Partida Rol por web

Le mete en el bolsillo a Chopper un par de barritas de las que le gustan, y cuando la mira Nersha tiene la boca llena de gominolas, no puede evitar alzar una ceja. Se las traga del tirón:

- Pero que no nos van a decir nada!!! Que tenemos que sacar la información!!!

Dijo ya más alto viendo que sus compañeros no la hacían caso, parecía una niña pequeña cuando no la toman enserio, abriendo mucho los ojos y con cara de circunstancia. Estaban haciendo un drama total con la situación cuando era el trabajo que tenían que hacer.

- Anda Chopper.. tú hazme caso a mi, saca toda la información de la PDA. De regalo unas barritas.

Le da unas palmaditas en el brazo.

- Haced lo que os de la gana, vais a hacerlo igual - dije.

Me aparté y apoyé mi espalda en una pared, prefería descansar en vez de discutir, estaba claro que la mayoría de los que estábamos en la sala no respondíamos al mismo credo. Estaban empeñados en sacar más rédito todavía de la información que había en la PDA, trabajo por el cual no nos pagaban y por el cual podríamos no salir demasiado bien parados.

Animado por Nersha y Apple, Chopper agarró el dispositivo de un tirón con uno de sus brazos peludos.

-Trae pa acá

Dijo, con su vozarrón. Dejó que los agentes discutieran de lo suyo y el gigante se sentó delante de las pantallas de su computadora moderna. Estaba a la vista de todos, incluido el fondo de pantalla de una Twi´lek en bikini que decoraba su escritorio (por lo visto, sentía predilección por esa raza) y empezó a teclear rápido con tres brazos, mientras que con otro degustaba una barrita de cacahuete que Apple le había dado.

-Tardaré un poco, podéis descansar durante unas horas, os avisaré cuando esté listo.

Dijo el álien tras una primera toma de contacto con el pda.

Wazn estuvo vigilando a Chooper durante la primera hora, pero luego empezó a sentir un pequeño temblor en su mano izquierda. La ejercito para ver que si pasaba, pero los espasmos eran cada vez mayores. Él sabia lo que significaba, así empezaba...

-Necesito un poco de intimidad, tengo que echar una meada, enseguida vuelvo. Su voz sonaba normal pero sus movimientos parecían algo torpes.

Wazn busco un lugar en el que los otros no tuvieran una visión directa y se dejo caer con la espalda pegada a la pared. Su mochila la tenia a su lado. De ella saco un frasco de Bacta intacto aun y el inyector de estimulantes.

Empezaba a marearse, a quedarse sin aire, así que se despojo del casco y tomo una bocanada de aire. Para entonces el inyector ya estaba cargado con una pequeña cantidad de Bacta.

Jodidos Pyke... Sin pensar demasiado coloco el inyector en su cuello y lo acciono. Al principio dolía como el demonio,  pero el pistolero apretó los dientes para no hacer ruido y que lo oyeran.

Después del dolor inicial llego la calma y el pistolero cerro los ojos. El Bacta tardaría un tiempo en hacer efecto, pero quedaría como nuevo.

-Cierto Apple, jeh...- se mordió la lengua y guiñó uno de sus ojos, mostrándose de una manera tonta pero graciosa a la vez-.Entonces no hay más de qué hablar- sentenció al escuchar también la respuesta de Irella-.Dejemos que el grandullón nos eche alguna de sus manos- cuando Chopper comenzó a trabajar con la PDA, el rostro de la Twi'lek se iluminó.

-Ese es nuestro Chopper- dijo con tono alegre al ver que finalmente se dispuso a hackear el dispositivo.Aún sentía el estrés en su cuerpo, sus músculos estaban tensos y su mente agotada.

-Nos vendrá bien un descanso.Esperaré a que desencriptes la información mientras me tomo un respiro- aceptó la oferta de Chooper sobre descansar, y buscó un lugar tranquilo donde sentarse o tumbarse para despejar la mente y tranquilizar su cuerpo.

No teníamos otro sitio donde ir, estábamos atrapados en el taller de Chopper, y además estaba desencriptando la información de la PDA de la hacker de Bax.

Me senté en el suelo con la espalda apoyada en la pared, llevé mi carabina delante de mí y saqué un trapo que comencé a pasar por el cañón. Seguramente nos pasásemos ahí un largo rato y, aunque no sirviera de nada, la tarea me reconfortaba y me ayudaría a que el tiempo pasase un poco más rápido.

El besalisco nos recomendó descansar mientras realizaba su trabajo, Wazn se fue a vaciar la vejiga y Nersha se dispuso a tomar un descanso. yo me quedé ahí sentada en el suelo, pasándole el trapo a mi carabina, mientras observaba lo que iba haciendo Chopper para desencriptar el datapad.

Wazn va a una dependencia separada del resto, un pequeño cubículo cerca del meadero donde la limpieza brillaba por su ausencia, realmente, puesto que no se podía esperar pulcritud de parte de un besalisco como Chopper. Al quitarse el casco el aire con olor a taller y productos químicos le dieron una buena bofetada de realidad, sin el filtro de por medio para salvarlo. 

El pistolero metió mano a sus objetos para sacar un inyector pequeño, similar a una pistola enana con un cargador lleno de un líquido color azul brillante y colocó el "cañón" en el cuello, para luego accionar el disparador, que se escuchó como un "ptzz" poco a poco, la cápsula se fue vaciando hasta quedar totalmente sin contenido, llenando sus venas del líquido azul.

Al principio ardía como un hierro caliente, era como si estuviera metiéndose ácido en las putas venas. Pero poco a poco, eso dejó de sentirlo, como todo lo demás.

En el suelo, a su lado, un cristal de un retrovisor lo reflejaba, apenas si podía reconocerse a sí mismo en aquel tipo que le devolvía la mirada en el cristal, mientras sus párpados iban cerrándose despacio.

Cuando todo se hizo oscuro apareció ella. Tayali. El único sitio donde volvían a estar juntos. 

El mismo sueño una y otra vez, en la cama, justo después de despertar, compartiendo miradas cómplices y risas con las cortinas blancas moviéndose en el aire que entraba por el balcón. Todo era perfecto. Pero de pronto, tras aquellas cortinas, la forma de varios hombres con un casco rojo, con la marca de sus presas tachadas en el pectoral de sus armaduras, a la vista de todos para que supieran a cuantos habían matado se formaba e iban pasando uno tras otro, como un escuadrón de la muerte. Eran los cráneos rojos.

Wazn siempre se levantaba y trataba de coger su arma, pero esta nunca estaba sobre la mesa. En esos momentos trataba de impedir que se la llevaran luchando con sus puños, pero ellos le pegaban un tiro en el vientre y le hacían caer de rodillas, mientras se llevaban a Tayali. Ella alargaba el brazo hacia él, buscando auxilio, susurrando algo que jamás llega a oír. Lo siguiente que ve es como es asesinada delante de él sin poder hacer absolutamente nada. Wazn cerraba los ojos y dejó escapar un grito de dolor. Cuando volvía en sí, estaba solo, con el cadáver de Tayali en la cama, y ante él, un espejo que le devolvía la mirada, era un monstruo lleno de cicatrices, y el pistolero tardó unos segundos en comprender que aquel monstruo no era otro que él mismo. 

En ese instante despertaba entre sudores. Siempre igual. Sabía perfectamente que los hechos no pasaron así, estaba completamente seguro y sin embargo, siempre el mismo sueño. Aun así, siempre que cerraba los ojos, volvía a intentar salvarla.

Sigue comiendo lo que había sacado de la máquina y se sienta al lado de Chopper

- Que gente más rara.. verdad??? Y luego dicen de mi..

Niega con la cabeza mientras se abre el envase de unas gominolas. Se sienta como un indio y en el hueco que dejan las piernas, coloca todas las cosas que sacó de la máquina.

- Dales tiempo.. te querrán y confiarán en ti tanto como lo hago yo.. ¿quién no va a quererte?? Además..  yo creo que a la de la rosita le gustas.. he visto como te miraba.. y te ha guiñado un ojo!!! Le molas fijo.

Sigue comiendo, no le mira, está más atenta a lo que pone los envoltorios.

- Ójala Bax me dé esta vez pistas buenas.. Te acuerdas de Kyle??? Te tienes que acordar.. pues le estoy buscando, desapareció en una de las misiones, pero yo sigo diciendo que se lo llevaron. Tú si lo ves.. me lo dices, vale???

Ahora si le mira cuando le dice eso

- O si te enteras de algo nuevo.. le echo mucho de menos.

En su cara se ve que echa en falta a su compañero.

El sofá de la oficina de Chopper era tan buen lugar como cualquier otro para descansar. Era viejo y tenía una manta sobre este que seguro que era igual de antigua. Aun así, era sentarse y el sopor entraba de lleno por su comodidad. Tanto fue así, que Nersha acabó hecha un ovillo y en los brazos de morfeo. 

Normalmente la contrabandista no soñaba con nada, pero esta vez empezó a soñar con cuando era niña, con su hogar, con sus padres y su gente. Allí estaba su hermana, sonriendo, como siempre, y le pidió que le siguiera de forma traviesa, en alguna de sus aventuras a sitios donde no debería estar. Nersha la siguió, con el corazón en un puño por la emoción de la aventura. Sershah se acercó a palacio, a una de las habitaciones separadas del resto por una cortina de diseño hermoso y le djo que entrara. Nersha dudó, pero decidió echar un vistazo para evitar las crueles burlas de su hermana. Dentro estaba todo oscuro y daba miedo. Sershah sonrió y la empujó con una patada. Nersha lloró y se volvió asustada, pero Sershah ya no era aquella niña, sino que se había convertido en una mujer mayor y le dedicó aquella macabra sonrisa de despedida antes de cerrar la cortina. Al volverse, Nersha pudo verse reflejada en aquella esclava Twi´lek de mirada perdida que bailaba en el local de Bax como si estuviera mirando a un espejo, luego la escena se tornó mas grotesca al recordar las perversiones de su antiguo dueño y los maltratos de sus compinches. De nuevo estaba esclavizada. Todo se volvió negro de pronto y de la oscuridad, apareció el rostro de Sershah y apuntó a su hermana con un bláster. Antes de apretar el gatillo, volvió a sonreir de forma altiva.

Entonces Nersha despertó de aquella pesadilla. Tal vez premonitoria.

Bajo la atenta mirada de Apple e Irella, Chopper tecleaba atento a la pantalla, pues el código se le resistía más de lo esperado. Cada pantalla de error, le daba un mordisco a la barra energética, hasta acabarla.

-Ya sabes, el mundillo de este sector es así. La gente no se fía de nadie desconocido. Pero ¿sabes? lo peor viene de los conocidos.

La criatura hizo algo así como guiñar el ojo a Apple, dándola un consejo.

-Es que tu eres demasiado buena, ojalá hubiesen más personas como tú en el sector. ¡En la galaxia!

Chopper sonrió después de hacer una bola con el plástico de la barrita y dejarla caer en la papelera al lado de la mesa.

-¿Me pasas una bebida Mandalore Power, por favor? necesito sacar a la artillería. 

Le pidió a la chica del pelo de colores, aunque cuando dijo lo de Nersha, se ruborizó.

-¿T..tu crees? ¡Que va! se que solo se trataba de un juego para conseguir lo que quería. Soy feo, no tonto. Pero a nadie le amarga un dulce.

El besalisco se volvió a la pantalla y siguió tecleando.

-¿Kyle? si, claro, el tipo ese con pintas de bruto. De hecho no me gustaba para ti las primeras veces que trabajamos juntos, no sé, demasiado brusco y marrullero, pero luego pude ver que tenía buen corazón, quizá tu se lo contagiaste ¿eh?

Sonrió, aunque cuando vio la cara de tristeza de Apple volvió a quedarse serio.

-Lo siento. No lo sabía. Seguro que lo encontrarás. Bax puede ser un capullo, pero si dice que tiene algo, tiene algo. Además ¿qué más nos queda, sino la esperanza?

Resopló. Al voltear la cara se dio cuenta de que Nersha se había quedado dormida en su sofá.

-Harías bien en descansar. ¡Y tu también, pequeña mercenaria! esto me va a llevar horas. ¡Gunter, cierra la puerta, que no quiero clientes!

Uno de sus empleados emitió un gruñido.

-¡Esa boca!

Le respondió el gigante. El empleado se fue de mala gana a la puerta del local y la cerró. Chopper volvió a su trabajo de desencriptar la información.

Sin todo el trajín de la persecución pude observar atentamente como se comportaba Chopper con el resto. Al parecer Apple y el tenían una relación más cercana que con los demás. Mientras pasaba el trapo por el cañón de la carabina pude relajarme lo suficiente como para bajar la guardia, al menos ya no nos perseguían.

Estuve todo el rato observando al besalisco, y como hablaba con nuestra piloto. Al poco rato, cuando se percató que la twi'lek estaba dormida le aconsejó a nuestra piloto que descansase y de paso también me lo recomendó a mí.

- Lo intentaré, gracias - respondí de forma escueta.

No es que no quisiera dormir, pero no hacerlo era un estado habitual durante las misiones, cerrabas los ojos y dormías, claro, pero no descansabas, siempre me quedaba en ese estado de duerme-vela alerta de lo que pudiera pasar. Guardé el paño y cerré los ojos, abrazada a la carabina, si al salir de aquí de nuevo volvía a haber una persecución, debería intentar estar lista para, esa vez sí, acertar en el blanco.

Se podía ver a Nersha, encogida bajo la manta, temblando y moviéndose incómodamente, con su rostro fruncido y empapado en la preocupación y el miedo.Vivir aquel sueño le resultaba doloroso y desconcertante.Un tortuoso camino por el mundo de las sombras que podría reflejar el destino de su vida o los mayores temores que le atormentaban.Pero entre todo aquel torbellino de sentimientos, se ocultaba el odio, profundo e intenso, alimentado por todos los demás, agarrándose al corazón de la twi'lek, tiznándolo lentamente, marchitando su alma pura y bondadosa.

Cuando el sueño llega a su fin, se despierta de manera apresurada, incorporándose  agitada, entre sudores y respiraciones fuertes.Su mirada se encontraba inyectada en sangre, luchando por mostrar odio e ira al mismo tiempo.Posa su mano sobre su rostro durante unos segundos, intentando tranquilizarse mientras esta frotaba suavemente su frente hasta finalmente deslizarse hacia abajo y arrastrar cualquier resto húmedo de sudor.Cogió aire profundamente y suspiró largo y tendido mientras su mirada y su cuerpo se relajaban.Se quedó unos instantes abstraída, mirando hacia abajo donde descansaban sus manos con las palmas hacia arriba.Perdida en sus pensamientos y recuerdos, decidió despertar del trance, llevándose las manos a sus pechos, y frotándolas por debajo de estos para secar el sudor, lo que provocaba que se alzasen y juntasen, saliendo casi de manera desproporcionada por el escote del top negro sin tirantes que vestía.

Necesito una ducha...

Se levantó de aquel sofá y acudió dónde Chopper para averiguar como avanzaba su hackeo y ya de paso preguntarle si había alguna ducha en el local.

Se levanta y coge un par de bebidas para llevárselas al besalisco. Sus palabras la consolaron en parte, y la hizo sonreír, le dió un beso en la mejilla.

- Gracias.. te debo una y muy gorda, por ayudarnos.

Bostezó y se desperezó, asintió a que debería descansar.

- Eso haré.. si me necesitas, llámame.

Cogió lo que parecía una gran chaqueta de Chopper y se sentó al lado de Irella, que parecía dormida. Se acurrucó a su lado y usó la chaqueta como una manta improvisada, quedándose dormida inmediatamente.

Chopper cogió la bebida y la abrió casi al instante, salpicando espuma amarilla toda la base superior del recipiente impregnando todo de un olor a deliciosa taurina bien fría. El beso de Apple le hizo interrumpir el trago y esbozar una sonrisa afectiva. Dos de sus cuatro brazos se posaron en las palmas de la joven.

-Tranquila, estamos para ayudarnos. Saldrá bien. Ve a descansar.

Giró en su silla para seguirla con la mirada y encontrarse con la escena de las jóvenes durmiendo. El besalisco sonrió y le dio un trago largo a la bebida. Ese mejunje le hizo reactivarse para volver a su trabajo.

Cuando Nersha despertó entre sudores, haciendo más atractiva aún si cabe la perfecta figura de la Twi`lek, se encontró de frente con los grandes ojos negros del besalisco.

-¡Eh! no...no es lo que piensas. No estaba mirándote de forma pervertida mientras dormías...es solo que iba a despertaros para enseñaros esto.

Dijo, nervioso. Pegó tal vozarrón que hasta Apple e Irella despertaron. Apple tenía la mejilla pegada al hombro de la cazarecompensas hasta ese momento, ambas acomodadas en una esquina de la habitación. No había rastro del pistolero, así que Chopper se asomó a la puerta, con prisa.

-¡Wazn, ya lo tengo!

Anunció, antes de volver a la silla. Alguno de sus empleados gruñeron por el ruido al ser molestados mientras dormían entre la chatarra. A Chopper se le notaba falto de sueño y con sobredosis de mandalorian power, pero ahí lo tenía, el archivo estaba descifrado. Salía un extenso archivo sobre un Nikto, por las fotos que mostraba de él.

-Os habéis metido en un buen fregado. Por lo visto, estos datos son una especie de albarán de...el sol negro.

Ese nombre pone los pelos de punta a cualquiera, incluyendo sudores fríos y temblores en el espinazo. No en vano, era la mayor y más peligrosa organización criminal de la galaxia, más allá incluso que el cartel Hutt. Y habíais intercambiado disparos con ellos.

-Parece que los Pyke contrataron a este cazarecompensas por encargo bajo un alias para que eliminara a un contrabandista que movía mercancía de dudosa legitimidad del borde exterior a Coruscant y así poder robar su cargamento de especias para los Pyke. Lo hizo bien, pero el cargamento jamás llegó a manos del sindicato, haciéndoles perder mucha pasta por ello y por eso os han contratado, tenían las sospecha de que se lo había vendido a otro comprador y que en estos archivos saldría a quién...y tienen razón. Se los ha vendido al Sol negro.

Hizo una pausa para masajearse el mentón y se quedó mirando un rato la foto del nikto.

-De hecho, lo conozco. Ha venido por aquí varias veces a venderme deslizadores. No le pregunto de donde vienen, me lo vende a buen precio y no hay nada más que hablar, ya sabéis. Suelo tener que limpiar manchas de sangre, pero en fin, es el negocio. Según el archivo se llama Kaa´tos Leeachos, aunque por aquí se le conoce como Kern Arg´ast, menudo bastardo.

Negó con la cabeza y siguió leyendo.

-El sol negro ha elaborado un buen informe sobre él. Parece que era esclavo de los Hutt, pero desde que obtuvo su libertad, se ha estado ganando una reputación en el mundillo de los cazarecompensas al cobrar varios trabajos no autorizados de alto riesgo. Experto en trampas y muy letal...

Chopper tocó la pantalla con los dedos y miró grave al grupo.

-Este tío sabe lo que se hace. Es peligroso. Y el sol negro también.

El besalisco se puso en pie, dejando la computadora visible para todo aquel que quisiera investigar más. Anduvo hasta la mesa y cogió el comunicador.

-Tengo que informar a Bax, lo entendéis ¿verdad?

La voz del besalisco hizo que el cuerpo se me agitase de golpe. Entreabrí los ojos y vi a la piloto a mi lado, que parecía tener la cara apoyada en mi hombro. Me levanté apoyada en la carabina para ver lo que Chopper había conseguido, por el tono de sus palabras parecía que había malinterpretado sus acciones. La conclusión al despertar era que el besalisco, amigo de Apple, tenía más relación con Bax, los Pyke y la misión que nos habían asignado de lo que había pensado en un momento. Maldije automáticamente la vida casi ermitaña que había llevado con mi padre y recompuse mis pensamientos antes de dirigirme al terminal esperando ver cualquier cosa alarmante.

En ese momento Chopper comentaba por encima lo que había bajo todos esos datos cifrados, el Sol Negro estaba detrás de todo aquel despliegue por parte de los Pyke.

- Buen trabajo y gracias - le dije mientras miraba a la pantalla y dejaba que prosiguiera con su explicación.

Habernos visto involucrados con el Sol Negro era preocupante, pero para nada inesperado, toda organización criminal acababa teniendo líos con ellos, y tarde o temprano iba a suceder, sobretodo desde que tuve que deberles el favor a los Pyke.

Me armé de valor y atendí al resto de la explicación. Al parecer, el protegido de los Pyke frente al Sol Negro no era otro que un cazarrecompensas nikto que había servido a la familia en un trabajo de intercepción de mercancías provenientes del borde exterior. Al parecer todo esto cabreo a los "legítimos" dueños, el Sol Negro.

Comencé entonces a repasar mentalmente en mis recuerdos si alguna vez me había cruzado con esa cara, algún recuerdo que tuviera al recoger alguna misión, al entregar alguna presa. No podía ser tan difícil, aunque no fuera muy dada a relacionarme con los demás compañeros de profesión.

- Si el Sol Negro va tras la pista de este cazarrecompensas nikto más nos vale entregar la información rápido, cuanto más tiempo nos busquen más reforzarán su trabajo - dije.

Al oír la voz de Chopper Wazn salto como un resorte. Mientras guardaba sus pertenencias y volvía a colocarse el casco pensaba en los sueños que le habían atormentado, agradecía que le hubieran sacado de ellos.

-¿Qué tenemos? Dijo mientras hacia un simple saludo al resto. Parecía que todos habían descansado y tenían mejor cara. Todas menos la suya, esa tenía difícil arreglo.

El pistolero escucho atento la información que había extraído Chopper, ese alíen al final había resultado fiable y útil tal como habían dicho las chicas, quizá le debía una disculpa, pero otras cosas mas importantes estaban en marcha.

-Entonces ese cazarecompensas, Nikto o Kern Arg'ast, seria un buen hilo del que tirar para saber algo más. Dudo que encontrar al Sol Negro sea más fácil, aunque ellos sean quienes tienen la mercancía que tenemos que recuperar. El pistolero hizo una pausa. - En cuanto a Bax, avísale, porque esto es tan jodidamente gordo, si lo conseguimos, creo que merecemos cancelar nuestras deudas con el sindicato.

Wazn sabia de la magnitud que había alcanzado el trabajo, pero aquella era la mejor oportunidad para escapar de las garras de los Pyke que se le había presentado en mucho tiempo y estaba dispuesto a correr el riesgo.

- Chopper ¿no hay nada más? ¿donde podemos encontrar al cazarecompensas? Se detuvo antes de seguir preguntando. - Por cierto. Empezó diciendo con trabajo. -Te pido perdón por como me puse antes, no todos los días a uno le persigue el Sol Negro, entre aquí algo tenso. Wazn tendió su mano a Chopper esperando que aceptara sus disculpas.

Cuando despertó no pudo evitar fijarse en la mirada de lasciva de Chopper.Sonrió mientras negaba con la cabeza y terminaba de levantarse.

-No pasa nada, se puede mirar, pero no tocar- y le guiño un ojo de manera pícara.Tras esto, siguió al mecánico chatarrero, parecía emocionado y preocupado por partes iguales.Observó aquella pantalla, todos esos datos subiendo sin parar, acompañado de las palabras preocupantes de Chopper.

-Sol Negro....vaya, hemos dado con algo gordo de verdad.Llama a Bax, si, esto puede cambiar las cosas drásticamente- se mordió el labio mientras sus ojos seguían mirando a la pantalla, hipnotizada por la información que contenía.No tenía ni idea de informática, y todo aquello le venía grande, pero al menos tenían lo básico para continuar con el trabajo.

-No sé que podrá ser la siguiente parte del trabajo, pero algo es seguro, no será fácil- comentó a sus compañeros mientras aclaraba aún sus ideas.

-Parece que ese cazarrecompensas es la clave.No creo que sea sencillo llegar hasta él...mmhmmhm- finalmente se desperezó, estirando sus brazos hacia arriba y encorvando la espalda hacia atrás y luego hacia los lados.

Se despertó de golpe y porrazo, no sabía donde estaba, hasta que vió a Chopper enfrente y ya recordaba donde se encontraban. Pero estaba muy a gusto, y aunque Irella se quitara, se acurrucó de nuevo, pensando que toparía con alguien o algo al acurrucarse, pero al final se terminó dando un buen golpe en la cabeza.

- Auu..

Decía mientras se frotaba la cabeza, ahí empezó a prestar atención a lo que decía Chopper. Este empezó a hablar y parecía que desconectaba por completo, que no se enteraba de nada, porque le miraba fijamente. Pero cuando dijo ciertos nombres, en su cara se vió el horror de oirlos.

- Estamos muertos!! Como nos pillen estamos muertos!!

Se puso muy nerviosa, el Sol Negro le asustaba mucho, más que Bax que aunque la regañara continuamente, no la haría daño, o eso cree ella. Pero esa gente es a otro nivel, y ya lo habían demostrado anteriormente, pero al no conocer su nombre parecía menos grave.