Partida Rol por web

Plata de Ley

Capítulo 6 - Regreso a St. Elmo

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18/07/2016, 01:13
Director

La calle permanecía tranquila. En la lejanía, algunos de los hombres que esperaban en los porches de los prostibulos volvieron a entrar, seguramente sedientos de alcohol y algo más... La campana de la iglesia emitió dos quedos golpes provocados por el viento que apenas se escucharon a un par de metros alrededor...

Notas de juego

Nada nuevo que actualizar, continuad como estábais.

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18/07/2016, 08:35
James McReady
Sólo para el director

-Pierre. Se llamaba Pierre. Lo conozco de...bueno, es una larga historia.Pero...¿Por qué de pronto le interesa tanto mi relación con él?-contestó Jack-¿En qué anda metido mi viejo amigo?

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18/07/2016, 21:04
Pancho Castillo

Vaso en mano, Pancho asintió mientras miraba con cara pasmado a todo lo que el señor Stark decía. No por dar razón como a los tontos al que antiguamente debió ser un hombre de cierto nivel económico que tenía frente a si, si no por auténtica reverencia al misterio de las desapariciones, las cuales Pancho achacaba en su mente al Chupacabra, quizás en la forma del propio Beamount o de uno de sus hombres.

Incluso un individuo tan simple como él se daba cuenta del temor que producía Beamount a los presentes, por sus gestos y palabras intentando hacer callar al hombre de traje raído. Ellos también creían en la maldición, entonces. Aunque callaran o desearan que Stark no hablara. 

Dió un largo trago al vaso, hasta apurarlo: -Entiendo compadreee...- Parecía claro que no iba a poder sacar al individuo la localización del rancho. O de las minas. - Pero por lo que le he entendidooo, la manera de estar más seguro en estos lares es intentar trabajar para el propio diabllooo..- Al ver la mirada que le lanzó como respuesta el hombre, mintió: - ...cosa que no pienso hacer después de oirle, amigooo. Agradezco su consejooo...-

Tras despedirse de los presentes, intentó salir del tugurio para buscar a sus "socios". Parece que la manera más segura de llegar al francés era intentar conseguir trabajo en su "hacienda".

Dondequiera que fuera que se encontrara ese rancho u ahcienda, porque sus indagaciones no habían sido muy buenas al respecto.

Tras salir del tugurio se dirigiría al Gran Hotel. Juanita era propiedad de Jack, y resultaba algo refunfuñona, pero seguía teniendo un rostro y culito dignos de mirar. Y a nadie le disparaban por mirar.

Se le dibujó una sonrisa en el rostro mientras lo pensaba: -Si que es dinamita esa Juanitaaa, síiii. Je je je...-

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19/07/2016, 07:33
Juanita "Dinamita" Rosales

Observo a mi alrededor mientras estamos allí parados
-Jack... no me gusta este sitio...- No me gusta nada de esta historia. Algo dentro de mí, supongo que mis supersticiosas raíces mejicanas, me dice que me largue, que con los bonos está bien... Los mejicanos no nos reímos de la muerte. La honramos y le hacemos fiestas, pero siempre tomándola en serio. No recuerdo con exactitud las palabras del pusilanime ese que estaba con la india, pero El Francés estaba muerto, no puede estar aquí. Si James dijo que estaba muerto, lo estaba...

Suena la campana de la iglesia y me sobresalto y me giro intentando ver quién la hace sonar, pero sólo es el viento.

-No... no me hagas caso- le comento a Jack, agachando la cabeza -Seguro que sólo es porque este sitio se parece demasiado al lugar donde me crié-

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19/07/2016, 12:07
Jack Lonegan

Jack escuchaba las palabras de su compañera, parecía que había tenido todavía mejores resultados que él en su investigación.

-La opción del mensajero tiene cosas buenas y cosas malas, como casi todo. Si conseguimos que venga aquí a nuestro encuentro, le quitamos la ventaja de jugar en su terreno y poder hacernos una encerrona, pero por otra parte perderíamos el factor sorpresa. Si un mensajero le informa de nuestra presencia aquí, puede que entonces si que se prepare a conciencia para un reencuentro muy poco amistoso y venga hacia nosotros con todas sus fuerzas.-Miró a los edificios cercanos a su alrededor.-Habrá que esperar a que vuelva el resto del grupo, y ver que opción les parece mejor.

Desde que entraron al pueblo, Juanita ha dejado bien claro que no está a gusto con todo lo que rodea a este asunto, y el sonido de una campana sobresalta a la mujer. Los mexicanos son un pueblo muy supersticioso y temperamental, pues esta intranquilidad también resulta patente en Pancho.

-Está bien Juanita, en cuanto estemos todos juntos decidiremos cómo actuar para resolver todo este asunto cuanto antes.-Intentó que sus palabras sonaran tranquilizadoras. Mientras tanto seguía mirando hacia los edificios del pueblo esperando la llegada del resto de los chicos.

Solo espero que estos nervios no le jueguen una mala pasada si hay que solucionar las cosas con algo de plomo.

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19/07/2016, 17:07
Michael Maverick

- Fiiiiiiu - Michael dejó escapar un silbido de sorpresa - Vaya señores, esa cantidad es... impresionante - puso su mejor cara de incredulidad. No sé si dispongo de tanto dinero - sacó la cartera y empezó a contar billetes a la vista de aquellos hombres, cuyas pupulas se dilataron a la vista de lo que estaba claro, sería desplumar a un primo.

- Bueno, imagino que sí que tengo ese dinero - sonrió - ¿quién puede decirle que no a un poco de acción verdad? - Cogió el mazo de cartas de encima de la mesa y empezó a barajarlas distraidamente. Barajaba despacio, desmañadamente, a veces se trababa y alguna carta caía encima de la mesa y tenía que volver a meterla en el mazo para barajar.

Cualquiera diría que aquel era un truco barato para relajar a sus contricantes pareciendo llamativamente torpe. En realidad Michael estaba estudiando las cartas. Había jugado en mil garitos y se las sabía todas. Buscaba cartas ausentes o duplicadas y lo más importanes, cartas marcadas. Había mil formas de hacerlo, marcas de tinta, rozaduras, dobleces, cartas de menor tamaño. Imperceptibles para quien no supiera qué había que buscar.

Si ganaba aquella mano se iba a forrar, al menos lo suficiente para que su estancia en el pueblo fuera bastaaaante agradable. Si perdía... bueno, no perdería ¿verdad?

- Tiradas (2)

Notas de juego

Tirada 1, 4, 8

Reroll (1 y 4) 9, 9

Total 18+10 (Inteligencia + Profesión) = 28 (!)

Esto es ganar (¡Ja!) y además sin aspavientos. Ganar inteligentemente también incluye ganar por los pelos o con un farol.

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20/07/2016, 00:29
Director

El hombre sonrió aún más ante tu atrevimiento, y a vuestro alrededor se formó un tenso silencio a medida que se desarrolló la partida. La ronda se desarrolló con la rapidez que aquellos hombres habían deseado, pero de un modo que lamentarían. No tardaste mucho en darte cuenta de que tus oponentes se comunicaban entre ellos con leves gestos y señas, con toda la intención de hacerse saber sus respectivas cartas. como habías supuesto aquello no era una simple partida de poker, era una batalla 5 contra 1.

Por suerte para ti, uno de ellos era más torpe que un caballo cojo. Sus gestos no solo eran evidentes, sino que tras repartir las 3 primeras cartas, gracias a él ya sabías interpretar exáctamente el color de la carta y el número o figura según los gestos. Tus cartas fueron un 10♠, y Q♠ . Prometedor, pero sin muchas posibilidades de éxito. Entonces abrieron las primeras tres cartas en la mesa. J♠ , J♦ y Q♥ . No pudiste evitar emocionarte. Conocías la mitad de las cartas del resto de jugadores gracias a su patoso compinche; con un trio de J de uno de ellos las probabilidades estaban en tu contra, pero la siguiente carta... K♠. El corazón te dió un vuelco; Aún perdías, pero tu mano había mejorado considerablemente. De las 52 cartas de la baraja quedaban 38; entre ellas había 18 que significarían tu victoria, y gracias a la información de que disponías sabías que que solo 3 de esas 18 cartas te las habían arrebatado los otros jugadores...

Cuando se dió la vuelta la última carta, fuiste tu quien sonrió satisfecho. 9♣; Escalera. Tal vez no fuera la mano más alta del mundo, pero era suficiente para limpiar el suelo con aquellos matones.


Aquello no les gustó nada a tus oponentes, ya que la mitad saltaron de sus sillas al grito de "¡Tramposo!" con intención de atacarte. Fueron el musculoso barman y el propio "líder" de aquellos hombres quienes les retuvieron.

- ¡El señor fue muy claro! Nada de disturbios dentro del local. - dijeron ambos. Cuando consiguieron calmar los ánimos, el que llevaba la voz cantante te habló directamente. - Tienes suerte de que tengamos cosas más importantes que hacer. Pero te lo advierto, si te encontramos de nuevo, ese dinero volverá a nuestras manos. - A un gesto suyo, los hombres comenzaron a abandonar el saloon en orden, todos dirigiéndote una mirada de intenso odio antes de salir. El hombre que había sentenciado la amenaza fue el último, pero además de odio había una fría determinación en sus ojos, estabas seguro de que cumpliría con su amenaza.

- Tiradas (5)

Notas de juego

5 tiradas porque enfrentas contra los 5 jugadores (todos pésimos, por otro lado)

Les has ganado y además uno de ellos ha pifiado, apúntate el rasgo "Con la cartera repleta" durante el resto del capítulo.

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20/07/2016, 01:39
Director

- ¡NO, No el nombre de su amigo, el de usted! - El encargado se había alterado muchísimo por un momento, pero entonces se echó atrás como asustado por haberlo hecho. De nuevo, volvió a escrutar los alrededores.

- No importa, lo siento mucho. - Se disculpó el hombre mientras se secaba el sudor de la frente con el dorso de la manga. - No, no hay nada en lo que andar metido. Solamente me sorprendió, nada más. Si busca a un tal Beaumont, su finca está al pie de las montañas a unas horas de aquí, a pocos kilómetros del valle de la plata. -

- Si me disculpa, acabo de recordar un encargo que debía haber hecho hace tiempo. Por favor, no se moleste en volver, me tomará el dia entero. Bienvenido al pueblo, y espero que disfrute su estancia en St. Elmo. - El hombre soltó las últimas frases atropelladamente, y antes de que pudieras responder cerró el ventanuco enrrejado dándote con una portezuela de madera en las narices.

Notas de juego

Por lo que puedes apreciar, las montañas parecen estar lo suficientemente lejos como para que el viaje a caballo dure un par de horas.

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20/07/2016, 01:49
Director

Mientras Lonegan y Juanita conversaban en la calle, las puertas del saloon destartalado al final del pueblo se abrieron de par en par, y el mexicano Pancho salió de allí. No le costó mucho encontrar a sus dos compañeros, cerca de la iglesia donde no habia nadie más por la calle que pudiera escucharles.

Mientras el mexicano se dirigía hacia ellos, las puertas de otro local se abrieron de un portazo, y entonces una pequeña multitud comenzó a salir del 4 de picas. Un grupo de hombres fornidos y visiblemente molestos abandonaba el local con muy malas pulgas, seguidos por un último hombre que tenía cara de buscar problemas. La media docena de hombres comenzó a caminar hacia Pancho, que se apartó sorprendido de su camino, pero en realidad no iban a por él, sino al Kaltes Bier de donde venía el mexicano.

A los pocos segundos de que el grupo entrase en el local, 3-4 parroquianos selieron de allí atropelladamente, corriendo después el extremo de la ciudad donde se refugiaron en el interior de unas destartaladas casas.

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20/07/2016, 07:05
James McReady
Sólo para el director

El nerviosismo creciente del revisor desconcierta a James ¿Qué habrá hecho el francés para que su nombre cause semejante pavor en las gentes de aquel lugar?¿Será por esa vieja leyenda de los indios? Por un momento se plantea si intentar sonsacarle acerca del motivo de su intranquilidad, pero no se le ocurre cómo siendo un extraño, podría lograr tal cosa.

Así que se toma un momento para otear el horizonte intentando identificar la ruta que ha descrito el hombre.

-¿Por allí entonces?-pregunta señalando en la dirección que ha podido intuir-.
 

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20/07/2016, 16:27
Michael Maverick

Maverick levantó las manos exponiendo las palmas en un gesto que simulaba rendición y al mismo tiempo mostraba las manos y las mangas, libres de cartas ocultas. Esbozo una leve sonrisa - señores, ha sido un placer, lamento su disgusto pero fueron ustedes los que insistiero en jugar tanto... y a una sola mano. Pura suerte, no es más que eso -

Se tocó el ala del sombrero a modo de despedida sin moverse de su asiento. No quería provocar a aquellos tipos. No era la primera vez que le amenazaban tras ganar a las cartas, ni la primera vez que le llamaban tramposo, pero provocarles sería contraproducente y no ganaría nada.

Cuando estuvo seguro de que aquellos tipos se habían ido del local llamó la atención de un muchacho del local, uno de los criados, camareros o lo que fuesen, apenas un niño. Le ofreció un billete de un dólar y ante el asombro del muchacho - ¿viste al hombro que entró conmigo? alto, mal afeitado, con una pluma en el sombrero y un capote del ejército lleno de polvo - cuando el muchacho asintió continuó - ve a buscarle, dile que su amigo Michael está aqui y que le invito a un trago, que no me vendría mal algo que compañía por si esos tipos a los que les he ganado deciden volver. Hazlo rápido y serán dos dólares - dijo metiendo aquel billete en el la mano del chico. 

- Ahora, señorita, un whisky, un buen whisky - dijo olvidada la presencia del chico y dirigida toda su atención hacia una de las despampanantes jóvenes del local. Un local de calidad con mujeres de calidad.

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20/07/2016, 23:01
Pancho Castillo

Pancho estaba algo conmocionado por la situación. Se aproximó a sus dos compañeros de banda, Jack y Lupita, mientras les decía de lado, sin perder de vista los acontecimientos que se producían en el tugurio del que acababa de salir: -¿Y a qué viene estoooo? ¿Será por que el paisano al que pregunté por el Francés empezó a hablar mal de él?. - 

Esta vez se giró hacia Lupita y Jack para hablar directamente con ellos: -Un tal Stark creía que el Francés y sus hombres estan detrás de las desapariciones y muertes, porque nunca ocurre le nada a la gente que trabaja para él, ni en las inmediaciones de su...- Intentó recordar como la llamaban: -...haciendaaaa.-

 -La gente parece tenerle bastante miedo a Beamount. Cuando el tal Stark empezó a hablar mal de él, los paisanos le pidieron que se callara. Tenían miedooo.- Miró lo que estaba ocurriendo en el local: - Y con razón, por lo que veo.-

-Además. Le achacan que la economía del pueblo vaya mal, y que compre barato a las gentes que se huyen para luego construir en su lugar casinos, prostibulos y demás, incluso ese hotel que los paisanos parecen odiaaaaarr.-

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21/07/2016, 15:21
Jack Lonegan

Jack escuchaba las palabras de Pancho mientras observaba el movimiento de aquellas gentes de un local a otro. Algo no pintaba bien, pero por el momento no parecía tener que ver con ellos, por lo que permanecía tranquilo y tratando de seguir manteniéndose al margen de posibles complicaciones. Lo que sí empezaba a resultarle un poco sospechoso era el tiempo que se estaba tomando James en volver tras preguntar en la oficina de correos. Aunque no había nada que les apremiara a actuar con rapidez, a Lonegan tampoco le agradaba no tener otra cosa que hacer que esperar en medio de la calle, así que decidió que iba siendo hora de volver a reunir al grupo y continuar.

-Creo que no necesitamos mucha más información, ahora tendríamos que estar todos juntos para decidir cuál es el siguiente paso a dar. Pancho, he dejado a Maverick en el cuatro de picas echando unas manos al poker, podrías ir a avisarle de que la hora de los juegos ha terminado y que tenemos que seguir adelante con el plan.-Sabía que los dos hombres nuevos de la banda habían hecho bastantes migas tras su paso por Las Cruces, y pensó que Pancho era el más apropiado para sacar a Maverick del local.-Yo iré a la oficina de correos a ver que tal le va a James por allí. Juanita, puedes acompañarme a mí, a Pancho, o quedarte por aquí cerca esperando que volvamos todos. Tu decides.

Lonegan esperó unos segundos a la respuesta de su compañera, antes de dirigir sus pasos hacia la oficina de correos.

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21/07/2016, 19:50
Juanita "Dinamita" Rosales

Mientras Pancho se acerca comienza un movimiento de personas de lo más sospechoso. Durante unos minutos pienso que vienen por nosotros. Pero no, se limitan a ir de una lado a otro. Así que concentro mi atención en lo que Pancho nos cuenta. No acabo de entender muy bien a qué se refiere pero saco la misma conclusión que él. Y el hecho de que en el hotel le tengan tanta deferencia, cuadra con su historia.

Escucho a Jack decidiendo qué hacer y, de repente, su comentario me sienta mal. Sabe que no estoy a gusto en este sitio pero ese "tu decides", en realidad a mí me suena a "me da igual"

"Te da igual ¿verdad Jack?... Tres años lo cambian todo y siempre pensé que cuando el asalto al tren ya te daba igual..."

-Voy con Pancho- digo girándome de golpe

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21/07/2016, 20:36
Pancho Castillo

-Okey jefeeee..- Se dirigió el mexicano a Lonegan. -... pues nos vemos luego en la oficina postal.-

Lanzó una mirada rápida al trasero de Juanita cuando esta se giró. -Las señoritas primerooo...- Le dijo a dinamita con una sonrisa algo perversa mientras la seguía camino al cuatro de picas.

Por supuesto, era la chica de Jack, y nunca intentaría nada con ella, pero pensó que no le pasaría nada por alegrarse un poco la mirada.

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22/07/2016, 01:48
Director

El chaval miró casi sin creérselo el dolar que le habían dado y se apresuró a la carrera hacia la puerta del 4 de picas. La camarera también se mostró de lo mas servicial a la petición de Maverick y en menos de un minuto había traido una botella del mejor whisky del local, se lo sirvió en un vaso y contempló con ojos de cordero cómo se lo bebía mientras permanecía de pie juento a él, con los brazos recogidos bajo sus ya generosos pechos y haciendolos destacar aún más. - ¿Está disfrutando del servicio, señor? -

En ese momento las puertas se abrieron de par en par, y dos personas entraron en el local. No era Lonegan, como había creído Maverick, pero ahí estaban dos personas que le interesaban del mismo modo; Pancho y Juanita.

En cuanto ambos entraron lo primero que notaron fue el penetrante olor a humo, sudor y alcohol, que les golpeó como una bofetada. Lo siguiente fue el ruido; los clientes desesperados o emocionados, los crupiers y otros mayordomos que anunciaban los ganadores en cada mesa y la mezcla de conversaciones y movimiento provocaban un estruendo que reberveraba en los oidos.

Cuando se acostumbraron a las dos cosas fueron capaces de encontrar a Maverick, sentado en una mesa de poker para 6 personas donde el resto de sillas estaban vacías, aunque no estaba escaso de otros jugadores que se habían ido reuniendo alrededor como espectadores, ni de jóvenes y atractivas camareras de pecho generoso, caderas anchas y ropa fina y escasa para atender sus necesidades.

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22/07/2016, 02:13
Director

La reacción del encargado había dejado a McReady pensativo donde se encontraba, contemplando el horizonte concentrado en sus propias elucubraciones. Así lo encontró Lonegan cuando atravesó la calle hasta la estación de tren, a unos escasos metros de unas oficinas cerradas a cal y canto, y con la estación vacía como una ciudad fantasma.

Con un ligero grito de su nombre, McReady salió de su ensimismamiento y se giró hacia un solitario Lonegan que había acudido a buscarle.

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22/07/2016, 07:13
James McReady

James se encogió de hombros al ver que el revisor no respondía a su pregunta. Total, no parecía que hubiese mucha duda al respecto.

-Que tenga un buen día y gracias-dijo en respuesta a aquel silencio-.

Al girarse de nuevo hacia las montañas percibió una sombra a su espalda que le resultaba conocida.

-Hola Jack-dijo James, saludando a su compañero recién llegado llevándose dos dedos al ala de su sombrero, que llevaba calado para protegerse del sol-Me parece que ya sé dónde queda esa hacienda. Si salimos pronto podremos llegar allí antes de que anochezca. Pero antes, me vendría bien una cerveza ¿Qué tal os ha ido a vosotros?¿Dónde están el resto?

Notas de juego

Master: a lo mejor no lo entendiste bien, pero...

antes de que pudieras responder cerró el ventanuco enrrejado dándote con una portezuela de madera en las narices

vamos, que no es un simple silencio, es que el tipo se había pirado.


Jugador: Según entiendo lo que hizo es cerrar los postigos de la garita y refugiarse dentro. Obviamente el lugar quedó en silencio. Pero del mismo modo creo que podrá oír mis palabras. Y si no, tampoco pasaría nada.


Master: Ok, sí, aproximadamente era eso. Ningún problema.

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22/07/2016, 13:45
Michael Maverick

- Aqui amigos, aqui, sentaos - dijo Michael desde la mesa haciéndoles gestos con la mano, sin levantarse de la silla - adelante, estaís invitados - añadió sirviéndose un vaso de whisky que colocó delante de Juanita. A Pablo, viéndole mirar con ojos desorbitados la botella de caro whisky escocés y relamiéndose los labios como si de un perro hambriento se tratara, le dejó la botella delante, a falta de otros vasos.

- Si podeís hacer el favor de esperarme esta señorita y yo tenemos un breve asunto que tratar - se levantó de la mesa sonriendo de oreja a oreja para coger del brazo a una despampanante joven - ¿verdad preciosa? - le dijo con complicidad a ésta mientras metía, profundamente, muy profundamente un billete de dólar en su escote.

- ¿Conoces algún sitio tranquilo donde podamos pasar un rato agradable? - seguro que si - se carcajeó de su propia gracia y continuó bisbiseando en tono de jugosa confidencia - y ahora dime ¿quienes eran esos tipo a los que acabo de desplumar? ¿No serán amigos tuyos? A que no - y volvió a carcajearse ruidosamente al tiempo que la muchacha ya fuera porque sentía una sincera simpatía por el jugador o bien con ganas de seguirle el juego a un inminente cliente, rió con él del brazo.

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22/07/2016, 23:49
Pancho Castillo

Parecía que a Maverick le iban las cosas bien, así que sentía tener que ser él el que tuviera que llegar a chafarle la fiesta: -Lo siento, Maverick, pero Jack quiere que vayamos raudo a reunirnos con él en la oficina de correos.- Remarcó la frase indicando con el pulgar hacia la salida del local, a su espalda.

Luego el mexicano miró algo paranoico hacia los lados, quién sabe por qué razón, antes de decir llevando sus labios cerca de los oidos de Maverick: -Parece que el jefe quiere solventar el asunto del Francés lo antes posible. Yo creo que no se va a quedar tranquilo hasta que le meta un buen puñado de plomo entre pecho y espalda... para asegurarse que esta vez cae bien muerto.- Después de decir esto, se estiró cual piñata y puso cara bobo, de nuevo sus ojos curioseando a los lados esperando que nadie le hubiera oído.