Partida Rol por web

Me desespero y contesto.- Bueno, veo que no tienes nada que contarme.- Lanzo una mirada fulminante a Oc'Korg.- Espero que tú hubieras intentado sacar la maza del culo del dragón al menos.- Dije mirando a Tikedf.

Oh, si poderoso señor- responde de inmediato el goblin- me dirigía prestamente a quitarle la maza a vuestra magnífica bestia cuando de pronto por el rabillo del ojo vi como la momia que nadie expulsó seguía allí acechando al dragón. Iba a ir a librarme de aquel monstruo de una vez por todas cuando...

¡Claro! ¡Y por eso te ví riéndote con la momia mirando como caminaba el pobre dragón desde vuestra bola de cristal! -dije, apuntándole con un dedo acusador.

Preparé sin más mi segunda mirada tenebrosa para Tikedf.- Tus argumentos no tienen ni pies ni cabeza, no se sostienen goblin mentiroso.- Acto seguido miré a Kradex.- Tú estás muy callado, ¿Con todo el alboroto que había tu estabas quieto?.- Dije esperando una respuesta suya.

-¡N-No, mi Señor Oscuro, no estaba quieto! En realidad, el pobre Kradex corrió a extraer la maza del querido dragón de su Señor, pero por el camino ¡tropezó y cayó por una ventana mágica al mundo paralelo en que el Señor Oscuro es bueno y no malo, el mundo está en paz y los goblins no son verdes...! ¡Fue horrible! - gimoteó Kradex. - ¡Y además el pobre Kradex sabe quién le hizo viajar a ese mundo horrible! ¡Fue Roko, que hace unos días se vanagloriaba de que había encontrado un chisme interdimensional en el templo en ruinas, con el que abrió la ventana...!

Reí por la torpeza del goblin.- Nadie te hizo viajar más que tú, asqueroso goblin, que tropezaste con aquel artilugio.- Hice una mirada tenebrosa a ese engendro. Acto seguido me dirigí cabreado también a Roko.- ¿Y tú en vez de cuidar al dragón te pones a buscar artilugios legendarios? ¡Os dije que no salierais de mi malvada fortaleza! ¿Cómo osaste desafiarme?.- Dije dando un puñetazo a la mesa.

Para contestar Roko se mantiene en reverencia hacia su Señor Oscuro. No porque sea culpable, sino por recordarle los hechos. -Mi Señor, cuando busqué hierbas multiolores para vos estuve en el Templo. Yo cuidaba al dragón, pero fui enviado a la ciudad submarina. Logré volver gracias al mago Horgus para cuidar al dragón, ¡pero el terrible Hamster Fantasmal no me lo permitía! Logré despistarle y volver al salón, ¡pero entonces Kur'ikú empezó a atacarme con su espada inteligente! ¡Me quería matar! ¡Tuve que salir de la sala para despistarle a él también! Y cuando regresé el dragón ya...fue atacado. ¡Fue culpa suya! -dice Roko señalando a Kur'ikú con furia acusadora.

Me giré a Kur'iku.- ¿Por qué querías matar a tu compañero? ¡Goblin traidor!.- Dije agitando la mano en el aire.

Kur'ikú miró con rabia a Roko.

- ¡Pues porque ese goblin es un traidor! ¡Y no le está contando toda la verdad!- gritó señalándole.- Efectivamente, un mago le había ayudado a volver... ¡y le había dado la capa del archimago a cambio de que Roko hiciera algún mal contra usted!- miró al Señor Oscuro.- Ya podrá imaginar quién humilló al dragón. Por mi parte, yo estaba vigilando al dragón, pero éste empezó a quejarse porque se había comido un insecto molesto así que decidí prepararle un remedio antes de que se le indigestara y enfermara. ¡Estoy seguro de que Roko aprovechó para cumplir su encargo!- explicó con cara de buen goblin.

Volví a mirar a Roko.- ¿Cómo osas traicionarme? ¡A tu señor oscuro! ¡Por una capa de un archimago!.- Miré mal a Roko, pero aún no lo hice de forma fulminante.- ¡Espero que tenga una razón lógica! De lo contrario...- Señalé la máquina dilatadora de anos.

Roko mira sonriendo a Kur'ikú. -He vuelto con la capa, sí, ¿pero qué inventas, si no estabas allí? -tras comentar lo obvio, de lo cual al parecer el Señor Oscuro no se percató, se vuelve hacia su señor. -Eso se lo ha inventado, sobretodo porque él desobedeció yéndose de vacaciones a la isla salvaje. Volviendo al "accidente", creo que el culpable es Oc'Korg, pues le he visto jugando con la mágica varita de colores, cuya magia podría lograr tal ataque hacia el dragón...Oscura Magnificencia.

Miré con desconfianza a Roko.- No, ¡Él estaba haciendo un remedio para mi dragón porque se comió un insecto molesto!.- Acto seguido miré mal a Roko.- Ahora en adelante te vigilaré de cerca, te asignaré a un guardián para que no intentes sabotearme.- Acto seguido miré a Oc'Kog.- ¡Con que jugando con mi varita de los colores! ¿Así que fuiste tú el que invocó esa gigantesca maza anal?.- No veía otra razón por la cuál quería jugar con la varita de los colores.- ¡HABLA AHORA!.- Dije desesperado.

¡ Todo lo contrario mi grandioso señor oscuro !.- Entrelaza las manos cual rezo dominguero y mira a su señor.- Tras haber probado la veracidad de su espada soluble en agua, volví a entrar a la sala del dragón, despierto y activo gracias a mi ya mencionada cerveza enana.- Mira entonces hacia abajo, traga saliva y continúa su argumento.- El dragón ya mantenía la maza en su precioso culo cuando yo utilicé su varita de colores, mi señor, ¡y la utilicé precisamente para sacársela! sin triunfo... fue entonces cuando vi a Uk'glush abriendo un portal hacia el el bosque oscuro, bosque que todos conocemos por sus grandiosas mazas... mi señor...

Miré extrañado al goblin.- ¿Un bosque de mazas? ¡Yo es la primera vez que lo escucho! ¡Y un goblin no puede llevar una maza grande, así que no me creo nada!.- Miré de forma fulminante al ser. Acto seguido miré a su compañero, el que él había nombrado.- ¿Para qué ibas al bosque oscuro? ¿No dije que ese lugar está restringido para vosotros? ¡Luego os vais de guateque y volvéis borrachos!.- Dije esperando que tuviera algo de utilidad su desobediencia, o acabaría mal.

- Perdonad mi amo y señor de la masculinidad. Como recordaréis oí a hurtadillas a Oc'korg poner en duda vuestra sexualidad. Decía que os gustaba yacer junto el dragón en vuestra cama. En ese momento me dirigía al bosque en busca de una de vuestras alimañas gigantes para ajusticiarlo, cuando... ¡el indeseable de Oc'korg utilizó la vara multicolor contra mí! 

- ¡De verdad mi señor! ¡Debéis creerme¡ !Soy vuestro mas fiel servidor!  -En ese momento se gira y se levanta el taparrabos para mostrarle al señor oscuro una pequeña maza incrustada en su recto-. ¡Ese artilugio es maligno! ¡Y Oc'korg un traidor!

Miré de nuevo a Oc'kog pero esta vez me ruboricé.- ¡Te dije que eso era un secreto! ¿Por qué lo contaste? ¡Mis malignos goblins perderán el respeto por mí por tu culpa! ¡Habla!.- Dije dejando de lado por un momento el asunto de la maza para entrar en otro asunto más importante.