Partida Rol por web

Es lo mismo, solo que mega tardo un poco en andar, por eso pedi los mails XD. Esperare que Brandon avance un poco mas en la trama para hacer mis comentarios y aportes, ya que mi participacion es apenas anterior, del 23-10-2009, aunque el personaje estaba desde antes como pnj.

Escena 4B, con fecha 19/08/2010

 Tras pasar un día y una noche esparcidos en grupitos, los aventureros se reúnen en la posada, con la intención de partir.

 Zenram e Ireth, estaban interesados en cazar a un nigromante de nombre, Tumor.

 Urian y Bran, estaban interesados en ayudar a Akriel.

 Iqbal paso la noche en un antro de peleas clandestinas, en la que hizo una buena pasta, nos contó que durante las peleas vio a Annan animándole. Para ver que se marchaba con un tipo al que, al parecer, contrató como guía para ir a Skald.

 Tras esperar y esperar, sin que llegara Annan, decidieron ir a preguntar en el antro, el "Club del Canto", allí confirmaron que se había ido con un hombre. Este se llamaba Bergen Blaz. Un tipo conocido, quien contrata a luchadores y extranjeros para participar en un evento en Skald. Preguntando, preguntando, parce ser que el tipo ese se largó con Annan, con su navío, hacia Skald.

 Un poco de roleo y relaciones entre pjs, tras un recibimiento efusivo por parte de Ireth, tras hacer las averiguaciones de Annan:

Ireth:

... y dime, que pretendes con esta mujer que está en Skald?pregunta avergonzada y mirando al suelo.

 Bran:

 Bran que parecía un tanto turbado por el desliz burocrático siente como se le ilumina el rostro al ver junto a él a la hermosa Ireth. La contempla unos instantes antes de responder. Finalmente se encoje de hombros.

 - Pues no es que pretenda nada con la muchacha, nada que no sea ayudarla.- Sonríe alegre.- El problema que tenemos los juglares, incluso los malos como yo, es que a veces nos creemos las historias de héroes y caballeros. Y eso hace que queramos imitar esos ejemplos a seguir.- Ríe despreocupado.- jejeje

 Al cavo de unos instantes prosigue pero con un posado más serio.

 - Me desquició ver como el ca... como el malnacido ese azotaba con el látigo a la muchacha en medio de la calle. Y su expresión sádica al hacerlo. Me apenó mucho su situación y no pude permanecer quieto... tal vez fuí un tanto precipitado. Pero si se repitiera un escena similar, casi seguro que actuaría igual.

 Ireth:

Cita:

- Pues no es que pretenda nada con la muchacha, nada que no sea ayudarla.- Sonríe alegre.- El problema que tenemos los juglares, incluso los malos como yo, es que a veces nos creemos las historias de hérores y caballeros. Y eso hace que queramos imitar esos ejemplos a seguir.- Ríe despreocupado.- jejeje

Jajaja, ríe Ireth avergonzada... eres tan humilde, agrega mientras pasa su mano por el brazo izquierdo de Brandon, sintiendo los biceps del bardo.

Cita:

- Me desquició ver como el ca... como el malnacido ese azotaba con el látigo a la muchacha en medio de la calle. Y su expresión sádica al hacerlo. Me apenó mucho su situación y no pude permanecer quieto... tal vez fuí un tanto precipitado. Pero si se repitiera un escena similar, casi seguro que actuaría igual.

Me... alegra saberlo... dice, haciendo una pausa, a mi me gustan los hombres fuertes, agrega, mirando a Harembah... esos que saben como proteger a una mujer...

Bran: 

 Bran mira a la sacerdotisa y comenta.

 - Si lo que buscas es fuerza, sin lugar a dudas, Haremhab es el hombre que buscas, todos los aquí presentes hemos visto sus destrezas en el combate y la potencia de sus brazos.- Hace una pausa.-Mas, en algunas ocasiones otras virtudes pueden compensar la falta de unos brazos fuertes como el ingenio... o incluso la discreción. Pero seguro que no te puedo contar nada que una elfa como tú no sepas, con tus bastos conocimientos.

 Bran se mantiene cerquita de Ireth mientras hacen el camino hacia su nuevo destino.

 En cualquier caso el grupo se puso en marcha en dirección al norte, el Caldero, en principio un viaje de unos tres días. La primera noche la pasaron en una posada donde Ireth y Bran tuvieron un romance.

 Durante el segundo día de marcha, se toparon con los llantos de una mujer que lloraba la muerte de su hijo sobre su tumba. Les contó que una bestia acechaba por las noches por los alrededores de su casa. Su marido estaba herido y su hijo muerto. El grupo se ofrece para ayudarla. 

 Ireth:

Esta elfa no era la misma del día anterior... se mostraba alegre de una forma que no habían visto antes sus compañeros. Mientras la fata iba "paseando" y mirando los árboles fue cuando sintieron el extraño ruido...

Cita:

Esperad aquí. Podría ser una trampa de los asaltadores de caminos. Me adelantaré a ver.

Ella se encogió de hombros y se limitó a sacar el arco de su hombro.

Cita:

debería regresar con ellos...ohhhh...Joshua...Joshua...Joshua!!! Mi pequeño retoñooo!! Mi hijoooo...

Al parecer, su hijo está enterrado en la tumba bajo ella, en donde ven la tierra revuelta recientemente, y las uñas de la mujer ennegrecidas por el esfuerzo...

Fui ahí cuando entonces la felicidad se borró del rostro de Ireth tan rápido como un rayo cruza el cielo tormentoso... recuerdos de su hija... de las incontables noches de llanto al enterrar a su amado y a su única niña...  miró a Brandon, que era el único que conocía todos los detalles de su oscuro secreto... pero su mirada golpeó el piso rápidamente, al igual que las primeras lágrimas.

 Tras rastrear la zona encuentran rastros de pisadas de grandes lobos y un licántropo. Esos rastros llevaron al grupo (Iqbal, Ireth, Harem y Bran) hacia una hacienda vecina en la que vivía un tal Jackques. Todo apuntaba a que era el causante de los problemas, los rastros, el detectar el mal de Ireth y su actitud odiosa. Finalmente confesó, transformó y atacó al grupo, junto a sus lobos, un combate breve pero intenso. Luego encontramos unos cachorros, que a pesar de que Bran quería intentar cuidar, Harem los mató en un plis, con el beneplácito de Ireth e Iqbal. En la casa de Jackques encontraron varios restos de cuerpos humanos, y un considerable botín en forma de armas especiales. Y una lista con nombres*... sospechosos entre ellos aparece el de Harkon también había un mapa con un camino hacia el este donde aparecía un lugar llamado Bluespur con varias calaveras dibujadas en el mapa (ni me acordaba de la lista y el mapa :o)

 Finalmente se dirige al norte, sin más contratiempos.

 El grupo, ya que ha llegado antes de lo pactado con Akriel, se divide en grupos. Ireth, Zenram y Haremhab para ir a buscar info y perlas para identificar objetos mágicos. Urian y Bran directos a la Vieja Posada. Iqbal al puerto.

 La posada es cara y el ambiente no es especialmente cálido respecto a los aventureros. Al juntarse mencionan que no se sabe nada de Annan. Ireth dice que entre los asistentes al comedor ve a alguien con pintas chungas (colmillos, mirada fiera, pelaje abundante...), finalmente el grupo se va a los dormitorios. Algunos a dormir y otros a disfrutar ;).

 Y entonces se lió parda...

 Mientras la pareja estaban haciendo crujir las vigas del piso de abajo, desnudos y en mitad de la oscuridad... ¡la cama sale disparada contra el techo! Tras el golpe, la pareja desorientada caen con la cama al suelo... para ver a un temible licántropo gruñíendoles. Desnudos, la pareja hace lo que puede. Bran plantándole cara e Ireth abriendo la puerta para salir pidiendo ayuda. Harem e Iqbal entran para plantar cara a la bestia. Ireth sale de la habitación herida y repudiada por Iqbal al ver la reliquia de su familia descansar entre los pechos desnudos de la elfa. Bran toma el arco para disparar a la bestia. El combate es breve, Harem acaba con ella e informa de que también han sido atacados ellos.

 Urian toma las ropas para dárselas a Ireth mientras critica las palabras de Iqbal. Ireth se enfada con Bran por no protegerla... Sube el conserje preguntando si todo va bien. Bran descubre que está hechizado. Con el conserje aviado asegurándole que todo estaba bien (¬¬) este se larga. Iqbal se disculpa por el malentendido con Ireth y se enfada con Urian.

 No obstante Ireth acusa a Bran de no protegerla, ni del licantropo, ni de los insultos de Iqbal, ni de interesarse por ella cuando salió al pasillo. No queriendo discutir en ese estado, Bran toma sus cosas y hace el gesto de irse, para que ella medite (y él de paso), al salir hay más bronca. La relación se parte.

... en el piso de abajo se topa con Harem intentando abrir la puerta de la calle para salir... cuando de repente se percatan de que en el piso de abajo hay una gran multitud de cambiantes! Harem le dice a Bran que avise al resto, el se niega a dejarle solo. La cosa se pone fea, el combate empieza y Harem cae hecho un guiñapo, arriba también hay ruido de combate. Bran sube corriendo dejando el cuerpo de Harem muerto en el suelo (¿?). Luchando por vivir el grupo sube y sale por una ventanta, mientras Urian planta cara a los 4 licántropos que hay arriba, y tres má sque suben de abajo, así como dos mujer-zorro.

 El grupo sale fuera y se larga...

 Fin de la escena.

 Simultáneamente, Bran e Ireth interpretaron la primera noche de viaje de Armonia a Skald...

Ireth:

La noche se sumía sobre los aventureros en el largo camino de Armonía a Skald.

La elfa y el bardo habían estado conversando casi todo el camino sobre su pasado.

Ireth le contó sobre su pasado, su marido y su hija, ambos fallecidos, varios años atrás... tal vez muchos para un humano, pero no tantos para un elfo. Sobre su llegada a Ravenloft, a las brumas, sus viajes por los distintos parajes, su año de soledad en Marais...

Bran:

 Bran no podía dejar de escuchar asombrado la vida que le relataba la hermosa elfa, embebido en sus palabras. Asintiendo, formulando alguna observación en un alto entre las palabras de Ireth.

 Se sentía afortunado al sentir como nacía cierta complicidad y confianza entre los dos. Cuando durante el relato ella parece un poco afectada, Brandon le pasa una mano por los delicados hombros y la estrecha cálidamente, intentando reconforarla con el gesto y con una mirada intensa.

 - Es bueno hablar del pasado, recordar a aquellos a los que amamos. Eso, muchas veces, nos recuerda lo afortuandos que fuimos y que tal vez podemos volver a ser.

 Le cuenta que nació no muy lejos de estas tierras, en el interior del bosque, que aprendió de su padre el moverse por el bosque como si de su hogar se tratara. Pasó varios años alquilando sus servicios como guía, hasta que una vez conoció a un tal Angus susurro Afable. De el aprendió la alegría de vivir con intensidad, disfrutar el presente. Las ganas de conocer y de viajar.

 Juntos recorrieron muchas ciudades, villas y pueblos, tocando para plebeyos y para nobles. Gran amistad hicieron con el pasar de los años. De hecho, te confiesa finalmente, que el hombre que intentó buscar para salvar allá en las lejanas pirámides del desierto era Angus Susurro Afable. Tras esa confesión el joven anda un poco en silencio, incapaz de evitar que su mente viaje en el tiempo para recordar ciertas escenas y momentos vividos...

Ireth:

Así que has vivido casi toda tu vida en los bosques... como yo... dice Ireth con una sonrisa muy tierna.

Me alegra haber encontrado alguien con quién poder compartir mi... mis... iba a decir algo que decidió guardar, y cambió sus palabras a último momento... mi pasado. Annan esta... "dasaparecida"... y ya he perdido a muchos amigos en el camino en Ravenloft... agrega con tristeza...

El brazo de Brandon desciende de los hombros de Ireth, y ella aprovecha ese momento para tomarlo de la mano.Crees que...? tu sabes... pregunta con algo de picardía... podamos amarnos? Mi... mi padre dice que todos los humanos son iguales... pe...pero yo veo en ti algo distinto... - se sonríe y agrega - me gustas mucho...

Bran:

 A pesar de haberse sumido en unas reflexiones profundas recordando tiempos pasados, las palabras de Ireth le devuelven al presente casi de inmediato. Su mirad va primero a las manos entrelazadas, el contacto de la suave piel y los finos dedos entre los suyos más grandes y ásperos le sorprende. Poco a poco, pero con un movimiento fluído, la mirada asciende por el brazo de Ireth hasta que finalmente los ojos de los dos se encuentran en una muda, pero intensa, pausa.

 - Caray... que directa. Me siento halagado por tus sentimientos Ireth- Dice finalmente con una sonrisa aflorando entre sus labios.- Amarnos... el amor, hay varias formas de amor. A que te refieres exactamente, una relación basada en el respeto y la confianza o... a algo más físico?- Empieza diciendo el bardo, sin prisas, paladeando cada palabra antes de que esa se traduzca en sonidos en el aire.

Ireth:

Cita:

A que te refieres exactamente, una relación basada en el respeto y la confianza o... a algo más físico?

Ireth no pudo esconder una risita de vergüenza que salía desde su corazón... jajajaja... no pueden ser las dos?

Bran:

 Una amplia y ancha sonrisa aflora en los labios del joven juglar.

 - El gozo se adueña de mí al escuchar estas palabras Ireth.- Dice el joven eufórico, la mirada radiante.-Mas no encuentro palabras para corresponderte, tal vez...

 El joven rasguea su lira y tras un asentimiento su voz canta suave y dulcemente acompañada por el melodioso sonido del instrumento...

No sé si es demasiado tarde, aunque no me impooorta. Tantas palabras existen... que debiera ser posible decirlo todooo, pero no es asiiií.- Tras unas notas solitarias continúa.- Hoy descubrí que con todas las letras, de una u otra forma unidas, creo que no sabría explicar... lo que con un beso te de digo:

 Te digo lo sincero, te digo de ti que quiero, te diiigo de mi espera, te digo mereció la pena, tanto luuustro de aprender a decir... con un simple beso.- Unos rasgueos solitarios de arpa suenan antes de proseguir.- Te digo lo sincero, te digo de ti que quiero, te diiigo de mi espera, te digo mereció la pena, tanto luuustro de aprendir a decir... con un simple beso.

 Finalmente su voz deja de cantar y sus dedos, poco a poco, dejan de rasgar las notas del instrumento mientras su mirada se embebe en la tuya, hasta que finamente descienden hacia tus dulces labios. Sin decir nada más, el joven se acerca más aún y ladeando lentamente la cabeza se aproxima a tus labios para fundirse en un tierno y largo beso. Más evocador que la más emotiva de las canciones...

Ireth:

Ireth observaba sorprendida a Brandon cuando este se echaba a cantarle una breve cansoneta a capella. Las mejillas se le iban poniendo más y más rosadas con cada estrofa, y por un momento recordó que su marido jamás le había cantado una canción... el era un guerrero, con el corazón frío como la escarcha... un hombre duro que sabía como protegerla... y eso era lo que ella quería siempre... un hombre que la proteja...

Pero... Brandon era diferente, el jóven humano mostraba respeto por sus palabras, y la elfa sentía que podía hablar con él de cualquier cosa... como si fueran iguales. Oh! Que errado estaba mi padre! pensaba, al recordar como su padre la golpearía si supiera que iba a estar con un humano...

Cita:

Finalmente su voz deja de cantar y sus dedos, poco a poco, dejan de rasgar las notas del instrumento mientras su mirada se embebe en la tuya, hasta que finamente descienden hacia tus dulces labios. Sin decir nada más, el joven se acerca más aún y ladeando lentamente la cabeza se aproxima a tus labios para fundirse en un tierno y largo beso. Más evocador que la más emotiva de las canciones...

La elfa no pudo esperar que los labios de Brandon tocarán los suyos... parecían avanzar tan lentos. La elfa se le echó encima, besándoló a la vez que le abrazaba con sus piernas y sus brazos...

Brandon sucumbió ante el inesperado peso de la elfa, y dió un pasó atrás buscando equilibrio... sus pies sin embargo tropezaron con una roca y ambos cayeron al piso... pero aún así, Ireth no se detuvo...

Bran:

 Bran, lejos de permanecer quieto, corresponde a los fogosos deseos de Ireth.

 Pronto deja a un lado, por decirlo de alguna manera, la arpa y se desabrocha el cinturón de la espada y la daga (pues se le estaba clavando). Al parecer Ireth también tiene cierta molestia con esos anchos ropajes, y caballerosamente, el bueno del juglar la ayuda a liberarse de esos...

 Bueno y digamos que terminaron de pasar una estupenda velada ^^.

D: ya he leído...  vaya... pero bueno, ya está jugado ^^

olvídense de frases: "... esos que saben como proteger a una mujer..." de mis labios, cosas así no saldrán de nuevo XD

yo me protejo sola, no necesito a un hombre para que cuide de mi... que es eso de un hombre que proteja a una mujer... pffff ya... ¿en qué estamos? ya quiero la aventura!

no podríamos ya empezar algún rol? parelelamente digo.

 Escena 4C, 03/12/2010:

 Con los lupinos en la posada, y aullidos en el resto de la ciudad, el grupo se tiró al río para intentar escapar... para casi ahogarse. 

 Bran, quien siempre se ha equipado ligero, pudo ayudar a Ireth, quitándole la armadura y sacándola fuera del río, para reanimarla fuera. Iqbal casi no lo cuenta. No había ni rastro de Zenram por ninguna parte (quien tenía los pergaminos acerca de la profecía).

 Tras salir del agua y rezar a los dioses, tras comprarse ropas nuevas y alguna armadura, el grupo regresa, durante el día, a la Vieja Posada. Todo parece normal.

 Allí les llega un enlace para contactar en un reservado con Akriel. La encuentran y parece asustada. Pasados unos momentos de tensión entre discusiones (Ireth básicamente) Akriel les habla de la Corona de Soldado, que es la reliquia que la liberará de su destino aciago, a pesar de no saber como exactamente. Dice que ha estado reuniendo información y ha descubierto que debe estar en algún rincón de los cañones que hay al este de Armonía.  Dice que un primo suyo nos podrá hacer de guía.

 Entonces aparecen el primo, Grimpel Vetter, acompañado de un druida gnomo (Rush) y... ¡Haremhab! El grupo alucina en colores, parece ser que fue un malentendido, no estaba muerto, solo hecho polvo y al salir se topó con el gnomo y el primo, le ayudaron a combatir a los lupinos y le curaron, y al oír que conocían a Akriel, les acompañó.

 A cambio del trabajo de encontrar y traer la Corona, Akriel se compromete a buscar información sobre Daglan Daegon (y así seguir con nuestra profecía).

 También comenta que los nombres de la lista que encontramos en posesión de Jakquess, son juglares, miembros de un club especial, el Club de Cristal.

 Finalmente, guiados por Grimpel, el grupo va al sur hasta Harmonía y hacia el este, al cañón... 

 Aquí sudamos sangre. Nos enfrentamos a una pesadilla, en este cañón árido, encontramos unas criaturas horrendas (Goblyns rojos, unas fieras salvajes y bastante camicaces), esqueletos, zombis, esqueletos gigantes... logramos rescatar a unos prisioneros encerrados en una especie de jaula de huesos donde los hombres, con el tiempo, se levantaban como zombis. Uno de los hombres nos comentó que por la zona rondaba una poderosa bruja llamada Radaga.

 Cuando nos apartamos para descansar fuimos atacados por más lobos, alguno especialmente peligroso, capaz de exhalar un aliento de frío. 

 En este punto de la aventura hubo un feo asunto, Harem (hombre muy temperamental) tomó no quería ir con los hombres liberados, creyéndoles un lastre, finalmente atacó y mató a uno de ellos que parecía haber perdido la razón. El grupo se lo tomó muy mal, y él se largó hacia el cañón solo. Más tarde lo encontramos hecho un cristo, había intentado asaltar un pequeño zigurat que había en el cañón custodiado por esqueletos. Al encontrárnoslo, y cruzar algunas palabras con él, nos dejó diciendo que se iba a descansar.

 El resto del grupo lo dejó y fue a investigar. Terminó con los esqueletos de la pequeña pirámide y en su interior encontramos un pequeño tesoro y un fragmento de un diario:

Yo quise belleza. Yo quise hombres. Yo quise poder.
Lo susurré en las nieblas, sólo una joven sacerdotisa de un dios débil. Y las nieblas respondieron. Me prometieron la belleza de cualquier dama en la tierra. Me prometieron la devoción absoluta de muchos hombres. Hablaron del poder para crear maravillas.
Yo escuché, reflexioné. . . pero me negué, sabiendo que nunca hay que negociar con las nieblas.

Entonces, de las nieblas surgió un gran cuervo. En su cabeza había una corona adornada con tres piedras preciosas. Mientras ésta brillaba, sus alas revolvieron las nieblas, y susurraron una vez más, "Toma la corona y hazte reina, para nunca ser tocada por la muerte."

¡Inmortalidad, junto con belleza absoluta, los hombres para adorarme, poder para ejercer, Ah! . . . acepté.

 ¡Al parecer la Corona esa tenía su origen en los Poderes Oscuros que controlan las nieblas de Ravenloft!

 En cualquier caso el grupo, sin Harem, siguió buscando por el cañón.

 Fin del mega resumen de la escena.

 Escena 4D. 18/05/2011:

 El grupo finalmente se interna en los parajes agrestes del cañón sin la compañía de Harem.

 (De hecho, durante unos meses, la partida sufrió un bajón... Sebas pensó en pausarla. Luego fueron Iqbal y Bran los pjs que tiraron del carro, quienes tras varias vicisitudes lograron dar con la Corona en un maldito dungeon, luchando contra un espectro y un esqueleto guardián... logrando derrotarles in extremis). 

 Con la Corona en su poder, salieron de la cueva/grieta y regresaron a la entrada del cañón. Donde se encontraron a Harem, medio recuperado y comiendo lobo... esperándonos.

 Entonces el  grupo estuvo pensando en qué camino/pasos seguir:

 Iqbal:

Puaj... esta carne está correosa y sin jugo. Se nota que es carne de depredador. ¡Dónde esté un buen trozo de carne de camello...!

Bueno, tampoco estaba tan mal. Pero espero comer mejor en la próxima ciudad a la que vayamos. Estamos un poco perdidos y sin saber que hacer. Lo ideal sería que las brumas nos tragasen y nos lleváramos esta corona a otro lugar, pero las brumas no siguen nuestros deseos. Así que aún nos quedan cosas por hacer aquí.

Podemos ir a ver a Akriel. Aunque soy reticente a entregarle la reliquia, quizás pueda obtener información de cómo destruir la corona. Así que tendríamos que ir de buenas y convencerla con dulces palabras de que renuncie a su profecía. La corona debe ser usada para un propósito más loable que evitar una boda con Harkon. Y ahí entra Brandon... Brandon, chico, a ti se te dan bien las mujeres.

Otra opción sería ir a hablar con el prometido de Akriel. Vive con los gitanos, y nos podrán decir algo sobre Hyskosha... Pero dejamos a Zenram en Skald, con los pergaminos de la profecía.

Opino que, ya sea por Akriel o por Zenram, debemos volver a Skald. Tenemos un mal recuerdo de las posadas locales, así que vamos a probar con otra cosa: alquilamos una casita en el Caldero. O la compramos. En la pirámide del cuervo hay oro de sobra para eso. Y es la mejor manera de que nuestra vuelta a Skald sea lo más discreta posible. ¡Así que vamos a expoliar el zigurat! ¡¿Qué me decís, chicos?!

 Bran:

 Brandon se estaba enjugando la escasa grasa que cubría su mentón mientras escucha a Iqbal, asintiendo acerca del comentario de las brumas. Y se ve sorprendido ante el comentario de las muchachas. De forma instintiva lanza una mirada a Ireth para luego responder.

 - Bueno, no se me da mal el tratar con ellas, el que permanezcamos juntos es otra cosa... ¿pero quien querría permanecer con una sola habiendo tantas donde fruir?- Nada más decirlo parece que una sombra de culpa tizna el semblante del juglar, pero no dice nada más al respecto.

 - No estaría mal adquirir una casa, en función de lo que encontremos en el zigurat. Y que nos reaprovisionamos...- Luego mira a los presentes y añade con un deje en la voz un tanto recriminatorio.- Por cierto, hace ya unas semanas que compartimos fatigas y pesadillas... ¿podéis contarme de forma más clara de que carajo va todo eso de las profecías? Me uní a vosotros por la situación en la que nos topamos, allá en las malditas arenas de aquel jodido desierto. Luego os acompañé a una ciudad y desde entonces siempre ha habido algún motivo u otro para que os acompañara, pero estoy viendo que es muy peligroso acompañaros. quizás me lo planteé en la próxima encrucijada.

Iqbal:

Yo me uní poco tiempo antes que tú. Nunca tuve demasiado interés en el origen de todo eso, pues fue un antepasado mío el que me pidió que siguiera la profecía. Como descendiente de Jamal, debo venerarle y cumplir sus designios.

Resulta que un gitano llamado Hyskosha tuvo unas visiones y los plasmó en varios pergaminos. Zenram solo me permitió brevemente el acceso a los documentos que custodiaba, pero era algo así como que el Mal con mayúsculas aparecerá en la tierra, precedido de varios acontecimientos que anuncian su llegada. Uno de ellos creo que era el despertar del Faraón, cosa que como sabes no se nos dió muy bien evitar. Ahora toca el nacimiento de un hechicero de la casa Daegon.

En teoría nos bastaría con que uno de los anunciamientos no se cumpliese para invalidar la profecía, ya que si al final no nace un descendiente de Daegon, o un sucesor de Daegon, o Daegon no resurge, la profecía ya no puede llamarse profecía y se convierte en papel mojado.

Ireth, Urian y Haremhab ya estaban en esto antes que yo, ellos tendrán más respuestas.

Rush:

Poco puedo decir, Sabéis bien que soy el más nuevo ene l grupo, apenas se puede decir que he acabado de añadirme, y solo puedo decir que todo en la naturaleza tiene su lugar y su motivo, asi que si estoy aqui es por que debo estar.- Dijo con una sonrisa

Una cosa esta clara, aqui no nos aburrimos, asi que ni me he planteado el dejar el grupo, y menos ahora que la cosa se pone interesante

Ireth:

Ireth, le clava una mirada intensa a Brandon y su mueca agria lo dice todo. Sin embargo, aunque permanece callada ante la idea de que el juglar se encargue de seducir a Akriel (quien por su parte, ya tiene otro enamorado en el lejano Gudarak, al norte), no guarda silencio cuando comienzan a hablar de Zenram y la profecía de Hiskosa.

Yo recuerdo el pergamino...el que guarda Zenram. Comenta con su sensual y musical voz.
Estuve con él desde el comienzo...alla en los pantanos de Souragnea, y...la voz de le opaca por momentos ante los terribles recuerdos.
...prefiero no hablar de lo que ocurrió alli, pero si recuerdo el pergamino...

Y asi, Ireth comienza a recitar.

La luz de los cielos sobre los muertos brillará....
...parpadeará, se debilitará, y todo de rojo tornará...

Por septima vez el hijo de los soles se ha de levantar
Para una eternidad de gritos al bribón condenar

En la casa de Daegón el hechicero nacerá
Aunque a la vida y la no vida las despreciará

El hombre sin cuerpo, los heraldos ha encontrado
aquella vez en la noche de los males desatados

Inajira su destino ha de revertir
Condenando a todos a una espantosa maldición de vivir.

Los sin cuerpo viajaran al pasado.
donde felicidad y odio creo tierras y reinados.

En realidad, una parte del pergamino faltaba...pero luego encontramos otra copia, y pudimos armarlo del todo. Son seis versos por lo que pueden ver....

 Finalmente el grupo decidió ir a Skald, tras saquear el tesoro del Zigurat... grave error ¬¬.

 Justo cuando Bran e Iqbal estaban dispuestos a bajar al interior de la pirámide apareció Radaga junto a una banda de goblyns. Se desató una buena batalla.

 Bran quedó cerrado en el interior del Zigurat junto a dos esqueletos gigantes que le atacaban mientras el resto se partía la cara contra los goblyns y Radaga. Fue un combate muy duro, Haremhab perdió un trozo de la cara de un temible mordisco (cayó a -8 pv), por suerte Ireth le curó y este logró terminar con la vida de Radaga. Urian murió. Al igual que un de los hombres que liberamos y se unió a nosotros en agradecimiento por haberle liberado, Lutter.

 Finalmente:

¡MALDITO SER! ME LAS VAS A PAGAR! MALDITO REPULSIVO SER! TE MALDIGO! Le grita a Haremhab, hasta que el gigante humano le clava la punta de la cimitarra en el cuello y la retuerce, silenciando sus amenazas.

Las nieblas que se han estado formando, parecen ser atraídas por su cadáver, y la hermosa mujer empieza a transformarse en....una anciana¿?
Su rostro, recién hermoso, comienza a envejecer rápidamente, se arruga y marchita, y la carne se separa de sus huesos.
Es como si un viejo pacto realizado entre la sacerdotisa del mal y los Poderes Oscuros que dominan éstas tierras, hubiera llegado a un apresurado final.

En breves instantes, la hermosa y joven mujer no es más que el cadáver de una anciana tan arrugada como los mismos goblyns deformes...

El cañón, al fin queda en silencio, y las brumas se disipan lentamente…
En lo alto, los cuervos empiezan a volar en círculos, descendiendo en espiral hacia el cadáver de la sacerdotisa.

Fin de la escena.

Escena 4E, 25/11/2011:

 El grupo regresó a Skald, alojándose en una buena posada para recuperarse de las penas y saciar su hambre tras tres días de dura marcha cargando con gran parte del tesoro. Tras haber enterrado en Armonía a Lutter y a Urian.

 Finalmente re reunieron otra vez con Akriel en la Vieja Posada. Ella parece muy triste y lloriquea acerca de que Harkon sospecha de que ella no quiere continuar junto a él.

 Iqbal le suelta que antes de dar la corona quiere la información, y Akriel, tras hacer latimitas, le dice que ha averiguado bastante acerca de ese y que lo ha dejado todo escrito en unos pergaminos. Pero entonces pregunta por Urian, a quien no ve presente.

 Iqbal:

Urian murió por tus caprichos-dijo, secamente.

En realidad murió porque el grupo se arriesgo a saquear. Pudieron escapar con la corona sin perder a un compañero, y prefirieron llenarse los bolsillos... Pero Iqbal pensó que la bruja estaba muerta, aquello no debía de haber pasado.

Mira, sabemos que Daegon está encerrado dentro de la corona. Ahora esto va más allá de un tema de amoríos, Akriel. Están en juego muchas vidas. Necesitamos que seas responsable y te impliques en nuestra cruzada.

 

Iqbal miró a la joven arqueando una ceja con escepticismo...

Akriel, doy por supuesto que has fracasado en tu intento de conseguir información sobre el paradero de Zenram, ¿no?

Nunca había encomendado a Akriel semejante linea de investigación, pero aquello empezaba a ser peligroso... Gimpel, Rush, ... Todos ellos presentados por la muchacha, con fidelidades dudosas si Iqbal seguía oponiéndose a dar la corona a Akriel.

Mira, Akriel... La corona está maldita, y puede ser usada para precisamente lo que estamos intentando evitar. ¿Quieres la corona? ¡Bien, fantástico! Pero primero tenemos que ocuparnos de Daegon. Ponerse la corona de tu familia con las fuerzas que guarda puede ser muy peligroso.

Ya está, he suavizado mis palabras. No quiero que esto se convierta en dos bandos... de momento solo puedo confiar en Brandon, Haremhab... y... y bueno, también creo que podría confiar en Ireth, a pesar de ser una blasfema que usa una reliquia sagrada de mi pueblo poniendo el nombre de otro dios en sus labios.

Entonces Akrel les suelta:

La dulce muchacha, logra contener sus lagrimas al fin, y asiente....
Ohhh...como puede ser tan frio...Urian ha muerto, y es....es como si nada le importara....

Sin embargo, nada de eso logra salir de mis labios, y haciendo un esfuerzo, puedo responder al explorador...
Si...pero no es la misma corona. Ustedes han recuperado la Corona de los Soldados...la de mis antepasados. En cambio la corona de la leyenda, la que nombra a Daglan Daegon, es llamada La Corona de las Almas...una vieja leyenda...

Akriel, le da a Brandon las anotaciones que ha averiguado, y les dice...
Les he dicho Harkon me sigue...más aun ahora. Es como si sospechara algo.
Por eso, no puedo transportar la corona hasta el sanatorio de mi amado doctor Dominiani como había planeado originalmente. Sin embargo, le he hecho llegar el mensaje a mi amor, de que una banda de héroes valientes le llevarán con seguridad, la corona a sus manos. Una vez que este tesoro sea confiado a mi amado, la maldición se romperá, y podremos casarnos! dice.

Ahí...ustedes podrán preguntar lo que deseen sobre Daglan....el doctor es un hombre sabio, y sabrá más que yo...

Akriel rompe en lágrimas entonces, recordando que su felicidad eterna esta estaqueada aquí.

Iqbal:

No, no, no, no, no... Esta corona encierra a Daegon, y al elfo ese. Lo he comprobado. ¿Podría ser que la corona de las almas y la corona de los soldados sean la misma? Ya sé que tus leyendas la describen distintas, pero ya se sabe lo que pasa con las leyendas... que se van tergiversando a lo largo del tiempo y acaban contando otra cosa.

O eso, o tal vez Radaga encontrara la forma de traspasar los espíritus de una corona a otra... Oh-oh... Radaga... Sí, bien... tenemos malas noticias... Radaga ha muerto.

 Finalmente el grupo decide partir hacia el sanatorio del dr. Dominiani. Una vez equipados de nuevo.

 Fin de la escena.

Escena 4F, 20/12/2011:

 El grupo partió hacia Gundrak, dirección al sanatorio del tal dr. Dominiani.

 Por el comino se toparon con un elfo que mostraba habilidad con las armas y con la magia, Jilokasin Malkavian. Apareció portando una niña muerta en brazos diciendo que la había intentado rescatar de un vampiro. El grupo decidió ir hacia una fortaleza cercana para dar parte de la muerte de la niña (y desconfiando del elfo). En el camino a la fortaleza apareció un lobo perseguido por dos monstruosos jabalís, la impetuosidad de Rush les metió en una pelea contra las bestias. Durante el encuentro Rush perdió la corona al transformarse en halcón para tomar distancia con los marranos. Ireth tomó la corona caída... 

Tras las flechas lanzadas en un primer momento, Ireth se había mantenido al margen del combate, y sostenía con la mirada casi perdida la corona frente a sus ojos...como hipnotizada.
La joven elfa, había hecho caso a los gritos de Iqbal, pero nada más hizo para ayudarlos ante el ataque de los enormes cerdos...

El lobizón, se había escabullido de vuestra vista, pero ya no era presa de los dos jabalís, que furiosos arremetían una y otra vez sin cansancio a pesar de las tremendas heridas.

Entonces, desde lo alto, el aguilucho chillo unos graznidos, aleteo con fuerza, y el jabalí al que Brandon había acribillado en el cuello se desplomó pesadamente sobre el suelo de hojas amarronadas.
Brandon y Haremhab entonces, descargaron golpes y dos certeras flechas sobre el más robusto de los jabalís. La cimitarra del sebuano encontró hueco en el blando cuello del animal, y de un largo tajo casi le cercenó la enorme cabeza, matándolo al instante...

 Ireth perdió toda voluntad. Se transformó en una autómata. Sin consciencia. Durante varios días Bran se ocupó de la incapacitada elfa.

 Al fin el grupo llegó al sanatorio y tras presentarse como viajeros atacados por bestias, el sr. de la casa (quien insinuó si venían por parte de alguien querida) les permitió entrar (el lugar era bastante tétrico). En la entrada les recibieron unos hombres encapuchados, al parecer unos sirvientes.

 Finalmente el doctor en persona apareció para recibirles. A pesar de las evasivas del grupo, el dr. parece estar al corriente de sus identidades y de que vienen de parte de Akriel y portando la Corona.

 El dr. nos convida a cenar y nos pregunta una y otra vez por Akriel, y sobre la corona. Visto como se molestó por que Bran no comió (creo que nos dieron carne humana para comer) el grupo receló en parte y prefirió no entregar ni mostrar la corona. El dr. les permitió hospedarse en algunas de sus habitaciones para atenderles la mañana siguiente, tras regresar él de un viaje que tenía de hacer ya mismo.

 (escribiendo...)

Non problem, ahora durante el mediodia me pongo con eso. :)

continuando...

Mas o menos lograron pasar la noche. A la mañana no obstante, el buen doctor se habia ido, para atender una emergencia. A solas en el castillo, el grupo se dividio para pasar el rato. La mayoria intento explorarlo para buscar una libreria, donde quizas se pudieran informar sobre la profecia. Haremhab salio al patio a entrenar, ya que lo suyo no es lo intelectual.

El sebuano fue importunado por uno de los monjes sirvientes, el cual se puso bastante pesado. Otro compañero se le unio y pronto los 3 estaban en plena pelea mano a mano. Harem quedo bastante soprendido al descubrir que uno de ellos era Dominic, el vistani del cual se habian separado. El debia estar internado aqui para tratar su depresion, pero ahora se encontraba cambiado, palido, con uñas como garras, enmudecido... Aunque no queria, tuve que matarlos. Al darme cuenta que esto iba realmente mal, fui en busca de los demas.

(No tengo estos mensajes pero es lo que concluyo) El resto del grupo, explorando los recovecos del castillo, cayeron por un pozo a la cocina. Mala idea. Los cocineros resultaron ser canibales, que magullaron un poco a algunos y mataron al gnomo Rush, para agregarlo al guiso. Los demas escaparon y se reunieron con Harem.

La idea entonces fue quemar el castillo de arriba abajo en venganza...  cosa que nos pusimos a trabajar. Pero tambien a buscar la condenada biblioteca que el castillo debia tener. Entre tanto revisar encontramos un sirviente que no era como los demas, un elfo. Dijo llamarse Furius.... 

Tranquilo muchacho, digo dirigiéndome a Iqbal, no les haré daño, no se quienes son ustedes, pero a juzgar por la situación veo que no estamos en un lugar del todo amistosa, no creo que sea este el momento ni el lugar para contarles mi historia completa, quizás ya habrá tiempo después, por lo pronto puedo decirles lo poco que recuerdo resumidamente.

Yo formaba parte de un variado grupo de viajeros similar al de ustedes, cuando nos topamos con una doncella en apuros de nombre, si no mal recuerdo su nombre era Akriel, que era acosada por un hombre que tenía la facultad de transformar su forma física en una especie de animal gigantesco, ésta mujer era presa de una maldición, de la que se libraría si conseguía una corona, para entregársela a su amado un tal Dr.Dominiani, creo que le decía la corona de los soldados. El grupo decidió entonces ayudar a la mujer y encontrar la corona. Fue en medio de esa búsqueda que el grupo terminó en unas cuevas infestadas de goblins y esqueletos animados, en ese lugar fui capturado por una bruja maldita, fue entonces que mi mente, victima seguramente de algún conjuro, se alejo de mi control y no fui más dueño de mi, aunque poseo algunos recuerdos esporádicos de lo que pasó desde entonces, no es mucho lo que se, sólo puedo decirles que de alguna forma logré escapar, luego unos gitanos me encontraron en estado de ausencia mental y aparentemente me llevaron con algún tipo de curador, este curador me despojó de mis pertenencias según recuerdo en una especie de biblioteca y me vistió con éstas ropas, lo siguiente que recuerdo es escuchar un grito desgarrador y un fuego arder, y luego aparecieron ustedes.

No se que fue de mi grupo, me separaron de ellos en las cuevas, pero sí se una cosa, debo recuperar mis pertenencias a toda costa, ustedes conocen el lugar donde nos encontramos?, saben donde se encuentra esa biblioteca? necesito recuperar mis cosas.

Logicamente no confiamos mucho en el de entrada... por decirlo suave. El tipo hablaba demasiado para estar sano. En fin, que continuamos buscando y dimos con la dichosa biblioteca. Tambien habia un libro sobre la Corona, como esperabamos. Pero en eso volvio el doctor, y para empeorar de las paredes surgieron unas cuantas sombras drenadoras de fuerza, que se cargaron al elfo espadachin. Los demas tuvimos que salir por patas... Bajamos por una cuerda tendida en las murallas, donde dos fracasaron en sus tiradas y cayeron a plomo XD.

Ya fuera del castillo, buscamos refugio en el bosque. Descansamos y al otro dia decidimos que hacer. Pero el elfo Furius seguia siendo un pesado asi que Haremhab le dio lecciones de quedarse callado... con la cimitarra. Por este brutal asesinato, sus ojos se tornaron rojos *-*, e Ireth recobro la conciencia, saliendo de su ensimismamiento por el horror ante esa barbarie. 

Mientras Bran y ella se "ponian al dia", con Iqbal nos alejamos, tanto para darles tiempo como para examinar una construccion algo separada del castillo, una vieja iglesia. Queriamos regresar a terminar nuestra labor de quemar el lugar y acabar con Dominiani y sus infernales esbirros, pero en vez de ir de frente buscar alguna ruta externa... tal vez algun pasaje. En fin, que tras algunos problemillas entramos, justo cuando se nos reunio la feliz pareja.

Cuando entras en este lugar, un sentimiento de miedo y maldad parece bañarte. Como el agua de un lago en un día de frío invierno inunda tu cuerpo y parece causar un dolor embotado y palpitante en tus huesos. Es imposible escapar a la sensación de que este lugar es un nexo para todo lo maligno en el mundo.

Una tarima de frío mármol blanco se alzan en la parte de atrás del cuarto. Parado sobre ésta hay un gran ataúd de madera manchado de rojo sangre. El féretro está cerrado y unas runas de aspecto tenebroso se graban en su tapa. Aunque el idioma es desconocido para ti, hay una maligna sensación en el mensaje. Las paredes y el techo se cubren con grabados de murciélagos y caras rasgos de murciélagos. La mayoría de las caras tienen sus bocas abiertas como si estabieran gruñendo y los largos colmillos se hacen claramente visibles.

Un pozo oscuro desciende a través del suelo de piedra al lado de la tarima. Aunque no puedes notar nada mas que una densa oscuridad en las profundidades de este túnel, una escalera de mano de hierro baja dentro de la tierra.

En fin, que contra lo que dicta el sentido comun decidimos explorar igual. Ya estaba por bajar al pozo cuando  una voz chillona y distante comienza a cantar..."Voishlacka...."...."Voishlacka...."...."Voishlacka...."...... una y otra vez. Pues que mojamos nuestras tunicas y tratamos de escapar, pero estabamos encerrados. Huelga decirlo, la palabra significa "Vampiro"

Al final nos repusimos y seguimos con lo nuestro. Harem queria bajar por el bonito pozo, mientras el resto revisaba la sala o buscaba como salir. Iqbal lo interrumpio al ser capturado por el ataud, que de alguna forma lo atrapo dentro. Hubo que romperlo para sacarlo, a cimitarrazos... y claro, el chico adentro tambien recibio parte del daño XD. Estaba muertico cuando llegamos a el. Y como todos me miraban feo decidi bajar al pocito a pensar... no deberia haberle causado tanto daño.

El sotano solo era un gran mausoleo, una distraccion. Al regresar arriba, no obstante, Iqbal estaba ahi de vuelta!. Vivo y hambriento de carne... poco cocida. Pero consciente. Asi que lo dejamos estar mientras se racionalizaba lo que podia haber pasado ahi. Volvimos al campamento, descansamos, y en cuanto estaba por amanecer, de nuevo al castillete, subiendo por la cuerda que habiamos usado para bajar el dia anterior.

Logramos revisar algo mas de la biblioteca antes de que las sombras nos volvieran a atacar. Logramos destruir 1 y las demas huyeron. De ahi ya nos pusimos a organizar el incendio, pero entonces vino el buen Doctor Vampiro Dominiani. Le dimos entre todos, pero era bastante duro. (en cierto momento me clavo sus colmillitos en la nuca, robandome algunas neuronas T_T) Al final, no obstante, el amanecer se aproximaba asi que se largo, aunque todos estabamos bastante magullados. El logra huir mientras nosotros nadabamos en ratas que nos mordisqueaban...

Al finalizar esto nos repusimos como pudimos, y empezamos el incendio, divididos. Me toco en suerte encontrar a Dominiani de nuevo, mientras huia por el salon. En mi estado no podia hacele gran cosa, asi que segui prendiendo fuego al sitio para distraerlo mientras el resto escapaba, y el tipo me siguio hasta uno de los cuartos superiores. Alli rompi la ventana, dandole un baño de sol, cosa que volvio a ponerlo en fuga, convertido en lobo, hacia las partes internas del castillo. Ya habiamos hecho suficiente y estabamos al limite, asi que me reuni con los demas, que preparaban la huida en el bonito carromato de Dominiani. Pusimos rumbo a Kartakass, y abandonamos el loquero de Dominani entre las llamitas...

 Escena 4G 18/12/2012:

 Echos unos cristos tras el enfrentamiento contra Dominiani y causar un incendio en el sanatoriom el grupo se fuga.

 Tras unas horas de viaje, el grupo reduce la gran velocidad del carruaje, pero no se detiene, hasta que, por la tarde, el grupo llega ante un cartel que anuncia las cercanías de un pueblo llamado "Teufeldorf", aún en tierras de la provincia de Gundarak. Deciden dejar la carreta y continuar con las monturas hacia el pueblo en busca de una posada. Que tanta falta hacía al grupo.

 Pero en esos momento el grupo tenía unas pintas muy chungas. Con Haremhab con media cara arrancada de un mordisco y los ojos rojos. Iqbal con incapacidad para comer comida que no sea carne cruda... y una extraña alergia al sol... el mayor símbulo de su diós, Ra!

 En cualquier caso la llegada del grupo al pueblo fue fea. Los pueblerinos no nos querían, por mi acento kartakansés, los ojos de Harem y el aspecto de Iqbal e intentaron echarnos. Pero Harem los asustó. Ante este percance, Bran e Ireth propusieron tomar provisiones y largarse, pues los pueblerinos tarde o temprano regresarían siendo más... Harem, quería quedarse (Iqbal no contaba):

 Bran:

 Bran dejó escapar un sonoro suspiro cunado vio partir a los aldeanos. Con un leve movimiento sacudió negativamente su cabeza antes de mirar al resto de sus compañeros.

 - En fin... supongo que el descanso habrá que esperar.- El juglar miró Harem, a quien a medida que el sol se iba ocultando tras el horizonte, se le hacía más visible el nuevo tono adquirido en sus ojos. Un escalofriante y desagradable tono rojizo.

 Luego miró de nuevo hacia la puerta por la que partieron los aldeanos antes de añadir.

 - Si nos quedamos ellos vendrán, junto a sus vecinos, y posiblemente la cosa empeore. Sugiero tomar cuanto necesitemos, dejar dinero a cambio y partir hacia la espesura del bosque a pasar la noche para alejarnos más de estas tierras.

Harem:

-Bah, que vuelvan a buscar pelea si se atreven...+gruñe despectivo.+ Los complaceré. Ahora me voy a dormir. No pienso regresar al bosque, Brandon, asi que si se van sera sin mi.

Estaba cansado de huir y en su cabeza la decisión estaba tomada. Ademas, preferia mil veces lidiar con un monton de aldeanos enfurecidos y asustados, a arriesgarse en el bosque. Era asi de sencillo. Con gesto digno, subio a buscar un cuarto con ventana que diera a un lateral o mejor, una calle posterior o tejado, si se daba el caso. Tampoco era cuestión de dejar todo a la ira...

Iqbal:

Iqbal asintió. Estaba de acuerdo con todo lo dicho. De hecho, Haremhab es muy buena persona si se queda solo para complacer a los lugareños. Lo único malo era que el estómago de Iqbal iba a tener que soportar otro viaje a caballo para volver al bosque.

Adiós, Haremhab. Yo ir con Brandon a los árboles.

La espalda de Haremhab ya cubría todo el hueco de las escaleras cuando su compañero se despidió de él. Quedaba por ver qué decidiría Ireth, que antes de todo este lío también insistía en pasar la noche en el pueblo. Y en cuanto al acopio de provisiones...

Yo no necesitar nada de lo que haber aquí. Seguro que a donde ir hay más conejos ricos como el último.

Ireth:

Ireth mantuvo una postura neutral durante todo el disturbio, creyendo que si los aldeanos veian sus orejas en punta reconocer a una elfa en el lugar sumado a los ojos de Haremhab, no haría más que caldear más lo ánimos, por lo que se limitó a esperar en un segundo plano sin llamar la atención de los aldeanos. Pero como era habitual, a pesar de los esfuerzos de Brandon por apaciguar las cosas, con el enorme sebuano presente todo se había ido al demonio. Los lugareños habían escapado aterrados.

 Ireth algo cansada de que la misma situación se repitiera una y otra vez, cerró sus ojos con sus dedos índice y pulgar e hizo una señal resiganda de indignación, respiró hondo y exaló intentanod tranquilisarse, luego dijo:

Hay hay amigos mios, nuevamente ha pasado, y pensar que lo único que yo quería era tener una sólo noche de paz,, en fin, lo hecho hecho está, creo como Brandon que se han complicado las cosas, no deseo lastimar gente inocente, como dice Bran,creo que deberíamos tomar lo que necesitemos, comida, y bebida y demás, dejar el dinero correspondiente y salir de aqui cuanto antes, esas personas huyeron aterradas, pero en el número muchas veces se encuentra el valor que no se tienen en el corazón, seguramente volverán y con armas y más personas, y no sólo saldrán lastimados muchos inocentes, si no que ni tu podrás sólo contra tantos mi querido Harem, vamos, salgamos de aqui, iré donde tu digas Bran, ya estoy demasiado cansada de muchas cosas como para seguir pensando.

Bran:

 El resignado juglar vio como Harem seguía empeñado en sus trece, en querer quedarse en la posada. Por lo menos Iqbal e Ireth no tenían ganas de meterse en más complicaciones de las que ya tenían. Miró al sebuano, lo comprendía en gran parte, pero no por ello compartía la misma determinación.

 - Haremhab, escúchame un momento, por favor. Todos estamos cansados y todos queremos descansar, en paz. Nosotros partiremos, pues queremos un poco de paz esta noche.- Hizo una breve pausa antes de proseguir.- Si vamos al bosque tal vez haya problemas o tal vez no, pero si nos quedamos es seguro que los habrá.

 El joven se acercó a la parte de la cocina mientras añadía.

 - Pero no estaría mal recordar por qué estamos aquí, para intentar detener una profecía. Si nos quedamos buscando más complicaciones de las que ya tenemos, tal vez nos no podamos terminar de cumplir con nuestro objetivo, tal vez el alguacil de la aldea sea una abominación como el cazador de donde saqué el arco, o como Hakon... o incluso como Dominiani.- El joven sacudió levemente la cabeza en gesto negativo.- Pero independientemente del peligro que pueda entrañar para nosotros el quedarnos, ¿qué lograríamos? ¿Qué paz encontrarías, un par de horas, tres tal vez... y eso a cambio de matar a unas pobres desgraciados que intentan defender sus casas? Yo si estoy metido en esto de la profecía es para hacer de este asco de mundo un poco mejor, no para matar campesinos.

Harem:

Ignora las palabras del resto y se va a dormir como habia dicho. Lo ultimo que ven es su trasero subiendo al cuarto y desapareciendo en uno de estos.

Queda claro que no tiene la menor intención de quedarse a discutir el asunto ni le importan un rábano los argumentos, cualesquiera estos sean. Solo desea tirarse a dormir un rato en un lugar cómodo...

Bran:

 El aire escapó de forma sonora por la nariz del joven quien vió como sus palabras penetraban mejor en los muros de la posada que en la cabeza del sebuano.

 - Sea pues.

 El joven cambió su rostro de gesto abatido por uno de firme determinación. Sin perder más tiempo tomó un queso, una gran hogaza de pan, longanizas y un trozo generoso de carne en salazón y un saco de manzanas. También tomó un barrilete de vino y un par de pellejos más. Finalmente dejó unas piezas de plata sobre la barra, las suficientes como para costear la comida y miró a los compañeros.

 - Yo me largo, él ha elegido su destino, y yo no quiero compartirlo.

 Cargando con todo salió raudo de la posada hacia donde estaban los dos corceles.

 En este punto solo son suposiciones de lo que pasó en el pueblo, pero diría que una turba intentó echar a Harem, y él se defendió/los atacó. Pilló la del pulpo, pero salió vivo y con una nueva marca de los Poderes Oscuros en su cuerpo.

 Por su lado el triunvirato se fue al bosque donde encontraron un refugio, sin problemas pudieron descansar. Momento en el que Bran pudo leer el libro* e Ireth sanar la deficiencia mental de Iqbal. 

 Durante estos momentos de reposo hubo un roleo bonito, pero lo resumiré. 

 Primero Bran habló acerca de la Corona, y de su creador Daegon, y como los Poderes Oscuros le encerraron en la corona. Luego un señor elfo también fue encerrado en la corona, librándose una lucha de voluntades en su interior. Daglan no era suficientemetne fuerte como para escapar, pero con cada descendiente suyo muerto, este se hacía más fuerte... pero los caprichosos Poderes Oscuros dieron la vida eterna a su último descendiente... ¡la bruja Radaga!También les habló que la única forma de romper la corona y con la existencia de Daglan, era que la persona tenía que matar a Radaga con la corona puesta.

 Luego hablaron de Harem, y sus cambios recientes y de su "camino ala perdición", dando cada vez menor importancia a la vida. Y surgió el tema de hasta que punto se podía confiar con él. 

 El grupo decidió irle a buscar por la mañana. Fue Iqbal, mientras Ireth y Bran recuperaron el tiempo perdido. Al regreso de Iqbal con Harem... este había cambiado de nuevo, ahora mostraba un rosto deformado con una mandíbula lobuna en lugar de una boca normal, eso pareció reforzar la teoría de Bran acerca del cambio de Harem.

Harem:

-Este pueblo, desde luego, tambien hay que evitarlo por completo. +comento con voz notablemente carrasposa y apagada+ Han sucedido algunos imprevistos... Por un lado, el combate con ese maldito Dominiani me ha dejado muy debil y torpe, como si me hubieran quitado algo del alma... Por el otro, creo que mi tiempo capturado con los lobos-hombres no dejo solo heridas fisicas y estos ojos rojos que ven en la oscuridad. Con eso estaba conforme... Pero ahora,  tal vez por haberme debilitado, me esta afectando màs... lo que sea.

Resoplo. Siempre todo a el. Podia haberse detenido ahi pero... En fin. Tenian que verlo. Tal vez tuviera que matarlos luego pero por el momento no quedaba otra, tampoco iba a andar haciendose el misterioso todo el rato. Asi que se quito el velo de piel, enseñando la boca y los dientes. 

Ahora estos eran una coleccion de afilados caninos, que desfiguraban los ya poco agradables rasgos del sebuano aun màs, incrementando su apariencia bestial. 

 Iqbal:

¡AGH!-Iqbal torció la cara para no seguir contemplándole-¡Es horrible! ¡Qué grima!-y luego volvió a ver por morbo-Y aparte, los dientes como que están más salidos, haciendo que las encías se vean más... como si tuvieses un grave problema de gingivitis. Claro que el resto de la boca también se las trae...

Puede que algún día a Iqbal le de por comerse a Haremhab, pero es que con ese aspecto se le quita a uno el apetito.

¿Cómo se supone que vamos a poner de nuevo un pie en alguna ciudad? Si con ese aspecto del Grandullón, nos van a echar a patadas de todos lados. Necesitaríamos... un pañuelo para tapar la boca. Y para los ojos un... un... Creo que con un saco de esparto en la cabeza acabamos antes. ¿Y qué pasa si estos cambios van a más?

Ireth:

Ireth ve llegar a Haremhab e Iqbal, rápidamente se arregla sus ropas, e intenta acomodar su cabello disimulando lo que ha pasado en la ausencia de los dos hombre.

Ejem ejem, hola amigos! Iqbal veo que has tenido suerte, Haremhab como estas? Veo que no muy bien a ver esas heri... AAAHH!

La elfa deja escapar un grito involuntario al ver la nueva cara del sebuano.

Pero por todos los dioses! que te ha pasado!?, eso es obra de alguna maldición y por lo que se ve muy poderosa, mucho me temo Haremhab, que tu estado se irá poniendo mucho peor cada vez, si has cambiado tanto en tan poco tiempo. Y es muy probable que termines sin poder controlarte, y seas un peligro para todo el grupo, como te sientes?  Aunque pensándolo mejor, este no es lugar para hablar de estas cosas, creo que debemos alejarnos cuanto antes de la zona, porque no vamos al sur?

Harem:

-Salvo en lo fisico, no he notado que me produzca ningun cambio en mi manera de ser...+gruño, volviendo a taparse+ Y mientras mantenga el velo y la capucha baja, debe bastar al menos para no ir provocando la alarma, al menos asi sirvio para salir del pueblo. Si alguien insiste en verme la cara, mal por el... Por mi parte, quiero seguir hasta Kartakass o donde sea presiso, mientra encuentre alguno de esos peludos y pueda darme una respuesta al porque estoy sufriendo este cambio...

Bran:

Bran quedó tan sorprendido ante la transformación física que experimentaba Harem que quedó mudo, no sabiendo recuperar la compostura, mirando primero a Iqbal y después a Ireth.

 Finalmente, cuando habla de nuevo Harem, tras tragar con cierta dificultad, Bran se le acerca mientras dice.

 - Creo que yo tengo una explicación...- Dijo mientras se acercaba donde el sebuano estaba recostado junto al árbol.- No son pocas las leyendas que hablan de cambios similares. Como sabrás este mundo no es solo un pedazo de tierra, en este mundo, la tierra tiene una... esencia, una influencia sobre los hombres y mujeres que la habitan. Y a todas luces esta es maligna, perniciosa.

 Tras una pausa, eligiendo las palabras con cuidado, prosigue:

 - Las leyendas señalan como, los hombres que abandonan relajan su moralidad, aceptando la muerte como algo no repulsivo, poco a poco se van convirtiendo, experimentando cambios físicos, que los van acercando cada vez a los seres que pueblan las pesadillas.

 - En las últimas semanas, no solo nos hemos enfrentado a hombres lobo, lobos hombres, caníbales, goblyns y brujas. Todos los presentes lo hicimos por que no tuvimos elección. Era eso o morir. Pero, tú fuiste más allá.

 La expresión de Bran se torna en pesar.

 - Primero decidiste que por no aguantar las palabras de un elfo, bien valía la pena matarle. Así fue como cayó Furius. Poco después tus ojos adoptaron ese resplandor rojizo.

 - Ayer mismo, decidiste que bien valía la pena dar muerte a unos aldeanos que quisieran proteger sus hogares, si así podías descansar en una cama. Por las heridas que cubren tu cuerpo Harem, deduzco que bastante sangre derramaste. Y ahora tienes esa mandíbula.

 El joven dio un suspiro antes de proseguir.

 - Querías una respuesta acerca del cambio que estás experimentando, y aquí la tienes. Sólo tú eres responsable de ella, compañero.

 Bran se sumió en silencio haciendo una pausa, para dejar reflexionar a Harem, para añadir.

 - Pero, ese cambio no tiene por que ser irreversible. En tu mano esta en evitar que el cambio prosiga  incluso hacer que reviertan. Pero depende de ti, y vuelvas a dar a la vida y a la muerte el valor que tienen. Arrepentirse de los pecados de uno mismo, es el primer paso para mejorar, el primero y el más difícil.- Con una gran determinación en su mirada concluyó.-Pero, si no creyera que no pudieras hacerlo, no te estaría contando esto ahora mismo.

 El roleo continúa un poco, en cualquier caso el grupo continuó alejándose del sanatorio. Hacia Kartakas, para ver que hacer si ir al cañón para asegurarnos de la muerte de Radaga (la abruja que se cargara Harem) o que hacer. Con estas el grupo se topó por casualidad con Akriel en los barrios extra muros de Kartakas.

 Fue un encuentro verbal lleno de rabia y dolor, le echábamos las culpas de la muerte de Urian y de Rush. Pero parecía que Akriel estaba desorientada... entonces, tras presionarla ¡cambió! Y en lugar de ser la dulce juglar era Harkon (O___o'). 

 El roleo continuó, nos amenazó y a punto de atacarnos estuvo, pero logramos de algún modo evitarlo, quería la corona (que llevaba Bran en la mochila) pero le contamos que qué clase de estúpidos creía que eramos, quien en su sano juicio iría por ahí con la corona encima (xD). Así que hicimos un pacto de darnos información unos a otros. Nosotros le hablamos de la relación entre Akriel y Dominiani... y él nos contó que no quería casarse con ella... sinó que era su padre (O___o').

 En cualquier caso el grupo prosiguió su camino, hacia Armonía y luego hacia el cañón de Radaga.

 Fin de la escena.

 Escena 4H, 12/04/2013:

 De camino al cañón, el grupo se percató de que "algo" había cambiado, las estrellas y las constelaciones parecían haber cambiado. Sin tener muy claro por qué lo pusimos en la lista de asuntos pendiente y continuamos.

 Al pasar por el mismo camino ya usado en otra ocasión, pasamos por la tumba de Urian para dar un vistazo... y resultaba que estaba removida y el cuerpo no estaba allí. Otro asunto pendiente en la lista.

Iqbal:

A Iqbal le había afectado especialmente el estado de la tumba del paladín. Había estado muy callado por un par de horas de dulce tranquilidad para sus compañeros.

Vale... No aguanto más este silencio. Si no lo dice nadie, seré yo el que diga lo que todos estamos pensando: tendríamos que haber enterrado a Urian en una pirámide. No se habría alzado si tuviese el reposo de un Rey. Debimos tomar un barco del Caldero y llenarlo de flores de difuntos. Y arrastrar esa barca funeraria miles de millas por la tierra hasta llegar a la pirámide del Cañón de Radaga y consagrar la estructura para alejar al mal de allí.

Pero no lo hicimos.

Fuimos vagos y tomamos el camino fácil. Lo enterramos como se hace con los perros y los pordioseros. Y ahora Urian está enfadado, y su irá se cobrará nuestras vidas. Ya está. Ya lo he dicho.

Tiró la mochila contra un árbol y se encaró con la corteza apoyando sus palmas y mordiéndose el labio.

...

¿Y ya está? ¿Todo queda en un simple "hicimos todo lo que pudimos"? Lo vuestro es puro conformismo. Me gustaría repasar con vosotros lo que les ha pasado a nuestros últimos compañeros de profecía: un cadáver se convirtió en bruma, otro en la sombra de lo que era, luego está el que fue devorado, el que abandonó su tumba y uno que nosotros mismos quemamos... Dominic. Ese perdió el alma mucho antes de que su cuerpo muriese.

¡Nada! ¡Ni uno solo de nosotros obtuvo un reposo que le permitiese unirse a la senda de los espirítus en paz y harmonía! Solo nos aguarda tormento desde el momento en el que cruzamos las tinieblas para embarcarnos en esta misión. Estamos salvando al mundo. Yo me esperaba más gratitud por parte de los dioses que aguardan acogernos tras la muerte. Nuestra empresa es Justa, ¿qué hay de Justicia en lo que nos pasa?

Yo os diré la Justicia que se nos aplica: los dioses no son benévolos con los que solo lo intentan. Las grandes deidades que nos vigilan desde lo alto saben que fracasaremos en nuestra gesta. Por eso no se molestan en salvar nuestras almas: no son más importantes que la de un granjero que siega el trigo. En nuestra mano no está cambiar el destino. Nuestros caídos son la prueba de ello. La profecía se cumplirá a pesar de nuestros esfuerzos.

Harem: 

-Quizas. Pero moriré intentando que no suceda, a pesar de que lo que me espere más allá sea solo sufrimiento y deshonor incluso tras la tumba. ¿Debo cruzarme de brazos acaso? Si la profecia se cumple, quien sabe si no sera  lo mismo o peor... solo que con el añadido de saber que no hice nada por evitarlo.

Escupe a un costado, puntualizando su forma de ver las cosas. Pero seguidamente añade.

-Y sobre los dioses... Ellos no son justos, ni agradecidos. No tienen misericordia o piedad. Solo un inmenso poder, para obrar como les plazca sin consecuencias. A veces a nuestro favor, a veces en contra, pero siempre según su capricho. Por eso son dioses... Tratar de razonar sus pensamientos es lo mismo que encontrarle sentido a los juegos de un bebe. Olvidalos, y sigue el camino que tu hagas, no el que te marquen... Si al final nos quieren ayudar o castigar, ya veremos entonces.

El sabia bien que hacia mucho, los suyos le habian vuelto la espalda. Mas concretamente, desde que saliera de Sebua. De ahi en adelante, habia visto como eran realmente las cosas. Un hombre hace su camino y nada mas. No hay mas ayuda que el instinto, los valores que decida llevar consigo, y los aliados que luchen de su parte. Es todo. Ciertamente, el criterio propio no siempre era el correcto... no de otro modo se habia ido ganando esa maldicion. Pero habian sido SUS elecciones. No las de otros. Y el que hace su camino debe cargar tanto con glorias como con errores...

Zenram:

Iqbal parece incapaz de olvidar lo sucedido y las perdidas comienza a sepultar su esperanza, para el mago sus palabras no son otra cosa que una forma de desahogo.

Mientras el hombre de las pirámides no termine de olvidar las pérdidas no podrá seguir adelante, debemos aprender de todo lo que ha sucedido, prepararnos, la duda es inútil, las decisiones son lo único que cuenta, si lo que desea es el descanso eterno entonces las llamas se lo proporcionaran, si su búsqueda está en ayudar a quienes lo merecen quizá no se ha dado cuenta que todos quienes habitan estas tierras han sido malditos por una causa que no escapa a su propia culpa. Haremhab sabe que hay que seguir delante de una forma u otra, temo menos a sus cambios evidentes que a los cambios que se guardan en las almas y se ocultan a la vista, creemos tener las respuestas y conocer nuestra encomienda y sin embargo ni siquiera sabemos de qué lado jugamos…

Sabedor que no había forma de que todos acordaran ni la solución ni el problema el joven evita comentar nada y se limita a sentarse recargado en el tronco de uno de los arboles listo a esperar…

Bran:

 El juglar sentía la mortificación de su compañero, entendía en parte su sufrimiento, pero en este aspecto se mostró más parecido a Harem, más pragmático tal vez. No obstante ello, no supo mantenerse callado ante el desánimo de Iqbal.

 - No te confundas Iqbal, conformismo no es lo mismo que hicimos todo lo que pudimos.- Con una breve pausa retomó.- Si fuéramos conformistas en lugar de regresar al sanatorio para prenderle fuego a él y a las maldades de Dominiani nos habríamos largado sin más. Tal vez nos superen los peligros, pero ten por seguro una cosa, amigo. No es más grande quien más poder tiene, sino quien tras caerse se vuelve a levantar. Este mundo no odia y desprecia y no para de apalizarnos con sus desgracias, pero aquí nos tienes, enseñando los dientes y dispuestos a poner todo nuestro empeño en joder la profecía, y en cada pérdida, en lugar de bajar los brazos, apretamos los dientes más fuertes y retomamos el camino.

 Bran termina esas últimas palabras con un gesto de rabia, con una mueca en la que enseña los dientes apretados, y el cejo fruncido, un gesto feroz.

 - Solo somos hombres y una elfa, pero incluso así no nos damos por vencidos. Y no lo hacemos por recompensas, o en nombre de los dioses, por lo menos la mayoría de nosotros no, sino por que es lo que nos toca hacer por que creemos en ello.- Acercándose al sebuano, le pone la mano en el hombro.- Usa esa rabia, esa frustración para alimentarte y encontrar las fuerzas que necesites para seguir adelante. Te necesitamos Iqbal, sin ti lo más seguro es que no hubiéramos llegado tan lejos, y sin ti posiblemente no lo logremos...

 Silencioso Zenram:

Si existe un dios en este infierno lo más probable es que no esté muy a gusto con lo que intentamos hacer, extrañas deidades dejarían que sus veneradores se creyeran dioses en sí mismos, me temo que de existir un poder supremo en estas tierras lo único seguro es que nuestro fin sea lo que mejor le parezca, maldito hombre de las dunas, ahora va a ser el más listo de todos...

Iqbal:

Habláis con palabras de paganos.

Para Haremhab, estaba visto que los dioses no se preocupaban por los actos de los mortales. Así le va. Ha perdido el respeto a los dioses y ahora hace lo que le place, mata por capricho sin temer lo que ocurrirá en el más allá. Sé lo que dijo Brandon sobre las transformaciones del Grandullón, pero... empiezo a creer que no son una maldición de la bruma sino de los mismos dioses.

Pero hasta Iqbal tenía que reconocer que Brandon era único para dar ánimos. Sus palabras elevan la moral como lo hace su canto en la batalla. Sus palabras de consuelo eran efectivos para que Iqbal siguiese adelante. Aún así, nada hacían para que lo hiciese con convencimiento. Porque a Iqbal no le asustaba poder haber hecho más, sino la posibilidad abrumadora de que todo cuanto hagan contra la profecía será en vano.

Mira a Ireth. Ella es una mujer espirituosa. De una deidad equivocada, pero es creyente de algo al fin y al cabo. Pero la elfa no dice nada para reconfortar a Iqbal. Como si ella también estuviese pensando lo mismo: que la magia divina que les otorgan los dioses solo es un empujón para que se estrellen contra un muro.

Siento haber sacado el tema. Es como si estas tierras me evocasen malos pensamientos. Creo que no puedo esperar al amanecer para rezar. Por favor, Brandon, encuentra pronto un lugar para acampar. Siento que los vínculos con mis dioses se están quebrando. Quiero realizar mis oraciones antes de ir a dormir.

 Finalmente el grupo llegó al cañón, estaba cambiado, pero allí seguía la prisión de hueso de donde liberamos a unos presos en la otra ocasión, ahora parecía estar llena de zombis... Pero no todos lo eran, entre ellos estaba ¡Zenram! A quien perdimos de vista al salir por la ventana de la Vieja Posada de Kartakas. Lo sacamos de ahí, nos intentamos asegurar de que era él (estábamos un poco paranoicos tras lo de Harkon/Akriel).

 Entonces nos adentramos por aquella tierra que había cambiado, en lugar de continuar los cañones originales, ante nosotros se abría un paisaje nuevo, llanuras de cultivos sin fin.

 Pasamos algún tiempo por ahí, hasta que descubrimos que había un ejército de goblyns que venía por detrás nuestro. Decidimos cambiar nuestro rumbo. Mientras, en el horizonte, el cielo parecía traer tormenta. Al poco esta se transformó en una cosa chunga, como un ciclón... emplazada en un pueblo.

 Nos acercamos y dimos un vistazo. Aquel poblado parecía tener una muralla blanca... que al acercarnos pudimos discernir que ne lugar de ser de piedra era de guerreros esqueletos cerrando filas. 

 Buscamos un paso distinto y logramos colarnos en el pueblo, llamado Homloch. Una vez dentro nos avistaron unos centinelas y corrimos para encontrar refugio en una iglesia. Tras varios percances, en ella, y varios muertos vivientes golpeando las puertas, llegamos ante lo que parecía una especie de misa fúnebre... en la que, entre otros asistentes, estaba Radaga... y al dado por muerto Furius.

 Empezó otro duro y desesperado combate (estábamos hechos mierda, especialmente Harem quien tenía mucha fuerza y constitución drenada). Durante la locura del combate, con Harem moribudno en el suelo, Iqbal rodeado y herido, Bran decidió mandarlo todo al cuerno, y sacó de la mochila la corona y se la puso en la cabeza. Sin que sucediera lo mismo que le pasar a Ireth semanas antes (no perdí la consciencia), y descargar unos buenos disparos contra Radaga, logramos derrotarla... 

Master:

El hombre de mudar se agita y suda en una pesadilla...como en los últimos dos días...

Sin embargo, los gritos de Iqbal alertan a Ireth, y la joven se acerca y lo despierta...
- Tranquilo...ya pasó, ya estas bien...le dice con su suave voz

El explorador, se pone en pie en medio de temblores y sin saber si está aun atrapado en una pesadilla...
- Otra vez soñando? Le pregunta Brandon...

Ya recuperado, Iqbal cuenta su sueño, culminando con el momento en el cual el goblyn-daglan, le corta la cabeza usando la daga.

- No fue asi como ocurrio todo eso IQbal...ya lo sabes. Como es que sigues soñando ese horror? -le dice el juglar, tratando de calmarlo...y vuelve a rememorar la historia.

Cita:

Con la destrucción final de Radaga, notan que la corona se ha elevado en el aire. Los gemas se han puesto de un color azul celeste profundo y empieza a irradiar una luz blanca limpia y pura. Una imagen brillante de un elfo vestido con una túnica blanca aparece en la luz. Él sonríe a la compañía y dice.
"Gracias. Durante casi 500 años, he estado encerrado en un combate interminable con el alma maligna del necromante Daglan quien construyó esta corona. Yo era más débil y no podría triunfar. Pero ahora, con la destrucción de la última descendiente de Daglan, he podido vencer su maldad. Ahora, medio milenio después de que comenzó, esta malevolencia ha terminado."

Iqbal, bebe un trago de agua, y se frota el cuello....
No entiendo...si fue todo una pesadilla, porque siento como si el cuello me lo hubieran arrancado y vuelto a colocar? Casi ni puedo tragar saliva...

.....
En cuanto el elfo, ya libre, completó su discurso, la luz se marchitó repentinamente, y la corona empezó a desmenuzarse en polvo.!
Cuando el viento esparce sus restos el dominio completo de Daglan recien creado, parece temblar...a punto de deshacerse sin la fuerza de su amo!.
Entonces, relata brandon, comenzaron a haber temblores...terremotos violentos, erupciónes volcánicas surgian del suelo que se partia a nuestros pasos!, grandes tormentas! Como si la tierra estuviera por desaparecer!

Yo no recuerdo eso...susurra IQbal, frotandose el cuello.
Más bien recuerdo un necromante mirandome, y un diablillo sobre sus hombros, jugando con mi cabeza decapitada......Que sueño horrible!...supongo que ESO hubiera ocurrido si yo mataba a Radaga, sin la corona puesta......

...

Con la destrucción final de Radaga, notan que la corona se ha elevado en el aire. Los gemas se han puesto de un color azul celeste profundo y empieza a irradiar una luz blanca limpia y pura. Una imagen brillante de un elfo vestido con una túnica blanca aparece en la luz. Él sonríe a la compañía y dice.

"Gracias. Durante casi 500 años, he estado encerrado en un combate interminable con el alma maligna del necromante Daglan quien construyó esta corona. Yo era más débil y no podría triunfar. Pero ahora, con la destrucción de la última descendiente de Daglan, he podido vencer su maldad. Ahora, medio milenio después de que comenzó, esta malevolencia ha terminado."

Ante las palabras del elfo, una luz blanca y pura continua irradiando desde la corona.
Iqbal parece algo perdido, mientras susurra una y otra vez...
- "En la casa de Daegon, el hechicero nacera....
...
Aunque a la vida y la no vida...las despreciará....

La energia positiva que emana de la corona, comienza a expandirse...
Primero parece afectar a Brandon, pero luego todos, empezando por quienes se encuentran más cerca del juglar, comienzan a sentir el efecto.
Las heridas se cierran por si solas, como si se tratara de un conjuro de Ireth, y cuando éstas estan cerradas parecen sufrir un éxtasis...que casi se convierte en dolor, si no fuera porque la corona deja de irradiar esa energía positiva y la absorbe...
Poco a poco, la corona comienza a desintegrarse y solo queda polvo en el aire...
Sus mentes tambien parecen haber sanado, y estan tranquilos, calmados y relajados como despues de una reparadora siesta.
El goblyn, observa su cuerpo, ya completamente sano de las quemaduras y empieza a huir de la iglesia!...e incluso Furius parece haber dejado de sangrar, y su rostro y cuerpo parece ya liberado de la maldad....

En el suelo, los muertos vivientes que quedaban, yacen muertos, uno de ellos portando la espada larga de Hordock quien se acerca a recuperarla dejando la cimitarra en su lugar.

 Con Radaga muerta, Daglan eliminado y así rota la profecía (o eso parecía), el grupo regresó a la entrada del cañon...

 Fin de la escena.

 Personalmente creo que la partida mola, y mucho, ha habido muy buenas dosis de roleo :).

Un saludo, chicas. ¡Bienvenidas!

Gracias Braderick! va a ser un gran desafío estar a la altura pero mola el esfuerzo :)