Marissa no estaba ni lo más mínimo convencida de lo que había pasado.
—Todo eso se lo dirás al magistrado del pueblo, quiero escuchar el testimonio de Lady Argentea. Tú date la vuelta y pon las manos en la espalda. Eres nuestro prisionero.
- Sabes que si haces eso, mujer, no conseguiras nunca mi ayuda, y ya puede morir la noble cuando no la encontreis, que a mi no me importará lo más mínimo. Un trato es un trato, lo cogeis o lo dejais. Y si no es asi, ya podeis darme muerte ahora, indefenso que estoy. No pienso hablar ni ir con vosotros a ningun lado. O es que piensas que un magistrado tendrá mejor parecer hacia un nigromante, independientemente de su culpabilidad o no.
A Layla no le convencia para nada la idea de dejar suelto a un nigromante, y mucho menos a uno tan peligroso como parecia ser ese.
La opción de Marissa era la más justa, pero el tipo no parecia verlo.
Muy bien. Pues si no quieres venir con nosotros a jugartela en el pueblo te matamos aquí mismo. Yo no tengo inconveniente. Es más, así nos despreocupamos de ti en el camino de vuelta, que bastante jodido va a ser ya.
Ya encontraremos a la noble sin tú ayuda. Sobretodo habiendonos dicho donde está. So bocazas.
Que alguien lo mate por favor.
Motivo: Intimidar
Tirada: 1d20
Resultado: 7(+5)=12
—No me creo nada de lo que dices, eres un mentiroso y un asesino, además de que levantas a los muertos vivientes y los controlas contra nosotros. ¡Asesinaste a los guardias de la caravana y levantaste sus cuerpos!
Marissa se cabreó, el maldito bandido que casi acaba con ellos quería que sólo por llevarles a donde estuviera Lady Argentea saliera libre y sin problemas de sus crímenes e intentos de asesinato.
Ella no lo iba a permitir. Trató de darle en la cabeza con el plano de su espadón, fallando.
Motivo: Hostia no letal
Tirada: 1d20
Resultado: 11(-2)=9
Me harté. Marissa no se traga nada de él.
Viendo el intento de asesinato de Marissa el tipo salió corriendo, escaleras abajo.
Ibais por buen camino...
(He visto que Nico se habia puesto en la via de escape, pero el hombre nunca te hubiera permitido pasar por su casilla y menos sabiendo que flanqueas)
Nico no se lo penso dos veces y fue a matar. Estaba claro que poco mas iban a poder sacar de ese hombre y era mas peligroso que estuviera libre. Debia perseguirle y evitar que dañara a alguien mas... para siempre.
- ¡Rindete, porque no vas a escapar vivo a no ser que lo negocies!
Motivo: Ataque con Espada Corta
Tirada: 1d20
Resultado: 7(+4)=11
Motivo: Ataque de Oportunidad
Tirada: 1d20
Resultado: 3(+4)=7
- Pues se desata mi acción preparada, que era cascarle a la minima.
- Ademas me genera ataque de oportunidad por huir de mi casilla amenazada.
- ¿Es en serio? ¿¿Dos ataques, dos fallos???
Yrian que había estado apuntando al hombre con su arco pese a intentar negociar con él, no dudó, en cuanto éste inició su huída, en dispararle y clavarle una flecha.
- Maldita sea, hubiese sido demasiado fácil por una vez. ¡Marissa! Ya nos ocuparíamos de él más tarde, ahora necesitábamos su ayuda.
Motivo: Disparo con arco
Tirada: 1d20
Resultado: 11(+5)=16
Motivo: Daño
Tirada: 1d8
Resultado: 8
- Tenía preparada la acción, asi que disparo en cuanto se mueve.
- Espero enchufarle.
A pesar de los intentos de todos por goleparle antes de que huyera, el nigromante salió corriendo sin ser herido.
Una vez estuvo fuera de la vista, el hombre sacó una poción y se la bebió. Daba igual ya que le persiguieran, era imposible que le encontraran estando invisible. ¿Podrían haber sacado mucho más de aquel hombre de haber actuado de otra manera? Quizás, pero ya era tarde para saberlo.
Layla vio como el tipo decidía jugarsela a huir, pero no pudo hacer nada por evitarlo ya que creía que se había rendido.
Aun así salió junto a los demás para tratar de perseguirlo. Y cuando llegó al lugar donde se volvió invisible lanzó un conjuro de area por si todavía estaba allí.
A ver. Yo no he declarado nuevamente mi acción preparada porque estabamos hablando, pero creía que la mantenia (vale, fallo mio por no especificarlo) Pero lo que sí es cierto es que el tipo debería de llevarse por lo menos un ataque de Oportunidad de Marissa.
Y aunque salga corriendo nosotros vamos tras él. Por lo que deberíamos llegar para ver cómo se hace invisible al menos ¿no?
Quiero decir. El tipo sale corriendo y saca una pocima. Nosotros salimos tras él. Suponiendo que no lleguemos a pillarlo, cosa que me extraña, vemos como se vuelve invisible. Por lo que podremos probar suerte y atacar a casillas ¿no? Y mi conjuro es de area (pequeña sí, pero de area)
La huida del enemigo era un fastidio, pero lo importante era la noble, y su recompenas. El clerigo habia dicho que estaba en el sotano, asique Nico comenzo a buscar una trampilla que pudiera dirigirle ahi.
- Olvidaos de ese malnacido, pensad en lo que hemos venido a hacer... ~ Conseguir una recompensa ~ ... Rescatar a una dama que necesita nuestra ayuda. Busquemos el sotano.
- Me tomo mi tiempo en buscar el sotano.
—Nicolae es un buen hombre, debemos bajar a encontrar a Lady Argentea, te seguimos...
Marissa, vigilando por si aparecía el malvado secuestrador, bajó al sótano con Nicolae.
Ya era tarde para arrepentirse, habían perdido la pista de aquel extraño personaje, pero algo hacía pensar que volverían a encontrarse.
- Recuerdo una puerta junto a la entrada, quizá baje al sótano. ¡Probemos!
Yrian guardó su arco, y recogió sus armas del suelo para bajar las escaleras confiando que sus amigos le seguirían hacía la puerta principal, junto a la que recordaba haber visto una puerta que podría dirigir al sótano.
- Si estáis de acuerdo, vamos todos a la puerta que hay fuera y adelante.
- Nico, protocolo de seguridad para puertas y otros ;)
No fue dificil para Nico encontrar, mientras Yrian decia lo de la puerta, un manillar cerca de la cabeza de la piel del oso que habia en la estancia del salón. Sin embargo, la puerta del mismo estaba cerrada por una cerradura que no parecía precisamente muy sencilla de abrir. Quizás el maldito nigromante tuviera una llave, pero ahora era tarde para acudir a él.
- Nico, ¿quieres probar? Si no, probemos con la puerta entonces -apuntó Yrian dirigiéndose a sus compañeros-.
—Que Milani te guíe— dijo Marissa apoyando su mano en el hombro del pícaro.
Y se lo sigo haciendo, para que busque trampas y abra puertas.
Nico observo la cerradura frunciendo el ceño mientras buscaba trampas en las cercanias. No se lo estaban poniendo facil, y no habia tenido mucha suerte con las anteriores...
- Dejadme ver si hay algo que nos pueda estallar... Y apartaos por si acaso, con un herido por la posible trampa nos basta.
Motivo: Desactivar Trampas
Tirada: 1d20
Resultado: 8(+8)=16
Motivo: Abrir Cerradura
Tirada: 1d20
Resultado: 15(+8)=23
- Me tomo 20 en buscar trampas. Imagino que Marissa me esta lanzando un guidance que me da +1. Total: 26
- Si hay trampas las desactivo y luego abro la cerradura de la trampilla. Si no, olvida la tirada de Desactivar trampas. Sumale +1 a las 2 tiradas plz, ke se me ha ido la olla con el guidance.
El hechizo que lanzó Layla no sirvió de nada. Ya que su enemigo había desaparecido. Lanzó un grito de rabia y se obligó a calmarse, si había huido no podían hacer nada. Ahora era cuestión de encontrar a la noble y volver con vida por el territorio tan hostil que tenían.
La hechicera estaba tan nerviosa como los demás mientras Nico hacia su trabajo. Pero según decia, y por el ceño fruncido que ponía, no era cosa facil.
Pensaba decir algo, pero prefirió no molestar y se quedó vigilando que no les atacara nadie mientras estaban concentrados en la cerradura.
Gracias a la pericia del pícaro, y a la magia de Marissa, consiguieron abrir la cerradura después de un largo rato. Una escalera de mano permitía entrar en el sótano.
Media docena de cajas y barriles ocupaban la mayoría del espacio de aquela bodega subterránea. Una rugosa manta se extendía por el suelo, en la parte sureste, cerca de su esquina y cerca de un cuenco con comida a medio comer.
A su lado una mujer claramente malherida descansaba sobre la manta. Al oiros bajar dio un pequeño respingo y se situó de espaldas a la pared. Si estaba aliviada de ver a alguien diferente o no, no se le notaba en el rostro, que era serio y de mirada penetrante.
Yrian bajó al sótano detrás de Nico preparado para lo que podrían encontrarse. Nada más ver a la mujer se aproximó para intentar evitar que se asustase. Su expresión inalterable despertó la sospecha del guerrero que se mantuvo una cierta distancia sin guardar sus armas.
- No os asustéis Lady Argentea, mi nombre es Yrian. Venimos desde Heldren a rescataros. Yuln Oerstag, uno de sus guardaespaldas nos informó de que os habían asaltado.
- No me mola su rollo, si se lanza de forma agresiva hacia mi la enchufo.
Por fin habían encontrado a la mujer, que lo suyo les había costado. La pobre parecia haberlo pasado mal, y seguramente el ver a un guerrero ensangrentado y armado no fuese de mucha ayuda.
Por lo que Layla toco el hombro de Yriam y le hizo una seña de que la dejara a ella, que era la menos amenazadora de los cuatro.
No os preocupeis Lady Argentea. Estamos aquí para ayudaros, los hombres que os han hecho esto ya están muertos. Vamos a llevaros a casa.
Motivo: Diplomacia
Tirada: 1d20
Resultado: 7(+10)=17