Partida Rol por web

Buzz, esta entre preocupado e indeciso. Hay otro garromeano en la tripulacion de la nave pirata, y si bien el compatriota quiere matarlos a ellos tambien, el instinto de conservación de la especie es mas fuerte que el instinto de conservacion propio. Los lazos de sangre son fuertisimos entre los garromeanos.

Voy a intentar algo,  le dice Buzz a Jenks. Toma esto, es en caso de que me pase algo. Cuando retira su mano de la de Jenks, el humano ve una roja granada de plasma. Es preferible morir a que nos capturen vivos.

Luego se da vuelta y se suma a la pelea. Corre agachado para evitar los disparos de los biosoldados (y los escombros) acercandose al gamorreano caido. Apunta con su sistema de punteria y dispara su laser contra las piernas del biosoldado que esta aplastando al compatriota. Bingo! dice.

Jenks asiente con la cabeza y se queda dubitativo, mirando la granada.

Acompañado de un refulgor dorado, el laser de hombro dispara y debido al recalentamiento la intensidad del mismo se acentúa sensisblemente. La linea de fuego atraviesa el aire y corta las piernas del biosoldado como si fuesen de mantequilla. Las rodillas humean un vapor extraño y mientras las pantorrillas se mueven hacia un lado, el resto del pesado cuerpo cae hacia el otro. Nisiquiera cambia la expresión del biosoldado cuando, una vez sin puntos de apoyo suelta al garromeano con los brazos y se desploma violentamente. Agujereado por diversos sitios, soltando ese pus blanquecino que parece ser su sangre, sin piernas, y sin embargo, sigue moviéndose arrastrándose cansinamente por el suelo intentando llegar a ninguna parte.

El garromeano se queda mirándote y cae de culo al suelo, con la escopeta a un lado. Su expresión es de consternación y asombro. Los lazos de unión de la especie, las constumbres del pueblo común, los recuerdos de la infancia en la aldea de chozas de caña y sobretodo, el sentimiento de rabia ante el desprecio que los humanos muestran ante el pueblo garromeano aflora en ese instante.
Si el anciano filósofo Dandengo, al que tuvo la suerte de conocer personalmente, le viese ahora, intentado matar a un hermano y obedeciendo las ordenes de un humano, sin orgullo ni honor, le desterraría, le despreciaría igual que los hombres.
Violentamente agarra el "collar de mascota" que tiene alrrededor del cuello y lo tira violentamente a un lado.

-Yo no soy Bluewater, ¡Soy Dundee! Malditos nombres humanos. -Murmura el garromeano.

Incluso Buzz tenía uno en el que Samus constaba como su "responsable". La adminsitración burocrática de la Dart.Corp determina que un garromeano, por su inferior inteligencia, necesita estar al cuidado de un hombre si quiere salir del planeta Shaigón. Claro que Buzz sabía lo que pensaba Samus y no se lo tomaban más que com un tramite burocrático. Pero... ¡Cuantas veces le habían echado de un local y la policía militar le había llevado a la dirección que se indicaba en el collar! ¡Cuantas veces le habían dicho a Samus que no dejase suelo a su cerdo!

En ese instante el biosoldado moribundo termina de exalar su último respiro, al parecer pueden morir. Pero un zumbido sale de su cuerpo y de su espalda, pues está boca abajo, empieza a emerger un bulto. Bluewater mira extrañado y el bulto, al alcanzar su máximo, revienta la piel y la ropa como un grano gigante. Del hueco emerge una especie soporte de hierro delgado en cuyo extremo sostiene una pelota surcada por surcos.
Los surcos empiezan a parpadear aumentando la cadencia cada vez más rápido.

-Va... va a ¡estallar!

-¡Maldito cerdo! ¡Que pasa ahí! ¡¿Estás tomando el té?! -Grita la lider mientras dispara desde su cobertura al otro extremo de la sala. Su voz aguda resuena por encima de los disparos y el loro que lleva al hombro cacarea un par de veces.

David Bluewater "Dundee" te mira de un forma muy significativa, después mira el cadaver del biosoldado y luego a la bomba. Estáis a unos tres o cuatro metros. Sin decir ni una palabra se abalanza sobre el cuerpo despedazado, lo echa a un lado y se tumba sobre él con la bomba debajo de la barriga, cuando la cadencia es ya muy rápida.

Todo se llena de humo en un instante y por la fuerza de la explosión una mano te da en el casco y cae a tus pies. La cortina de humo es densa, y como en el interior de una nave espacial no corre el viento tardará en disiparse. En el resto de la sala los disparos se detienen un instante ante el ruido y la confusión, pero pronto se reanuda el tiroteo.

Buzz se levanta horrorizado el visor de su traje. Esta todo rojo! Es la sangre de él! Rapidamente, como un instinto, se pasa una mano por el visor, a la vez que se corre para atras, intentando separarse de los restos del garromeano.

Me salvo a mi... Ha saldado mas rapido de lo que pensaba la deuda que contrajo. Mira a los bio soldados, mira a los piratas, de nuevo a los biosoldados, y les grita!

BASTARDOS!!! COPIAS DE HUMANOS!!! No valen ni el metal del que estan hechos! Buzz esta muy enojado.

Enojado consigo mismo sobre todo, por pensar que los enemigos mas mortales serian los piratas, y se da cuenta tarde de que no es asi. Los biosoldados son el verdadero enemigo. No se van a rendir jamas, y ni muertos termina su empeño por acabar con la vida de otros.

Buzz, entonces, comienza a disparar contra los biosoldados. Mira hacia la capitana pirata, y le grita: TENGA CUIDADO! SON BIOSOLDADOS y AL MORIR EXPLOTAN! (se imagina luego que habra pensado ella al ver a otro garromeano, en armadura, y todo manchado de sangre, gritandole cosas) Ahora, no importa.

Luego le apunta a la capitana de los bio soldados y dispara una granada de fusion al lugar donde se encuentra ella.

Nota: cabe aclarar que la granada de fusion no estalla si se encuentra cerca del presinto de seguridad que la inactiva, a menos que se instrodusca un codigo especial. Es para evita accidentes.

La granada sale disparada dejando un rastro carmesí brillante del material trazador*, y cruza volando la distancia que la separa de su víctima.

Pero Lieutenant, la lider de los Biosoldados se anticipa, le lanza una mirada asesina a Buzz desde donde está y justo antes de que le alcance el explosivo, salta a un lado, mostrando su esbelta y ágil figura.

Tras rebotar dos veces contra la superficie de una de las consolas y caer del lado en que se cubren los soldados máquina, una bola de fuego rojo de tres metros de diámetros se expande sin hacer mucho ruido y desintegrándolo todo a su paso, matando hasta a las bacterias del aire a una temepratura de un millón de grados centígrados.

Uno de los biosoldados cae destrozado a un lado, pues la explosión le da de refilón y la consola de mandos, que funcionaba a modo de trinchera en ese momento, y el suelo, se funden en un charco de metal humeante que, al enfriarse deja una horrenda masa. La temperatura general en el puente de mandos aumenta.

"Reordenar prioridades: Batalla inútil, enemigo desconocido que no representa una amenaza seria. Salvar mi estado físico para continuar con el plan previsto. Sacrificar las unidades estandart. Prioridad número uno: salvar el grueso del ejército."

Lueutenant se levanta de nuevo y se cubre cerca de la compuerta blindada, la salida más probable.

Basilea Douris, la lider de los tripulantes del Nautillae te mira de reojo... y sonríe. Después sale de su escondrijo y le descerraja un cargador entero al enemigo más cercano, que se combulsiona por los impactos, mientras grita las ordenes a sus subordinados.

-¡Inutilizadles los miembros! ¡Desarmadles! ¡A la carga! El loro que llevaba al hombro sale volando y sobrevuela la batalla trazando círculos en el aire, cerca del techo del puente.

Un segundo antes, los biosoldados, siguiendo órdenes del sujeto Lieutenant, se habían desecho de sus armas, que al fin y al cabo apenas tendrían munición o estaban inservibles (dado que los soldados-máquina nisiquiera se habían tomado la molestia de cubrirse y no habían dejado de disparar todo el rato) y se habían echado al combate cuerpo a cuerpo, de forma suicida y desorganizada para permitir escapar a su lider.

Cuando los asaltantes salen de sus cobertura y empiezan a disparar contundentemente, (aprovechando la superioridad que proporcionan las armas de fuego), en lugar de una retirada del enemigo, se encuentran con que se activan sus bombas interinas y que siguen avanzando, absorbiendo gran cantidad de daño, deformandose sus estructuras físicas por los impactos de las balas y surgiendo de sus pechos lso terribles explosivos.

Mientras, Lieutenant se acerca a la compuerta blidnad y pulsa el control de apertura...

-¡¡¡¡iiiiiiiyyyYYYYYYYYYYAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAARRRRRRRRRRRRRRRRRRGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGG!!!!!

Grita el enorme tipo moreno, de dos metros de altura, cuando salta fuera la trinchera y, haciendo caso omiso de los disparos, agarra con todas sus fuerza al biosoldado que estaba apunto de saltarle encima, uno que ya había perdido la cabeza por un disparo fortuito y tras alzarlo en bolandas sobre su cabeza, lo tira lejos.

El cyborg asesino atraviesa el aire como un maniquí y justo al estrellarse contra la pared de enfrente, a unos metros de allí, estalla su bomba interna desprendiendo algunos trozos de espuma blanca y enegreciendo el metal con una llamarada rojiza.

Escuchas a Nakon por la comunicación: -¡Buzz! ¡Hay que sacarte de ahí! ¿Ves alguna salida? Creo que podemos agujerear la pared de espuma, pero... ¿estarás a salvo? ¡Olvida a ese traidor de Jenks si es necesario!

Buzz mira a la capitana de los biosoldados. Se esta por escapar la maldita perra! Nuevamente Buzz activa la ultima granada que tiene y la arroja, intentando apuntarle de nuevo a ella.

Pero tal vez una vieja armadura de combate no sea el elemento mas preciso para arrojar granadas. Al escaparse de sus manos, ve que no se dirije al sitio que él habia querido, sino que se desvia un poco. Ante la duda, se agacha y se cubre las dudas.

En esa posicion, escucha la transmision de Nakom, y le alegra saber que sus amigos no lo han abandonado.

La granada se desvía de su camino y por un mal cálculo acaba rebotando entre las consolas de mandos del lado de babor, donde estalla en una tormenta de fulgores dorados y se repite el proceso anterior, funde el acero, corta cables, destroza componente e inutiliza ordenadores, pero sin nadie cerca.

Completamente indemne, Lieutenant, pulsa de un manotazo el boton de apertura de la compuerta blindada y ésta se abre con sonidos mecánicos. Arrodillada para cubrirse de las posibles balas perdidas y para no ser un objetivo fácil, observa, postrada ante el mecanismo, cómo las láminas de acero y cristal se apartan a los lados tiradas por pesados gozones industriales. Cuando al fin se desbloquean los seis niveles de seguridad, cuando se pliega el último de ellos, una extraña figura aparece al otro lado, de pie, del tamaño de un hombre que permanece ergido en toda su estatura.

Pero en ese instante se activa un alerta roja, las luces blancas se apagan y el puente de mando se ilumina con una insuficiente luz roja. La figura desconocida queda entonces a contra luz, con los fosforescentes del pasillo central del Chamaleon a su espalda. Es un hombre, y sujeta algo entre sus brazos, pero tansolo se distingue su contorno y no eres capaz de determinar quién es.

Los últimos coletazos de la confusión de la batalla se apoderan de la escena y mientras la megafonía de la nave transmite el mensaje explicativo de la alerta, los últimos biosoldados estallan acallando sus palabras y destrozando lo que quedaba de los ordenadores del puente de mando.

Pero como la megafonía repite el mensaje continuamente, cuando los tripulantes del Nautillae salen de sus coberturas (donde se habían vuelto a meter para evitar las explosiones) y vuestra vista se adapta a la luz roja permitiendoos ver al fin a la extraña figura que espera en la compuerta blidnada abierta, escucháis las razones de la alerta roja:

-¡Daños graves en el control de estabilidad!¡Daños graves en el control de gravedad! ¡Daños graves en el control del reactor B! ¡Daños graves en el control del reactor C! ¡Daños graves en el control de la carga! ¡Incapacidad para reiniciar el sistema! ¡Perdida total de conexión! ¡Indetección del nódulo central! ¡Incapacidad para poner en marcha los protocolos de emergencias! ¡Perdidal del control de las cápsulas salvavidas! ¡Colapso de los reactores inminente!

Y mientras la voz mecánica de la primitiva IA del Chamaleon repite una y otra vez todos los fallos de abordo, Lieutenant retrocede ante la visión del hombre que corta su camino hacia la salvación.

-¡¡Altooo!! -Grita Madock desde la compuerta blindada, haciendo resonar su voz aguda y cansina por sobre el sonido de la alarma. Lleva el traje espacial recojido hasta la cintura y la corriente de aire creada al abrir la compuerta agita graciosamente su camisa hawaiana. En su cinturón, en lugar de una pistola, cuelgan sus chanclas playeras y sus eternas gafas de sol le tapan los ojos.
Pero lo más extraño es que, sobre su cabeza, con los brazos extendido temblando por el peso, alza una especie de tarro lleno de líquido, una suerte de contenedor siniestro que parece salido del mismo laboratorio de la Dart. Corp. que los biosoldados. ¡El recipiente contiene una cabeza humana!

-¡Bajáme de aquí! ¡¡Pelotudo!!*

Capitan! evacuen la nave!, El charmeleon esta por estallar! A menos que Alfie pueda ayudar en algo. La IA de la nave no puede controlar el reactor. Creo que fui yo. La nave hará colapso en bre...

Buzz escucha un ruido, y se queda mudo, sin poder articular palabra. Lo que estan viendo sus ojos... es algo que no esperaba.

Ese que esta ahi es Madok? dice aun por el comunicador. Por fin aparecio el muy idiota... pero que carajo lleva encima?... Parece una cabeza humana, pero en un frasco... Luego reacciona, y le dice a Nakom: Capitan, aparecio Madok, la nave esta por estallar, encontrare la forma de salir de aqui, no se preocupen.

Corta el comunicador, y se levanta, intentando pasar desapersivido. Se acerca a Jenks y la capitana. Vamonos de aqui! le susurra a Jenks.  Con cuidado y despacio... Levanta a la capitana con sus brazos, y comienza a caminar con determinacion hacia la nave pirata.

Todo el mundo se queda quieto, mirando a Madok. Pero los tripulantes del Nautillae reaccionan y le apuntan con sus armas mientras tu llevas a la capitana en brazos y Jenks te siguen sujetando con fuerza la granada, el pobre hombre nunca había sido muy valiente.
Pero apenas dáis un par de pasos cuando MAdok te interrumpe.

-¡Buzz! ¡Pedazo de Zoquete! -Grita. -¡¿Donde carajo vas, pero no ves que te estoy salvando el pellejo?! ¡Ven aquí tío, nos largamos!

-¡¿Dónde estás Fergus?! ¡Teníamos un trato!

Ya estas cerca de la plataforma de la escotilla del Nautillae cuando una risita, que empieza en un tono muy bajo, se acrecenta y te eriza los pelillos de la nuca.

-u, u, u, j, u, ju, ju, ju, jua, ¡jua, jua, jua! ¡JUA, JAJAJAJA! -Ahim Fergus, el mafioso barrigón que domina los barrios bajos de Nueva Jamaica, el dueño de los hoteles de superlujo "Fergus-On", el inmoral señor de la guerra de bandas, desciende la plataforma del Nautillae. -Aquí estoòoy Madok, sabíiia que me la jugaríiias de una forma u oòotra -Tira con su brazo izquierdo, y de entre las sombras aparecen él, y una hermosa muchacha a la que sujeta violentamente por el cabello de color azabache. Ella cae al suelo, arrodillada a los pies del seboso lascivo. Es evidente que está cansada y que la han golpeado.

-¡hay! -... -¿Mad?

-Bajad las armas chicos, ese es el agente infiltrado. ¡Ja! Así que para eso era la chica.

Los piratas bajan sus armas y se disponen a recojer a sus heridos y largarse rápidamente. Mientras, Lieutenant, aprovechando la situación se levanta y sale corriendo por el pasillo por el que ha aparecido Madok, que parece ser la única salida aparte de la fragata pirata.

Buzz se detiene un momento, y mira a Madok con desconfianza... La escena se le ocurre patetica, pero tal vez funcione. Abre un canal privado con él, el que usa con toda la tripulacion de La sombra.

Madok, infeliz, mas te vale que ese intercambio funcione. No sé quien sera la chica esa, pero mas te vale que no nos abandones a la primera de cambio, porque ya veras lo que te sucede en ese caso.

Buzz se gira y le dice a Jenks le siga la corriente en todo lo que haga. Luego mira a la pareja que se asomo en la nave Nautilae, y le dice con desprecio al gordo. Me parece que entiendes como es el trato, no?  Nosotros tenemos tuyo, y nosotros tenemos algo que nos interesa... Sin mirar a Jenks, le dice: Jenks, si alguien quiere disparar o hacer raro, tu le arrojas la granada a este gordo, No creo se le pueda fallar.

Se acerca unos pasos a la pareja, con la capitana en brazos, y le vuelve a decir al gordo. Entrega a la muchacha y todo sera sencillo. Luego podran recojer su "pecera" del otro lado.