termino diciendo que partirían una vez en el auto pero lo haría una vez estuvieran subidos.

Miro hacia el techo dudando de la integridad del mismo, esperando que no cayera sobre nuestras cabezas de manera repentina.

¡La furgo!, - ¡eso es!,- digo en voz alta, - tenemos que ir a la furgo y salir por patas de aquí.

Señalo los walkies, - avisa a la jefa, dile que vamos para allá en cuanto podamos. Que ellos vayan hacia la furgoneta también. Nos podemos encontrar allí. 

Miro a Denis.

- No tienen walkies Denis...Igual otra opción es esperar a que vuelva el paleto, quizá para entonces el bicho se haya ido, o se coma al paleto y mientras eso pasa, nosotros huimos...Sino es irse sin la jefa, y sin Ryan, e ir a por un guarda forestal, policia...o lo que sea...No creo que debamos ir a los gritos...O avisarlos cuando estemos en el vehículo, y que bajen a las prisas...- propongo, en una lucha entre la ética humana, y el egoismo de la supervivencia. Está dificil.

Pero en la mente de Rick, la batalla habia terminado hace rato. Triunfando en su egoismo.

Por lo que cuando noto como las palabras del resto acompañaban sus pensamientos de escape, sonrio complacido. "Si deberiamos subirnos ahi y ver conducir hasta tener de nuevo señal." Sugirio y miro hacia la puerta acercandose un poco mas a esta antes agacharse para tratar de ver por debajo de la puerta.