Partida Rol por web

Snowpiercer 2: Ice Breaker

El ultimo vagon

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05/11/2017, 13:54
Roland S. "Broker"

LLego a la sala donde esta los asquerosos mandamases cebando al ganado, y una cara de asco surge en mi rostro, me pongo a la cola, para poder comer algo repulsivo para no morir, y cuando encuentro a Kaidan le llamo - Olya , La Doctora, Elaine y su madre estan en su camastro, no se pueden mover de alli porque la madre de Elaine esta peor, podrias cogerle algo de comida para ellas y llevarselas?, me temo que si nos han llamado no me dejaran irme si me necesitan para reparar algo y no quiero que se queden sin comer estan debiles y seguro que empeoraran las dos, te lo agradeceria MUCHISIMO Olya - mientras se lo pido la cojo su mano y la beso mientras pongo unos ojitos de cordero degollado al pedirle ese inusual favor, y a la espera que con mi buena voluntad y peticion cariñosa no me ponga ningun problema.

Una vez solucionado el problema de la comida de las chicas de enfermeria, cojo mi racion y me lo como mientras me pongo delante de Crowell, con cara algo chula, pero sabiendo que no podia hacer nada que malinterpretara o ofendiera porque para el la vida valia entre poco o nada, pues ya nos conociamos y sabia como se las gastaba.

- Saludos señor Crowell, hacia tiempo que no nos honraba con su maravillosa presencia en el vagon lujoso de 3º, que tal se encuentra, Que necesita del su mas leal servidor Broker? - dicho con algo de rintintin y humor, pues aunque sabia que era peligroso, tambien sabia que evitaria el conflicto con gente util para el.

 

le doy un mordisco a mi barra gelatinosa, la miro , y miro a Crowell- Quiere un poco señor?

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05/11/2017, 14:14
John Callahan

John salto como un resorte, en cuanto la puerta se abrio avanzo a grandes zancadas hasta ella. El jefé de seguridad en persona se atrevia a ir a buscar empleados en el apestoso vagón de tercera.

John se tenso como un musculo engarrotado, más cuando estucho a Roland hablar de un modo tan irrespetuoso a uno de los hombres más peligroso de todo el maldito tren ¿Pero que cojones estaba pensando?¿Queria que lo mataran?

La mano de John se movio rapido para soltar una colleja a Roland pensando que si era el quien le castigaba el animo de Crowell se aplacaria un poco. Despues de tantos años allí dentro parecia no comprender lo peligroso que era soltar la lengua en mal momento.

-¡Habla con más respeto al señor Crowell!.- Le gruño a la par que su mano le sacudia, con la fuerza justa para que sonara pero sin intención de causarle un daño real.

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05/11/2017, 15:38
Alan Ficherald

Al abrirse la puerta no me sorprendí, era cuestión de tiempo que llegaran desde primera o que lanzaran algún mensaje por la megafonía.

Trajeron como era obvio la comida... como cerdos teniamos que comer mierda compuesta de a saber que... pero al menos nos mantenía vivos. Roland informó a Olya de la situación con Elaine, cosa que me tranquilizo. Entonces se escuchó de boca del mandamas que teniamos que ir a reparar cosas mientras cogiamos las raciones. - Te lo dije Olya - Partí un trozo de mi ración - Por si la necesitan alguien más que yo, no creo que me de tiempo a comerla entera. - Entonces me agaché a Sarah que ya estaba lamiendo su ración y le acaricié la cabeza - Volveré pronto, haz lo que te digan ¿Vale? - De nuevo asintió

Le di una palmadita en el hombro a Jake mientras que Roland ya estaba haciendole la pelota a Crowell - Vamos anda. - Y una vez a la altura le agarré el hombro a Roland - Serás pelota. - no pude evitar reirme sus actuaciones siempre eran así parecía como si se quisiera ganar siempre a la gente - ¿Y bien señor Crowell? ¿Que se ha quemado esta vez? - Obviamente mantenía mi tono de respeto por costumbre, nunca quería que John me pegara como a Roland o a otros.

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05/11/2017, 17:26
Olya Lébedeva

Por instinto me pongo en la cola para recoger nuestras raciones, aunque no puedo dejar de dirigirles una mirada de preocupación y ánimo a los hombres a los que llaman. Joder, ¿ni siquiera pueden dejarles comer tranquilos, antes de obligarles a irse?

Roland se dirige hacia mí; ya ha recogido su ración, y la mordisquea con cara de asco. 

 Olya; la Doctora, Elaine y su madre están en su camastro, no se pueden mover de allí porque la madre de Elaine está peor, ¿podrías cogerle algo de comida para ellas y llevarselas?

Asiento con la cabeza, mientras la fila se mueve.

-Pero... -comienzo a replicar, antes de que él se aleje para hablar con el mandamás que ha atravesado la puerta- no sé si me dejarán coger más de una...

Finalizo, en voz baja. Me aproximo cada vez más al carro de las raciones. Gelatinosas, oscuras y desagradablemente blandas, nos esperan a todos con la irónica forma de un lingote de oro. No es que haya visto uno nunca, pero mi padre dijo que guardaban cierto parecido. Aunque, probablemente, el oro sabría mejor que este mejunje extraño.

Alan me da un trozo de su ración, y lo guardo rápidamente en mi bolsillo. Si me ven con más comida, puede que me quede sin nada.

Por si la necesitan alguien más que yo, no creo que me de tiempo a comerla entera.

-Gracias -respondo, pensando, precisamente, en Elaine y su madre.

Sarah se queda a mi lado, mientras su padre se aproxima al mandamás y a Roland, quien ya ha recibido un par de gritos de John. Pongo los ojos en blanco, ¿es que se creen que pueden tratarnos como a ganado? 

Pero antes de que me surjan ideas contestatarias, llega mi turno para recoger la comida. Abro la boca para explicarles la situación de la enferma, pero, sin darme tiempo a hablar, me ponen un trozo en la mano y me obligan a seguir. Me mantengo de pie, en la fila, aunque los de atrás ya intentan apartarme a empujones.

-Perdone -llamo la atención de uno de los guardias que custodia el carro- debo coger tres raciones más. Hay una mujer enferma en el vagón, y su hija y la médico no pueden venir a por más comida. Me han pedido que les lleve la suya.

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05/11/2017, 17:58
John Callahan

-Lo que dice esta mujer es cierto.- dijo John al guarda que llevaba la comida, esperando que su palabra sirviera para que le permitieran coger la comida de las demas, en un tono bajo para no armar escandalo por lo que solo el guardia y Olga me escuchan.

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05/11/2017, 18:10
Jake Martinson

El aviso de la comida, si es que podía denominarse así, llegó de la voz del maldito Crowell, nos trataba como si fuéramos basura, despojos humanos y eso me ponía enfermo, pero enfrentarse a él era muerte casi segura.

La barra gelatinosa, con una pinta asquerosa y un sabor que mejor no describirlo, era lo único que recibíamos como nutrición, nos mantenía con vida, pero poco más. Migajas comparado con los festines que debían darse en 1° pero pensar en ello sólo conseguiría enfurecerme más, así que lo aparté de mi mente y me limite a seguir las instrucciones, sumiso.

Apreté la mandíbula y me puse a la cola junto con Alan y Olya para recibir mi "ración", la recogimos de manera obediente y nos apartamos para comerlas en silencio. En ese momento Crowell pronuncia mi nombre junto al de Alan y Roland. Me quedé mirándo un momento a Alan-el banquete tendrá que esperar amigo-dije con una mueca, partí mi porción por la mitad, la tragué casi sin masticar y le dí el resto a Olya tal cual hizo Alan, no podía desperdiciarse y tanto la madre de Elain como ella misma lo agradecerían-Toma Olya, llevarles mi parte les vendrá bien, además ya estoy lleno-la mueca de desagrado fue clara.

Me dirigí hacia mi camastro, recogí algunas herramientas más y volví junto a Alan-Cuando estés listo, nos vamos amigo, a ese cerdo no le gusta que le hagan esperar-dije dándole una palmada en el hombro.

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05/11/2017, 20:31
Roland S. "Broker"

Senti como John me golpeo, con mas sonoridad que fuerza en mi brazo, he hice el paripe para que pareciera que me dio fuerte, pero una sonrisa se marcaba en mis labios ... me gustaba picar, y jamas podia perder la oportunidad de picar en el limite a Crowell, sabiendo que si no me pasaba de los limites del humor o la ironia, podia mostrar mi desagrado de la situacion, incluso al mas duro del lugar.

- Calma, Calma solo estaba bromeando ... bueno que ocurre ahora?

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07/11/2017, 00:04
Rhazes Crowell

Rhazes iba a hablar pero John llegó antes dando su merecido al bocazas.

Al principio no dijo nada. Observaba como la gente iba cogiendo sus barras gelatinosas y se las comía. Por algún extraño motivo eso le hacia sonreir por dentro. No fue hasta que los tres estuvieron delante que empezó a hablar.

- Téneis trabajo. Creo que el apagón ha sido general. Hay un par de cosas que necesitan de vuestra atención- Rhazes hizo un gesto y uno de los guardias salió detrás de él y os entregó unas bolsas de tela negra, una a cada uno. - Ya sabéis como funciona esto. Ponéoslas en la cabeza. A los de 1ª no les gusta que les curioseen los mendigos.- Dijo sonriendo con una malvada sonrisa, sabiendo que era algo denigrante. Como llevar presos al corredor de la muerte.

Así se trabajaba allí. Cada vez que se os necesitaba se os tapaba la vista para que solo vierais la zona en la que reparabais las cosas. Simple y efectivo. Posiblemente cruel pero según Marko, el Arzobispo, si a un pobre le das pan para desayunar, después también pedirá para comer y cenar.

 

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07/11/2017, 00:13
Caroline Josephine "CJ" Miller

Al oir la puerta y ver entrar las barras de proteínas escupí al suelo.

Asco de comida. Pero por otro lado siempre habían comido lo mismo. Día tras día. Cierta ocasión, una mecánico robo unas piezas de fruta y las compartió con Gillian y los del consejo. Eran los mayores, así que también los mas respetados de todo el tren.

Yo era la aprendiz de Gillian, su pupila, así que recibí un trozo de una cosa que se llamaba "manzana". En su momento me pareció lo mas exquisito. Aun recuerdo su sabor en mi boca. Manzana. Quería manzanas después de eso durante días. Pero Gillian negó con la cabeza. No habría manzanas nunca mas. Y así fue.

- Elaine. Quédate con tu madre. Iré con John a ver si nos dejan ir a la enfermería.- Dije cogiéndola de la mano para darle fuerzas y despés un pequeño abrazo.- Si nos dejan...

Andé decidida y sin mirar a ningún lado. Incluso pase de largo cuando Olya y Kaidan iban en nuestra dirección a darnos la comida. Ahora la comida no me importaba.

- Señor Crowell.- Dije parándome delante de el mientras veía como me escudriñaba de arriba a bajo con esos ojos azul intenso. - Soy Caroline, la ayudante de Gillian. La medico. Necesito ir a la enfermería urgentemente. Tengo a alguien allí atrás que necesita antibiótico. Las plantas de esta zona no brotaran hasta dentro de un par de meses por lo que... no puedo hacer nada- Dije dejando caer los brazos a los lados.- Se que en la enfermería puedo conseguir algo. - Luego cambié de táctica ya que su cara me indicaba que la siguiente palabra sería.  "Pues que se muera"

Maldito hijo de puta...

Me acerqué levemente hacia el para susurrarle algo sin que los demás me oyeran, solo los mas cercanos quizá.

- No querrá que haya una epidemia incontrolable en el tren y llegue hasta 1ª, ¿no? Necesito esos antibióticos, señor...

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07/11/2017, 00:28
Rhazes Crowell

La Doctora se me acercó con aires de sabelotodo.

Era la pupila de Gillian, y eso decía mucho. Pero ademas era la medico de 3ª. Demasiado joven para eso, pero era verdad que hacía bien su trabajo. No pude evitar reirme de que se pusiera delante como si su altura fuera suficiente para dejarla ir a la enfermería.

Sin embargo cuando dijo lo de la plaga... Ummm. Mejor prevenir.

- ¿Claro, porque, nadie quiere perder a nadie, verdad, pequeña? ¿Que tal esta el viejo Gillian?- dije sonriendo.

Después hice un gesto con la cabeza a John, que estaba cerca. Un leal perro guardián.- Vigílala, que no haga nada raro. Ir y volver. ¿Me entiende, señor Callahan?- Se giró hacia uno de los guardas y la quitó otra bolsa negra para dársela a John. - Ya sabes que hacer. Pónsela.

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07/11/2017, 00:47
Jake Martinson

Nos colocamos los tres ante Crowell y Roland como siempre haciendo de las suyas-nunca aprenderás ¿verdad?-le miré de reojo, cualquier día le pegarían un tiro, eso lo tenía claro, toda gente tiene un límite y la virtud de la paciencia de Crowell, si es que tenía alguna el miserable, no la poseía. En ese momento apareció Caroline a nuestro lado pidiendo antibióticios y susurrándole algo al tirano, a lo que él accedió.

Ponernos la bolsa era denigrante, me hacía sentir un maldito esclavo y con gran placer se la haría tragar a Crowell, pero una vez máz, tocaba guardarse el orgullo y mirándole directamente a los ojos como si pudiera fulminarle con ellos me puse la bolsa en la cabeza. A través de la tela negra no se veía practicamente nada, los sonidos y voces llegaban ligeramente amortiguados y podía llegar a ser agobiante para algunos, pero nosotros ya estábamos acostumbrados así sin mediar palabra y con la bolsa puesta esperé a que me guiasen fuera del vagón-Te juro que algún día recibirás tu merecido, cerdo-pensé tensando la mandíbula.

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07/11/2017, 01:27
Alan Ficherald

Sorprendido ante lo dicho por Crowell, no puedo evitar preguntar - ¿Un par de cosas? Bueno, supongo que seis manos seránsuficientes - digo mirando a mis compañeros que no compartían mi misma paciencia, aunque no les culpaba, odiaba tanto como ellos a Crowell... pero no todo en la vida se resuelve a quien da el primer puñetazo. Seguidamente nos dió la bolsa y de nuevo las caras de hastio, esta vez de los tres se podían ver claramente

-Veo que la sugerencia que hice de cambiar las bolasas por simples vendas no llegó a nada ¿Eh? - Estaba entonces remangando la bolsa cuando CJ llegó para hablar de Elaine a Crowell - ¿Tan mal está la señora Blake? - No pregunté ahora puesto que cada uno tenía su función que realizar, y cuanto antes repararamos las cosas rotas del tren mejor, igual que cuanto antes obtuviera los antibioticos Caroline mejor. Me puse entonces la agobiante bolsa de tela negra en la cabeza, preparado para iniciar la marcha.

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07/11/2017, 01:43
John Callahan

John contuvo la respiración cuando la doctora tuvo el valor de pedir las medicinas. El iba a hacerlo, ella se le adelanto y resulto ser lista de lo que él hubiera sido. El riesgo de una epidemia era lo bastante serio para darle lo necesario pero solo se atrevio a sonreir por dentro.

Dio un paso al frente al ser llamado.-Señor, si, señor.- dijo sabiendo que eso era justo lo que esperaba y lo que queria oir. Cogio la bolsa negra para cubrir la cara de Carol. Era simple protocolo pero sabia lo humillante que era. Le dolio profundamente tener que hacerlo pero no había alternativa. Para sobrevivir, si los de primera te llamaban perro, tenias que ladrar...era asi de simple, aunque en su vida habia visto un maldito perro vivo ni tenia mucha idea de que clase de animal era.

Una vez puesta la bolsa, John cogio el brazo de J.C para guiarla, sin pretar ni hacerle daño. Sabia que podia confiar en ella y no se escaparia ni armaria ningun alboroto en primera.- Ya ha oido al señor Crowell, señorita, ir y volver.- le repitio con un tono mas educado pero firme. Esperaba que ella comprendiera que lo que fuera tendria que cogerlo rapido.

-No te quejes tanto Ficherald, en tu caso la bolsa en la cabeza te favorece.- bromeo, en su papel de guardia cabrón.

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07/11/2017, 01:43
Kaidan

Tras finalizar la discusión entre Jake y Olya, por fin llevaron a Alan con su hija. Por el camino Kaidan se mantuvo en silencio, apenas entendía nada de lo que decía Alan, no era su campo de experiencia. Confiaba en que él y los otros mecánicos sabrían encontrar y arreglar el problema, él no podía hacer nada en esa situación y por tanto prefería no hacer comentario alguno.

Llegaron hasta el lugar donde habían dejado a Sarah y esta se fundió en un abrazo con su padre. A Kaidan se le escapó una sonrisilla al verlo, los niños del vagón de cola eran su debilidad. Lamentaba no poder ofrecerles nada más que aquella magra existencia. Kaidan tenía muy claro que no traería una criatura a aquel mundo tan injusto, le parecía una crueldad. Pero se esforzaba por ayudar y animar a los pequeños en todo lo que pudiera.

Finalmente llegó el momento que tanto se había hecho esperar. Las puertas que conectaban el vagón de cola con el resto del tren se abrieron y dejaron paso al pedazo de mierda de mayor graduación que se les estaba permitido conocer. Rhazes Crowell. Al menos esta vez su llegada iba acompañada de una buena noticia, las raciones del día. Aunque no era como para considerarlas buenas en sí, al menos auyentaban el hambre.

Rápidamente los colistas se organizaron en una fila y fueron recogiendo su respetiva barra. Kaidan se puso a la cola junto a Roland y Olya. Asintió ante las palabras del manitas - Descuida, me encargaré de que les llegue lo suficiente y algo extra, que nunca viene mal - pero Roland ya estaba plantandose frente a Crowell y buscandole las cosquillas, desde luego el hombre tenía una afición por ponerse en riesgo innecesariamente que daba gusto. John actuó rápidamente, cumpliendo su cometido de guardia, seguramente una colleja era algo mucho mejor de lo que se podía esperar del jefe de seguridad.

Alan y Jake también se presentaron ante el llamamiento. Después de Olya, era el turno de Kaidan de recoger la ración, pero aprovechó la conmoción del numerito de Roland para ajenciarse varias barras de proteínas, las que llevaría a Elaine y su madre. Junto con los pedazos que le habían dado a Olya, debía de ser suficiente. La profesora se dirigió preocupada hacia los guardias pidiendo más, pero Kaidan le dió un golpecito en el brazo y cuando se giró le enseñó sus bolsillos llenos de barras discretamente, fuera de la vista de los guardias, mientras movía los labios diciendo "no" pero sin soltar palabra.

Mientras se aparaba del carrito escuchaba las palabras de Crowell, tan simpático como siempre el hombre. CJ salió de repente detrás de ellos y fue directamente hacia el mandamás. Como siempre también, la doctora no se cortaba un pelo, ni siquiera con alguien con tanto poder en el tren. Por suerte, Rhazes debía de estar de buen humor, porque no castigó a Roland y permitió a CJ ir a la enfermería de primera y usar sus antibióticos, de incalculable valor en el tren.

Kaidan contempló como los guardias colocaban las bolsas opacas en la cabeza de sus compañeros con una mirada de desprecio hacia los malnacidos que lo hacían. Los trataban como a una mierda pegada al zapato de todas las maneras posibles, y seguro que a más de uno lo divertía, como seguramente a Crowell. Pero no tenía sentido alguno hacer nada al respecto. Ellos tenían las armas y el control del tren, y a los de tercera solo les quedaba acatar y callar. De momento...

En fin, allí no hacia nada útil, y con la partida del cuarteto de colistas, solo quedaba Olya a su lado. Le dió un golpecito para llamar su atención - ¿Les llevamos esto a las chicas? Creo que juntandolo todo tenemos para ración y media para todos.

 

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07/11/2017, 08:22
Olya Lébedeva

Kaidan: ¿Les llevamos esto a las chicas? Creo que juntandolo todo tenemos para ración y media para todos.

Observo los bolsillos de Kaidan. Así que ratero, eh... bueno, nunca se sabe cuándo puede venir bien. Pero... veo cómo le cubren la cabeza a CJ, dispuesta a llevársela, y me muerdo el labio inferior, inquieta. ¿Y si no regresara? El vagón de cola estaría completamente perdido sin ella. Incluso yo. 

Los pensamientos fluyen a toda pastilla en mi cabeza. Miro al guardia, John Callahan; ha sido lo suficientemente amable como para insistir para que me dieran más raciones. Eso debe significar algo.

-No podemos dejar que se lleven a nuestra única médico -le digo a Kaidan- debería quedarse con Elaine y su madre.

Me rugen las tripas, pero dejo mis raciones en manos del chico, mientras, con pasos titubeantes, me aproximo a Callahan. Siempre he llevado un perfil bajo; filosofía de molestar lo mínimo para no morir por intoxicación de plomo. Pero ahora hay muchas cosas por las que luchar, muchas cosas de las que tomar conciencia por fin, y arreglarlas. Y quiero ver a mi padre, necesito verle. Quizá si me sacan de ahí, quizá... 

-¿Os importa si voy yo, en lugar de CJ? Creo que ella es más útil aquí, con sus pacientes. 

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07/11/2017, 17:13
Elaine Blake

Le costó aceptar no ser ella la que fuese a pedir las medicinas, pero lo cierto era que su madre la necesitaba a su lado. CJ y John tenían controlado muy bien que decir, por eso Elaine no insistió en acompañarles. Su lugar estaba con Ellen, y por parte de la doctora sabía que haría todo lo posible para conseguir los antibióticos.

La amenaza de epidemia en el tren fue la mejor carta que tenían para jugar frente a Crowell. Elaine se despidió de Roland con un fuerte abrazo, viendo como lo requerían junto a Alan y Jake para arreglar la avería del tren. Antes de irse le susurró algo al oído.

Suspiró cuando aquel hombre sin alma les obligó a colocarse las bolsas negras en la cabeza. No soportaba ver a sus amigos en aquella situación, no se lo merecían. Todos eran uno, todos sufrían las injusticias de tercera.

Desde el camastro de su madre contempló también como la llegada del hombre significaba la hora de la comida. Estaba muy nerviosa y ahora se sentía peor, la adrenalina y la cortisona que se le había disparado al saber que su madre estaba tan enferma ahora la tenía prácticamente sin fuerzas. Comer las barras de proteínas le vendría muy bien, aunque dudaba que su madre pudiese hacer el esfuerzo siquiera de tragar la gelatina oscura. Estaba muy mal.

Cogió de la mano a Ellen y le aseguró calmada conteniéndose las lágrimas. - Vuelvo enseguida. - se dirigió hacia la zona de las puertas automáticas donde había una cola grande de gente intentando conseguir su porción de comida. No se atrevió a mirar los ojos de Crowell. Era de esos hombres que con solo una mirada te hacía sentir mal. Y a ella no le apetecía sentir eso en su interior.

Pero si que miró a CJ y John con una mirada de súplica. "La vida de mi madre está en vuestras manos".

Notas de juego

Mi pj se tiene que quedar con su madre pero no sé si alguien más se queda en tercera?

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07/11/2017, 17:28
John Callahan

John escucho a Olya y zuncio el ceño.-Señorita, esto no es una excursión a la que pueda apuntarse. El señor Crowell ya ha dicho que sera la doctora quien salga del vagón, la traere enseguida asi ahora apartese si no quiere que la aparte yo.- Dijo sin ganas de hacerle daño pero muy firme.

Con la de años que llevaban alli y aun no habían aprendido a callarse la boca y obeceder. Ya tenian la enorme suerte de que la dejaran ir por medicinas como para que la maestrilla se las diera de lista y quisiera jugar a liarla.

Notas de juego

Olya XD

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07/11/2017, 17:53
Elaine Blake

Tener el apoyo de Roland era una de las pocas cosas que le hacía sentir bien. Prestar atención al comentario de John cuando se refirió a él como su novio no era su prioridad, pero algo le hizo sentir miedo como pocas veces cuando Crowell llamó a los mecánicos.

Sabía que algo raro estaba pasando en el tren porque a su madre la habían envenenado. No se conformaban con aislarlos en tercera, parecía que también los querían asesinar, y si pasaba algo malo y Roland perdía los nervios?

Ella no estaría allí para calmarle.

- Me quedaré con mi madre, pero no sé si podré averiguar algo, no me puedo separar de su cama. - frunció los labios. - Mantente alerta cuando vayas a primera. - le acarició la barba con ambas manos. - Y ten cuidado, a veces hablas demasiado. - se abrazó a él otra vez. - Puedo ser fuerte por mi madre, pero no me hagas ser fuerte por ti si te ocurre algo. - se despidió de él dándole un beso en la mejilla.

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07/11/2017, 17:51
Olya Lébedeva

Me cruzo de brazos, sintiendo que el corazón se me dispara en el pecho. Le dirijo una mirada de reojo al capullo del pelo oxigenado. Todo mi ser me insta a que me calle y regrese a la fila, pero es como si mi boca actuara en contra de las órdenes de mi cerebro.

-Ya sé que esto no es ninguna excursión. Pero la médico debe quedarse con sus pacientes, y si es sólo un trabajo de recogida de medicinas, ¿por qué no puedo ir yo? -Insisto, tragando saliva después.- Esto no es ninguna revolución, ya ven que soy inofensiva. Sólo quiero ahorrarle el viaje a la doctora.

Observo los fusiles que llevan los guardias, preocupada. Sé que no me dispararían (o eso quiero creer), pero les he visto utilizar la culata para reducir a algún exaltado, alguna vez. Vuelvo a mirar a los ojos a John, intentando parecer inofensiva. Por favor, en la cara no.

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07/11/2017, 18:11
John Callahan

-Y seguro que usted sabe exactamente que medicinas necesita, porque usted lo sabe todo.- gruño John de nuevo intentando que Olya cerrara la boca y dejara de protextar.-Mire maestria, reparta la comida que es lo que le han pedido que haga y deje de joder la marrana. Lo que usted crea no le importa a nadie, el señor Crowell a dado una orden y punto. Asi que coja las raciones y desaparezca antes de que me cabree...¡y ni una palabra más!.- la aviso.

Olya no debia entender que si Crowell perdia la paciencia con ella lo pagaria muy caro, todo por encabezonarse en ser ella la que fuera a buscar medicinas, de las cuales no tenia ni puta idea. Para ser profesora era tonta de cojones.

Notas de juego

arreglado