Partida Rol por web

Proyecto "Auget": Génesis.

Preludio: Nota discordante (15-10-2015 07:00h)

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26/04/2017, 19:17
Narrador

Cogiste el instrumento con cuidado, pero con seguridad, como acostumbrabas a hacerlo. El saxofón era de un valor importante para ti, con él creabas, te expresabas. Era mas que una herramienta. Tu hermana sabía eso, pero no podía entenderlo por completo, no como tú. La relación entre el artista y su instrumento era algo que solo otro artista podía entender.

Te tomaste tu tiempo en empezar a tocar, no había ninguna prisa. Era la primera vez que ibas a tocar la pieza a alguien que no fueses tú mismo, así que lo mejor iba a ser tomárselo con calma. colocaste tus dedos sobre las teclas, palpando el frío metal. Una vez preparado te llevaste la boquilla a la boca y cerraste los ojos, disfrutando del momento.

Las notas empezaron a sonar en una melodía armoniosa que tanto tiempo te había costado crear. No tardaste en entrar en trance y la música te embriagó con los sentimientos que te producía aquella familia que te había acogido de forma tan cercana, pese a que a veces tú los veías como algo ajeno. Tocabas por inercia, no de memoria. Ya te sabías las notas, el tempo, el ritmo... Así que solo tenías que preocuparte por el sentimiento.

Escuchándote te diste cuenta de que, aunque lo estabas haciendo bien, podías hacerlo mejor. No sabías si era porque estaba tu hermana delante, porque estabas nervioso, o simplemente porque no era el momento, pero, cuando acabaste, pese a que lo habías hecho bien y no te habías equivocado en nada, supiste que no había sido tu mejor actuación.

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26/04/2017, 21:29
Sarah Meyers

Tu hermana había permanecido en silencio, sentada en tu cama. Cuando por fin abriste los ojos seguía ahí, no se había movido ni un centímetro. Los ojos de la chica estaban húmedos y estaba conteniendo la respiración. Evidentemente estaba emocionada.

Wow. Consiguió decir, secándose los ojos con las manos. Por suerte no llevaba maquillaje. Es super bonito. Papá y mamá no se lo van a creer cuando se lo toques a ellos. En serio. Y pensar que lo has compuesto tú... Te miró a los ojos y esbozó una sonrisa, tratando de recomponerse. 

Ahora ya sé que voy a quedar como el culo. Déjame ser la primera en darles el regalo, anda. Te pidió, medio en broma medio en serio.

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30/04/2017, 18:08
Rhys Meyers

Después de que los dedos del chico se moviesen al son de esa canción, emotiva, llega a su fin. Intentó dejarse llevar, pero tocar en público siempre fue y es sumamente más difícil. El ser observado, el miedo a equivocarse de nota, o de un maldito despiste como olvidar su propia letra, impide que la canción se exhiba en su máximo esplendor. Parece que por mucho que quisiese, no conseguiría vencer a la vergüenza, la máxima responsable que le hace más difícil aquello lo más sencillo. En cambio los ensayos en la tranquila soledad fueron su única referencia.

Abre los ojos y aparta el instrumento con delicadeza a un lado en mitad de esa reflexión. Los ojos castaños del él perciben que los de su hermana están empañados, quizás por el motivo. Rhys se rasca con nerviosismo la mejilla derecha. Para Sarah pudo ser una obra de arte cargada de sentimiento, para el menor de los dos, una confesión de unos sentimientos bien guardados, y no obstante, insatisfecho con el resultado.

Serias dudas aparecen en su cabeza, de que en lugar de una canción tenía que haber continuado un cuadro. Así se libraría de tener que meter la pata delante de sus…padres en un momento, importante. La posibilidad de error, le hace tamborilear los dedos en la mano que no rasca de forma insistente la mejilla.

De un cajón busca unos pañuelos que le tiende con una dulce sonrisa, tímida, y especialmente agradecida sonrisa, a la emocionada chica. El chico se sienta al lado de ella, y en la necesidad de un contacto cercano, pasa en brazo en el hombro de ella. – Gracias Sarah. Tu…postura, y opinión es importante para mí, ¿sabes? – Le gustaría decirle más, pero no encuentra las palabras, ya que aunque también emocionado, prefiere reprimirse. – Y gracias por ponerme las cosas tan fáciles, de verdad. – Añade en el mismo tono, con una sonrisa más apaciguada.

Y claro que sí, tú eres la mayor, ¿no? Te tengo que hacer caso. – Comenta a modo de concesión, pero como a una broma cercana y fraternal. Una pequeña y breve risa sale de su garganta. Sigue con el contacto, y mientras la observa de soslayo, no puede sentirse más afortunado, el chico más feliz del mundo. Y también el más idiota, por tardar tanto en darse cuenta y aceptarlo.

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01/05/2017, 14:38
Sarah Meyers

Oh, tranquilo, no es necesario. Te dijo a los pañuelos, secándose los ojos con la palma de la mano. No iba maquillada, no le importaba. Les va a encantar. Te repite, cuando le dices que su opinión es muy importante para él.

Después, te mira y titubea un poco. Tengo que ir a prepararme para la entrevista, que no puedo llegar tarde. Tu hermana parecía sentirse mal por decir aquello. No quería romper aquel momento así, pero lo cierto era que habíais apurado la mañana e ibais a tener que daros prisa para llegar a vuestras obligaciones. Tú tenías que ir a clase. Igual incluso llegabas tarde para la primera clase.

Sarah se levantó y se dirigió hacia la puerta. Esperamos a la noche para los regalos entonces. ¿Quiéres que me pase a buscarte por la uni después de clase?

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04/05/2017, 22:18
Rhys Meyers

Rhys se rasca la nuca con una boba sonrisa esbozada en la cara, no obstante dura poco, ya que tras las palabras de Sarah el chico revisa el reloj. – Ostras, que llegaré tarde. – Dijo nervioso. Se pasó volando entre unas cosas y otras. Por suerte ya lo tenía todo preparado, pero eso no le libraba de tener que salir apurado, más teniendo en cuenta la distancia entre la casa y la universidad. – Sí, porfa. Nos vemos después. Suerte con la entrevista. – Le dice a su hermana con una sonrisa. No tarda en darle un beso fugaz en la mejilla y con toda la velocidad que su cuerpo podía, recoger las cosas necesarias y salir de la habitación. – Hasta luego. – Añade como despedida y abandona la habitación, también la casa.

En la acera, da grande zancadas, además de dar gracias por su entrenamiento que le ayudó en su momento a tener un buen físico en cuestión de reflejos. El problema radica en la constancia, por razones de tiempo tuvo que dejar el deporte, en su caso la natación, y así enfocarse más en las artes. Sigue corriendo hasta llegar el ferry con el temor de ganarse una buena bronca el primer día. Y más que de los profesores, de Marc, seguramente le tildaría de irresponsable.

Pero eso al joven no le importa demasiado, tiene una sonrisa en la cara, y por dentro rebosa felicidad. Es un día especial para él, así que también los nervios recorren hasta la última de sus células. Seguramente estará inquieto y despistado hasta que llegue el tan ansiado, como temido, momento. El corazón le late a una velocidad de vértigo, cuál caballo desbocado. Lo mismo se puede decir de la respiración, agitada.

El primer día de clase en la universidad, también el mismo que ha decidido cambiar algunas cosas de sí mismo. El temor, la inseguridad, la incertidumbre, gobiernan el interior del chico. Muchos cambios, y eso le provoca estrés emocional. El día empezó bien, ya se vería que tal le iría en las próximas horas.

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07/05/2017, 19:09
Narrador

Saliste de casa tras despedirse de tu hermana, que te deseó también suerte y te despidió negando con la cabeza y con una sonrisa en su rostro, probablemente pensando en lo desastre que eras. De forma cariñosa, por supuesto. Al salir de tu casa el frío te golpeó la cara. Cualquier otro día tal vez hubieses maldecido ese frío, pero aquel día parecía que podías ver el lado bueno de las cosas, o al menos con esa actitud avanzaste hacia la universidad.

El día te acompañaba, no había ni una nube. El frío se debía a la época del año, pero para mediodía el sol ya habría calentado las calles y se podría estar en manga corta. Cogiste el ferri. Había mucha gente, como siempre, pero aquel día parecía que te importaba menos aquel agobio, tu mente estaba en otro sitio. La universidad, Marc, tu familia, la celebración... La alegría se mezclaba con el nerviosismo y la inseguridad, dando un resultado bastante extraño que no habías experimentado demasiado.

Tras el largo trayecto, llegaste a la universidad. Al mirar el móvil comprobaste que llegabas justo a tiempo. En la entrada de la universidad te encontraste con Marc, que estaba esperándote probablemente mientras comprobaba la hora de vez en cuando en su reloj.

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07/05/2017, 19:25
Marc Morton

Marc era un chico moreno, alto y bastante atractivo. Sin embargo, su personalidad era algo difícil, sobre todo cuando tenía proyectos. Era tal vez demasiado educado y formal. Tú habías conocido una parte de él más natural, pero de cara al público parecía un chico estirado y algo snob.

Vaya, mira quien se ha dignado a aparecer. Te saludó, antes de dedicarte una sonrisa. Ya pensaba que iba a tener que echarte la bronca por hacer pira.

- Tiradas (1)
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14/05/2017, 19:52
Rhys Meyers

Sigue corriendo sin detenerse, comprobando la hora en su teléfono móvil con dudas de que llegar puntual. Y en el interior, una extraña mezcla que jamás había sentido anteriormente. Sí, extraña. Alegría, también preocupación, ansiedad incluso, y la mente ocupada en otro momento y lugar bien lejos del ahora y de la universidad. Por mucho que se esfuerce en intentar centrarse, no lo consigue del todo.

Al levantar la vista una vez un edificio grande, sin duda su objetivo. Finalmente llega a él tras una incesante carrera. Y justo a tiempo. A la hora en punto, ni un minuto más, ni un menos. Una sonrisa tímida de satisfacción se dibuja en el rostro del estudiante. Guarda el teléfono y ve un rostro hartamente conocido, el de Marc. Tan serio como de costumbre. Rhys acorta distancia con él con una sonrisa y otro empujón más. – Ey, hola. – Dice el recién llegado con el aliento entrecortado mientras la mueca se le amplifica hasta estar radiante. – Uff, creía que casi no lo conseguía.- Comenta aliviado pero sin recuperar el ritmo cardiaco.

Toma una necesaria bocanada de aire, llena sus pulmones, los vacía con lentitud. – Perdón. He llegado justito. Muy justito. – Dice el artista con timidez. Se rasca la nuca. – Será mejor que vayamos yendo a clase. – Le sugiere al chico a sabiendas que el más estricto, no le agrada llegar tarde a pesar que el primer día no había de mucho interés en cuanto a materia por impartir. Explicaciones del curso, del sistema, vamos, para los novatos. - Por cierto, ¿qué tal todo? ¿Bien?- Formula la cuestión pero está listo para ir moviéndose.

En ocasiones, Rhys no puede evitar preguntarse cómo es posible que dos chicos tan dispares, sean amigos. Marc siempre fue muy recto, organizado, seguro de sí mismo, mientras que el otro, de tez más oscura, era y es un completo caos que se pone nervioso cuando es el centro de atención. Mucho más emocional y menos metódico. Muy dispares entre ellos, y sin embargo, parecen llevarse bien, quizás el nigeriano busca en el otro eso de que carece y de tanto admira de su amigo. Y no obstante, en la mayoría de veces, es mejor no pensar demasiado en eso.

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29/06/2017, 02:06
Marc Morton

Marc dibujó un semblante un poco condescendiente al oir a Rhys: No me extraña que hayas tardado, vives en la otra punta de la ciudad y tienes que coger el Ferry después de todo.

Luego elevó los hombros y añadió: Todo va bien... bueno, salvo que te podría haber pasado algo de camino. ¿Has visto las noticias? -empezó a decir mientras se encaminaron hacia el interior del campus y la actividad del mismo les iba envolviendo.

Yo, personalmente, soy bastante escéptico. Lo de la chica desnuda en la playa no me parece nada del otro mundo... ahora dicen que hay cosas mucho peores. Hasta ese tipo aburrido del ayuntamiento ha tenido que salir a decir que la gente no entre en pánico. -resopló- Creo que estamos ante el típico episodio de histeria colectiva. -dijo negando con la cabeza con cierto aire de superioridad, como si la gente en general fuera un poco absurda. La gran inteligencia de Marc le hacía tener un humor ácido y una actitud algo cínica a veces, pero nunca había tratado mal a Rhys.
 

Notas de juego

Podemos continuar si quieres ^^.

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02/07/2017, 01:03
Rhys Meyers

Los hombros del chico se encogen. La distancia no parece preocuparle - Sí, bueno, lo idea hubiese sido la universidad de mi zona, o de buscar un pequeño estudio mientras estén las clases. Aunque me permite aprovechar el tiempo para hacer otras cosas. Ya sabes, leer, estudiar, estar al día. - Comenta con tranquilidad mientras los pasos le van acercando a su próximo destino con tranquilidad. La primera clase del día, y del curso. No puede evitar sentir cierto nerviosismo, gente nueva, compañeros, y profesores. Cambiar de entorno, nunca le fue, ni sería tarea sencilla para él.

El siguiente tema saca a Rhys de sus propias películas aún sin rodar, y la actitud de Marc sale a relucir a la primera de cambio. Ninguna novedad, siempre fueron muy dispares entre ellos. Y en ocasiones, el chico de tez oscura, se pregunta que ha visto el otro para ser su amigo, y por supuesto mantener la amistad. No tenía muchos amigos, así que para el nigeriano, es todo un regalo que nunca rechazó ni tenía intención de dejarlo pasar. Simplemente le llamaba la atención, tan curioso como es él. También inseguro.

Sonríe de forma tímida. - Sí, vi las noticias. Serán casualidades. Y sobre la chica, seguramente estaría en el agua y al salir, se fijaron que no tenía ropa. - Comenta a modo de buscar una explicación mucho más realista. Más sencillo de creer. - Luego nos dirán que los médiums, y videntes también tienen superpoderes o algo. - Hace énfasis con los dedos cuando pronuncia las palabras médiums, videntes, y superpoderes, el trío de palabras bastante surrealista. ¿Quién se cree esas historias? - Yo tampoco me lo creo la verdad. - Añade totalmente seguro.

Guarda silencio durante unos segundos, donde su boca se tuerce a la derecha. Sigue pensando en el tema. - A ver que pasa, tal vez sea un experimento sociológico, vete a saber. - Se le ocurren más teorías aunque no llega el punto de escepticismo de su amigo, tampoco lo termina de ver. Está convencido de que existen otras explicaciones, bueno, casi convencido de ello. - Si tuviese un superpoderes, me gustaría poder teletransportarme, así seguro que llegaría menos justo. Aunque fijo que acabo llegando tarde por pereza. - Dice a modo de broma con una sonrisa dibujada en los labios, muy habitual en él.

Continúan su marcha, la conversación también, pero otro tema. - Ehhh, ¿ha pasado algo que deba enterarme? - Le pregunta a Marc, aunque seguramente la respuesta ante la cuestión formulada sería una negación con total seguridad. Le esperaban grandes cambios, y por la mañana habían empezado. Tampoco podía quitarse de la cabeza el concierto que tendría en mente con su familia. De hecho, se estaba arrepintiendo de no haber continuado con el cuadro. Ya asumía que metería la pata en vivo y en directo. Será un desastre. Lo veía. Y por esa razón, estaba inquieto, con la mente distraída, absorta. La verdad es que no podía sentirse más afortunado después de todo, aunque no supiese muy bien qué pasos seguir en su actual vida tan cambiante. Tan mutable.

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05/07/2017, 00:29
Marc Morton

Marc escuchó a su amigo con atención y sonrió de aquella forma tan leve e irónica.

Ya sabes cómo son algunos conciudadanos. Ven a una chica bañarse desnuda en el mar y les asaltan 300 años de tradición puritana encima. -comenta con sarcasmo- Si. Concuerdo contigo. Es posible que todo este histerismo sea algo pasajero. -suspiró con cierto desdén.

Y si, tienes razón, seguro que si te teletransportas llegarías tarde. -amplió aquella curiosa sonrisa que pocas veces enseñaba- Pero tengo que reconocer que sería una de las capacidades más útiles. Yo en vez de lo que dices, aprovecharía para pasar la tarde en Nueva Orleans... en algún buen lugar rythm and blues acompañado de comida cajún... y luego una noche en Paris y... uff, creo que me volvería loco y no dormiría. Además tendría la vida resuelta. ¿quién necesita un trabajo si puedes entrar o ir donde quieras? -elevó los hombros con cierta gracia mientras traspasaban las puertas de la facultad.

Seguro que sería algo más fascinante que todo esto. La verdad es que no hay muchas más novedades. Creo que ayer fue una de las fiestas de la hermandad con las novatadas para los novatos, por lo que habrá un montón de zombies por el campus haciendo el tonto. Marc torció el gesto y compuso aquella cara de "típicas estupideces humanas".


Y Marc no estuvo desencaminado. Como solía ser habitual después de la típica noche de novatadas, muchos de los estudiantes habían hecho novillos y otros muchos caminaban por el campus con gafas de sol para ocultar los efectos de no haber dormido demasiado.

Finalmente llegaron al gran aula donde tenían clase de Historia del Arte con una aburrida profesora, Doris Windmill. Era toda una eminencia, pero sus clases podían llegar a ser bastante tediosas. Marc y Rhys se sentaron juntos en un lugar poco llamativo. El resto de compañeros iba ya ocupando el resto de sitios, la mayoría de los valientes, con la tónica habitual en sus caras, otros como Marc y Rhys preparados y atentos...

Pasaron 7 minutos de la hora de comienzo y Windmill no llegaba.

Qué raro... -susurró Marc a Rhys de forma confidente- La vieja Doris siempre es bastante puntual...

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09/07/2017, 00:44
Rhys Meyers

El chico de tez más oscura escucha con atención los comentarios del más pálido, una sonrisa se dibuja en los labios al torcerse hacia la izquierda. Rhys tenía que admitirlo, los americanos, concretamente los estadounidenses poseían una moralidad bastante particular, incluso incomprensible según qué puntos. Amplía la sonrisa y una pequeña carcajada sale a relucir.

La cabeza del moreno asiente sin titubeo ante el plan especial con el fin de sacar provecho de tal capacidad. – Sí, sin duda. Me has convencido. Lo pediré para Papá Noel, y oye, quién sabe. – Sigue con la broma y se ríe de nuevo mientras los pasos rutinarios le llevan junto a su amigo y compañero de clase hasta el aula correspondiente. El nigeriano nunca fue muy dado a las fiestas, desde siempre ha preferido eventos más tranquilos.

Visitar museos, pintar, escuchar música, especialmente Jazz, tocar su saxofón. Y antes practicaba la natación, pero la tuvo que dejar por falta de tiempo. Imposible estar y tenerlo todo. Más si se le iba unas tres horas y algo al día en el ferry.

Walking Dead. Ha empezado. – Murmura el chico al ver con relativa curiosidad a los jóvenes con los visibles efectos de la reseca, gafas negras, dolor de cabeza, náuseas, y el sueño trastocado. Sí, sin duda unos simpáticos síntomas del día después de una gran fiesta. No recordaba que tenía clase historia, tan aburrida como tediosa. Y encima gracias de que estaba fresco. Si se le añade una gran resaca por ceder a la vida nocturna, sin duda una combinación dolorosa. Se muerde el labio inferior suavemente ante ese pensamiento.

Mientras esperaba la llegada de la mujer, Rhys se puso hacer garabatos distraídamente sobre un folio a medio utilizar. En ocasiones prestaba atención en clase, en otras dejaba volar la imaginación. Hoy estaba ligeramente descentrado especialmente, más que nada por el tema familiar, no conseguía quitárselo de la cabeza. Obvio, estaba dando un paso importante. En eso meditaba hasta que el comentario de Marc le saca del ensimismamiento auto impuesto.

¿Eh? ¿Qué? – Pregunta en voz baja, casi inaudible. Arquea una ceja cuando se percata de la situación y del bolsillo del pantalón saca su teléfono para comprobar que efectivamente, la mujer, llegaba tarde. – Habrá que marcarlo en el calendario. Susurra el chico extrañado. – Tal vez ha pillado atasco, ha perdido el autobús, o no se encontraba bien. A saber. – Comenta buscando una explicación creíble. – Nos habrían avisado si ella sabía que llegaría tarde o no vendría. – Llega a esa conclusión tras pensar en que efectivamente, tiene que ser un imprevisto.

Pues tocará preguntar en la sala de profesores a ver si saben algo. Comenta el chico a su comentario sin subir el volumen y sin ser consciente de que le tocará a ese improvisado rol.

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09/07/2017, 01:45
Marc Morton

Casi como respondiendo al misterio, entra uno de los profesores en el aula. Rhys no sabe muy bien quién es, pero le suena que es del mismo departamento que Doris.

[color=#0040BF]Buenos días clase. Como sabréis, soy el Decano Jacob Rominger. Me temo que tengo malas noticias hoy. La profesora Windmill se ha visto involucrada en un accidente algo masivo en el puente de Jersey y no podrá venir. No os preocupéis, me han dicho que no es grave, pero supongo que debemos anular la clase, al igual que la del profesor Jason Howard a las 11. Les diría que fueran a la Biblioteca o a Tutorías y aprovechen. De hecho, si tienen alguna duda, yo mismo me ofrezco a partir de las 10 en mi despacho, en sustitución de la buena de Doris... [/color]-el decano lanzó una mirada un momento sobre algunos de los alumnos más cansados- [color=#0040BF]O quizá quiera la providencia que algunos de ustedes aprovechen para tomarse un breve descanso o un café. [/color]-sonrió de forma sarcástica-[color=#0040BF] Es todo. [/color]

Dicho aquello, la insigne figura del decano desapareció ante los murmullos de los compañeros de Rhys.

El comentario de Marc no se hizo esperar, tras resoplar:

Mira qué bien. Podía haber dormido un par de horas más hoy en vez de venir aqui. ¿Y si hacemos caso al buen decano y nos cogemos un café y nos vamos a senarnos un rato a la plaza? La idea de quedarme en la cafetería no me hace ilusión... mucho menos meterme en la biblioteca tan pronto... pero vamos, estoy abierto a ideas.

La "plaza" a la que se refería Marc era el lugar principal de reunión del campus. Una enorme zona ajardinada y con fuentes que servía como descanso para los estudiantes y como punto de encuentro. Prácticamente todas las facultades tenían acceso por camino al lugar. Al amigo de Rhys solía gustarle más quedarse en los exteriores que estar dentro de los sitios ¿sufriría algún tipo de claustrofobia?

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12/07/2017, 00:19
Rhys Meyers

Antes de que ni siquiera Rhys se incorporarse con la clara intención de preguntar que había pasado con la profesora, entra otro, que cree que es del mismo departamento, tal vez un compañero. El chico le mira extrañado y luego a Marc para después regresar de nuevo su atención sobre el docente para prestar atención al mensaje que estaba dando, y conforme va avanzando se queda pensativo, y preocupado sin poder evitarlo.

Al marcharse su compañero lanza su comentario, también una sugerencia para pasar el rato libre. – Vaya, ¿un accidente? ¿Estarán bien? – Pregunta al aire con evidente intranquilidad. Así es él. Mostrando inquietud por los demás a pesar de no existir un lazo de afecto. También asume que el señor Howard se ha visto involucrado también. - ¿Qué habrá pasado? – No cesa en formular esa cuestión, esa duda en su mente.

Rhys tampoco tiene ganas de meterse a la biblioteca a primera hora. Aún necesita despejarse, y centrar su cabeza. - Suerte la tuya. – Le dice a Marc con una sonrisa a medio esbozar. -  Yo Ehhh, vale, a mí también me hace falta. – Se tapa la boca al abrírsele de forma casi incontrolable ante el amago de un bostezo. -  Vamos pues. A ver si me despierto, aún sigo en babia. – Comenta tras recuperar su expresión.

La plaza es también de su agrado, un lugar tranquilo, verde, con fuentes. Un pequeño edén entre los edificios que casi se podrían llamar cárceles. Todo el día metido, incluso a uno se le olvidaba que estaban allí por voluntad propia, bueno, más o menos. Obviamente, aprovecharía aquella pausa no solo para despejarse, si no para buscar más información sobre el accidente. Aunque no antes de tomarse un muy necesario café para cargar pilas. Sin hacer nada, el sueño y el aburrimiento podrían hacer mella, y eso que el día acababa de empezar. Una pereza.

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13/07/2017, 23:50
Marc Morton

Marc estaba tan extrañado como tú por todo ese asunto del accidente.

Vamos a por ese café y cuando nos estemos recuperando del maldito sueño cotilleamos con el móvil. Ese accidente me ha dejado tan intrigado como a ti...

Y así lo hicieron. Salieron a buen paso del aula, tomaron camino hacia la cafeteria y tomaron un par de cafés y algo de comer para llevar. Una vez con ello en las manos se dirigieron a la "plaza". Les fue algo complicado encontrar sitio, puesto que varios "zombis" y otros alumnos más normales se habían ido aposentando en los bancos para hacer lo mismo que ellos.

No somos nada originales. -comentó Mark con una de sus leves sonrisas sarcásticas.- Bah ¿sabes qué te digo? que voy a poner el culo al lado de la fuente. El amigo de Rhys se dirigió a una de las fuentes que había en cerca de la entrada y se sentó en el bordillo apoyando su mochila, su café y un waffle que había cogido aprovechando el menú de desayuno.

Mientras Rhys también se acomodaba, Marc sacó su móvil y pareció buscar información: Vaya, vaya... pues si que ha sido serio.

Mmmmm... hay varios relatos del asunto. La mayoría de medios dice que ha sido un accidente múltiple a secas pero fíjate aqui... El NY Eye, esos amarillistas de siempre, dice que todo ha sido culpa de una gran persecución policial. Más de 20 coches accidentados, tres autobuses y el puente de Jersey cerrado al tráfico desde las 9... No me gustaría ser ahora mismo concejal o alcalde... -añadió mostrándole los resultados de su búsqueda.

En un momento dado Rhys se sintió bastante confortado por el lugar dónde estaban... ¿sería estar al aire libre? ¿la compañía? ¿el olor del café? ¿el frescor de la fuente? ¿el sol de octubre que daba en su rostro con un calor agradable?

Notas de juego

No he puesto qué toma Rhys de la cafetería por si querías ser más original ^^.

Si buscas en tu propio móvil, verás que casi todas las versiones coinciden en lo que ha dicho Marc. No hay todavía números respecto a heridos o muertos porque parece muy pronto. El NY Eye, es el típico periódico digital que se ha hecho famoso por dar noticias de tinte claramente amarillo.

Por cierto, al final de tu intervención, tendrías que hacernos una tirada de FdV a dif. 5 ;-).
 

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16/07/2017, 22:26
Rhys Meyers

El chico acompaña a su amigo a la cafetería con la esperanza que un poco de cafeína en el organismo terminase de despejar su mente, un café americano y una rosquilla glaseada con azúcar, ambas cosas para llevar y ser disfrutadas en la plaza al aire libre. Sin embargo, los dos chicos no son los únicos que pensaron lo mismos. – No, para nada. – Comenta Rhys ante la broma de su colega. Un tanto molesto, no le gusta estar tan rodeado de gente, al menos cada uno va a lo suyo. Toma asiento justo al lado de Marc, y no tarda en dar el primer sorbo al café en su búsqueda de la tan necesaria cafeína.

No tenía mucha hambre en realidad, pero nunca está de más de saborear algo dulce, especialmente si es esponjoso. Y el bollo comprado sufre el primer ataque, un generoso bocado. Es pringoso, al menos la servilleta no le dejará las manos igual de pegajosas. Mientras mastica, deja su bebida al lado y con el teléfono se pone a imitar a su amigo. – Si es tan grande como ha dicho el profesor, seguro que habrá algo colgado. – Dice sin apartar los ojos de la pantalla.

La voz de su compañero le hace detener su búsqueda para fijarse en la noticia encontrada. – La leche. Pues sí que ha sido gordo. – Comenta con asombro al leer el contenido del artículo, aún sin terminar de creerlo. Como si su mente se resiste a asimilar lo visto. - ¿Una persecución por el puente? ¿Es que el nota ha ido en dirección contraria o qué? – Añade en voz baja, pero audible para Marc. Hace un gesto de negación con la cabeza y le da otro bocado a la rosquilla.

Mientras mastica una sensación extraña le va invadiendo, una sensación agradable, confortable, no sabe de dónde viene. Tal vez de un poco de todo, de estar al aire libre, tranquilo, y con el calor del café, ajeno al resto de estudiantes y personal de la universidad donde cursa. ¿Qué más da? ¿Acaso importa?

- Tiradas (1)
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17/07/2017, 16:54
Narrador

Empezó como aquella sensación agradable si, pero poco a poco fue extendiendose, fijándose. Rhys se sentía como un algo en continuo "movimiento". Era una sensación extraña, vital. Sentía ese flujo dentro de su cabeza, de su cuerpo, de sus piernas y brazos. Era una sensación extraña, nueva.

Y entonces, en algún momento, aquella sensación pareció expandirse de forma progresiva. Primero sintió ese mismo fluir en Marc, en los chicos que estaban cerca de él sentados en el cesped y sobretodo en la fuente... el flujo de la fuente era como una especie de Faro luminoso en aquel mundo nuevo de sensaciones. La fuerza del agua al salir al exterior era hipnotizante. Casi podía convertirse en una de esas gotas de agua que caían en el remanso del fondo del fuente y luego vuelta al circuito... pero ¿cómo podía sentir todas esas cosas? ¿cómo podía sentir ese fluído en todos y cada uno de los que tenía alrededor? La sensación empezó a ser tan intensa y extensa que su mente empezó a embotarse.

Le pareció oir la voz de Marc llamando su atención.

¿Rhys? ¿¿Rhys?? ¿Estás bien tío?

Pero aquello llegaba como un eco lejano, como si fuera una especie de ensueño o algo irreal. Lo real era todo ese fluir a su alrededor. En los seres que estaban cerca, en las "cosas". Y entonces todo aquello empezó a saturarle... mucho.

Notas de juego

Bien, bien. Necesitamos una nueva tirada de Fuerza de Voluntad a dif. 6.

Si logras superarla, todo volverá a su ser y verás a un Marc algo preocupado dandote toques en el hombro (como si te hubieras quedado "idiota") y los chicos de alrededor también estarán mirándote curiosos.

Si la fallas te quedarás muy confuso y asustado, tu reacción en ese sentido no debería ser buena. Quizá te levantes y te alejes o pierdas un poco control. Lo dejo a tu libre albedrío.

Si la pifias... bueno, te dará una migraña atroz y una sensación de vértigo tremendamente fuerte. Necesitarás sujetarte a algo o te caerás redondo (haz una tirada de Destreza+Atletismo dif. 6). Necesitarás un par de minutos para que el dolor cese. Podría igualarse como si alguien te metiera un bocinazo en todo el oído... ^^

Suerte.

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19/07/2017, 23:03
Rhys Meyers

La extraña sensación, relajante en su nacimiento, se va extendiendo poco a poco, se magnifica a cada segundo. Cada individuo, cada elemento emanaba una especie de halo indescifrable y el cerebro del chico empieza lentamente a colapsarse al igual que una carretera en plena hora punta, cada elemento no cesa en fluir hasta el interior del joven, lo que le hace quedarse aturdido, alejado de la realidad.

Rhys está ahí, su cuerpo, pero no su mente. Inmóvil por completo, al igual que una estatua de piedra, con la mirada fija en un punto que le había robado la atención, sin pretenderlo de forma claramente preocupante. No es consciente de que su nombre es pronunciado una y otra vez, y que le observan. El flujo es más intenso, pero al poco pierde fuerza, lentamente, hasta que desparece al igual que ha aparecido a la vez que un eco resuena en su mente. Oye pero no escucha. Todo regresa a la normalidad, y la atención se fija en su colega Marc de forma distraída que parece visiblemente preocupado.

Lentamente, una media sonrisa se pinta en el rostro del chico que hasta entonces se había quedado como un lienzo blanco, inexpresivo. Va recuperándose de su viaje a quién sabe dónde. Ni el mismo protagonista es conocedor del destino. - ¿Eh? Ah, sí que me he quedado en babia. – Comenta en tono despreocupado y luego una tímida carcajada. Suerte que la oscura tez cubre la vergüenza manifestada en las mejillas. Ser el centro de atención digamos que nunca, ni le sigue gustando.

No sé de qué te extrañas, ya sabes que soy un soñador profesional, tan pro que hasta sueño despierto. Lo voy a convertir en deporte nacional. – Añade en el mismo tono. Necesita rebajar la pequeña tensión palpable en su amigo, aún sin importar del motivo. Da otro bocado al bollo que engulle de forma golosa mientras que la mano libre se encarga de rascar la mejilla, un gesto inconsciente debido a una molesta inquietud.

- Tiradas (1)
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21/07/2017, 00:22
Marc Morton

Marc parece aliviado una vez que ve que su amigo parece volver en si. Le mira extrañado cuando suelta aquella carcajada, aunque finalmente niega con la cabeza.

Por un momento me ha parecido que ese café llevaba alguna sustancia extraña o que... yo que sé, te habías convertido en uno de esos "freaks" que se teletransportan o algo. Si sólo te has ido a los mundos de yupi por mi no hay problema... pero joder, no te vayas tan lejos. No parecías reaccionar a ningún estímulo.

El resto de chicos pareció volver a lo suyo. Y Marc volvió a mirar el móvil un momento.

Mascar el pequeño bollo estuvo bien y, de hecho, pareció devolverle a la normalidad de forma completa. Pero entonces decidió dar otro sorbo al café casi de forma automatizada y... volvió a tener una extraña sensación. Notó el líquido caliente como penetraba en su cuerpo. No era la "típica" sensación. Era como si sintiera de veras como cada mililitro de café fuera recorriendo su cuerpo y finalmente acabara uniéndose al fluir completo que era su cuerpo.

Antes de que su mente volviera a ensimismarse con aquella sensación, Marc volvió a llamar su atención rompiendo el "hechizo".

Mira, mira lo que acaba de publicar el Eye -dijo mostrando con una sonrisa el móvil.

En la pantalla del móvil pudo leer:

ÚLTIMA HORA

Según hemos podido descubrir por nuestras fuentes, el choque en el Puente George Washington* ha sido ocasionado porque las autoridades perseguían a un conocido criminal que bien podría ser el Asesino del Corán.

Por desgracia, las autoridades no han podido dar con el sospechoso, que podría haber huído aprovechando la confusión.

Aquel título resonó por la mente de Rhys. Había oído hablar de aquel tipo. Llevaba medio año matando mujeres... todas ellas jóvenes caucásicas de pelo rubio o castaño claro de entre 20 y 30 años. Ahora mismo no se acordaba del número de chicas muertas ¿media docena? ¿más? Le llamaban el Asesino del Corán porque al parecer dejaba versículos de éste en los lugares del crímen ¿o era en sus ropas? Lo cierto es que no recordaba mucho más, salvo que el modus operandi era un misterio y había muchos rumores respecto a gran cantidad de cosas. Más que por alguna otra cuestión, conocía de lejos el caso porque más de una vez había salido el tema en la mesa familiar. Para desgracia de todos, Sarah cumplía bastante bien con el perfil físico de las víctimas del asesino múltiple y sus padres estaban bastante preocupados.

Marc permanecía soriente. Esto si que es gordo. Si ese cabrón se ha escapado... ufff. El caso es bastante interesante. ¿Sabías que hay quien dice que el FBI todavía no sabe como ese tipo mata a sus víctimas? Casi podría decirse que es el primer caso raro antes de toda esta oleada de tonterías "freaks" por toda la red... -terminó aseverando con su sarcasmo habitual.

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23/07/2017, 20:44
Rhys Meyers

El chico no puede evitar reírse un poco ante el comentario de Marc, aunque ligeramente avergonzado eso sí. Su mente es incapaz de procesar qué le había ocurrido, el por qué había desconectado de forma involuntaria. Y su mente se pierde entre divagaciones, al no encontrar respuestas decide dejar de lado la recién preocupación. Seguramente sería el estrés emocional, seguramente. Tendría que relajarse y tomarse las cosas con una mayor calma. – No tengo intención de utilizar el pasaporte. – Añade con otra broma para dejarlo estar así.

Sigue ocupado con el bollo, y su paladar agradece el dulce. Tras un par de bocados ingiere el café, lo que causa que la extraña e inexplicable sensación regrese, aunque de forma más tenue. Cada gota del líquido ingerido, lo nota, el fluir es evidente. La simbiosis también, nuevamente su compañero le saca del ensimismamiento.

Una noticia. Tras leerla se queda asombrado, pensativo. Y evidentemente preocupado. - ¿Eh? ¿Aún sigue libre? – Pregunta al aire con incredulidad en su voz suave. Necesita dar un segundo vistazo a lo escrito para terminar de creerlo muy a su pesar. Aún recordaba como en casa habían tratado el tema en varias ocasiones, principalmente por su hermana Sarah, sí, su hermana. El vello se le eriza. No conoce muchos detalles del caso, más bien escasos.

Nuevamente el colega de Rhys hace alarde de su ironía. – No estoy muy al tanto. Y no me digas, ¿se cree que tienen algún “talento” o algo así? – Remarca la palabra talento, evidentemente deja claro a qué se refiere exactamente. No existe la broma en ninguna de sus palabras, tampoco en el tono empleado.

Espero que lo cacen pronto”. – Piensa para sí con leve angustia. Deja el café apoyado en la fuente, y termina con el bollo, se limpia como puede las manos con lo que queda de la servilleta. Una vez hecho saca su teléfono para buscar el número de Sarah. – Sea así o no, es un loco más en  un mundo donde no faltan precisamente, sobran. – La gente es así, o saca lo mejor, o lo peor. Pueden hacer felices a los demás, al igual que su familia adoptiva. Y también son capaces de amargar la existencia de forma intencionada.

Los dedos pulsan la pantalla táctil del teléfono. Quiere enviar un mensaje a su hermana: “Ey, ¿qué tal la entrevista? Espero que bien :D. Seguro que lo consigues, ánimo.” – Termina de escribir dudoso, y le da enviar mientras su mirada se pierde en el cristal líquido que forma parte del teléfono.