Partida Rol por web

Caranthir hace su magia y con su saber combinado distingue las propiedades magicas de los objetos 

-Una espada fraguada para ser mas poderosa que una normal> Nota : espada +1

-Pergamino con un hechizo de clerigo> Nota burning hands clerigo nivel 3

-Varita magica hecha de hierro> Nota shocking grasp 28 cargas

El libro no es magico es medio bestiario medio religioso de monstruos crueles y sanguinarios con dibujos de su forma y manera de actuar> Nota parece valioso requiere tirada tasacion para saber cuento exactamente

B4. Washing pool

En el centro de la pequeña habitacion hay una piscina circular llenada por una fuente rodeando el borde calaveras decorandola en circulo y tambien en algunas partes del borde manchas de sangre

No estais solos en esta habitacion

B5. Escaleras

Unas escaleras en espiral sobre un pilar grueso , conducen a una inmensa negrura

Arus vio de nuevo a otro engendro que aguardaba en la habitación con una piscina adornada por calaveras y manchada con sangre. Sin duda solo podía tratarse otra criatura del mal, y como tal, acabariamos con ella. Su aspecto inspiraba pavor, pero no al joven Arus, que encontraba coraje en su señora.

Sin dudarlo se adelantó a sus compañeros escudo y cimitarra en mano y descargó un furioso golpe sobre el enemigo.

Un nuevo terror apareció en la habitación a la que llegaron, Arus parecía dispuesto a lanzarse al combate, y Arumat no iba a dejarlo solo en la lucha contra el mal, apuntó con la ballesta y contuvo la respiración intentando mejorar así su precisión, tras un par de segundos de duda disparó a la criatura, clavando una saeta profundamente en una de sus cuencas oculares.

Me acerqué a la criatura para asestarle un ataque con mi espada mágica pero no tuve la destreza necesaria para asestarle el golpe, me faltaba practicar más con la espada para coger soltura.

Rebusque en mi cabeza en cuestión de milésimas de segundos por si conocía al monstruo:  sus debilidades - poderes - y demás. Cómo también saber como se podía convocar a un monstruo de éstos  y mantenerlo subyugado , pues creí que podía servir para discernir contra quién nos enfrentábamos y medir la cuantía de su poder.

De forma casi involuntaria, lanza la joven hechicera su maldicion del sueño.
- Domine creature sonium est

Tras repartir los objetos que habían encontrado Drialia avanzó junto con sus compañeros por uno de los caminos que había dejado atrás antes. Al abrir una nueva puerta una criatura apareció ante ellos. Drialia desenvaino la cimitarra y escudo en mano se dirigió hasta la criatura lanzando un tajo no muy acertado. 

El combate es increibemente rapido, los heroes actuan demasiado rapido para que el varguille pueda reaccionar, el diapro de la ballesta pesada de Arumat atraviesa al monstruo y Arus da el golpe de gracia.

No hay nada mas de interes en la habitacion.

Los personajes van a las escaleras, pero se dan cuenta que estan obstruidas por un desprendimiento, , el gran peso de las rocas hace imposible subir por ahi.

B12: El túnel se ensancha hasta lo que parece que alguna vez fue un pequeño santuario, ya que al noreste unos escalones conducen hasta una plataforma de piedra gris. Sobre la plataforma hay un antiguo altar, poco más que un basto bloque de mármol negro con una concavidad poco profunda tallada en la parte superior. Este receptáculo está lleno de lo que parece ser agua sucia

La criatura cae rápido, gracias a un certero tajo y al agujero del dardo de la ballesta de Arumat al atravesar al engendro.

Retrocedieron, ya que las escaleras se encontraban bloqueadas con toneladas de escombros. Solo quedaba una sección de las catacumbas por explorar, y de momento habían sacado poco en claro. Tras recorrer el pasillo llegaron a un pequeño altar con un recipiente de agua sucia. Nada interesante había allí, pero quizá tras la siguiente puerta si lo hubiera.

-Preparaos y continuemos. El aire humedo de estas catacumbas empieza a entumecerme el cuerpo. No quisiera pasar más tiempo del estrictamente necesario en este agujero.-Dijo a sus compañeros con una sonrisa mientras se dirigio a la puerta cerrada. En cuanto estubieran listos entrarían.

- Si, es el camino mas logico, pero aun no hemos encontrado nada que encaje con todo esto, o es algo que se me escapa
Se para y mira a cada uno de los miembros.

Muy buen golpe caballero ( le digo al inquisidor ) , y a ti Arus que decirte donde pones el ojo golpea tu espada . ¡¡ Ahora que vengan esos engendros del infierno estamos preparados para darle su merecido !! digo con aire de arrogancia ante mis enemigos, aunque por ahora no había ninguno y el que yacía estaba muerto así que no podía escuchar mis fanfarronadas.

Con actitud más calmada le hablo a mi compañera tienes razón Persephore creo que todavía nos falta el peor enemigo, aquel que ha convocado a éste monstruo de los planos. Así que estar muy atentos a lo que nos queda por explorar. Sigo como siempre a Arus.

Otra vez habían acabado con la criatura antes siquiera de que está hubiese podido hacer nada. Drialia vio como sus compañeros celebraban la victoria y continúan el camino. Pasaron por una especie de altar que contenía una especie de agua. Drialia miro hacia arriba a ver si había alguna gotera y luego olfateó el agua. No sabía porque pero le parecía extraño que ese agua estuviese ahí. 

Arus empuja las pesadas hojas de piedra, que se abren sin oponer resistencia.

Hasta donde la luz de la antorcha os permite podéis ver una inmensa sala que parece nada más y nada menos que una gigantesca catedral subterránea. Hay una puerta de piedra a cada lado de la entrada principal pero, más allá de ellas, los muros están grabados con extrañas e intrincadas runas. En el centro de la sala hay un estanque con un anillo de cráneos humanos pulidos en equilibrio sobre afiladas estacas dispuestos en círculo alrededor del centro.

Nada más abrir las puertas escucháis una voz chillona que procede de la oscuridad al fondo: "¿Cómo os atrevéis a mancillar el sanctum de la Madre?"

¿ De quién era esa voz que escuché en cuanto Arus abrió esa puerta ?,  parecía la voz de una matriarca de la raza de esas horribles criaturas a las que habíamos dado una muerte digna. Viendo que se escondía en la oscuridad y que era imposible verla. Sin lugar a dudas era la líder de su raza y por tanto el más temible enemigo, y  aunque mis compañeros convocaron conjuros de luz me dispuse a no dar tiempo a que ese monstruo pudiese atacarnos por sorpresa. Guardé la varita y con breves gestos y palabras desaparecí de mi sitio.

Nada más abrir la puerta, una estancia enorme y oscura se abrio ante los aventureros. Era similar a una enorme iglesia o catedral. Sin duda un edificio de algún culto o dios depravado como las criaturas que en las catacumbas habitaban.

Una voz preguntó al grupo por sus motivos, pero solo la oscuridad se veía, los hechizos lumínicos apenas alumbraban unos metros. Arus levantó su escudo para iluminar la zona, y esta vez sacó una de las jabalinas que llevaba a la espalda. Esta vez se mantendría alejado ya que todavía le dolía el cuerpo de las heridas anteriores.

-¿Quien anda ahí?¿Y quien es la Madre a la que hemos mancillado?. Da la cara.-Dijo Arus con autoridad mientras afinaba la vista por si veia algo.