Partida Rol por web

Specus Vespertilionum

Pars IV

Cargando editor
30/01/2013, 23:24
Teodorico

Sigo cantando mientras acelero un poco el paso, y me decanto hacia el lado derecho del camino...

-¡¡¡O no tiene un real, o no tiene un reaaaaaaal!!!

Deslizo la daga y la empuño con la mano ocultándola.

- Tiradas (1)

Motivo: tormento

Tirada: 1d100

Dificultad: 87-

Resultado: 52 (Exito)

Cargando editor
31/01/2013, 10:31
Pedro

- ¿Y a ti qué te importa? -Le grito al guardia apartándome más de él.

- Tiradas (1)

Motivo: Tormento

Tirada: 1d100

Dificultad: 105-

Resultado: 75 (Exito)

Notas de juego

Muy raro... :S

Cargando editor
31/01/2013, 11:00
Ramiro

Notas de juego

Yo creo que quien tiene +75 a tormento es el guardia, y no nosotros...

Cargando editor
31/01/2013, 11:02
Pedro

Notas de juego

Eso me pegaría más ;)

Cargando editor
31/01/2013, 18:02
Director

Notas de juego

Lo de tormento/tortura era una broma xD

Cargando editor
31/01/2013, 19:34
Teodorico

Ya un poco decantado hacia la derecha y en el camino después de dar el recital que aprendí una vez en el burdel del pueblo, comienzo a andar arro dando unos saltitos, y grito:

-¡que me meooo!, ¡meada comunal!, hermanos, vigiilad conmigo que no vengan animales...

Necesitábamos ganar uno o dos asaltos para preparar un plan.

 

Notas de juego

Ya decía yo que el modificador era de lo mas generoso... :D:D:D:D

Cargando editor
31/01/2013, 22:57
Director

Notas de juego

Por cierto Teo, tira un Ocultar (Hab) con un un bonus +50% (por la oscuridad) por el asuntillo de la daga.

Cargando editor
31/01/2013, 23:04
Teodorico

Apoyaba la mano armada contra mi abdomen para que no se viese el brillante filo a la luz de la luna.

- Tiradas (1)

Motivo: ocultar

Tirada: 1d100

Dificultad: 70-

Resultado: 56 (Exito)

Cargando editor
31/01/2013, 23:08
Director

Vuelve aquí y para el escándalo de una maldita vez , desgraciado. Y vosotros, ni se os ocurra seguirle. Vamos a llegar ya al cementerio, allí vamos a aclarar todo tranquilamente, ¿verdad que sí? —dice el guardia, en realidad nada tranquilo con  la extraña actitud de Teodoro.

Repentinamente, saliendo de detrás de una casucha, hace aparición una nueva pareja de soldados del noble, alertados claro está por todo el ruido que arma Teodorico. Casi parece que el señor haya sacado a pasear durante la noche a todos sus perros por miedo a represarías de los campesinos.

¿Qué diablos pasa? —pregunta el más rechoncho de los dos, antorcha en mano—. Pensábamos que se trataba de algún borracho, no de unos críos. Es una noche delicada, tenemos orden de matar a todo aquel que deambule.

No sé qué mierdas pasa —contesta vuestro acompañante antes de escupir al suelo una flema—, pero me huele muy mal. Traman algo y han mencionado no se qué de Gregorio y una cabeza. Joder, están cubiertos de sangre, puede que hasta hayan matado a alguien.

Es curioso —dice el tercero, de piel morena y cara picada por la viruela—. Justo antes de la noche nos encontramos con Gregorio. No le prestamos demasiada atención en su momento, pero parecía algo excitado. Bueno, hablad de una puta vez. ¿Qué está pasando?

Cargando editor
31/01/2013, 23:59
Ramiro

Harto de tanta tontería, no puedo más, y al final, lo sueto—. ¿Que qué pasa? ¿Y por qué no se lo preguntáis a Gregorio? ¡Es él, y su extraña bestia la que ha formado todo este lío! ¡Fue su extraña criatura la que mató al hijo del señor! Si queréis sabed qué está pasando, venid con nosotros a buscarle. Es él quien tiene que dar explicaciones, y no nosotros.

Tras el arranque, fruto de la ira más que de la cabeza fría, añado—. Claro qué, seguro que lo quiere ocultar todo. ¡Queríamos pillarle por sorpresa, pero ahora será imposible! ¡Tenemos que darnos prisa!

Notas de juego

Hala, de perdíos, al río.

Cargando editor
01/02/2013, 09:11
Pedro

Aquello iba de mal en peor. Ahora la escolta que llevábamos camino del cementerio había aumentado y un par de guardias más se unían al grupo.

Me quedé blanco como la cera e incapaz de dar un paso más al oír a mi hermano soltar la verdad de aquella forma.

- Pe-pero... Pero... Ramiro... -Fui incapaz de articular cualquier otra palabra. Ahora sólo había que esperar y rezar para que a aquellos guardias les entrara la curiosidad y quisieran interrogar al sepulturero.

Cargando editor
01/02/2013, 12:58
Teodorico

Se me corta la meada al escuchar a Ramiro contar todo, y espero disimulando delante del tronco mientras guardo el cuchillo otra vez, y cojo el macuto en la mano, por si hay que lanzarlo lejos...

Cargando editor
01/02/2013, 17:21
Director

Notas de juego

Haz una tirada de elocuencia Ramiro.

Cargando editor
01/02/2013, 17:22
Ramiro
- Tiradas (1)

Motivo: Elocuencia+Suerte

Tirada: 1d100

Dificultad: 60-

Resultado: 91 (Fracaso)

Notas de juego

Aclaro que gasto suerte en la tirada, para que veas que no hago trampas :P

Cargando editor
04/02/2013, 12:26
Director

El soldado que os acompaña se ríe notablemente ante la explicación de Ramiro y le insulta llamándole pésimo embustero. Sin embargo, uno de los nuevos presentes, el más rechoncho, le interrumpe antes de que se lance a por vosotros.

¡Quieto Lázaro! Puede que haya algo de verdad en sus fantasiosas palabras. Fue precisamente Gregorio quien denunció que vio el cuchillo de Don Fernando en la casa del albañil que tenemos apresado. Aquí hay demasiadas coincidencias.

—¿Quiénes son vuestros padres? ¿Por qué os habéis metido en esto y qué pruebas tenéis? —dice el tercero, el de piel morena, algo desconfiado.

¡Están mintiendo joder, os lo digo yo! —dice rabioso Lázaro, que ya no trata de guardar las apariencias de calmado—. ¿Vamos a joder a uno de nuestros informadores por las palabras de un crío sin ninguna prueba? ¿De verdad os vais a creer ese cuento? ¡Dejádmelos un ratito y ya veréis como sueltan toda la verdad!

Acto seguido el guardia rechoncho, que parece que tiene el liderazgo, manda a Lázaro a buscar a su compañero para evitar el conflicto inmediato y así ser cuatro por lo que pueda pasar.

¡Qué te den por culo Ramón! —escupe furioso Lázaro antes de echar a correr a buscar a su compañero.

Cargando editor
04/02/2013, 20:03
Ramiro

Ignoro al guarida que nos tacha de mentirosos, para centrarme en los que me creen. Así, digo a estos—. Nosotros somos los hijos de ese albañil. ¡Nuestro padre es inocente! ¡Si ni tan siquiera nos ha puesto la mano encima! ¡No haría daño a nadie!

¡Y Claro que tenemos pruebas! ¡Esa cosa nos atacó! ¡Casi abre la cabeza a nuestro hermano! —digo señalando a Pedro—. Pero pese a todo, estábamos preparados... Teo, enséñaselo... Estaba en la Cueva de los Murciélagos. ¡El enterrador lo estaba criando allí! ¡Él es el culpable de todo! ¡Si no está en su casa, estará allí! ¡Tenemos que ir rápido!

Cargando editor
04/02/2013, 23:47
Teodorico

Me abrocho el pantalón como puedo, y me acerco despacio, estirando el brazo en el que llevo el macuto, ofreciéndoselo al guardia.

Estiro el brazo al máximo por si quiere agarrarme y darme.

-Aquí tiene su merced.

Cargando editor
05/02/2013, 17:30
Pedro

Asiento con la cabeza a todo lo que está diciendo mi hermano, mientras le muestro al soldado la cabeza vendada.

- Es verdad... casi no lo contamos.

Cuando llegó Teo con el macabro cargamento, señalo el saco con el dedo.

- Mírelo usted, mírelo... y ya nos dirá si mentimos.

 

Cargando editor
07/02/2013, 19:59
Director

Ramón agarra la bolsa manchada sin decir palabra y la abre para descubrir la horrible cabeza que guarda en su interior.

¡Santo Dios! —dice dejando caer la bolsa al suelo y santiguándose. La cabeza sale rodando, quedando libre y a la vista, mostrando su demoniaco aspecto—. ¡Hay que avisar en el castillo! ¡Y que despierten al cura!

El otro tipo guarda la prueba con cierto temor y echa a correr con ella en dirección al castillo. Al poco rato regresa el soldado que no os creía junto con su compañero. Aún después de explicárselo sigue sin creérselo, pero accede de mala gana a ir a ver qué tiene que decir el enterrador de todo esto.

Vosotros no vais a venir —os comunica Ramón con tono autoritario—. Se os llevará a vuestra casa inmediatamente y esperaréis ahí sin salir hasta que se os llame. Puede que eso sea mañana a primera hora, o durante el resto de la noche, no lo sé —hace una pausa pensativo y le da un golpecito en el hombro al guardia que rato antes estuvo con la moza—. Ya has oído, llévales a su casa y espera allí, es donde se encontró la daga.

Cargando editor
07/02/2013, 20:22
Ramiro

¡No! ¡nosotros podemos ayudar! ¡de verdad! ¡por favor, dejadnos ayudar! ¡tenemos que liberar a padre! —grito al guardia, pero estoy seguro de que no me hará ningún caso. Será mejor que nos movamos para casa, antes de que empeoremos mucho más las cosas...

- Tiradas (1)

Motivo: Elocuencia

Tirada: 1d100

Dificultad: 60-

Resultado: 100 (Fracaso)

Notas de juego

JODER, QUÉ PEDAZO DE PIFIA...