Partida Rol por web

Viajáis hasta Arkham, nada más llegáis Michael Olive os está esperando. Es un individuo bajito, con gruesas gafas y poblada barba negra, al que parece imposible tomar en serio.

-Gracias por haber venido -os dice dándoos la mano uno por uno-. ¿Han venido para investigar la desapariciónde mi amigo Georges Zamañorre? -os pregunta esperanzado, parece que está sinceramente preocupado por la desaparición de su amigo.

Os acompaña hasta un despacho y os pide que os sentéis

-¿Desean tomar algo de beber?

Tomo la mano del hombre cuando la ofrece a modo de saludo -Buen día profesor- respondo a su saludo -Mis compañeros y yo tenemos cierto interés en la investigación de su amigo, no somos expertos investigadores, pero podemos ofrecer nuestra ayuda a dar con su paradero-

Por mi trabajo había estado en contacto con personas buscando a sus seres queridos desaparecidos y sabia que en la mayoría de los casos nunca eran hallados, y las pocas veces que lograban encontrarles ya era demasiado tarde, por ello evito darle falsas esperanzas al hombre, desde mi propio punto de vista su amigo ya había muerto.

Ya una vez en el despacho nos ofrece algo de beber -Un café negro sin azúcar de ser posible- aun en mi mente retumban las visiones y en especial la risa de aquella aberración.

Adam negó con la cabeza ante el ofrecimiento. Estaba intentando dejar el alcohol pues le acababa metiendo en mas líos de los que podía salir.

— Antes de nada, nos gustaría saber sobre los tatuajes. Es posible que esté todo ligado ¿sabe? Iremos paso a paso y nos va diciendo todo lo que sabe y así acabaremos encontrando a su amigo.

La monja estrechó con sorprendente firmeza la mano de Olive.

—Lynn Marie— omitió su dedicación religiosa, por el momento —. No, gracias— rechazó educadamente la bebida, aunque no el asiento.

Everest y McWire tomaron la iniciativa, así que ella aguardó a que el señor Olive respondiera a ellos primero.

Armstrong también saludó al profesor, apretando su mano con firmeza.

— Edwin Armstrong, es un placer conocerle —respondió—. ¿Algo fuerte, tal vez? —contestó al respecto de su ofrecimiento.

Al ver que sus otros compañeros hacían las preguntas pertinentes, el deportista no tuvo problema con quedarse en segundo plano.

Olive manda a una secretaria a hacer café mientras él mismo sirve una copa de brandy a Edwin

-Mi amigo, Georges Zamañorre, es profesor de Historia Antigua, especializado en culturas del Mediterráneo Occidental anteriores al florecimiento del Imperio Romano. A mediados de octubre de 1921 me confesó, muy excitado, que creía haber encontrado restos de una cultura común entre los diversos pueblos mediterráneos del siglo VI a. C. Basaba sus teorías en un misterioso signo que podía encontrarse, toscamente labrado, en algunas tumbas de la antigua provincia romana de la Mauritania Tingitana, en la actual Marruecos, que según se decía era el signo del «Abridor del Camino». Zamañorre había encontrado el mismo signo en una necrópolis Ilergeta cerca de la ciudad de Tarragona, en España, solo que allí recibía el nombre de «signo de la Puerta y la Llave». Y afirmaba que había encontrado referencias «en un venerable libro» de que el signo era conocido en la península árabe por las mismas fechas, bajo el nombre de «Umr at Tawil».

Georges Zamañorre partió hacia España dos meses más tarde, en diciembre. Iba en busca del origen de este culto, que según él se encontraba en la mítica ciudad de Tartessos. Desde entonces no se ha vuelto a saber nada más de él. Sospecho que ha sido secuestrado o algo peor, que sabéis que España es un país salvaje e incivilizado.

Y antes de que lo preguntéis no, no sé que libro estaba consultando. Este es su despacho, al parecer vosotros sabéis más de su investigación que yo, podéis buscar entre sus cosas por si encontráis algo que os sea de ayuda.

Me levanto de mi asiento -Con su permiso- digo al profesor y comienzo a rebuscar entre los libros, con algo de suerte el libro aun se encuentra en el lugar.

Entre los escasos papeles que dejó Zamañorre tras su partida, solo encuentras unos apuntes sobre el simbolismo del signo:

«El símbolo representa la Puerta. En una tumba, es la puerta hacia la Otra Vida, hacia la Muerte. Pero puede ser igualmente una puerta en la otra dirección: de la Muerte a la Vida. Asimismo, parece ser que en algunos ritos se consideraba que por dicha puerta se podía entrar en contacto con dioses o demonios. Al parecer, el mayor punto de fuerza mística del Signo se encuentra en el vértice inferior. El signo indica una puerta abierta. Según parece, hay otro signo para cerrarla. Según referencias, este otro signo tiene forma de una línea diagonal de la que salen cinco trazos, tres en un lado y dos en otro.»

También encuentras una apresurada anotación en una vieja agenda que dice: «Consultar Capt. V. de Rama Dorada».

Adam estaba distraído por toda la explicación. Sus entrenados ojos estaban buscando cosas de valor casi de manera automática y se le pasaría por alto cualquier pista que pudiera ser encontrada sobre la investigación.

— Lo siento mucho por su amigo, pero si desapareció en España dudo que podamos hacer mucho para encontrarlo. Sería de locos.

Lynn Marie escuchó todo lo que decía el señor Olive, especialmente interesada en la parte histórica que George Zamañorre parecía investigar. Miró a Adam —Si hay que hacerlo, no me supone inconveniente viajar a España. Hay que dar con la raíz de todo esto— dijo.

Se incorporó para examinar el despacho y algunos documentos, pero no quería tocar demasiado ni invadir la intimidad del desaparecido más de lo necesario.

-Lamentablemente parece que el libro no se encuentra aquí, solo he hallado unas anotaciones- digo mostrando a mis compañeros y al profesor los apuntes sobre el signo y una anotación en una agenda.

Nota sobre el signo:

«El símbolo representa la Puerta. En una tumba, es la puerta hacia la Otra Vida, hacia la Muerte. Pero puede ser igualmente una puerta en la otra dirección: de la Muerte a la Vida. Asimismo, parece ser que en algunos ritos se consideraba que por dicha puerta se podía entrar en contacto con dioses o demonios. Al parecer, el mayor punto de fuerza mística del Signo se encuentra en el vértice inferior. El signo indica una puerta abierta. Según parece, hay otro signo para cerrarla. Según referencias, este otro signo tiene forma de una línea diagonal de la que salen cinco trazos, tres en un lado y dos en otro.»

Anotación en la agenda:

«Consultar Capt. V. de Rama Dorada»

Adam dice que es imposible investigar si el hombre desapareció en España -Estoy con la Señorita Lynn y tampoco tengo inconveniente en viajar- evito llamarla Hermana, si ella misma no quiere ser reconocida como una tendrá sus razones.

Armstrong aceptó de buena gana la copa de Brandy, la cual bebió prácticamente de golpe, dejando salir después un gruñido entre el escozor y el gusto. El deportista trató de seguir las palabras del profesor, pero era obvio que aquel no era su fuerte, distrayéndose con alguna otra cosa en más de una ocasión. Sin embargo, algo sí que sacó en claro: habría que viajar a España. El castaño suspiró, pues la verdad volver a Europa no estaba entre las cosas que le gustaría hacer... pero había quedado demostrado que ellos tenían poco o nada que hacer contra esas fuerzas mas que seguirlas e intentar ponerle un freno a todo aquello.

— Supongo que no tenemos mucha opción, ya quedó demostrado que intentar olvidarnos de aquello no sirve de nada —habló, principalmente, por sí mismo—. Lo mejor será hacerle frente de cabeza —se encogió de hombros.

Volvió a leer los textos, percatándose de la anotación en la agenda.

— ¿Rama Dorada? —preguntó en voz alta—. ¿Es algún... libro esotérico o algo así?

Adam se cruzó de brazos.

— No se como pensáis viajar a Europa, yo al menos no tengo un duro, así que conmigo no contéis. Os puedo acompañar en cualquier investigación en nuestro país, pero poco mas.

Negaba con la cabeza, él estaba acostumbrado de vivir al día a día y era impensable ahora mismo algo así.

— ¿O a caso usted nos va a financiar la investigación y búsqueda de su amigo? — dijo mirando directamente a Michael.

Entre los escasos papeles que dejó Zamañorre tras su partida, solo encuentras unos apuntes sobre el simbolismo del signo:

«El símbolo representa la Puerta. En una tumba, es la puerta hacia la Otra Vida, hacia la Muerte. Pero puede ser igualmente una puerta en la otra dirección: de la Muerte a la Vida. Asimismo, parece ser que en algunos ritos se consideraba que por dicha puerta se podía entrar en contacto con dioses o demonios. Al parecer, el mayor punto de fuerza mística del Signo se encuentra en el vértice inferior. El signo indica una puerta abierta. Según parece, hay otro signo para cerrarla. Según referencias, este otro signo tiene forma de una línea diagonal de la que salen cinco trazos, tres en un lado y dos en otro.»

También encuentras una apresurada anotación en una vieja agenda que dice: «Consultar Capt. V. de Rama Dorada».

— ¿O a caso usted nos va a financiar la investigación y búsqueda de su amigo? — dijo mirando directamente a Michael.

-Si así lo necesitáis podría pagaros el viaje a España, aunque no podría financiar la investigación, mi economía no es tan sostenible como para poder pagar una investigación

-Lamentablemente parece que el libro no se encuentra aquí, solo he hallado unas anotaciones- digo mostrando a mis compañeros y al profesor los apuntes sobre el signo y una anotación en una agenda.

-La biblioteca está en el segundo piso, quizás cogió el libro de allí, a veces pasaba horas en la biblioteca para sus investigaciones 

-Seria bueno echar un vistazo, con algo de suerte el libro continua allí o en su defecto podemos tener una lista de cuales fueron los últimos libros que tomo y llegar a dar con el nombre del que buscamos- digo tomando asiento y espero la taza de café, esperando que con ella pueda despejar mi mente aunque sea un poco.

-Con algo de la información que él tenia podemos darnos una idea de que rumbo tomo su investigación y eventualmente dar con su paradero- o con sus huesos, pienso a sabiendas que era lo más probable, si había llegado a toparse con algo parecido a lo que vimos en aquel castillo.

La monja no encontró nada en el despacho, pero la mención de una biblioteca habría otra vía de información que podían aprovechar. 

—Me gustaría echar un vistazo a la biblioteca, si es posible— dijo con educación, coincidiendo con Everest en que podía serles útil examinar algunos libros.

Adam que tenía más morro que espalda y no tenía ni un duro respondió.

— Perfecto, tomaré esa financiación con gusto y buscaremos a su amigo, quedese tranquilo.

— Lo mejor será revisar primero la biblioteca, sí. Ya luego podemos... organizarnos con respecto al viaje —Armstrong se levantó de su asiento, dispuesto a echar un vistazo con sus compañeros.

Vais a la biblioteca y buscáis los últimos libros que Zamañorre consultó, encontráis los siguientes libros:

• Necronomicón, traducción de John Dee
• Magia auténtica, de Theophilus Wenn
• La Rama Dorada, de James G. Frazer

Los dos primeros pertenecen a la sección 240 BL, y tenéis serios problemas para consultarlos, ya que se trata de ejemplares raros y muy valiosos. Además, para poder revisarlos tenéis que inscribiros en la lista de espera, con lo que su consulta se retrasaría varios meses...

El tercer libro, en cambio, es más accesible, lo conseguís sin más problemas pidiéndoselo a uno de los ayudantes de la biblioteca. Hay un párrafo en el capítulo V que os interesará especialmente:

«... para viajar a tiempos y lugares lejanos habrás de invocar a Aquél de Fuera, al llamado Umr at Tawil, el que va cubierto con un velo místico y mora en los abismos más allá de la Tierra. Hay quien dice que es, fue y será, y que vino antaño desde las oscuras estrellas con sus hermanos, y que su simiente cubrió la Tierra, y que sus hijos perduraron a través de las Edades...»