Partida Rol por web

Estaba tranquilamente en mi piso del centro de la ciudad, relajandome en mi sillon favorito, un silon de piel que decora mi salon como el mejor cuadro, y observando el panorama nocturno pro la ventana, cuadno mi telefono movil comenzó a sonar, lo deje sonar un tiempo, y luego finalmente me levante de mi sillon, no sin cierta molestia, a por el aparatito; cuando lo abri vi un escueto mensaje de la secretaria del principe que me pedia, o quiza ordenaba, que fuera al principado.

Dado que no tenia nada mejor que hacer en aquel momento, decidi ir de inmediato, pues mi curiosidad me impulsaba a saber que queria de mi el principe; de modo que me puse mi cazadora, cogí el movil, mi cartera, y las llaves del piso, y salí de casa, cerrando con llave antes de irme, pues nunca se abe lo que puede pasar.

Camine por la avenida, no me apetecia conducir aquella noche, de modo que decidi ir andando; meti las manos en los bolsillos de la cazadora y aprete un poco el paso, pues tampoco queria llegar muy tarde, afortunadamente, el pincpado tampoco estaba muy lejos, solo lo suficiente para un buen paseo.

Era aquella una noche despejada, por lo que maldije las luces de la ciudad pro no dejarme contemplar con claridad las estrellas. Se sucedian las luces de las tiendas a punto de cerrar, de las cafeterias y restaurantes donde la gente cenaba, o tomaba algo mientras conversaba a estas horas primeras de la noche.

Estaba mbelesado en mis pensamientos cuando llegue al edificio que era para el príncipe su santuario. Entre y me encamine a recepción para preguntar por el príncipe.

- Señorita, por favor ¿Podria decirme sipuedo ver al señor Julian? -

Cuando llegas al edificio del principado ves la ya conocida entrada de puerta doble en la pared frontal. Todas las luces de la alta edificación están a oscuras. Miras a lo largo de la calle y no ves a nadie a excepcion de una muchacha apoyada en la pared junto a la puerta.

Me aproximo receloso al edificio del principado, me resultaba extraño encontrarme todas las luces del edificio apagadas cuando el principe me habia convocado allí, me aproxime a la puerta del edificio y observe a la muchacha que había apoyada junto a la puerta, que haria ella alli a estas horas de la noche.

- Buenas noches - dije a la muchacha - ¿esperas a alguien o es que estas montando guardia?- pregunte en un tono un tanto jocoso.

Me disponia a llamar a la puerta para ver si había alguien, o es que me habían gastado una broma convocandome ante el príncipe.

La joven levanta la mirada del suelo mostrando una cara inexpresiva que  cambia a divertida cuando oye a Vlad. - Me llamo Rachel Douglas - Sonrie y mira al cielo - En serio tengo pinta de portero?

Me aparto justo a tiempo para que la puerta no me golpee en la cara, por el umbral sale un hombre que llama a Rachel por su nombre, en tono impertivo, y ambos se marchan sin que haya tenido siquiera tiempo de presentarme.

Agarro el pomo de la puerta manteniendola abierta y atravieso el umbral esperando que dentro haya alguien para recibirme, pues ya que había ido queria ver al principe; no me gustaría tener que quedarme con la intriga de saber que quería de mi como para llamarme con tanta urgencia.

Al entrar ves un pasillo a cada lado, totalmente oscuros, y de frente un mostrador de informacion con una pequeña lampara de mesa, a la derecha de éste, un ascensor.

No había nadie en la recepción, y el edificio estaba completamente oscuro salvo por una lampara de mesa colocada sobre el escritorio de la recepción. Paso por al lado del mostrados y me pongo en el lado donde deberia estar el recepcionista, aproximo la lampara para poder ver mejor y busco algo que me indique donde se encuentra el principe o en que planta está su despacho.

Tan ensimismado en tus pensamientos no te fijas en el hombre sentado tras el mostrador que te mira fijamente, el cual tose levemente para hacerse notar y con un boli que tiene en la mano te indica el cartel que tiene a su espalda, donde indica que en la planta -4 está las "Oficinas principales; P. Julian.

me giro y saludo al hombre mientras me dirijo al ascensor que hay al fondo, entro en la capsua metalica y pulso el boton 4, cuando se abren las puertas del ascensor salgo y busco el despacho del principe.

Se abren las puertas del ascensor, y cuando te dispones a salir piensas - Mierda, era en el -4 (menos 4).

Me maldigo por tardar tanto en recorrer el camino hasta el principe y golpeo con el tacon de mi bota el suelo del ascensor, presiono el -4 y espero cada vez con mas impaciencia llegar a mi destino.

Atravieso la estancia, la decoración de lo que aprecía una sala de espera es recargada, camino a paso lijero y abro las puertas batientes.

Saludo a la señorita Comb con una inclinaciónd e cabeza y un ligero hola, la sigo por el pasillo hasta la sala de espera y me sient impaciente por que el principe me reciba y me comunique de una vez que es lo que quiere de mi.

Miro al hombre que acaba de entrar con una expresión de curiosidad e impaciencia. - No, sigo sin saber que hago aqui, porque me ha convocado el principe ni que quiere de mi. - conteste - ¿Puede usted darme información al respecto? -