Partida Rol por web

Lluvia mira fijamente la danza ejecutada por sultan y mientras abre mucho los ojos al verle escapar aparentemente sin ningun sentido abre la boca y por fin habla

[B]-A ver, he visto algo ahi dentro, en el almacen, de nuevo..-[/B]

- Bueno, si hay alguien en el almacen tendremos que desviarnos para dar un rodeo sin perder tiempo y no pasar cerca. No me gustaria que estuvieran esperandonos los macarras que estaban con el perro ese tan feo. Seguramente se trate de eso, puesto que cuando nos vigilaba Pipa no habia ninguna mala sensación ni hemos sentido esto antes. Y sobre lo de autorecluirnos, estaria de acuerdo si no fuera porque nos han ordenado explicitamente ir a la colonia a informar. Viendo lo fanaticos que son, el no aparecer podría ser considerado alta traición o algo peor. Lo mejor será ir avisando que podemos tener "algo" y que no se nos acerquen mucho... y que a todo recien llegado le apliquen una cuarentena estricta, no sea que tengamos una plaga

Te agazapas entre las sombras. A tu alrededor escuchas varios ruidos y te parece notar movimientos, pero podría ser cualquier cosa... O nada.

Mientras tanto tus compañeros se van adelantando.

-¿A que os referís con lo de Pipa? - Dice Axel moviendo las orejas intrigado- ¿Qué ocurrió ahí dentro?

- No hay lugar para poner a todas las posibles víctimas de la enfermedad... casi habría que poner en cuarentena a los sanos, en vez de a los enfermos -responde Bastet, poniendo en todo caso buen cuidado de no ponerse a favor de viento de Baldomero.

Lluvia tuerce el morro

-Vaalee, pues no habra quarentena vosotros vereis. En cuanto a quien nos esta vigilando, tengo la ligera sensacion de que no es ningun perro ni ningun amante de ellos, ya que dado su bajo coeficiente mental de todos sabido, ya nos hubieran atacado..observar es mas..felino.Yo me voy a ver que o quien es porque todo esto me huele mal, si alguien quiere venir que venga-

Se gira y vuelve de nuevo hacia el amacen

- Lo de Pipa es que se nos presentó nada más salir de la perrera, nos dijo que nos había estado observando todo el tiempo y que regresáramos para informar. No se, pero esto cada vez me está dando peor espina (con lo contento que estaba porque habíamos triunfado). Pensar que puede haber una epidemia y que los fanáticos que nos enviaron nos estuvieran vigilando todo el tiempo no me gusta nada. Eso por no contar que nos seguimos sintiendo vigilados aun después de que Pipa se marchara. Si no es un perro ni es Pipa ¿quién nos espía? Y lo más preocupante, ¿por qué?

Al acercaros al almacén os reencontráis con Sultán que se había escondido allí. Entre las sombras véis brillar unos ojos... Ya no hay duda ¡es un gato!

-¡No os acerquéis más!- os dice desde las sombras -Creo que estoy enfermo...<cofff> podría contagiaros <aaagh>-

Baldomero se queda pálido al ver que, efectivamente hay una plaga contagiosa. Aunque por otro lado se queda un poco aliviado al ver que esa plaga puede ser diferente a lo que le pasa a él, puesto que no tiene ni pizca de tos.

- De acuerdo, no nos acercaremos... - comienza a decir - ... pero podemos hacerte un par de preguntas desde la distancia, ¿verdad? La primera sería ver si tu enfermedad comenzó con picores y no con tos... y la segunda saber si eres uno de los gatos que estaban en la perrera y que acabamos de liberar

Con las dos respuestas podría descartar que lo que le pasaba a él fuese lo mismo que lo que le pasaba al gato infectado... o hacer que la paranoia aumentase varios enteros y que realmente les hubiesen enviado a un lugar infectado por vete tu a saber que

-Primero empecé con las toses... Después me salieron sarpullidos <cojjjj>, no veas como pican- empieza a explicar

-Más tarde tuve dolores de estómago y empecé a encontrarme débil... <aaarrggh>, es por eso que he venido más despacio desde la perrera y pretendía dormir aquí hoy- se para un momento (parece que se está rascando)

-<Cof, cof> Así que tú eres el calvo que nos liberó ¿eh?... <aaagh> Ya me parecía a mí- Notáis su voz más débil y parpadea largamente, parece que se está quedando dormido.

-Eeeecccs...

Bastet procura alejarse del tipo espeluchao ese. Liberar a los tipos de la perrera no ha sido muy buena idea, por lo que parece.

- Igual sería buena idea irnos..

Aliviado porque él no tiene toses y el picor puede ser producido por algún producto químico que usaran para limpiar o desinfectar la perrera (o una alergia a algo que a los demás no les ha afectado a la piel por estar recubiertos de pelo, que alguna desventaja debía haber por estar completamente pelado), Baldomero mira al gato enfermo con una mezcla de preocupación y tristeza.

- Si, fui yo el que os sacó de ahi... - Baldomero gira la cabeza al ver que el gato enfermo se está quedando dormido - ERh... ¡EH! ¿Te encuentras bien? ¡Qué tontería de pregunta, está claro que no!

Al escuchar a Bastet Baldomero se gira hacia ella para mirarla mal. - Si, claro... vamos a dejarle aqui, abandonado a su suerte. Está claro que no le va a pasar nada. No me he jugado el pellejo para liberar a nuestros hermanos y dejarlos tirados después para que agonicen. Si esta es la revolución que estáis buscando lo siento, no es la mía. Ya lo dejé claro cuando Axel y yo nos enfrentamos en solitario al perraco en este mismo almacén y antes de meterme a rescatar a los gatos en la perrera; no estoy por dejar a nadie atrás. Si queréis marchar a la colonia id, yo voy a prepararle un sitio para dormir cómodo y caliente en una caja con uno de los sacos que le tiré por encima al perro para evitar que se comiera a Axel.

Baldomero se gira de nuevo hacia el gato enfermo. - Tranquilo, te prepararé un sitio para que puedas descansar y mañana trataré de traerte algo de comer... - comienza a decir mientras piensa como hacer la pregunta del millón sin ser brusco, pero no es nada fácil. - ... oye, una cosa. ¿Había más gatos enfermos en la perrera?

A lluvia tambien le parece asquerosin el congenere pero esta de acuerdo con baldomero, no nos hemos jugado el cuello y rescatado para ir a colgarnos medallas frente a la colonia, esa no es la revolucion que ahora lluvia quiere defender

-Yo me quedo con baldomero y el enfermo tambien pero alguien tendra que volver a la colonia y contar lo que ha pasado para que tomen las medidas pertinentes-

Ayuda a baldo a hacerle una cama al decrepito gato pero no la situa muy cerca de donde ellos vayan a estar porque si enferma tambien no cree que puedan hacer mucho, al terminar se sienta un poco alejada para escuchar la respuesta del gato tiñoso

Balomero sonrie al ver que alguien más se preocupa por el gato enfermo, pero la situación impide que esté contento (aun así le dedica una sonrisa a Lluvia... auqnue siendo tan feo como es, queda algo grotesca)

- No nos llevará tanto tiempo prepararle un sitio decente para que descanse si tengo ayuda, así que los que os queráis marchar podéis esperarnos fuera para ir juntos a la colonia. A fin de cuentas, somos nosotros dos quienes más se internaron en la perrera y si quieren saber algún detalle de lo que hay más allá del patio solo lo podremos dar nosotros... por no contar que cuantos más seamos para regresar, más seguro será nuestro camino si hay algún problema.

Sale de entre el grupo y se dirige a Baldomero dedicándole al gato enfermo una mirada de complicidad

-Baldo, tío, sabes que llevo contigo desde lo de el perro, y no te dejé atrás aquella vez. Tampoco voy a dejarte atrás ahora- Y nunca, pensaba Axel. Pero su imágen de gato duro no le permitía decirle esas palabras tan ñoñas de amistad a su amigo. - Supongo que necesitareis a alguien con fuerza para mover el saco, o por si acaso. Nunca esta de más. -Axel sonríe.- Además no me hace mucha gracia que el grupo quede así de descompás y que os quedéis tan solo dos con el enfermo. - Miro a los demás - Está claro que es tan importante salvarle, como comunicar nuestra victoria. Así que id a comunicar el triunfo de los gatos por encima de los humanos. Nosotros llegaremos un poco más tarde, no importa. Porque visto lo visto, es mejor que haya un sitio seguro sin esta especie de enfermedad, y si existe eso, que sea el refugio. Id - y acto seguido Axel se giro mirando a el gato enfermo. Pensó como lo ayudarían sin acabar tambien infectados, pero supuso que a su amigo cerebrito ya se le ocurriría algo - como siempre - él el ojo y Axel la mano - como siempre también - y eso le gustaba.

-Bueno... ¿cómo te llamas compañero? -Dijo dirigiendose al gato enfermo.

Sultán ya ha tenido bastantes aventuras por este ciclo lunar, así que silenciosamente, imitando la manera de los gatos normales, se marcha desde su escondite haciendo mutis por el foro y sin que nadie se entere.

Desde allí regresa a su casa en el callejón. Se mete en el contenedor de basura abollado que es su hogar, y se echa a dormir.

Baldomero mueve la cabeza para agradecer las palabras de Axel sin darle una palmadita en la espalda, pero viendo que ya hay más que piensan como él (y comprendiendo a los que no quieren arriesgarse a contagiarse, que es un acto lógico) propone la opción intermedia (que por eso de que "en el punto medio esta la virtud" y que los extremismos son malos le parece cada vez mejor opción) - Bien, entre los tres no nos costará nada preparar eso, así que yo optaría porque los que no quieran permanecer aqui se queden fuera controlando que no hay ningun peligro en el camino y nos esperen un momento antes de ir a cruzar la calle. Volver a la colonia puede entrañar problemas y separar el grupo solo nos hace más débiles, sólo hay que recordar lo que ha pasado cuando no hemos permanecido unidos y como el cruce de la calle en grupo sirvió para que pasáramos solamente con una magulladura

Baldomero, más tranquilo después de ver que no es el único que se preocupa por el enfermo, mira al resto a ver que deciden esperando que el arranque por ver como pasaban del gato rescatado no disgruegue al grupo (que hasta ahora está funcionando bastante bien)

Se quedó calladita mirando a unos y a otros. Ella sabía que se iba a quedar con el enfermo, no abandonaría a ningún gatito necesitado a su suerte, eso estaba claro, pero no sabía qué pensar de sus compañeros. La reacción de Baldomero, Axel y Lluvia la enorgulleceron de sus tres compañeros, por lo que no pudo evitar acercarse y saltarle encima a Baldomero dandole una lametazo en la mejilla, y repitiendo la acción con Lluvia y Axel. Después se sentó cerca del gato enfermo, pero a una cierta distancia de seguridad, esperando a que Baldomero, cabecilla de la operación, decidiese qué hacer.

- ¡Eso dijo María Tifoidea y mira lo que pasó!(*) Vale, a ver si dejáis de pensar con el corazón y empezáis a utilizar el cerebro. La presencia de nadie va a sanar a nadie, y sin embargo, podéis acabar contagiándoos y contagiando a más gente. ¿Acaso alguno de vosotros sabe veterinaria? ¿Cual es el planazo para evitar lo que evidentemente parece una enfermedad respiratoria?  Porque estamos todos respirando el mismo aire... No te lo tomes a mal -señala al gato enfermo-, pero ahora mismo aparentas ser bastante contagioso. Y no veo en qué va a beneficiarte que los demás nos contagiemos también.

Bastet cabecea, desesperada ante lo que considera un serio error en el control de enfermedades.

- Si queréis salvar a este tipo, me parece bastante más razonable intentar atraer aquí a un veterinario que  dedicarnos a rondar a su alrededor. Baldomero, puedes indignarte todo lo que quieras conmigo, pero creo que te equivocas.

Baldomero se queda sorprendido cuando Dama le da el lametazo, ya que está poco acostumbrado a las muestras de afecto (solo proporcionadas ocasionalmente por el genio del mal que le servía hasta que un agente secreto desarticuló su organización, y de eso hacia mucho tiempo).Todo el mundo sabe que los archivillanos lo son porque no han tenido cariño en su vida y tratan de compensar la falta de afecto hacia ellos con odio y/o terror entre la población mundial, que nunca se quedan con la chica y que siempre aparece un héroe que le rompe el cuidadosamente confeccionado plan de conquista del mundo... a diferencia de los villanos normales, que al ser de perfil más bajo suelen quedarse con la chica, la pasta y la fama sin que nadie les moleste (y si les molesta acabe en la carcel o durmiendo con los peces) y pueden saquear bancos (haciendo que parezcan compensaciones por prejubilaciones de directivos), paises (en lugar de chantajeandolos consiguiendo pensiones vitalicias y privilegios por haber sido jerifante) y cosas así... era una pena que a Balodmero una buena puesta en escena le gustara más que cenar caballa y calificara como "Gran genio del mal" en vez de solamente maligno o chungomante (pero claro, es mucho más aburrido dominar el mundo a través de una agencia que califica economicamente paises y sus deudas que ser reverenciado como un rey-dios viviente)

Onanismos mentales aparte, Baldomero se queda pensativo ante las palabras de Bastet. A él lo que se le da bien son los planes malignos, la conquista del mundo, descubrir agentes secretos infiltrados (e idear rebuscados métodos de eliminación innecesariamente complicados) y cosas de ese estilo... la contención de epidemias (y ser un líder buenrollista que se preocupa por los suyos en vez de mandarlos a morir por la causa) le viene de nuevas (claro que, hasta ahora, sus esbirros eran humanos y no gatunos y tenía su explicación).

Tras rascarse la cabeza, Baldomero se gira hacia sus compañeros... y ve como le miran a él, como esperando que diga algo. Apesadumbrado, se levanta y habla sin levantar la vista del suelo. - Me temo que tiene razón... - comienza a decir en un tono triste - Lamentablemente tiene razón. El bien que podemos hacer es muy poco, sobre todo si lo comparamos con el mal que puede significar que nos infectemos nosotros también. No solo por nuestra salud, sino también por la colonia. Tenemos una responsabilidad y no podemos dejar de lado a los que confian en nosotros... aunque tampoco podemos dejar nuestros principios en el camino para justificar cualquier cosa por la causa. No lo se...

No, se perfectamente que es lo que debemos hacer... lo que pasa es que no me gusta un pelo

Baldomero hace una pequeña pausa antes de continuar sin levantar la mirada del suelo, como si no quisiera (o se atreviera) a mirar a los demás). - Prepararemos un cobijo para que pueda pasar la noche y mañana dejaremos pistas desde la perrera hasta aqui. No me gusta devolver allí a un hermano, pero es donde mejor cuidado estará y donde tiene más oportunidades de recuperarse, ya que tienen veterinarios que podrán curarle loq ue tiene. Realmente nosotros poco podemos hacer por él, más allá de hacerle sentir mejor... y con una cama mullida y el apoyo que le hemos dado espero haberlo conseguido, auqnue solo sea un poco. Por lo demás... debemos regresar a la colonia e informar. Es lo que dijo Pipa, el trabajo está hecho y quieren información de primera mano. Debemos regresar...

Baldomero comienza a caminar con la cabeza gacha hacia la salida del almacén. - Axel, prepára uno de los sacos para que nuestro amigo pueda descansar allí, por favor... el resto no os entretengáis, podríais infectaros. - Baldomero continua hablando girando la cabeza hacia donde está el gato enfermo (pero sin levantar la mirada del suelo) - Descansa, mañana a primera hora volveremos a traerte algo de comer y buscar ayuda. Me gustaría hacer algo más, pero... me temo que no puedo

Al pasar junto a Bastet levanta la pata pero recordando la preocupación de la gata por las enfermedades, la baja y asiente con la cabeza en un gesto de aprobación. - Bien hecho, has mantenido la cabeza fría.

Finalmente, Baldomero abandona el almacén pensando por qué alguien querría ser un superhéroe visto lo que tienes que preocuparte de los demás y como te quedas cuando en vez de tratar a los esbirros como peones de ajedrez perfectamente prescindibles los ves como iguales que dependen de ti.