Partida Rol por web

Menudo rollo, con tanto guardia en los alrededores no tuve oportunidad de echarle mano a nada. Resignado y con las manos tan vacías como mi estómago me reúno con mis compañeros en el callejón cuando veo las ratas esqueléticas.

—Oye oye oye. ¿Apenas acabamos de salir de un lío por un conjuro fallido y ya nos vamos a meter en otro?— aún me entran arcadas de recordar el resultado anterior. Esa grotesca imagen me perseguirá todas las noches.

Tony negó con la cabeza y le ofreció a Barret lo poco de manzana que quedaba.

No creo que sea buena idea más magia. Para cocinar, lo mejor es hacer una hoguera y calentarlo ahí. De todas formas hay una razón para no comer ratas de ciudad. Yo paso. No he caído tan bajo aún.

Y previendo la tragedia inmediata de alejo del grupo y echó un vistazo a la calle principal a la espera de que se calmaran las cosas para poder salir y buscar de nuevo a la sheriff.

Y tras pensar unos minutos se giró de golpe.

Ostras! Ya se cómo ganar dinero. Podemos eliminar las ratas de las casas y que nos paguen por ello. Si es que esas ratas zombi hacen su trabajo y no la lian más.

Me adentré en el callejón junto a los compañeros para tratar de evitar a los guardias, allí Arnolfus planeó nuestra siguiente táctica para conseguir algo que echarnos a la boca, me preguntó sobre si tenía algún hechizo para preparar las ratas y me encogí un poco de hombros con una sonrisa en señal de que podía, al menos, intentarlo; sin embargo el resto de compañeros no parecían fiarse de mis habilidades. Hinché mis mofletes en señal de enfado y entonces me defendí -oye, tampoco es que me muera de ganas de comerme a Tony ni unas ratas pero estamos hablando de supervivencia- me defendí -¿sabes lo difícil que es pensar y hacer magia con la barriga vacía? a este paso me voy a quedar sin mana-  me lamenté llevándome las manos a la barriga en señal de que estaba hambrienta.

Cuando Tony propuso su plan alcé ligeramente una ceja -¡para eso sí estás de acuerdo en aprovecharnos de la magia!- comenté dolida -entonces ¿el problema soy yo?- dije mostrándole unos ojos casi llorosos -¡espera y verás me convertiré en una gran maga!- anuncié a continuación haciéndome la fuerte.

Meditó unos momentos...

-Bueno, sería posible... el problema... ya sabes; a veces, la magia falla ligeramente... un mero asunto de matices... Podría pasar que convocase a ratas gigantes que devorasen humanos... y entonces, sí que nuestra reputación se iría a la mierda... No, más vale rata en mano, que ciento volando; peladas y asadas, nos parecerán liebre, que son gordas.

Acepto el trozo de manzana de Tony, de la cual no sé de dónde procede ni quiero saberlo. Le doy un mordisco mientras Kromi y Arnolfus discuten qué hacer.

¿Comer ratas? He comido cosas peores, sobre todo desde que viajo con ellos. Personalmente no le pongo pegas mientras no suponga comerlas crudas.

—Yo solo digo que "a buena hambre no hay pan duro, ni se moja en vino puro"— y tras decir eso termino de comerme el trozo de manzana, masticándola de forma sonora*.

Tony negó con la cabeza desde la entrada del callejón.

No me fío de vuestra magia en general. Pero ya que están ahí las ratas esqueleto, mejor usarlas para eliminar las ratas vivas de alguna casa habitada y que nos paguen por ello.

La última vez que comí rata me salieron unos enormes y dolorosos bultos negros por todo el cuerpo. Prefiero no repetir la experiencia. Pero si queréis seguir adelante, prefiero probar suerte en la cárcel. Allí dan de comer -se rasca la nunca pensativo - o eso creo. Jajajajaja

Miró a Kromi.... en plan... "¿A que no hay huevos?"  ... Oir a alguien decirles a unos magos que no se fiaba de la magia... era como retarles abiertamente a que hiciesen uso de ella....

... Momento de espectación... tensión... justo cuando va a haber un desastre pocos minutos, pues esa sensación

-Tengo una idea para que esto funcione- dije tras escucharles y al ver como Arnolfus me animaba silenciosamente a hacer uso de mis habilidades -¿donde están esas ratas? no van a cocinarse solas- pronuncié alargando las manos mientras las cerraba y abría varias veces en un gesto de "dame, dame"

Tras un buen rato, finalmente algunas de los esqueletos de ratas regresaron. Sin embargo, las ratas de por si no eran muy listas, por lo que solo una de ellas regresó con el cuerpo de otra rata. El resto regresaron con cosas diversas. Nada útil ni comestible y... ¿un dedo humano? Por la falta de sangre parecía que no era reciente, por lo que os podíais imaginar de donde venía. Entonces ya comenzaba a escucharse a alguien cerca, posiblemente los guardias.

Cuando las Ratas llegaron me acerqué a recoger el botín, sin embargo no se me veía emocionada al hacerlo, sino que cogí al animalucho por la punta de la cola mientras ponía mala cara ¿Cómo había llegado a este punto? ¿y si moría de hambre? después de todo tenía un cubo mágico que me reviviría ¿no? pero... la verdad prefería no experimentar aquella experiencia.

Tragué saliva, estaba algo nerviosa pero tenía que hacerlo ¡ya era cuestión de honor! miré a Toni, estaba apunto de pedirle algo cuando escuché a alguien acercándose -ay no... deben haber seguido a la rata del dedo- dije comenzando a dar unos saltitos nerviosa al pensar en lo que podría pasarnos si nos pillaban -te-tenemos que escondernos- pronuncié mirando a mi alrededor, buscando un lugar donde ocultarme -¡no hay tiempo! aguantad la respiración- dije tratando de lanzar un hechizo para volvernos a todos invisibles.

Cojonudo, no solo no traen mucha cosas de utilidad sino que para colmo ya están los guardias acercándose. Me dispongo a ocultarme cuando Kromi, presa del pánico, lanza un conjuro.

—¡Espera Krom...!

Eso es lo que apenas atino a decir antes de que lance el conjuro. ¿Qué será ahora? ¿Nos volvemos bebés en pañales incapaces de correr y de decir otra cosa aparte de gugutata? ¿Nos convertiremos en papilla? O mejor, que nos volvamos luminiscentes de forma que nos vean desde 10 kilómetros...

-De donde habrá sacado ese ded...

No terminó la frase, cuando se percató de que Kromi estaba lanzando un conjuro sobre ellos, así que se le cortó la frase, y rápidamente hizo un gesto con la mano para desconvocar a las esqueléticas ratas; malo era que les encontrasen,... pero caray, que también hubiese ratas esqueleto, lo mismo no agradaba a la Guardia.

Tony se giró al oir de nuevo los canturreos de su compañera

Ya está liada otra vez...- Musitó

Kromi, con las prisas, de nuevo volvió a equivocarse de hechizo. De pronto todos ellos comenzaron a brillar casi como faros. Incluso los esqueletos de Arnolfus comenzaron a hacerlo. Parecía que no había escapatoria pero antes de que los guardias aparecieran, una bandada de cuervos que pasaba por allí vieron algo brillante. Y claro... A los cuervos les encanta las cosas brillantes. Todos aquellos cuervos se lanzaron de lleno contra ellos, comenzando a picotearles tratando de llevarse eso brillante. Lamentablemente las ratas esqueleto acabaron igual que en su otra vida, pero los aventureros quedaron tan rodeados de cuervos que los soldados al verlos decidieron alejarse por el peligro que conllevaba acercarse a ellos.

"Cría cuervos y te sacarán los ojos". Decía el refrán. Pues el que creó el maldito refrán no se esperaba que existieran personas como nosotros, lo suficientemente desafortunados como para que esos malditos bichejos se ceben con nosotros.

Lo único que puedo hacer el tirarme al suelo entre quejidos y rodar para quitármelos de encima. Y no dejan de picotearme como si quisieran arrancarme la piel a tiras. Sí, eso es lo último que me faltaba...

—¡No, agentes, no se vayan! ¡Por favor, quítenme estos pajarracos de encima y arréstenme! ¡Pero solo a mí, por favor! ¡Bueno, a Arnolfus también! ¡Esperen! ¡No se vayan!— pero no, la guardia no está dispuesta a arriesgarse a salvar a un genio como yo. Frustrado con todo grito a mis compañeros mientras sigo luchando para quitarme a las aves de encima —¡Que a nadie se le ocurra la genial idea de lanzar otro conjuro! ¡Estoy harto!

Me pregunto si nos picotearán hasta la muerte... la verdad, ya estoy muy cansado de mis compañeros. Eso sí, cada picotazo duele un huevo.

Había que reconocer que el efecto luminiscente tenía su gracia... y que en una caverna, sabiamente usado, sería de una utilidad espectacular, pero... en aquel momento,... lo mismo no era el idóneo...

Pero no hubo tiempo para lamentaciones ni para recrearse en la contemplación de un tipo de magia que le resultaba inaccesible, pues una bandada de cuervos... esas ratas aladas y emplumadas, decidió que eran buena carne y la emprendieron con ellos....

La guardia se largaba, Barret se lamentaba y...Leches!!! que los cuervos eran aves, y por tanto,... COMIDA!!!!

Mientras con una mano se dedicaba a espantar a esas dichosas aves, que cual moscas cojoneras se empeñaban en intentar sacarle los ñáñaros por las orejas, con la otra sacaba la daba, y tras murmurar un "sus vais a cagar"... intentó acuchillar a alguna, por eso de tener algo comestible, que les hacía falta.

-Son comida!!!

... avisó al resto, por si conseguían atrapar a alguna de esas malas bestias

Cuando noté como comenzamos a brillar me di cuenta de mi error, sin embargo decidí esperar un poco antes de aceptar que había salido mal "quizá acabemos brillando lo suficiente como para cegarlos" pensé cerrando los ojos por precaución, sentándome y haciéndome una bolita por si llegase a ocurrir. Entonces, escuché una gran cantidad de aleteos y espantosos gritos de ave acercándose y lo siguiente fue dolor, me quedé en aquella posición llorando y esperando a que se marchasen mientras escuchaba los gritos de mis compañeros "se han vuelto locos" pensé.

Aghh. Ya sabía yo que era mala idea. -dijo Tony al notar los primeros picotazos. Sin embargo, el hombrecillo no se quedó acurrucado a dejar que le comieran los cuervos ni se molestó en luchar contra ellos. El barbudo echó a correr hacia la calle principal. Probablemente si se metía en algún montón de abono o en algún abrevadero, los cuervos le dejarían en paz... Probablemente.

Tony que se alejó hacia la calle principal, por suerte para él y sus compañeros, encontró un abrevadero donde se pudo lanzar espantando así todos los pájaros sobre él. Sin embargo las estrategias de hacerse un ovillo y el de pedir ayuda no parecía funcionar, por lo que los pájaros no dejaban de picotearles. Sin embargo, podía ser peor... Peor como con Arnolfus que, al tratar de golpear a los cuervos, lo único que logró fue golpear a uno de ellos, espantándolo y de esa forma atrayendo incluso más cuervos con su brazo reluciente.

-Mierdaaaaaa!!

No solo no había conseguido espantar a los cuervos... sino que parecían llegar más... a ese ritmo, morirían devorados a picotazos... había que hacer algo, y preferentemente rapidito...

Lanzó unas apresuradas palabras arcanas... su idea era convocar una jaula en la cual pudieran guarecerse hasta que el hechizo brilli-brilli se esfumase, pero....

Oh, sí,... apareció una jaula,... pero alrededor suya, y de los cuervos... ahora estaba encerrado con los cuervos en la misma jaula, y encima no era demasiado amplia, así que, de escapar... nones

-joodeeeer!!!!

Tenía que pensar otra cosa...