Partida Rol por web

Mis nuevos compañeros parecen más versados que yo en los bajos fondos, así que dejo que compartan sus teorías ya que poco puedo aportar, en cuento llegamos al Second Chance está claro que cumple a la perfección con la imagen de tugurio que teníamos en mente, pero la pelea que tiene lugar en el no se parece a la típica reyerta menor de taberna, hay un guardia muerto, un guardia nada menos! Y otro está en graves apuros, mi honor no me permite quedarme de brazos cruzados, el resto puede encargarse de la rata que estamos buscando, pero yo he de salvar al guardia.

- Id a por el indeseable de Fredrick yo voy a salvar al guardia.

Con esto Faysal desenfunda su cimitarra, manda un pensamiento hacia amanecer para que permanezca a la espera y se lanza hacia los matones.

- Dejad a ese hombre escoria u hoy comeréis la tierra del cementerio! - grita a los delincuentes para distraerlos y dar tiempo a escapar al guardia.

Si se atreven a levantar las armas contra mi serán eliminados.

Sin tiempo para reaccionar, observo como nuestro compañero entra en acción sin antes haber pensado un plan.
maldito insensato, va a hacer que descubran nuestra posición, debería pensar antes de actuar.
Me giro en dirección a mi grupo ¿Qué creéis quendeberiamos hacer? Pregunto, preocupado¿Le ayudamos, o vamos directamente a por Fredik? En mi opinión, deberiamos ayudarle...aunque no use mucho el cerebro...

-Deberiamos ayudarlo, de todos modos ya no disponemos del factor sigilo -es por esto que prefiero trabajar solo en lugar de con patanes...
Tras decir esto, avanza, con su ballesta ya en mano, al lugar en el que esta su compañero.

Vista la situación, me preparo para lo que esta a punto de ocurrir sacando mi arco compuesto. Espero que esto no empeore la situación...
-ESTAMOS DETRÁS DE TI FAYSAL, TE CUBRIMOS LAS ESPALDAS, le grito mientras se aleja, para que sepa que no pelea solo. Me gustaría solucionar las cosas de otra forma, pero como parece que no se puede, vamos a quemar cosas, pienso mientras en mi cara aparece una sonrisa, la cual se va tornando cada vez más y más loca...

Es inevitable, allá donde voy todo se torna en confrontación...

Desenvainando el hacha, dubitativo, carga hacia el tumulto siguiendo los pasos de Faysal, Duhl y Qyeo'd. 

¡Mantened los ojos abiertos ante la posible huida de Fredik!

¿Por qué?...

El local tiene dos salidas, una es la puerta por la que habeis entrado, y la otra está tras la barra. Fredrik esta lejos de ambas, no será dificil darse cuenta si intenta huir.
De momento, se mantiene en su posición tras la mesa.

En el momento en el que Elo se da cuenta de que habeis entrado suelta un gruñido de sorpresa, que se transforma en un grito de rabia cuando se da cuenta de que habeis entrado blandiendo armas.
Demonios, que pasa hoy en la ciudad! Salid de este lugar antes de que os arranque las entrañas!! Se gira hacia su fiel perro Vamos chico, hazme sentir orgulloso!

El sabueso salta encima de la barra, y gruñe en vuestra dirección. Elo avanza hacia vosotros.

Preparado para el combate

¿Vosotros también buscais problemas? Pega una patada al guardia personal de Shalar y se dirige hacia Faysal.
Largaos de aquí, ¡esto no tiene que ver con vosotros! Mira a sus amigos, y se preparan para defenderse.

Los rufianes no tuvieron otra idea que encararse contra él, pronto se arrepentirían de osar atacarlo.

- Problemas? Los problemas los habéis encontrado!

Con esto lanza una ágil estocada para mantenerlos a raya y de paso empezar ha hacer daño.

"Muy buena tiene que ser la bebida en ese sitio para que lleve a la gente a hacer semejantes cosas sin estar adulterada"

Se encogió de hombros.

-O que no los acepten en otro sitio. Todas las tabernas tienen su clientela.

Pero no le apetecía debatir sobre la idiosincracia de las tabernas y de los fracasados. Como ponerse a pontificar sobre el viento. En lugar de eso se dejó llevar hasta que entró por la puerta de la posada y hubo jaleo. Jaleo que por cierto, técnicamente, sus compañeros decidieron espolear. ¡Y luego el loco era él!

"..."

Se había estado escurriendo hasta donde estaba Fredik. Él sí había hecho caso a la petición de "por favor no saquéis armas u os mataremos", así que confiaba en pasar desapercibido en la situación mientras todo empezaba mientras el follón se desencadenaba a todos lados... y mientras él cumpliría su trabajo, que en ese momento era sacar a la sabandija yonqui de allí.

-Hey jefe -dijo en un susurro cuando estuvo junto a él- Conmigo y salimos juntos aprovechando el jaleo. ¿Va?

Fija la mirada en el perro.

¡No lastiméis al animal, yo me ocupo de él!