Partida Rol por web

- Eso, eso... escuchad a Auris que parece que es el único que usa la cabeza... - dijo Marcus intentando apoyar a su compañero. - No debemos pelear entre nosotros. -

Alzó las manos en son de paz... - ¿Por qué no seguimos buscando la entrada a la tumba? A lo mejor alguno de los cautivos sabe algo... -

Continuo con el conjuro, muviendo el brazo en el aire, como si pusiera y quitara algo.

-Haha- Que ego! Un placer. Cuanto me divierte, cuanto me divierto; los bienhechores amenzandome con sus armas, el bribon buscando paz y un angel suplicando y maldiciendo...
Que impronta, cual grandeza, cuanto poder! Apenas hago temblar cielo y tierra por un simple gesto. Por un hechizo que no lastimara a nadie. Por algo de que agraciarme... Y cual es mi descaro, que para mi acto, si su dios es justo, quitara sus fuerzas si osan lastimarme.

En un abrir y cerrar de ojos parece que todo se detiene: Amon termina su conjuro el cual no logra tener el efecto deseado mientras que Tolmir que ha detectado que tipo de hechizo es a tiempo se detiene en su lanzamiento. Aún así no baja la guardia puesto que decide que no sabe si ese hechizo ha sido para divertirse o por otras intenciones.

En cualquier caso Jezabell que no ha notado nada extraño no va a por el semidragón, sino que se dirige directamente hacia los cautivos dispuestos a liberarles. 

Me giro hacia los cautivos mientras comienzo a desatarlos y a llevarlos al fondo de la sala, dandoles agua. Esta tarea lleva un tiempo por lo que puedo pensar sobre las palabras de Auris y Marcus, que aunque no acaban de convencerme, si parece lo más razonable ahora

Me dirijo a los cautivos y echo una mano a Jezabell.

- Lo siento. - digo disculpándome con ellos. - Pero vais a tener que esperar aquí a que volvamos. Al menos esos vampiros no os molestarán más. - Espero que nos crean pues somos su única oportunidad.

- ¿Llevais mucho tiempo aquí? ¿Recordáis algo de cuando os trajeron o del tiempo que habeis pasado aquí? Cualquier cosa que podáis decirnos puede resultarnos de utilidad... - comentó el ladrón.

Miro la punta de mis garras mientras muevo las falanges preguntandome por que no funciono el conjuro. -Mmm. Blegh. Ustedes no son divertidos...-
Sin interés veo como empiezan a ayudar a los prisioneros. -Dejadlos, volveremos para la cena.- Digo con una sonrisa...

A todo eso, me pregunto si ya ha salido el sol fuera...

Esto perdía el encanto, escuchar sermones y ver caridad. Quizá entendía por que la mujer ayudaba a los prisioneros, con una idea equivocada, lo que me llevaba a no entender por que los hombres se lo permitían, si al final cuantos más sean los hombres tendrán menos posibilidades al competir el fornicar con ella...
-Ustedes los humanos son desagradables. Carecen de instinto... y fuerza, olfato, garras...- Niego con la cabeza. -No los entiendo.- Y no debería, es de mala educación el jugar con la comida.

Tras bufar, me da curiosidad saber lo que hay delante, por lo que me dirijo a salir de esta habitación.

Jezzabel liberarlos para que que mueran  no es una buena opción, qui tiene una oportunidad les proveeremos de comida y sustento según nuestras posibilidades  pero tenemos un misión que cumplir.

Dirigiendome a los cautivos:

 Cualquier información que nos puedan dar sobre el templo, la ciudad o sus habitantes no s será bien venida, en cuanto podamos vendremos a liberarles, tienen mi palabra.

Los hombres y mujeres de la salen se encuentran completamente débiles y desnutridos. La mayoría de ellos se encuentran inconscientes, y solo los pocos que se encuentran conscientes no tienen ni fuerzas para responde a vuestras preguntas. Solo las miradas en sus ojos con un ligero brillo indican esperanza. 

No voy a dejarlos salir para que mueran, auris, pero no voy a dejarles aqui atados, mi intencion es dejarles en las mejores condiciones que pueda hasta que sea seguro sacarlos de aqui, quiza podriamos ir trasportandolos con el conjuro de Tolmir hasta la ciudad, en grupos aunque nos lleve un tiempo y dejarlos alli en manos de alguien que pueda ayudarlos tanto fisica como mentalmente de todo cuanto hayan sufrido. ¿Tolmir, ¿a cuantos puedes afectar con tu conjuro?

Marcus, necesitaremos que encuentres un agujero por el que poder salir en forma de gas, no quiero que nos vean en la sala y tus ojos son los mas apropiados para ello, Rob, como dijiste antes que querías averiguar mas sobre este asentamiento creo que dispondrás algún día para hacerlo en lo que ponemos a estos hombres en buenas manos. Yo me quedare protegiendo a los que no podamos sacar.

Auris, jilokasina, ¿os quedareis conmigo o preferis acompañar a Rob? - la paladina de nuevo asumio su actitud normal, evitando e ignorando a Amon y por supuesto dejando fuera de los planes de rescate.

Se realista, no podemos encargarnos de ellos ahora. Una cosa es impedir que Amon los devore y otra muy distinta salir con ellos. Mi conjuro afectaria a cuatro de ellos, y no pienso emplear todo mi poder en sacarlos de aqui arriesgando nuestras vidas y las suyas. Nosotros fuimos descubiertos y estos ademas de no tener manera de defenderse no saben ni donde están, como para llegar a sus casas.

Además tendriamos que acompañarlos fuera, en esta maldita ciudad y llamando la atención de todos los habitantes.

Debemos dejarlos aqui y tratar de volver rápidamente, sólo entonces veremos como podemos sacarles

- Jezabell... - comenzó Marcus a sabiendas de que sus palabras podrían resultar duras para la paladina. - Yo tampoco quiero dejarlos aquí... pero creo que es la mejor opción para ellos. En la que más posibilidades tienen de sobrevivir. Debemos hacernos una mejor idea de este lugar, y cuando lo hayamos limpiado de criaturas malignas entonces, y sólo entonces, intentar sacarlos. Cualquier otra cosa me parece una carnicería... -

Aún así, Marcus echó un vistazo intentando encontrar algún agujero por si tenían que usar el plan de la paladina más tarde.

El constructo se adelanto de su segundo plano, donde había esperado a que la situación tensa aquella se solucionara. 

-Creo que me es posible sacarles de aquí, con cierta discreción. Aunque no con presteza. Se me ocurren varias opciones- continuo el constructo -Para empezar como os he dicho antes los miembros de la academia parecen conseguir residencia en esta ciudad simplemente ocupando una de las chozas semiderruidas de fuera. Podríamos salir ahí fuera y buscar una o dos chozas para nosotros, eso en principio no sería nada sospechoso. 

Posteriormente podríamos intentar sacarles de aquí. He estado analizando las posibilidades y si, quien quiera que lleva esta academia ya no sabe de nuestra presencia aquí por la cantidad de ruido indiscreto que hemos hecho, entonces lanzar un par de conjuros mas no será especialmente notorio.

En concreto estaba pensando en hechizos de teleportación, pero me temo que no dispongo de la energía necesaria para transportar a tantas personas. Otra posibilidad podría ser hacer el recorrido por medio de la discreción. Tengo la tecnología necesaria para crear un campo de ocultación psico-cinética alrededor de mi estructura, lo que podría hacer a un grupo pequeño imposible de detectar a simple vista.

-Eso nos deja con varios problemas... el primero es que no podemos estar seguros completamente de que los miembros de la orden no dispongan de formas para detectar presencias indetectables a la vista. Un campo antimagia en una zona a la entrada esta en el ABC de la seguridad del hogar.... chhhhhrriinkkk crrrankghh. 

El segundo es que el grupo es bastante grande para poder ocultarlo en un solo viaje, podríamos hacer varios viajes, pero eso aumentaría las posibilidades de que seamos detectados. También podríamos solucionarlo reduciendo las personas de tamaño, conzco la combinación alquimica que produce una transformación molecular controlada, podría sintetizar esos cambios en un cristal y crear un rayo que proyectara la alteración alquimica directamente al cuerpo de los afectados, ademas de expadirlo, de esta forma afectaría variso a la vez.

El tercero de los inconvenientes se encuentra en el estado de semi-inconsciencia de los prisioneros. Necesitariamos acarrearlos con nosotros, lo cual aumentaría aún mas el número de personas e incrementaría la posibilidad de que nos descubran. Como cuarto inconveniente esta el hecho de que los prisioneros desaparecerán de este cuarto y quien quiera que suele visitarlo dará la alarma. Quizá busquen a los prisioneros en todo el poblado y no será especialmente difícil sospechar de nuestro grupo. Aún así podríamos esconderles en una capsula extradimesional. 

Por último el gran inconveniente de todo esto se encuentra en la cantidad de tiempo que me llevaría realizar todos los preparativos y la cantidad de materiales que tendría que invertir en ello. El tiempo es lo mas apremiante y calculo que necesito almenos un día de trabajo para poder tenerlo todo a punto-

Como siempre la jerga de Arrow había sido bastante difícil de seguir, sobretodo por su verborrea, mas que por su lenguaje. 

Rob, quitando el ruido metalico, me recuerda a las muchas voces superpuestas que se escuchan en un poblado; ruido, murmullo, inteligilbe...
Pero creo que apunta a los mismo que los demás.

-Ay si... Descolgarlos de sus cadenas, traten sus heridas usando hasta sus manos, invoquen un festin y sientance felices con eso y sigamos!- No digo como ser un buen samaritano, esto es sarcasmo.
De me saldria patear a un prisionero contra la pared, tal cual una madre enojada lo hace con el juguete del niño que no quiere hacer las tareas.

El tiempo transcurría y los aventureros aún no habían decidido que hacer con ellos. Las palabras de Rob eran bastante lógicas y acertadas, dadas las circunstancias. 

Por el momento estaban teniendo mucha suerte puesto que aún no habían sido detectados... pero eso podría cambiar en un momento u otro.

- Aunque las opciones que plantea Rob son interesantes y efectivas... como él también dice, el problema del tiempo es crucial... - Marcus miró a la paladina y dejó que sus ojos se cruzaran un largo instante...

- Creo que deberíamos dejarles algunas provisiones e indicaciones de que no se muevan de aquí hasta que regresemos... Jezabell... quiero ayudarles tanto como tú... pero no les servirá de nada que nos descubran sacándoles de aquí... no les servimos de nada muertos. Acabemos de explorar esto y luego les sacamos... - Marcus había propuesto lo más sensato en su opinión... con los vampiros muertos dudaba que nadie más se acercara a esa zona para importunar a los prisioneros.