Partida Rol por web

Hago esfuerzos monumentales por no derramar más vitae mientras salgo de mi vehículo. Miro al cielo, a la luna plateada. Su luz ilumina tenuemente el lugar.

Cuánto olor a muerte… Quitándome toda otra sensación de la cabeza, me concentro en la foto que tengo en mi bolsillo interior. Su presencia es como la de un faro, y me da fuerzas para seguir.

Manteniendo mis elegantes movimientos y mi digno porte me adentro en el edificio, dispuesto a escuchar lo que tengan que decir los cainitas sobre el suceso. Me interno por el interior del Eliseo hasta llegar a la sala donde me han llamado para que acuda.

Abro la puerta sin decir nada, dejando que se abra completamente sin preocuparme por cerrarla después. Mi mirada recorre la sala, evaluando a los cainitas allí reunidos. Me detengo para observar con más detenimiento al que va de militar.

Sin perder más tiempo me cruzo de brazos, para echarme a un lado y dejar que lleguen los demás. Hago un último esfuerzo por contener las lágrimas mientras recuerdo cómo los azules ojos de mi hijo me miraron por primera vez. Aprieto con fuerza la mandíbula.

Lo traeré de vuelta, a mi lado…

Una vez llega al eliseo...

-Buenas noches caballeros....- responde para cuando pasa delante del capitán, juntar sus piernas, estirar su cuerpo y colocar su mano estirado sobre la frente.

-Capitán....- dice a modo de saludo.

-¿Algo nuevo sobre la misión?- pregunta por último realmente interesado.

¿Qué demonios ha pasado aqui?, ¿habéis capturado "vivo" algún causante de estos estragos? - la ira consumía a Naomi, solo pensar lo que le podía pasar a su "pequeña", le dotaba de una presencia e ira enorme, solo tenía pensado ver lo que le pasó a su sire y recuperar a su pequeña, antes de que se encapricharan con ella -

Necesito saber mas cosas de que ha sucedido, es de vital importancia.... - decía autoritoria, como una severa entrenadora -

 Tomo por los hombros a mi sire y la miro a los ojos por un momento. Calmate Olympia, por favor. Yo también estoy preocupada por Amy, me da miedo lo que esos salvajes puedan hacerle. Pero angustiandonos y llorando no vamos a lograr rescatarla. Donde está la Olympia Morris que yo conozco y que me educó? 

Suspiro, y me siento a su lado. Mira, el Regente dice que habrá una reunión en el elíseo, están planeando un rescate. Ire yo y me apersonaré de la situación, para que Amy pueda volver pronto, de acuerdo? Pero por favor cálmate. De nuestra fortaleza y aplomo depende el pronto regreso de Amy.

Hacía mis esfuerzos para calmar el miedo y la angustia que tenía. Sentía muchas ganas de llorar, pero tenía que ser fuerte. Oh dios, tendré que ser fuerte por quien sabe cuanto tiempo.

Agus Nosferatum

Escucho llamar, y la gente observa a su alrededor sin saber a quien han llamado, aunque tratandose de un Nosferatu, bien es sabido que en cualquier lado puede estar. Camino entre la gente hacia la afluente sala en la que todo tipo de personalidades se estaban reuniendo. Me sentía inquieto, y prefería mantenerme oculto

¿Qué es el Eliseo? ¿La gente que aquí entran son vampiros? ¿Humanos? ¿Ambos? ¿Debería conocer de antes este edificio?

En el medio del salón, como un poste decorativo más, quedo aguardando escuchar de qué tratara la supuesta llamada a voluntarios para el rescate de los secuestrados, no me entusiasmaba el trabajo en equipo con vampiros, por lo que esperaba encontrar alguna información relevante que me señalara un camino que yo mismo pudiera seguir

El Eliseo, cómo ya sabes (*) es el lugar donde se encuentra el principe, especie de gobernación de vampiros.

Entras al mismo y te encuentras en un salon amplio, hay un hombre sentado estilo militar, y otros tantos esperando.

A pesar del miedo, y de tus inseguridades decides ayudar. Motivo por el cual Te diriges al Eliseo (*) donde están organizando el rescate.  Entras a un salón donde están algunos hombres y mujeres esperando.

Tu sire se calma. Es curioso, nunca habías visto a Olimpia así,  y eso que ya la habías visto en situaciones difíciles. Crees que se encuentre así por la culpa. Antes de que la chica se fuera al Eliseo había  castigado a Amy, de una forma algo exagerada a tu parecer. Pero en eso tú no podías meterte.

Recoges algunas cosas que te pueden ser de utilidad (*) y  te diriges al Eliseo.

Manejas con cuidado el vehículo, mientras piensas en todo este lio  emocional. Es una pena, es posible que imponerle a Amy su personalidad fuera un error.

Cuando aparcar ves los rastros de fuego contra el pavimento, el edificio algo trastornado. El olor a vitae y a muerte inunda el lugar. Cuando entras te llaman te diriges a uno de los salones. Hay un hombre de porte militar sentado, y  observas como poco a poco van entrando personas a la sala.

Tomas el taxi realmente trastornado. No puedes evitar los recuerdos cuando eran niños,  en realidad, las relaciones más duraderas de un ser humano, no son con sus padres, o sus parejas, es con sus hermanos. Pero... ya no eres humano, y aún así, sigue siendo tu sangre, tu hermano, el único que te queda.

Tu familia había sufrido mucho, y de ese árbol familiar, sólo quedaban dos ramas, una estaba dañada (tú)  y la otra era la única que tenia semilla.

El Taxi te deja al frente del Eliseo. Puedes sentir el olor a vitae y a muerte, justo hace unas horas estabas con tu hermano... vivo.

Pensar en eso te hace mal.

Entras a un salón. Hay un hombre de porte militar sentado, y  observas como poco a poco van entrando personas a la sala.

Marcus que bueno verte por acá. Dice el hombre murmurando bajo. Estoy esperando que lleguen más personas para comenzar la reunión  y tus  dudas se contestarán.

Cada uno de ustedes entra al salón, pueden ver la cara de todos los presentes, esta llena de tristeza e ira. Hay un hombre militar al frente de todos que después de murmurar algo a un hombre enorme de color los mira evaluando que estén todos. Poco a poco el salón se ve medianamente lleno.

Una mujer rompe el silencio.

¿Qué demonios ha pasado aqui?, ¿habéis capturado "vivo" algún causante de estos estragos? - la ira consumía a Naomi, solo pensar lo que le podía pasar a su "pequeña", le dotaba de una presencia e ira enorme, solo tenía pensado ver lo que le pasó a su sire y recuperar a su pequeña, antes de que se encapricharan con ella -

Necesito saber mas cosas de que ha sucedido, es de vital importancia.... - decía autoritoria, como una severa entrenadora -

Calma. Dice el Militar. Vamos por pasos. Se escuchan muchos murmullos. Sé que todos están interesados, pero  vamos en orden, tenemos que ser sistemáticos para que la misión tenga éxito. Mira a la mujer.

Soy el General Q, soy asistente del sheriff de la ciudad y el encargado de liderar este rescate. Los mira a todos. Estoy buscando un grupo para rescatar al senescal y a otros, con suerte.

Supongo que sí están aquí es porque desean unirse a esta comisión.

Joeman al oir la noticia del secuestro no duda cual es su obligación, pero la mala conciencia de la vida anterior como Joe Barmby le hace mantener una actitud desganada y sin la energia propia del superheroe.

Las imagenes no llegan a desaparecer en ningun momento, imagenes en las que no hay ningun atisbo de moralidad, tan solo supervivencia. Una supervivencia ruín basada en la despreocupación hacia la salud y la vida de los demás.

...

...

Joeman está dispuesto a corregir esos errores del pasado.

Si necesita unas piernas agiles o alguien capaz de inmiscuirse entre las sombras, no dude de que su hombre ha llegado.

Es un joven delgado y de pelo rizado. Parece que no se hubiera afeitado en algunos días y su ropa parece haber sido lo primero que hubiera encontrado en el armario...y seguro que no era un armario muy poblado. Su voz suena firme y mantiene una pose de brazos en jarra que le da un aspecto entre ridiculo y heroico.

Se presenta ante vosotros el defensor de la justicia, Joeman.

Ehh... El hombre te mira serio... ¿Joeman?, ¿justicia?... mmm comprendo. Alza una ceja como si estuviera pensando en algo. Nos agrada pensar que los malkavian han enviado un representante, No dudo que será útil.

Hace un gesto de suspirar y mira a los demás.

Pues no perdamos mas el tiempo, vayamos a esa misión de rescate.

¿ con que cosas contamos ?,¿armas, equipo, vehículos? -  la voz de la preciosa rubia era autoritoria, casi como si reprendiera una maestra a un alumno conflictivo, más sus verdes oscuros que contrastaban con su pálida piel, le daba un aire dominante -

Un perro ladra desde el centro de la sala enseñando los dientes a todo el mundo a su alrededor se mantiene firme en su posición dandose a conocer sin ningún miedo a las tenebrosas creaturas que aquí le rodean. Hace falta prestar un mínimo de atención para poder ver a la figura que hay en pie junto a él.

Un hombre alto, de barba deshilachada y rostro escondido en la penumbra que el ala corta de su sombrero y el cuello largo de su negra gabardina le confieren. Bajo la gabardina se ven unos pantalones de traje y unos zapatos de cuero negro. Las manos en los bolsillos tan solo permanece silencioso, observando, observandoos, observándole.

Tiene unas largas ojeras, de no haber dormido bien desde al menos hace 10 años, un tenue, imperceptible siseo sale de él, haciendo que el perro guarde silencio respetuosamente relamiendose unos inusualmente largos colmillos.

La atención que por unos segundos haya tal vez acaparado, se desvanece, centrándose de nuevo en la presentación del grupo de rescatadores, así como una exposición de los recursos y procedimientos a llevar a cabo. Agus tan solo estaba esperando que se hablara del rescate, del lugar, de quienes, de cómo, de porqué, de por donde empezar, del primer paso...

Una voz suave y delicada se escuchó desde la parte trasera del tumulto.

-"Soy Mattheson, y vengo dispuesto a ayudar."

Entonces Phileas avanzó unos pasos entre el resto de los presentes.

-"Esos cabrones no van a irse de rositas después de lo que han hecho, ¿alguien tiene un plan trazado?"