Partida Rol por web

El viaje transcurre sin incidentes, algo que es de agradecer sabiendo la situación.

Llegáis a la Ciudadela Arcana, cuyos muros negros como el ónice rodean todo el recinto, y ascienden a gran altura. Cruzáis una de las entradas principales tras pasar por los guardias y las custodias arcanas.

A Valeria y a ti os sorprende la Escuela Arcana, es un lugar de lo más completo y preparado para enseñar a aprendices de magos... ¡y está lleno de chavales de buen ver! En cambio Redrak, la cría de dragón rojo de Pyros, no parece impresionarle. Se nota que ya ha estado antes.

Durante el viaje Valeria ha estado muy distraída con Pyros. Parece que está muy cómoda al lado del mago, con quien habla de temas mágicos que ni comprendes. Cosas de magos. Igual Valeria está demasiado cómoda con Pyros, piensas, y sospechas que a ella le gusta. Pyros muestra mucho interés en la chica de cabello verde, pero parece que solo en lo referente a su talento mágico.

También Valeria se ha entretenido con Redrak, a quien le ha propuesto varios acertijos que al dragoncito le costó sacar, lo que te hizo echar unas risas.

Avanzáis dentro de la ciudadela, donde veis varios edificios y torreones, y una especie de pequeña ciudad donde viven y duermen la mayoría de los magos. Pero en la ciudad no hay tanto mago atractivo como en la escuela.

El carruaje se detiene finalmente, frente a un edificio grande y lujoso.

 Ya estamos aquí, en la sede del Consejo Arcano. Como miembro del mismo debería asistir a las reuniones, pero la verdad es que aparte de ser temas aburridos, la mayoría son demasiado conservadores y necesitan meses para tratar temas absolutamente simples.

???: Te doy toda la razón, vice-archimago Pyros Fuegorrojo - le responde un hombre mayor con barba canosa, muy alto, ataviado con túnica y sombrero blancos, además de un bastón de madera.

 Me alegro de verle, archimago - se gira hacia vosotras - Os presento a la máxima eminencia del Consejo Arcano, el Archimago Ándorsul el Blanco. Redrak, salúdale.

 ¡Hola archimago! ¿Tienes acertijos para mí?

 ¡Por supuesto que sí, joven Redrak! Tengo todo un libro de acertijos para mi dragón preferido - el archimago inclina la cabeza a modo de saludo, y observa con atención a Valeria - ¿Es ella la legendaria maga de hace 5 milenios de la que me hablaste?

 Si estoy en lo cierto, sí. Debería ser aquella maga que podía crear conjuros como si de un juego de niños se tratara. Pero no hemos venido para hablar de ella. Necesitamos ver a Altatuss para pedirle una raíz de mandrágora. Lo necesitamos urgentemente para una compañera de gremio que está gravemente enferma.

 Ya sabes lo problemático que es Altatuss. Buena suerte con él.

Pyros pone mala cara, y eso es mala señal.

No se yo, tanto mago y demás, me veo fuera de lugar.. - se siente incómoda ante todo el pack, donde estudian los magos, las conversaciones sobre magia de Valeria y Pyros, la verdad que hasta esta tan incómoda y nerviosa , que cada dos por tres se rasca el hombro derecho..

Debería de haberme ido con otra misión, mas hecha para mi preparación, y aunque veo mucho joven guapo, miedo me da acercarme a uno y decirle algo, por si me transforma en sapo..-  la verdad que realmente se sentía incomoda toda rodeada de un panorama de magia..

Al ver al Archimago, guarda silencio y hace una reverencia, pero se queda muda y ya deja de hablar en todo el trayecto, eso si, cada dos por tres mirando para todos los lados, rascándose el hombro derecho, tenia una pinta en sus acciones bastante cómica

Valeria enarca una ceja al escucharte.

 Pues fingiste muy bien en el encargo anterior, parecías una exorcista - comenta divertida - Y menos mal, de lo contrario aún tendría pegado a mí al cliente...

 Vaya, vaya. Así que es usted una señorita con recursos - afirma el archimago refiriéndose a ti - Altatuss está en su laboratorio, con su proyecto.

 Gracias, archimago. Iremos a verle inmediatamente.

 Pyros, una última cosa. Mi propuesta para que seas mi sucesor como archimago sigue en pie, para cuando te canses de recorrer mundo.

El joven mago esboza una sonrisa.

 Me halaga que siga viéndome como el mejor para sucederle... pero como dije la primera vez, no me interesa.

 Pyros... estoy muy viejo, ignoro cuánto tiempo más voy a vivir. Si no hay asignado un sucesor si me ocurriera algo, lo elegirán en el consejo... y la verdad, hay muchos candidatos que me horrorizan, como Seigur.

 Seigur... - la cara sonriente de Pyros desaparece instantáneamente - Si él fuese archimago no dudaría en utilizar los medios de la Ciudadela para imponer su doctrina.

 Sería nefasto. Tú en cambio estás más en mi línea... no se me ocurre otra opción.

 Puedo sugerirte a Sheena Cannes. Es inteligente y perspicaz, y con gran talento con la piromancia.

 No lo dudo en absoluto... pero sabes que tú eres el más indicado. Eres el mayor talento que hemos tenido en milenios... aparte de la chica aquí presente - suspira - En fin... si me ocurriera algo antes de que decidas cambiar de opinión, tendré a Sheena en la recámara... pero no es lo que deseo para la Ciudadela.

Ándorsul sonríe y se despide de vosotros con una leve inclinación de cabeza, y se retira haciendo girar su bastón con gran destreza. ¡Tiene la agilidad de un chaval!

Te sorprende que Pyros haya rechazado un cargo tan importante como el de Archimago de la Ciudadela Arcana.

 Bueno, vayamos a buscar a Altatuss.

Os adentráis en el edificio y empezáis a subir una infinidad de escaleras. Valeria al principio se muerde el labio, pero al final pregunta una cosa a Pyros.

 Pyros... parece que conoces bien a esa Sheena, ¿verdad?

Ves la preocupación de Valeria. ¿Acaso está celosa?

 Así es, fuimos compañeros en la Escuela Arcana, e incluso tuvimos una relación amorosa, pero rompimos hace poco.

 Yo... lo siento... - contesta disimulando un poco mal, parecía contenta. Por fortuna Pyros no le ha visto la cara.

 No te preocupes, era inevitable supongo. Ella está ligada a la Escuela Arcana, y yo viajo de un lado para otro viviendo aventuras e investigando ruinas y misterios, y nos veíamos muy poco. Así es imposible mantener una relación. Y no pasa nada, tengo muchas cosas aún por investigar y aprender, y eso es lo único que me interesa ahora mismo. Sí, claro, también ayudar a Keyleth, eso es lo esencial ahora.

Tras subir al menos 2 centenares de escaleras, estáis enfrente de una puerta. Pyros llama golpeando los nudillos un par de veces.

???: ¡Estoy en mitad de un experimento, maldito botarate! - brama una voz detrás de la puerta.

 ¿Altatuss? ¡Soy yo!

???: Esa voz... ¿no serás ese molesto mocoso de Pyros?

 ¡Así es!

Se abre la puerta súbitamente, asomándose por ella un hombre mayor, escrutando con evidente molestia y mirando mal a Pyros.

 ¡Desembucha, qué rayos has destrozado esta vez, maldito desastre con patas! ¿Y quiénes son estas mujeres?

No ha destrozado nada..- se adelante la señora Hiriyama...

tenemos un problema gordo de envenenamiento de una compañera y necesitamos su ayuda, para ser clara y concisa, necesitamos una raíz de mandrágora... - dice la anciana mirando al anciano cascarabias

Wouw, en tus años mozos deberías de haber sido un apuesto joven...jijijijiji... - dice Hiriyama sonrojándose mientras le decía eso al hombre mayor

El mago se ríe a carcajada limpia.

 ¡Usted sí que sabe, señorita! - te adula - ¡JUAJUAJUAJUA! De joven tenía que quitarme a las admiradoras de encima, créame. Apuesto a que a usted todavía le ocurre - se da media vuelta y entra en la habitación - Soy Altatuss, mago y maestro alquimista. Por favor, pasen.

En el interior hay varias mesas con diverso instrumental alquímico (pipetas, alambiques, un par de calcinadores...) y un amplio estante con diversos ingredientes.

 Así que raíz de mandrágora... es un ingrediente un tanto raro, pero da la casualidad de que tengo.

 ¡Eso es genial! Le estamos muy agradecidos por nuestra amiga.

 Alto el carro, muchacha. Dije que es un ingrediente raro, y no pienso regalarlo así como así. Necesito que hagáis varios recados a cambio. A ver... - Altatuss abre un diario titulado "agenda diaria" - Bien, en primer lugar iréis a la biblioteca de la Escuela Arcana a ayudar a hacer el inventario de libros y ordenarlos.

¡Ese viejo mago pretende encasquetaros sus tareas! Si bien por otro lado, en la escuela hay mucho mago joven...

Ya me gustaría, ya me gustaría, a los jóvenes de ahora no les va las mujeres maduras.. - rie al contestar...

Escucha a Altatuss...

Tareas a hacer a cambio de la raíz, lo que sea por ayudar a nuestra amiga, además, usted esta ya mayor para esa clase de tareas, yo menos mal que aun tengo la energía de cuando era joven y bella, podré encargarme de las tareas yo sola... - la idea era que el viejo mago se sintiera algo culpable y echara una mano también en las tareas... -

Aunque tendrá que mostrarme como se hace ese trabajo, en casa si lo he hecho con tarros de mermelada, con mis recetas de cocina, no creo que sea difícil, coger grandes y pesados libros, ponerlos en orden en la estantería.. - dice la anciana con cara pensativa, mientras se tocaba con el dedo índice de la mano derecha  el moflete derecho

El mago te mira seriamente.

 Lo siento, pero ahora estoy enfrascado en un experimento muy importante. ¿Por qué cree que le he echado la bronca a este diablillo? - clava una mirada asesina sobre Pyros - ¡NI SE TE OCURRA TOCAR NADA, CATÁSTROFE!

 Descuide, no pensaba tocar nada - contesta con una sonrisa divertida - Más vale que nos encaminemos hacia la Escuela Arcana.

 Oh, espera un momento, mocoso. Tengo otra tarea para ti... tendrás que ir a pedirle ojos de araña a Dafne.

 ¡NO! ¡CUALQUIER COSA MENOS IR A VER A DAFNE LA LOCA! ¡SIEMPRE ME DESPEINA!

y.. ¿ se puede saber de que trata ese experimento tan importante ?, un hombre sabio como usted, se le nota muy ocupado, debería de desestresarte... - dice sonriendo la anciana... -

Bueno, puesto que esta mujer mayor ira sola, me tocara a mi ordenar la Biblioteca, vosotros dos, ir a por los ojos esos o lo que sean... -dice mirando a Pyros - .. o buscamos arañas y les sacamos los ojos.

Si quieres, cambiamos , yo voy hablar con Dafne y vosotros dos ordenáis la Biblioteca... - dice mirando con una sonrisa cómplice a Valeria, mientras pone cara de pilla, alternando la vista entre Valeria y Pyros.

Pyros suspira aliviado.

 No sabe cuándo se lo agradezco, señora Hiriyama. Pienso pagarle ese favor - afirma esbozando una sonrisa de oreja a oreja.

Valeria sonríe ampliamente sabiendo tus intenciones. Parece incluso agradecida.

 ¡Yo también voy con vosotros! - replica Redrak, entusiasmado, aunque no sabe por qué.

 Redrak, ¿recuerdas la última vez que visitaste la biblioteca? Acabaste provocando un buen incendio.

 Es verdad... - el pequeñín agacha la cabeza, triste. Pyros se acerca a él y le acaricia la cabeza.

 Fue un accidente, no te preocupes.

 ¡A mí no me dejes ese desastre alado! ¡La última vez me destrozó todo el equipo químico!

 ¡Estaba resfriado!

 ¡Estornudabas llamas por todas partes! ¡No quemaste todo el edificio de milagro!

Redrak vuelve a agachar la cabeza, triste.

 Ay, pobrecito... - Valeria abraza con dulzura a Redrak.

La señora Hiriyama se acerca al Dragoncito y le da un golpecito en la cabeza con Matilde...

En fin, tu te vienes conmigo a por lo de los ojos, pero dado tu curriculum de incendios no deseados, si te da por prender fuego "sin querer " a algo, probaré contigo, una receta de un guiso estupendo, que aun busco una carne buena para el guiso... - mira al dragoncito con cara de hambre -

Así que por tu bien, controla esas llamas o tendremos Guiso de Dragón..jejejeje - se acerca al dragoncito con cara de comérselo, pero luego se gira y sonríe -

Bueno, si me comentáis y orientáis para que vaya a ir a Dafne , la de los ojos de araña, me iré para alla.. jejejeje - dice sonriendo la anciana a todos -

Por cierto pequeño, Redrak creo recordar que te llamas, si te portas bien, te digo acertijos... - acaricia la cabeza al pequeño dragon

Altatuss te dio las indicaciones para la sala de Dafne la Loca. Un par de plantas arriba y todo el pasillo hasta el fondo.

Redrak te acompaña el trayecto, habiendo dejado solos a Pyros y Valeria (tal y como planeaste, a ver si juntas a esos jovencitos). Llegas al lugar, cuya puerta está abierta. Al entrar ves un montón de cosas apiladas en estanterías, y escuchas una voz siniestra.

???: 3 gotas de extracto de belladama, 10 mililitros de veneno de basilisco, una tira de piel de medusa... ¡ooooh, si! ¡Mufufufufufu!

La voz es de una mujer bastante siniestra, de pelo gris oscuro, nariz aguileña con una verruga.

 Ella es Dafne... siempre me da miedo... - murmura Redrak, algo inquieto.

La mujer se gira instantáneamente, clavando la mirada sobre la cría de dragón.

Dafne: ¡Ooooooh! ¡Si es el familia del joven Pyros! ¿Dónde está él? ¡Me encanta su pelo!

Muchas Gracias, veníamos buscando ojos de araña, me han comentado que una mujer tan sabia y diestra en preparados, pociones y demás, no tendría pegas de tener tales ingredientes, aunque yo le decía aquí a Redrak, que no podías tener esos ingredientes, que es complicado tener ojos de araña, siento molestarle, buscaremos en otro lugar, de seguro otras personas tal vez tengan, pero no creo que tenga usted, esos ojos de araña... - dice mirando al dragón, con cara de  " he ganado la apuesta, no tiene los ojos de araña"

Dafne: ¡Ooooooh! ¿Te envía Altatuss? Claro que tengo ojos de araña, deja que busque... ¡Mufufufufufu...!

La mujer empieza a rebuscar por las estanterías de forma frenética. Redrak te mira con cara de no comprender nada y se pone a cotillear por el lugar. Accidentalmente derriba con la cola un par de recipientes que había en la mesa y te caen encima. Rápidamente sientes cómo todo tu cuerpo se estremece y va transformándose.

Dafne: He encontrado los ojos... ¡oh, no, los venenos ultraconcentrados!

 ¡Ha sido un accidente, lo siento! - se disculpa Redrak, arrepentido y preocupado.

Los efectos siguen, dejándote aturdida. Notas que tu cuerpo se está transformando completamente. Tu piel se va cayendo y tus partes del cuerpo van creciendo, lo que causa que tu ropa te oprima. Al final la transformación cesa, y tanto Redrak como Dafne te miran sorprendidos.

Dafne: ... ¡mufufufufufu! ¡Qué interesante, sí!

Te sientes diferente, más alta, estilizada, tu piel parece lisa...

Maldito Dragón, voy  hacer ese guiso contigo, espera que te coja.. - dice muy enfadada la señora Hiriyama...

Luego cae que esta en un sitio con magia y demás, se para de golpe y mira a Dafne y al dragón...

¿ que me ha hecho ese futuro condimento de guiso ? - dice señalando a Redrak

Redrak corre a esconderse detrás de una estantería.

 ¡Fue sin querer! ¡Lo siento!

Dafne saca un espejo y te enfoca. ¡Te llevas una sorpresa cuando te ves rejuvenecida, como en tus mejores tiempos! ¡Hasta vuelves a tener el busto bonito!

Dafne: Mufufufufufu... nunca pensé que 2 mezclas venenosas pudieran formar una poción rejuvenecedora permanente. Lástima que no recuerde sus ingredientes, habría podido usarlo conmigo misma y me podría hacer millonaria.

Amm...lo que son las cosas..., lo mismo con lo que haya quedado en el suelo, puedes descubrir los ingredientes que eran.. - dice la ahora joven Hiriyama a Dafne...

Cambiando de tema, ¿ tiene los ojos de Araña ? - pregunta Hiriyama a Dafne

Y en cuando a ti, ya hablaremos a solas... - dice mirando a Redrak

Dafne: Oh, no merece ya la pena, mufufufufufu. En realidad prefiero trabajar en venenos, si, sí... Aquí tengo los ojos de araña, mufufufufu - te entrega una bolsa.

Cuando abandonas la sala, te encuentras a Redrak esperándote en el pasillo, con ojos lastimeros.

 No quería hacer nada malo... snif...

Vamos a centrarnos en salvar a nuestra amiga...- dice sonriendo al dragon y acariciandole la cabeza...

Umm..tu carne es blandita, jejejeje, si haces otra por el estilo, te cocino en el guiso, a ver a que sabra tu carne jujujjju.. - dice Hiriyama a Redrak -

Vamos a llevarles los ojos al mago, espero que hayan terminado con lo de la Biblioteca... - dice pensativa

 ¡Sí, salvemos a Keyleth!

Regresáis con Altatuss, quien sigue enfrascado en su experimento.

 ¿Ya habéis regresado? Bien, dejad la bolsa sobre la mesa. Ahora necesito que vayáis a la sala de seres mágicos invocados, cerca de la Escuela Arcana, y lo limpiéis - todo eso lo dice sin miraros siquiera.

 Altatuss es un explotador - te murmura Redrak.

Para desgracia de la cría de dragón, Altatuss tiene un oído muy fino. Se gira airado para abroncarle.

 ¡Estúpida lagartija, tengo el oído fino! ¡Te vas a entera de lo q...! - se queda mudo al verte, y luego busca con la mirada - ¿Dónde está la encantadora señora de antes?

Soy yo, aquí el dragoncito tiro unos ingredientes en la sala de Dafne, cayéndome encima, este es el resultado, una especie de rejuvenecedor, con cosas venenosas, Dafne no se lo podía creer... - dice mirando enojada al dragon

Bueno, ¿ qué tenemos que hacer en lo de criaturas mágicas ?, por cierto, ¿ ha probado el guiso de dragon ? - mira con una sonrisita perfilada, mirando de reojo a Redrak