Partida Rol por web

   En parte el lanzar aquella piedra funciono a medias, digo en parte por que uno de los muchachos esos se encontraba con media vida fuera de su cuerpo, algo bastante asqueroso la verdad ... mentiría si digiera que siento pena .... , pero aguantable tras lo visto en el estado que habían dejado al capitán ... en parte las ramas y hojas ayudan a que amaine la imagen global... , quizás por lo mismo y cansado de que en cualquier momento me pusiera entre sus objetivos es que me armaría de valor.

  Aprovechando la pequeña escena con el movil y los comentarios de la gorda para aproximarme por la espalda de la encapuchada e intentar derribarla.

Ryan, quien se encontraba mirando las paredes para disimular las tonterías que acababa de decir, dio un salto increíble hacia la misma al escuchar los gritos que venían de afuera de la cabaña. Miró al niño con asombro al escucharle decir que su madre acababa de volver. - Joder, joder, joder. - no dudó ni un instante en salir a ver lo que estaba pasando, después de todo Matt Doe y Diana se habían quedado afuera.

Al salir se horrorizó al ver lo que había pasado con Matt, aunque Diana parecía estar viva y bien, dentro de lo que cabía esperar. - Después de todo este tiempo ¿sigues viva? - dijo mirando a aquél Ghostface que los miraba amenazantes y armado. Por las pintas que llevaba y los testimonios del crío, solo podía ser alguien de los primeros asesinatos, una mujer concretamente.

Miró con gran asco a Elba al escuchar y ver lo que hacía. ¿No se la podían haber llevado a ella en vez de a Matt Doe? Se fijó por detrás de esta que Lazlo, quien parecía haber llegado allí de alguna forma hasta el momento inexplicable, se estaba avalanzando a por ese viejo y pocho Ghostface.

Ryan se miró el brazo izquierdo, tembloroso, aún tenía una herida muy reciente, recordaba el filo del cuchillo pasando por su piel, entonces dirigió su mirada a River y a Sam, había venido aquí a proteger a sus salvadoras, aunque eso le costara la vida. - No soy un gallina, no soy un gallina. - murmuró para sí mismo, cerró los ojos y empezó a correr hacia aquél ser que parecía la parca. - ¡Te voy a demostrar que puedo valerme por mí mismo y proteger a mis amigos! - para entonces proferir con un grito, de miedo, de guerra... Ni Ryan lo tenía claro, pero si que sabía que lo hacía para no escuchar sus propios pensamientos.

Aquél Ghostface se preparó para atacar a lo que venía por su espalda, por lo que empezó a girar para realizar un ataque circular con su guadaña y rebanar más cuerpos, pero para sorpresa de esta, mientras realizaba el giro un asustado y gritón Ryan se estampó contra ella, haciendo que resbale y pierda el equilibrio, haciendo así caer la guadaña al suelo y dejándola completamente indefensa a la embestida final de Lazlo, quien no tuvo mucho problema en placar al pequeño criminal y derribarlo, poniéndose encima suya.

Sin dudar ni un segundo, Lazlo le quitó la máscara a la chica que había estado siguiendo por el bosque, para revelársela a los demás.

¡Coño! ¡Quería girarme para atacar a quien venía por detrás mía, pero solo un poquito para seguir controlando a los demás! - se quejó, maldiciendo probablemente a alguna deidad que no habría tenido en cuenta sus super deseos. - ¡Quita de encima maldito bruto! - pataleaba, intentando quitarse de encima inútilmente a Lazlo.

Todos pudieron ver que aquella mujer, estaba realmente arreglada para el sitio donde vivía, aunque fijándose mejor, el maquillaje estaba tapando claros síntomas de desnutrición ligera. Aquella mujer resopló, resignada, parecía que tenía que recurrir a la labia, al igual que la primera vez que la secuestraron. - ¡Jackie, maldigo el día en que conociste a esa cría! - refunfuñó de pura rabia, antes de intentar calmarse. Se quedó pensativa un segundo y entonces decidió intentar tocar la fibra sensible de sus ahora captores.

Yo... - dijo con un tono más calmado y suave. - No quería hacer nada de esto. - miró con cara de pena a todos. - Hace diez años, después de toda la movida que ocurrió, después de la muerte de mi padre, de mi hermana, de mi novio... Decidí que quería separarme de todo aquello y me vine a vivir aquí. - miró a Madison ahora. - Y como bien sabes, las dos somos de buena familia, me costó empezar a vivir sin todos los lujos que teníamos de normal.

Pero nadie quería contratarme en ningún lugar interesante, no sin preguntarme quien era y pedirme papeles... Y claro, nadie va a contratar a la hija de un putero violador y a la novia de un asesino. - una lágrima empezó a caer por su cara. - Al final empecé a aceptar trabajos precarios, donde nadie preguntaba nada, solo querían que todo se hiciera lo antes posible y en negro, pero luego me enteré de que estaba embarazada y... - sollozó un poco.

No tuve más remedio que ponerme el traje que dejaron aquí y empezar a robar para sobrevivir y darle una vida lo más digna posible a Jackie. - su voz cada vez estaba más quebrada. - Pero entonces Jackie me dijo que una niña se había adentrado en el bosque, que quería conocerla ¡y yo intenté negarme! Si alguien descubría que estábamos aquí podrían querer hacernos daño...

Parecía que la chiquilla no podía llegar hasta aquí, pero entonces, vi que alguien empezó a matar gente disfrazado de Ghostface, acudí al entierro para ver que se cocía y vi cómo os metíais aquí a meter las narices donde no os llamaban... Y tuve que tomar medidas. - miró entonces con seriedad al grupo en general. - ¡Y podría haberme salido con la mía si no fuera por esos mocosos entrometidos y esa estúpida niña!

Elba Ginaso mientras todo eso ocurría se había vuelto a colar en la cabaña y había salido con un pequeño tupper de albóndigas, las cuales vació en el suelo para recoger los restos de Matt Doe. A fin de cuentas, había que traerlo de vuelta de alguna forma, y bueno... podían creerles si traían un buen trozo de carne humana entre salsa de tomate.

-Bueno sí... todo muy bonito eso de ir robando por ahí... -Comentó Elba Ginaso como tal cosa- Pero te acabas de cargar a Matt, lo dejaste como la vaca de su finca... y eso es algo que no tiene nada que ver con sobrevivir... por cosas como esta te funan en twitter.

Cuando Diana salió de su shock inicial, la asesina ya estaba reducida. Por lo que entró a la cabaña a buscar una soga o algo con que asegurar de que no se escapara. 

Habría que llevarla atada hasta el pueblo, a no ser que alguien vaya a buscar a la sheriff y la traiga hasta aquí. Lo cierto es que Diana debería volver con el grupo ya que sola se perdería por el bosque, por muchas marcas que River haya dejado. 

Así que dejó al resto pensar en la estrategia mientras ella se hacía útil en lo que podía, y en este momento solo se le ocurrió eso. Revisar la casa.

Para cuando el joven Mui abrió los ojos, empapados en lágrimas no derramadas, pudo observar que toda aquella locura había salido bien y que, por el momento, nadie más iba a morir y con ello, había devuelto la deuda que tenía con Sam y River. Suspiró. - Supongo que. - sonrió muy levemente, aunque sus ojos no mostraban felicidad de ningún tipo, después de todo acababan de perder a un amigo. - Supongo que estamos a la par.

Ryan se echó la mano a la cara al escuchar a hablar a aquella chica, quien rápidamente reconoció como Eleonor Rigby Cole. Le sorprendió como pasó de la furia a la tristeza en solo un momento... ¿A caso esas emociones que estaba mostrando eran reales? Además, algo de todo lo que había dicho, no le terminaba de cuadrar.

Dices que cogiste el traje que dejaron... Pero ¿quién? Dana Scully murió con el suyo y a tu novio... Bueno, al final registraron su casa y demás, imagino que le quitarían el suyo, así que... - la miró a los ojos directamente. - ¿Quién dejó aquí su traje? - parecía una pregunta muy tonta, pero si no había sido ni Dana ni Mark, eso significaba que otro asesino lo había dejado allí y no había pagado aún por sus crímenes del pasado y visto lo que acababa de hacer Eleanor, parecía bastante evidente que había sido ella. - ¿No querrás decir "cogí el traje que dejé"? - se notaba que Ryan estaba aún algo asustado, pero estaba más centrado en encontrar la verdad en aquello.

El hormonado joven no se creía nada de lo que ella decía, menos aún de que se arrepintiera de nada de lo que había hecho. - También se te ve bastante desnutrida, según las películas te molaba darle a las pirulas... Yo creo que no solo has estado robando "cosas esenciales" para darle a Jackie una vida "digna", osea, no sé, mira donde lo tienes viviendo...

El grito nos hizo salir a todos por patas, tan solo para encontrarnos con Matt jodido y muerto.

Siquiera los comentarios de Elba -alias Señorita Manson- me tranquilizaron en absoluto. Ver aquel disfraz con la guadaña en mano me hizo sentir escalofríos y mi primer instinto fue ponerme delante de Jennifer, a modo de protección. Un Ryan con huevos y Lazlo se encargaron de reducir a...

- ¿Eleanor Nosequé?- Pregunté mirando a Madison. En realidad no era una pregunta. Todo el mundo que hubiera seguido esa historia la conocía, aunque en mi caso del apellido ni papa. 

Diana se marchó dentro y esperé que estuviera bien. Lo que quedaba ahora, tras escuchar su historia, era ...

- Soltadla.- Dije dando un paso hacia la disfrazada y cogiendo de la mano a Jennifer para dejarla al cuidado de River.- Si. He dicho que la soltéis.- Me acuclille cerca de ella. Podía ser la abogada del diablo, la guardiana de los pardillos, la rebelde del barrio... pero no la gilipollas del circo del asesino. Aquellos que me conocieran, sabían que las cosas las solucionaba de dos maneras: O a ostias, o con un plan que llevaban a darse de ostias. Ahora tenía el último.- No puede huir. Ni lo hará, ¿verdad cielito?- 

Miré a esa mujer al rostro directamente con cara de cabreo. Había matado a Matt. Tampoco es que fuera mi superamigo, pero el resto si estábamos aún en peligro.

- Ella no es Ghostface. No el que está matando de verdad. Ella ha querido defender lo suyo, aunque las consecuencias de eso...- señale con un dedo lo que quedaba de Matt-... no te las vas a poder quitar de encima, guapa. Pero de momento, nos vas a ayudar.-

Giré mi rostro para avisar a la vacaburra.

- Elba. Tú manejas Twiter y esas mierdas, ¿no? Quiero que escribas un Twit con una foto nuestra diciendo que hemos capturado a Ghostface.- Miré al resto uno por uno de los que estaban allí, para finalizar en Eleanor.- Y tú, nos vas a ayudar a encontrar al verdadero Ghostface. Porque vas a hacer de cebo. Cuando el verdadero sepa de ti, vendrá a matarte, para atar cabos. - Ladeé la cabeza para ver que me estaba entendiendo.- Solo que, entonces, no te encontrará a ti...- toqué la tela del disfraz que llevaba puesta.- Porque imagino que para ti lo mejor es que tu hijo esté lejos de esto. Así que si nos ayudas, nosotros te ayudaremos con Jackie. Yo, te ayudaré con él, ¿trato hecho?

Diana escuchó a Sam desde dentro de la casa, y tuvo que decir lo que sabía. - El problema es que aquí no tenemos señal. Antes estuve sacando fotos a la cabaña e intentando marcar el lugar en Google Mapa, pero no hay señal de teléfono, ni internet. - dijo todavía rebuscando por la casa algo con que atar a la asesina. 

-Para publicar eso en Twitter tenis que volver hasta casi el límite del bosque. Allí comencé a perder señal, cuando River había hecho solo algunas marcas. 

Por su parte Elba escuchó como Samantha Collins abogaba por dejar a aquella mujer libre, algo que claramente a Elba Ginaso no le gustaba lo más mínimo, pues alguien acababa de matar a su padre y aunque ahora ya no tenía que aguantar las lechugas avinagradas, en el fondo le gustaba tener a alguien con quien quejarse de la gente sin huevos. Pero algo le llamó la atención de toda esa diatriba:

- Ella no es Ghostface. No el que está matando de verdad. 

-Matt, levántate. -Le dijo al cadáver del joven dándole un leve toque con la pierna- Que no te han matado de verdad.

  J...joder...bbfff.....bffff... - comentaba tras irme reponiendo de aquella carrerilla, que tampoco fue mucha, pero el estress de saber que la podía palmar por tan estúpido movimiento, por suerte nada mas ocurrio y la identidad del enmascaro salio a la luz ... excepto por la parte de que no era ni el oficial y por ende... aun estaba el otro maniaco dando vuelta...

   El que los Payos estos se estuvieran haciendo cargo no me iba ni me venia, simplemente me acerque al muerto le hice un rezo silencioso a modo de algo de respeto y me desligue completamente del resto, eso si... hasta el final.

   Bueno... si I'enen el cebo y caña, pues solo I'enen que lanzal en un esT'anque mas sabloso... - comentaba desde mi sitio - Plueben almal la T'leta en el campus, en el peol de los casos sel sit'io del donde lapido huil.

Rápidamente las lágrimas de la chica desaparecieron. - ¡Cómo osas dudar de mis palabras niñato engreído! - decía forcejeando aún más. - Ese traje pues... ¡Era uno de repuesto de Dana, sí! - sus palabras ahora tenían rabia, odio, pero entonces volvió a suspirar y a calmarse totalmente y a poner cara de pena. - Esas pastillas que mencionas, las tomaba porque estaba muy muy mal. Pero Jackie, la luz de mi vida, me trajo motivos para estar feliz y dejarlas de lado ¿verdad cariño?

Jackie, quien hasta el momento había estado completamente callado, lleno de terror al ver a su madre, viendo la fortaleza de la gente que le rodeaba, decidió pronunciarse. - No. - dijo en primera instancia, sorprendiéndose a sí mismo, apretó un puño y continuó. - ¡No es verdad Madre!

Miró a los demás, intentando buscar en ellos apoyo, una vía de escape a aquella vida, una forma de ser un niño normal. - ¡Sigues robando más de lo que debes, solo hay que ver todo el maquillaje que llevas! No sé como serías antes de que naciera o si realmente intentaste cambiar, madre, pero solo te interesan dos cosas, estar guapa y no pensar en la realidad, yo me siento totalmente como algo secundario. - se agarró a River, quien estaba ahora custodiando a Jennifer. - Me prometiste hace mucho tiempo que no matarías a nadie, que usarías solo la violencia justa para que sobreviviéramos pero... Pero... 

Aquél chiquillo, que parecía estar guardando las formas hasta el momento y mostrar una madurez muy superior a cualquier niño de su edad, rompió a llorar y gritar. - ¡¿A caso lo hacías por intentar llevar una vida lo más digna posible para los dos?! ¡¿O era el miedo a que te pillaran y pagaras por todo lo que habías hecho junto con Padre?! - cayó de rodillas al suelo y buscó con la mirada a Vega, esperando algo de consuelo y comprensión. - Yo solo quiero ser un niño normal...

Eleanor escuchó lo que decía su hijo, Diana, tras revisar el cuarto de la madre, pudo confirmar que lo que decía el niño era cierto, ya que fue buscando una cuerda, pero pudo encontrar porras, cuchillos, esposas, entre otras cosas que una persona que roba "lo justo" para vivir, no necesitaría. - ¡Maldito crío, yo que te he dado un techo donde dormir! ¡Alguna que otra comida al día! - gruñía.

Pero para cuando Diana la iba a atar a la asesina que tenían delante, Samantha la cortó y le propuso un trato. Viendo que tenía alguien con quien negociar, alguien que la escuchara para poder así salvar el culo, se tranquilizó totalmente, se sacudió el polvo y mostró una postura tranquila y relajada. - Está bien, mentir hace que te salgan arrugas, como pareces una persona razonable, te diré lo que vamos a hacer.

La chica se estiró un poco, como si no acabara de asesinar a alguien o hubiera sido placada hace un momento o hubiera estado "llorando". - No pienso hacer de cebo para nadie, ninguno de vosotros lo valéis. - en el saco iba incluido su hijo. - Pero os puedo dar algo de información privilegiada, después de todo, yo ayudé a Dana Scully y he ido aprendiendo algunas cosas suyas con el tiempo.

Arqueó una ceja y sonrió con superioridad mirando a Madison. - Aparte de enseñarme a como matar a la zorra de tu madre, a mi hermana y a otros tantos que matamos hace diez años, tenía ideas muy interesantes para el futuro. - pero entonces levantó el dedo índice para negar con él. - Pero esa información, no es gratis, me tenéis que dejar marchar.

Alzó los hombros, como si todo aquello ya no fuera con ella. - Esa es mi única oferta, o la tomas o la dejas. Prefiero estar en la cárcel antes que hacer de cebo para un admirador de pacotilla. - se notaba que disfrutaba con aquello, pues estaba segura de que iba a generar algo de discordia en aquél grupo de amiguitos que ahora, se encontraba frente a una decisión difícil.

- Deja de hacer el idiota, Elba.- Gruñí justo antes de que la zorra vestida de negro y su hijo tuvieran ese arranque tan emotivo... y revelador.

A esa zorra le importaba una mierda su hijo, al parecer. Y eso cambiaba las cosas. Yo no había sido madre y que Dios me pille confesada si alguna vez lo era. Pero sabía lo que era tener una hermana. Sabía lo que era perderla y lo que dolió. Esta... solo se echó al niño al hombro y tiró para adelante, porque no le quedaba otra. Y con ello... arrastraba al crío.

- Dije que me encargaría de tu hijo, no de que no fueras a la cárcel.- Desde luego Elba, con un cierto humor negro, había dado en el clavo.- Pero veo que Jackie te importa una mierda. Solo quieres salvar tu culo. Así que, si, te voy a usar de cebo, lo quieras o no.

Tal cual. Porque aunque no hubiera cobertura en la zona, podíamos sacarla de allí, igualmente.

- Querida...- Me puse delante de ella, con cierta sonrisa malvada.- No lo has entendido.- Odio a las actrices y esta estaba haciendo el papel de su vida con tal de salvar el culo. Eso me irritó mucho más aún y cerré el puño con tanta fuerza que mis nudillos se pusieron blancos.- Dije que te soltaran... para poder dejarte inconsciente.

No tarde ni un segundo en darle un puñetazo en los morros para ponerla a dormir.

La cabeza de River se había quedado cortocircuitada tras revelación y revelación. El cuerpo de Matt en el suelo, el creer que iban a morir, que sus amigos consiguieran desarmar a Ghostface, revelando así a una mujer de complexión pequeña, que de verdad era la madre de Jackie.

Además, el número de críos que tenía a su cargo no dejaba de aumentar. En una mano tenía a Jennifer, a quién instintivamente colocó ligeramente detrás de ella. Luego Jackie se acercó y buscó su otra mano, la que todavía tenía fuertemente agarrada al destornillador. No sabía exactamente para qué, pues en el momento de la verdad ni se le había ocurrido usarlo, dejando que sus amigos actuaran por ella. Pero no era el momento de pensar en ello, porque Jackie se había caído al suelo y lloraba pidiéndole ayuda.

River no sabía mucho de niños. En la comuna, incluso cuando quería ayudar a los adultos, nunca le había llamado el cuidado de los pequeños. Prefería hacer otras cosas, más de lo que ella veía como de mayores por esa época. Pero sí sabía sobre lo que era sentirse diferente, y querer compartir un poco de esa normalidad que todos los demás parecían tener.

-Lo eres, Jackie.-dijo soltando el destornillador de su bolsillo y agachándose hasta estar a la altura del niño, rodeándole con el brazo libre y estrechándolo contra ella, animándole a que la abrazara de vuelta.-Lo arreglaremos todo, ¿vale?

No sabía como todavía, pero confiaba en que entre todos los del equipo, lo conseguirían. Lo único que quedaba por decidir era Eleanor. Le dio el tiempo justo para oír la oferta de Eleanor y como recibía un puñetazo.

Viendo como Samantha "Sam" Collins le pegaba un puñetazo en la cara, porque sí, a aquella asesina (pero de mentirijillas), Elba Ginaso tuvo claro cual iba a ser su siguiente paso; con paso decidido y guardando en el bolso aquellos restos de albóndigas de Matt con tomate, esta mujer... dio un fuerte bolsado en la cabeza a Jackie.

-¡Violencia intrafamiliar!. -Gritó Elba Ginaso para dejarlo K.O. - Bueno, o violencia hacia esta familia en específico, ¡Que os den familia en específico!, O lo que sea... Realmente no entiendo porque no quedamos más... Si al final vais a ser interesantes y todo... ¿Podemos ir después a agredir a Jordan Hallwinter?.

Qué bonitas son las reconciliaciones... (ironía).

Era evidente que ese crío recordaba al traumatizado de su papaíto. El asesino asesinado por el teletubbie morado (Morat). Suena a paradoja o escena extravagante, ¿no?

Pues así funciona todo.

Seguro que algún día tú, miniatura demoniaca, también sacarás la vena asesina, pensé dándole a mini mugriento (Jackie) un poco de margen para socializar y generar ese innato odio por la gente, que, al igual que él, muchos tienen; pero o no lo saben, o lo esconden. ¿Acaso nunca habéis presenciado la violencia desatada cuando son las rebajas? Eso sin ir más lejos ya es un acto oscuro de la personalidad.

-De nuevo… cazador cazado, Eleanor- le solté con una sonrisa irónica a la misma gótica de hace 10 años. La hija de papi Cole –Veo que te sentó demasiado mal el embarazo- y es que no sólo este plan biológico sádico afecta a la curvatura del cuerpo, sino que encima parecía haberse maquillado tanto los ojos como los labios con un trozo de tizón.

Por el resto.... las tripas que recogía la obesa aquella con un pelo parecido al de una peluca despeinada de oferta (Elba), los actos de heroicidad (Lazlo y Ryan) y los puñetazos lanzados tras los llantos fingidos, hubieran quedado bien para un mal tráiler de la primera película de Godzila VS alienígenas.

El problema era que iba a romper la aparición estelar de la primera saga, es decir, la de mi personaje (la cual necesitó clases) -A ver frikis, no me importa que practiquéis Kárate Kid, u os hagáis una "hamburguesa" de - granja = Matt- procedencia dudosa- dije interviniendo ante el revuelo - Pero pensad. ¿Qué podrían hacer un puñado de -estúpidos - adolescentes con una ex ayudante de la primera psicópata?

Sus neuronas dirían "pegarle" hasta que oscureciera (dándole tiempo al resurgido del cuchillo a llegar). Porque la valentía de la humanidad se centraba en atacar cuando veían que el contrincante caía inconsciente y/o se veían en mayoría. 

Yo siempre me vengué sin la necesidad de ensuciarme con actos violentos. Cosas del dinero. -¿Nadie se quedará solo en casa las próximas horas?

Puesto que nadie se interpuso entre Samantha y Eleonor, le propinó tal puñetazo que debido a su mal estado físico en general, la tumbó en el suelo. Por otra parte Jackie logró parar parte de la golpiza de Elba con su antebrazo, aunque tampoco se quejó, pues entendía que lo viera como una amenaza. Después de todo, los padres locos tienen hijos locos ¿no?

Elba Ginaso no le importaba el soliloquio que aquella vieja estaba contando, ella simplemente estaba feliz de golpear a niños con los otros adolescente de su instituto. Realmente no había ninguno que se salvara, pues entre los que asaltaban a la asesina (pero falsa) de la madre del niño como quienes no impedían esto, todos eran culpables de continuar con la violencia.

-Bueno, -Comento Elba mientras agarraba a Jackie por la camisa y lo levantaba del suelo mientras lo zarandeaba con ambas manos- ¿Y después de golpear a esta familia en específico que plan tenemos?. Me estoy empezando a cansar de golpear a este niño... y eso que me caía bien, tenía dotes para la pintura.