-Me gusta la idea de Marc. La verdad es que si puedo evitar hablar con mi tío lo prefiero. Tal vez diga una tontería... Pero el ayuntamiento guarda un listado de todos los edificios abandonados con orden de desalojo y derribo. Eso es información pública. Kate... a ti se te dan bien los ordenadores. Que os parece lo siguiente... Buscamos un locutorio o cibercafé con ordenadores y conexión a internet. Kate, te conectas y miras la base de datos, a ver que edificios pueden ser interesantes para nosotros. Uno céntrico con una orden de derribo, por ejemplo. Y luego lo borras de la base de datos. Conociendo como funcionan las cosas en el ayuntamiento, de que quieran darse cuenta de que el edificio no se ha demolido, habremos cambiado de alcalde, y el expediente se perderá para siempre. No se... Tal vez es una burrada, ya digo que yo de ordenadores no entiendo y tal vez eso no tiene mucho sentido.

Marc se quito las gafas y limpio los cristales con una esquina de la camiseta.- Eso estaria de puta madre.- comento a nadie en particular. Era de noche pero aun asi le gustaba llevar las gafas de sol puestas, aunque no recordaba el motivo.

Decidio no agobiarse demasiado con el tema de recordar, penso que tal vez se diera un golpe en la cabeza y recordaria algo mas con el tiempo.

Asiento.

-No es algo complicado... Incluso podría darlo como una vivienda habitada ya y suministrarla de agua y luz- hago planes mientras en mi cabeza.

Entrar en la base de datos de un ayuntamiento y esconder mis huellas no será complicado. Tampoco pensarán que un edificio "ha desaparecido" entre los declarados abandonados... Y algo aprovechable podríamos encontrar... 

-Decidido pues... Sólo queda un pequeño detalle. -Joseph coge la punta de su camiseta y mira hacia abajo, como si fuera a recoger fruta en ella- Que narices hacemos con las ropas estas de militar, porque damos el cante que es una barbaridad.

Miro a Joseph y luego mi ropa.

-Debemos cambiarnos... Pero deberíamos irnos ya, es más importante. Quizás encontremos algo por el camino, saquear una tienda no es una opción, llamaríamos más la atención.

Lo que llevo no me incomoda, pero los colores nos delatan. Al menos espero que estos tipos no se pongan a quitarse la ropa como si nada, yo prefiero conservar las mías. No pienso desnudarme frente a ellos, ni quiero que ellos lo hagan.

-Me gusta la idea de hacernos con algun inmueble en las zonas bajas de la ciudad. Alli nadie ve nada, nadie habla con la policia y eso nos beneficia. Quizas podamos acercarnos hasta algun delincuente habitual, uno de esos maleantes que siempre escapan de la policia aunque sean culpables.

Podriamos asaltar su casa, poner fuera de combate a sus matones. Hay asesinos por toda la ciudad, camellos y narcotraficantes. Nunca me escuchareis decir que matar esta bien, pero hay gente que no merece ni el aire que respira, quizas neutralizando a alguno asi, podamos hacernos con algun dinero para seguir con nuestra mision, armas y una guarida.

Despues podriamos usar ese dinero para ganarnos a la gente de la zona, para que se sientan en deuda con nosotros y nos aprecien, asi nadie nos delatara y podremos movernos con mas libertad.

No se como podriamos conseguir ropas nuevas. Quizas entrar en alguna tienda y llevarnos algo de ropa. Tenemos algun dinero para dejarselo al dueño?

Marc escucho y resoplo. En la confusion no todos estaban escuchando.- Bien, vamos a mover el culo ya.- dijo abriendo la marcha.- Miraremos en los contenedores, nos disfrazaramos de mendigos, la mujer y otro entraran en un sitio de ordenadores y el resto vigilara por si nos siguen o atacan, pero tambien porque entrar todos juntos sera un cante. La mujer encontrara una vivienda en el centro y lo arreglara para que podamos vivir alli. Entonces iremos a ese lugar y nos instalaremos. Ese es el puto plan. Cuando este todo eso logrado seguimos pensando.

Somos militares señores, no criminales ni vamos a ir por el mundo asaltando comercios.- expuso con seriedad.- Todo lo mas que admito es saquear un telefono publico para sacar unas monedas y pagar el ciber.

-Se trataria de entrar en un comercio a la fuerza pero dejar el dinero alli. No es mi intencion robar a nadie honrado. Aunque tengo claro que robar a malvados y delincuentes no me quitaria el sueño ni minimamente.

Giro la cabeza, mirando a los hombres enormes que no paran de discutir si robar ropa o no, como si de un partido de tenis se tratara y acabo negando.

-O podemos pasarnos por una iglesia y pedir ropa de la que deja de caridad... No hay que robar a nadie y no hay que dar dinero. Cuando consigamos algo de ropa la llevaremos como intercambio- me meto, casi dudando, no es que me guste tener que mediar y menos entre dos armarios roperos.

-Sea lo que sea vámonos ya, somos fácilmente detectables si no nos movemos- y éso sí lo sé de sobra, estamos más vigilados de lo que ninguno de ellos jamás se imaginará.

-Por mi vamonos. Pero no estoy muy convencido de que en una iglesia vayan a tener ropa para mi. Igual el parroco puede darnos unas monedas sueltas para ontactar con unos "parientes" por internt seria menti al parroco pero podriamos devolverle el favor con alguna ayuda economoica mas adelante. cuando podamos. De todos modos, no podre mas pegas en este asunto. Consigamos algo de ropa y vayamonos de esta zona.

Podriamos asentarnos en alguna fabrica en la zona industrial antigua. Un sitio de aspecto ruinoso al que nunca vaya nadie. Si conseguimos que Catherine se conecte a internet seguro que puede buscarnos algo, no?

-¿Que coño te pasa tio?.- pregunto Marc dirigiendose a Gavrael.- No escuchas. Dejate de fabricas, la señorita puede darnos un lugar estable para dormir, una puta casa de verdad mucho mas defendible que una fabrica en las afueras que se te llena de yonkis el fin de semana. ¿Y donde has visto un cura dar limosna a gente de uniforme militar?.- Gruño Marc, se sentia como si estuviera rodeado de idiotas.

- Dejaros ya de "podriamos" y "alomejor" tenemos un puto plan, vamos a seguirlo. De la ropa ya nos encargaremos, algo encontraremos por el camino o fingimos que estamos de despedida de solteros pero mover el culo ¡YA!

Os ponéis en marcha rápidamente. De forma instintiva, como si llevarais haciéndolo toda la vida, trabajáis en equipo. Alguien de avanzadilla, otro en la retaguardia, el resto buscando ropa en los contenedores...

Ashton los siguio cuando salieron, aunque no habia dicho una sola palabra desde que despertaron, como mucho habia asentido o negado. Aun estaba completamente hipnotizado por las nuevas sensaciones, demasiado ocupado sintiendo su nuevo cuerpo.

Cuando las luces de la calle le dieron en la cara, sin embargo, parecio volver en si.

-No puedo quedarme demasiado tiempo con ustedes dijo simplemente Tengo que volver a casa. Necesito entender que es exactamente lo que nos hicieron...
 

No es una buena idea separarnos, al menos ve con alguien.- dijo Marc. El no recordaba si tenia familia, aun asi no se acercaria a ellos hasta estar seguro de lo que estaba pasando.

Los seres que nos atacaron no se han esfumado por arte de magia y nos dejaron claro que no les caemos bien.

-No seas ignorante, Ashton. Ya se que quieres ver a tu familia, pero ahora no es buen momento. Recuerda que el ejército también nos disparaba. No recuerdo porque, pero si el ejército nos quiere muertos, lo primero que harán será vigilar a nuestras familias por si contactamos con ellos. Tanto por tu bien como por el suyo, es mejor que les evites durante un tiempo. Por ahora es mejor que permanezcamos unidos.

Vuestra búsqueda por los contenedores de la periferia tiene éxito. Encontráis un contenedor de ropa, de metal cuya cerradura Kate consigue abrir sin dañar con unos alambres de un contenedor de escombros próximo. Dentro encontráis ropa de todo tipo, e incluso algunos zapatos en buen estado para reemplazar las botas militares que lleváis. Para Gavrael no hay ropa ni zapatos, pero con un poco de ingenio, aprovecháis unas ropas de talla grande (vulgarmente para gordos) a las que les desgarráis las perneras y los brazos. Eso le da un aspecto un poco extraño, pero al menos llama menos la atención que vestido de militar.

El siguiente paso es dirigirse al centro para localizar un locutorio o ciber-café.

Estáis acabando de vestiros cuando hasta vosotros llega el sonido de unos disparos...

Completamente aturdida por el incidente Rachel no ha podido hacer nada sino seguir al grupo con la vista perdida. Nadie le dijo que esto iba a pasar. Quería hacer carrera en el ejército y ser un ciudadano ejemplar.

Siempre he sido una buena chica. No me he metido en líos. Soy deportista y sana. Me aliste en el ejército para servir a mi país y accedí a estos experimentos para hacerlo mejor. No se porque ha ocurrido esto pero lo voy a descubrir.

El sonido de más disparos me hace salir del aturdimiento.

Disparos. Voy a ver de qué se trata.

Me acerco sigilosa hacia el área donde se escuchan los disparos.

Corro hacia los disparos con los demas. Pero me separo de ellos y voy al origen de los disparos intentando buscar la espalda como quien dice.