Partida Rol por web

Marcus dejó a un lado la puerta con la trampa y avanzó por el pasillo hasta la siguiente bifurcación a la derecha*.

Vio otro pequeño pasillo que sobresalía pero no se fió. Aquella tumba estaba repleta de trampas. Observó detenidamente el área antes de avanzar.

Trampas y más trampas, que mas habría? Más trampas?
Resople y bufe, el picaro se estaba tomando su tiempo y yo quería ver algo de acción.
Puse mis garras en el suelo, en cuatro la posición. Entonces me vino una arcada... luego la baba cayo por un costado de mi boca al suelo.
Otra arcada y mi pecho se hincho, el vómito estaba próximo a venir. Eructos y arcadas se hacían cada vez mas violentos, mis ojos se desorbitaron, puestos en blanco, y mi estomago se contrajo con fuerza para poder lanzar.
Abrí grande mis fauces y largas patas de insectos empezaron a salir, atravesando mi garganta llenos de saliva y saliendo por mi boca, un grupo de escarabajos infernales caía al suelo, agitaba sus alas que tenian debajo del caparazón para limpiarse y rápidamente caminaban por el suelo y las paredes, hacia delante y a la próxima habitación.
Si había algunas otras trampas estos grandes insectos caerían en ellas...

Amon no nos precipitemos, seamos sistematicos, no sabemos que se puede desencadenar.

- Hombre... si tenemos bichos que pueden comerse las trampas por nosotros no es una mala ayuda. - comentó Marcus sonriendo. Le había gustado la idea de Amon.

- Yo puedo buscar trampas y desactivarlas si las encuentro... pero si yo fallo esos bichos pueden comerse una lanza o lo que sea en nuestro lugar... Prefiero que sea lo que sea lo que nos aguarda en estas salas le pinche a esos bichos antes que a mí. - la sonrisa de Marcus se ensanchaba. Sí... debía haber comprado unas cuantas mascotas antes de salir de aventuras. ¿Por qué nunca se le había ocurrido?

Uno de los escarabajos entra por la habitación que quedaba por descubrir... no obstante, desaparece aplastado por las cuatr paredes que se cierran en un abrir y cerrar de ojos. 

Los otros dos escarabajos se dirigen hacia abajo del todo, hasta llegar a un arco de puerta. A unos tres metros de distancia de los insectos, te comienza a brillar.

Tu inspección no detecta trampas, pero si una pequeña puerta secreta en una de las alas del pasillo. 

- ¡Eh, psssshh! - exclamó Marcus a sus compañeros. Señaló con la mano la puerta secreta que acaba de descubrir mientras manipulaba el mecanismo para abrirla.

- Por aquí hay otro camino. - indicó. - No me gusta nada que ese arco brille y ésta parece ser nuestra única salida. - indicó mirando la recién descubierta puerta secreta.

Un sonido gutural y los insectos se detuvieron. -Que es ese arco?- Gire la cabeza... sera que Auris me hizo dudar el enviar los insectos?

Miro en la dirección que indica Amon e intento recordar algo parecido.

Amon y Auris no tiene dificultades de deducir que el arco se "activaba" nada mas acercarse a unos tres metros. Analizandolo mas de cerca, parece ser que las piedras brillan de un color diferente: la dovela inferior izquierda en verde, la clave en rojo y la dovela inferior derecha en verde claro. El arco está cubierto de una bruma y velado por una neblina que impide ver que puede existir en su interior. 

Sin llegar a tocar o atravesar el arco, Marcus trató de buscar alguna trampa en sus cercanías.*

- Si no encuentro trampas envía a uno de tus bichos. - dijo Marcus a Amon. - ¿Puedes comunicarte con ellos? - si Amon podía hablar con ellos seguro que podían enviar a uno para que viera qué había al otro lado y volviera para contárselo.

- No veo ninguna trampa... pero las luces indican magia seguro... - comento cauto. - Amon, ¿te importaría mandar a uno de esos bichos a explorar? No creo que si hay algo o alguien al otro lado se vaya a alertar por un bichito de nada... -

Resoplo y con un gesto de amenaza hago que los bichos corran hacia delante... 

-No había escrito algo? Que el roja brillaba si había sangre y que por el verde va el valiente y no me acuerdo bien... No suelo recordar las cosas que no me interesan...-
Pues bien, unas habitaciones antes estaba escrito un enigma sobre colores...

Los bichos entran y esperáis pacientemente a que regresen... mas no lo hacen. Desgraciadamente, la niebla del arco es demasiada espesa para saber lo que les ha podido ocurrir.

Sera mejor que cruce yo solo , si la cosa se pone mal  puedo cambiar de plano e intentar volver aqui.

- Espera un momento. - pidió Marcus a Auris. El pícaro rapidamente sacó una cuerda de su morral, la hizo girar con pericia con su muñeca y lanzó uno de los extremos hacia el portal con la intención de que lo atravesara, mientras mantenía sujeto el otro extremo de la cuerda con sus manos.

Quería dejar la cuerda unos segundos en el otro extremo del portal y luego recogerla para ver si seguía intacta y si se podría regresar.

Además si alguna criatura no inteligente se hallaba al otro extremo, a lo mejor intentaba morder la cuerda o tirar de ella, y ellos estarían entonces preparados.