Partida Rol por web

Rollerblade sonríe y dispuesto a avanzar al interior con la espada en ristre y apunto para sablear a alguien mas.

-Veo que quieres ser el siguiente, ¿eh machote?-

Era el momento tranquilo y con cara de póquer esperaba a que el patinador entrara en la sala, un poco cubierto tras la puerta pero no con margen de maniobra, la pierna con implante prepara para lo que hiciera falta.

Veo mucha charla y poca accion patinadora...hagamos una cosa, vuelve con un refresco, unas patatas, la hamburguesa no hace falta, contigo tendre suficiente carne picada....Jhon sigue provocando al patinador para que este entre y que xtreme tenga su oportunidad mientras confia en que al menos puedan desarmarlo y dejarlo en el interior donde su superioridad numerica seria determinante

Rollerblade abandona la seguridad del marco de la puerta, dispuesto a luchar con vosotros en el cuerpo a cuerpo.

Veo como la sangre de Eliot comienza a abandonar su cuerpo y cómo lo hace con velocidad. Ahora el malnacido entra por la puerta buscandonos a los demás, le arrojo a la cabeza lo primero que encuentro mientras que me acerco por uno de sus lados para atizarle con el palo que tengo. Ahora podemos darle entre todos.

Rollerblade entra en la sala dispuesto a golpear enseguida, pero XtreM es capaz de reaccionar antes. Notáis como el cazador maldice con su mirada mientras intenta corregir su rumbo.

Según da el primer paso a su izquierda esta XtreM medio oculto por la puerta un despiste que pagaría caro si conseguía golpear al patinador...

Pero la sangre del Eliot o hizo mella en el equilibrio del XtreM...

Parece que XtreM no se aclara y pierde la oportunidad de abatir al cazador. Lo que permite soltar una sonrisa de burla a Rollerblade.

busco un objeto de metal o pieza que poder lanzarle.

Uno de nosotros ha caído ya como consecuencia de este despreciable juego, quizás podamos acabar con él, quizá caigamos alguno más.

El olor a la sangre comienza a llenar el ambiente, debemos espabilar o no será la única sangre que se esparza por el suelo.

Parece que nuestros movimientos son algo confusos, esta muerte, aunque no lo parezca, nos ha afectado. Es hora de que nos afecte una alegría.

- Malnacido, haremos justicia haciendo que tu sangre se derrame junto a la de nuestro compañero caído.

Le arrojo lo primero que pille a la cabeza y luego trato de atizarle con el palo desde el lado opuesto al que se acerque Jhon.