Partida Rol por web

Van a acabar avergonzándome....

Me acerco a mi superior.

-Capitán ¿Necesitará algo de mi esta tarde?-le pregunto, con la idea de saber cuanto rato podré estar en las termas.

Byakuya te mira. En su interior está orgulloso de que alguien de su división haya ganado y se siente bien por el hecho de que fue él quien te puso en esa lista la primera.

- Tienes todo el día de hoy y el de mañana libre.

Se retira. Soi Fong te da la enhorabuena una vez más y también se va. Los aplausos continúan.

-Gracias, capitán.

Saludo a las gradas una vez más y me marcho. Rumbo a las termas. en ciertos momentos hago shunpos además de esconder mi reiatsu para que nadie me siga...como quería Yoruichi, que nadie conociera ese lugar.

Al llegar me desnudo y me meto al agua sin más.

Dios...ha sido duro...¡Pero he ganado!

Acabé por quedarme dormida con la cabeza apoyada en el bordillo.

Cuando despiertas sigues en las termnas, completamente bajo el agua quitando la cara de la nariz hacia arriba.

Sigue estando soleado, aunque, ¿cuándo ha anochecido en ese lugar?

Te sientes completamente recuperada y el agua sigue tan caliente como desde el principio. Ese lugar es solitario, relajante y tranquilo. Todo lo contrario que en la superficie.

¿Cuánto tiempo habrás estado dormida?

Me levanto estirándome cual gata adormilada.

¿Será de familia?

Y me visto pensando en todo lo que me queda por mejorar...tengo que conseguir depender menos de esa técnica...no es algo de lo que pueda abusar en un combate prolongado. Debo aumentar mi resistencia.

En realidad si mantengo activo el fénix...mi cuerpo sufrirá mucho menos. Pero claro...mi reiatsu...

También debo aumentarlo.

Y la asfixia es genial para atacar, pero...Omaeda y Matsumoto usaron tácticas defensivas. Tengo que pensar en algo así. El muro de llamas no es suficiente. Debe mejorar.

Practicar nuevas técnicas.

Y mi kidoh...lo lanzo con potencia, pero demasiado lento. Lo esquivan...es...frustrante.

Reforzar mi kidoh.

Y seguir mejorando mi velocidad.

Aunque en ese sentido estoy más satisfecha.

Y todo eso...rápido.

Recordé a Kenpachi...si decidía volver a atacarme...tenía que mejorar.

Con hambre, regresé al sexto escuadrón a comer.

En cuanto sales del lugar secreto te das cuenta de que ha anochecido a velocidad de vértigo. La luna ilumina los caminos y las estrellas te recuerdan que aún son inalcanzables para ti.

Shinigamis de diferentes divisiones vigilan los caminos, atentos porque demasiada calma nunca es buena.

Una vez que llegas a tu cuartel, todos tus compañeros comienzan a aplaudirte y silbar sin descanso. Muchos te palmean en la espalda según pasas y luego Rikichi es quien se toma la libertad de acercarse a ti.

Rikichi: - ¡Enhorabuena Reena! Eto...- comienza a rascarse la nuca y mirar a otro lado. Notas que comienza a sonrojarse- ... que-quería saber si...

Pero una de las shinigamis se acerca hasta vosotros y coge a Rikichi del cuello.

Shinigami girl:- Se pregunta si le concederías una cita. ¿A que sí, Rikichi?

-Lo siento Rikichi, pero no.

Era mejor cortar eso de raiz o sería peor. auqnue doliera un poco ahora.

-Solo salgo con gente más fuerte que yo.- lo suavicé un poco. En realidad salía con quién me pareciese atractivo...y no era el caso. Por lo general ambas cualidades solían ir de la mano...aunque no siempre.

Agradecí a todos su apoyo y me serví no uno, sino dos tazones de humeante Ramen y me puse a comer

El pobre chico fue arropado por los demás. Algunos se reían, otros le daban ánimos.

Tú mientras te sientas y comienzas a comer tu buena ración de comida que tanto te mereces.

Renji no está. Ni tampoco, obviamente, el capitán. No obstante, Rukia entra llamando la atención del resto de shinigamis. Es raro que ella venga a comer con la "plebe", pero bueno, te ve, y se acerca:

- ¿Puedo sentarme contigo?

-Claro Kuchiki.

No añadí "sama" ni nada parecido, sabía que no le gustaba que lo hicieran.

-¿Qué se te ofrece?

Comencé a atacar el segundo cuenco de ramen, pero acerqué a ella el plato de dango.

-¿Con quienes combatiste en el torneo?

Rukia te sonríe agradecida y se sienta enfrente de ti.

- Bueno...- comenzó pero le acercas el plato y cambia de tema-gracias. Luché contra Hanataro, Hinamori, Nemu y Nanao.

Toma un muerdo y empieza a comérselo con más educación que los demás.

- Verás... en parte mi hermano me envía, en parte me envía Renji porque no puede venir y en una tercera parte... me envío yo.

-¿Hm?

La inviito a continuar, continuando con mi cuenco de ramen.

¿El capitán y el teniente? ¿Y ella misma?

Estoy algo extrañada.

Saca un cuaderno y empieza a dibujar a Byakuya como un conejo y luego a Ikkaku, Yumichika y Zaraki también como conejos supuestamente aterradores.

- Bien... primero, Nii-sama me pide que te diga que ni se te ocurra pasarte por el undécimo escuadrón.

Después levantó un segundo dedo, marcando el punto número dos y dibuja a Renji y a ella misma, todo como conejos.

- En segundo lugar... nos gustaría... a Renji y a mí, que nos acompañaras al distrito del Rukongai al que pertenecíamos antes de ingresar en la academia porque... bueno, ahora tienes fama y podrías ayudar a tranquilizar las cosas allí. Sería mañana y... seguramente no tardaríamos mucho...

Mientras te lo explicaba te dibujó al lado de ellos dos. Una conejita muy linda.

Marcó el número tres con los dedos.

- Y... bueno, me gustaría que me ayudases con dos cosas. Una, que me acompañaras a ver a ese Ganju y a su hermana. Tengo que perdirles perdón... y la otra... bueno, quería consejo... ya sabes, de chicas.

¿Pero qué? Vaya dibujos...

Contuve las ganas de reirme, todo lo que pude.

-Oh ¿Así que me veo linda?- sonreí.

Cogí la libreta e hiceun bocadillo que salía del capitán Kuchiki y decía. "Pyon, pyon".

Y ya no pude evitar reir.

-Ay...afú..-traté de respirar.

-De acuerdo iré, no veo porqué no y tengo el día libre. Aunque no sé yo que voy a calmar allí...y te ayudaré a buscar a ese Ganju.

-¿Y de qué quieres consejo de chicas? Es...¿Sobre Ichigo?

Rukia se pone tensa en cuanto oye el nombre de Ichigo.

-¿¡YO?! ¿por qué crees que es Ichigo? ¿Qué tiene que ver? Yo no dije nada de Ichigo.- mueve las manos enérgicamente, casi se vuelven invisibles, un cacho de dango se estampa en la cara de Rikichi. Pobre, ya lo que le faltaba.- Ha... haha.... ha...

-Entonces...se trata de Inoue. Es normal...esos pechos volverían loca a cualquiera...aunque no sabía que fueses lesbiana Kuchiki.

Bromeaba, claro. Pues estaba claro que se trataba de Ichigo.

-Dime de que quieres hablar...aunque si quieres ir a un lugar más privado, podemos dar un paseo.

Ante el comentario de Inoue, Rukia se quedó con la boca muy abierta y una gota descendía por un lateral de su cabeza. Y solo reaccionó cuando Reena volvió a la conversación sin exageraciones ni desvíos.

- Sí... bueno, podemos hablarlo de camino a mi casa.

Se levanta. El pobre Rikichi intenta despegarse el dango del pelo.

- Eto... ¿Cómo sabes si le gustas a alguien?

Miro a rukia y le sonrío.

Después me acerco a Rikichi, le cojo de la barbilla y le doy un beso en la mejilla. Y me voy hacia afuera.

-No todos...pero si le gustas a alguien y le das un beso así...se pone tan rojo como Rikichi ahora...- le digo una vez fuera antes de comerme uno de lso tres dangos pinchados en una varilla que llevo.

-Cuanto más concreta seas, más te podré ayudar.

Yo no podría darle besos... siempre nos peleamos...

Continúa caminando.

- Mmmm... es que... no sabría decirte, bueno sí, pero ... está bien... se trata de...

Y justo en ese momento llega Renji por detrás. Ves que le pega un capón a Rukia y que apoya su antrebrazo en tu hombro mientras mira a Rukia con seriedad:

Renji:- ¿Tú no deberías estar descansando?

Rukia le devuelve el golpe pero el triple de doloroso.

Rukia: - ¡Descerebrado! ¡Me has podido estampar contra el suelo!

-Bueno bueno niños, no os peleéis. O la segunda más fuerte del sexto escuadrón os dará unos azotes.

Vaya...ya no me lo dirá...

-¿Ya te han curado del todo, teniente temporal?- me meto con él.

- Oi... tienes exceso de confianza, Shihöin...- te advierte.

Luego deja de apoyarse en ti y camina recto con vosotras.

- Soy un tipo duro. Claro que me han curado. A todo esto, te estuvieron buscando Rangiku, Hisagi y Kyoraku taicho. Todos por separado. La primera y el último iban bastante pedo.

Llegáis a la habitación de Rukia y paráis antes de que entre.