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SS Era Mitológica: La Guerra de Ares

B:S01E01 - Bienvenidos jovenes guerreros!

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31/03/2011, 17:05
Director

Hoy Presentamos: Bienvenidos al Santuario, Jóvenes Guerreros! 

 

El puerto es pequeño, tan solo un muelle de madera blanqueado por el sol y los pies bajo el fuerte sol de la primavera del Mediterráneo. Al levantar la vista, el destino inunda los ojos: 

El Santuario. 

Artemias avanza con su pequeño bolso al hombro. A pocos metros ve a otro grupo de chiquillos, y un hombre alto y flaco que le hace señas para que se acerque.

El hombre se identifica como Eleas. Con un movimiento de manos acalla las preguntas, y los invita a seguirlos. Comienzan a caminar tras él, dejando atrás a los trabajadores del pueblo.

Ligeramente apartada camina una niña. A todos les sorprende, pues les han dicho que no se admiten mujeres en el Santuario, excepto como sirvientes. Seguramente su historia será particular...

Notas de juego

Historia: El Origen. Oportunidad de Post Ejemplar!

Si el siguiente post es elaborado, contando con flashbacks incluso la historia pasada de los personajes mientras se presentan (la audiencia tiene que conocerlos!), ganará 1 puntos de experiencia extra. 

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31/03/2011, 20:12
Artemias

Mientras caminaba me sorprendía por la forma en que había llegado allí, atravesando el desierto solo, con apenas comida, pero con la fortaleza necesaria y el espíritu que me había inculcado mi maestro…Alcides, un hombre que podría parecer vulgar o rustico, si, pero con un corazón de oro y dispuesto a llevar el nombre Aldebarán algún día, esperaba con ansias el futuro de poder llamarlo así y luchar a su lado.

El armadura de Escorpio era mi meta, pero debía empezar desde abajo Unicornio fue mi elección y lucharía incluso a muerte por lograr mi sueño.

En mi mente venían recuerdos lejanos de cómo fui vendido como esclavo casi sin saber quien era o que debía hacer, como sea buena mujer me enseñaba a escondidas a pesar de la reprimenda o golpizas de su cruel marido, la vez que le pague su bondad y cariño librándola de aquel infeliz y como ella, agradeciéndomelo sin palabras me llevo a mi maestro.

Ahora era otra persona, mi maestro me había enseñado sobre el cosmos, sobre la vida y sobre los dioses y Athena, me jure a mi mismo con sangre en aquella ocasión proteger a esa diosa y a este mundo de lo que fuese, solo mostraría mis sentimientos a aquellos que fuesen dignos, solo compartiría mi meta a aquellos que se ganen mi confianza, no venia a hacer amigos, venia a cumplir mi destino, destino que yo mismo tenia pensado forjar.

Estaba cerca, podía sentirlo, elevando mi mente y me corazón a Athena rogué por su protección, mientras continúe caminando tranquilamente siguiendo a Eleas, esperaría el momento para hablar cuando se le indicase, por ahora, la única dama presente tendría la prioridad, después de todo, Nerea la mujer que lo educo, le había enseñado  a ser un caballero…

Notas de juego

Post ejemplar: hubiera estado bueno esforzarse un poquito más, es apenas suficiente: 1pt 

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31/03/2011, 23:37
Sadalsuud

Los fríos de Siberia me habían preparado para lo que fuera, cuando fuí prácticamente adoptado por Deneb, un guerrero de los hielos quien me halló tirado literalmente en el frío suelo siberiano no esperaba que el destino me trajera hasta acá. Aunque ha sido tan poco tiempo siento que he crecido mucho más allá de lo que debiera en mi mente. Durante años, Deneb no solo fue mi maestro sino también mi mejor amigo, confidente y prácticamente la figura paterna que necesité por tanto tiempo.

Cuando el tiempo llegó, Deneb consideró que yo era digno de cuidar por Athena guardiana de la Tierra y asegurar que la vida no fuera jamás amenazada por ningún tipo de amenaza. Durante nuestros entrenamientos, mi maestro me contó la historia de Séleme y el mito de la gran constelación de la Corona Austral, mi constelación regente perteneciente a la vez al signo que según Deneb definía mi personalidad. Mi cuerpo se acostumbró al frío de Siberia, mis ropajes así lo demuestran.

Es por eso que apenas llegamos al clima mediterráneo cálido característico de estos lugares, he tenido que despojarme lo más que puedo de mis ropajes para poder soportar este calor. Aunque no es totalmente insoportable si es algo bastante duro, algo a lo que tendré que acostumbrarme pues según Deneb, he de venir aquí a mejorar y crecer como santo, buscar conseguir un ropaje sagrado y así proteger a la diosa Athena que según las leyendas está próxima a renacer si no es que ya lo ha hecho. Durante la caminata veo otros jóvenes junto a mí, parecen estar también maravillados de largos viajes que les han traído hasta acá - Vaya, espero que la competencia no sea tan fuerte como pareciera serlo, sin importar lo que ocurra yo obtendré el ropaje de Corona Austral y enorgulleceré a mi buen maestro - pienso para mí mientras camino en la mitad del grupo

Notas de juego

Post ejemplar: Apenas suficiente, al menos tenemos el nombre del maestro...: 1pt 

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01/04/2011, 00:41
Orrin

Mientras subo la cuesta pienso en las duras caminatas que mi maestro Xylon me tenía preparadas todos las mañanas al alba.

Cuando Xylon me encontró con apenas 5 años supo enseguida que tenía un gran potencial así que pidió permiso a mis padres para entrenarme. Con el visto bueno de mis padres nos fuimos a Rodas donde tuve unos duros entrenamientos. Desde entonces siempre tuvo en mente el momento en que se pondría la Armadura de Dragón.

Hasta ese momento tendré que entrenarme en el Santuario y parece que no estaré solo en este cometido.

Incluso hay una muchacha. Esto si que es nuevo. - pienso mientras sigo al hombre llamado Eleas.

Notas de juego

Post ejemplar: Solo te doy el punto porque estamos iniciando, pero posts así NO van a recibir experiencia extra, a esforzarse un poco más chico!: 1pt 

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01/04/2011, 02:00
Reyhan

La mirada siempre puesta en el firmamento divisando la morada de los Dioses, ese lugar tan anhelado y sublime para cualquier humano y el recinto de la finalidad de todo lo que fuimos, somos y seremos.

Poso suavemente mi mirada en el templo de la Diosa Atenea sin perder la vista en el firmamento. El susurro latente de su llamada tocaba mi corazón con golpes fuertes y sonoros, tal vez mas que eso, era el llamado o el sonido del destino. Arreglo mis cabellos rojos que se alborotaban con el flujo continuo del viento del santuario.

 

No puedo recordar la ultima vez que sentí esta alegría en mi corazón. Son anhelos y esperanzas los que me traen hoy acá. Son vientos que no proceden de la tierra ni mucho menos de los hombres. Son posiblemente...cartas del destino. 

 

detengo mi caminar para alejarme un poco del grupo de muchachos que seguían mi mismo rumbo. Observo rápidamente el lugar que acabo de dejar, que mas que ser solo un lugar, era una imagen mía, en la que dejaba mi pasado atrás para darle paso a un mejor futuro, uno que ya estaba escrito. Sonrío levemente al ver el tormentoso reflejo de mi pasado y sigo mi camino hacia mi presente.  

El sonido de los pasos de los presentes por las escaleras era lo único que se escuchaba, ninguno gesticulaba nada. Solo se podían escuchar voces que traían los vientos de las montañas, algunas alegres otras de calma, pero la mayoría significantes para cada uno en este momento de silencio.

Tal vez esa era la mejor manera de pasar la vida. Ya me había acostumbrado al silencio, tanto de los que habían pasado por mi vida como de el mio mismo. Solo muy pocos habían sido verdaderamente trascendentes en mi vida, solo muy pocos habían entrado en mi silencio.

 

Maestro... 

No recordaba su nombre, fue como si el mismo tiempo lo hubiera borrado de mi mente. Pero solo sabia que todo se lo debía a el, desde sus entrenamientos físicos, su cariño y respeto como padre putativo por un tiempo y sobre todo sus enseñanzas en el camino a lo verdaderamente trascendente. 

... ahora camino en la dirección correcta.

Sigo a todos los muchachos esperando con ansias las palabras de alguno de ellos.

Notas de juego

Post ejemplar: Bien hecho!: 1pt 

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02/04/2011, 00:44
Lucio

Le había resultado entretenido el viaje a Atenas a Lucio. Es que él siempre había vivido apartado de la gente, rodeado tan solo de ovejas y la compañía de una sola persona. Incluso cuando lo enviaban a comprar algo, esos momentos para interactuar con otras personas eran breves, y generalmente esas personas eran siempre las mismas. Posiblemente durante los días que duró su viaje había conocido y hablado con más personas que en todo el resto de su vida. Lucio estaba contento con esto, era algo nuevo para él y le gustaba, aunque también le desconcertaba un poco. Arthas, su maestro, le había advertido que había un mundo completamente distinto al que él conocía en Simino, la aldea donde se había criado. Que las personas no eran todas como las que conocía, pero Lucio jamás pensó que llegara a tal extremo. Del mismo modo que muchas personas intentaban ayudarlo de buena fe, muchas otras quisieron aprovecharse de su ingenuidad. Conoció ciudades más grandes de lo que podía imaginarse, donde la gente vivía apurada y parecía enojada todo el tiempo. ¿Se convertiría él en eso si permanecía mucho tiempo en Atenas?

Fueron cuatro los momentos que marcaron la vida de Lucio, de los cuales él recordaba solo dos. El primero fue cuando sus padres decidieron abandonarlo a su suerte, siendo tan solo un bebé. Lamentaba no haberlos conocido, pero más que nada para preguntarles qué los había llevado a tomar esa decisión. El segundo fue haber sido encontrado por Filippo, el pastor, quien nunca le permitió llamarlo "padre" aunque Lucio así lo sentía. El tercero fue conocer a Arthas, su maestro, con quien llevó en principio una vida similar a la que llevaba con Filippo, pero que luego comenzó a instruirlo en cosas que antes creía imposibles y no sabía que existían, y que solo poco antes de partir pudo llegar a comprender. Si bien Filippo le enseñó a Lucio cuanto pudo, fue Arthas quien además de enseñarle todo lo referido al combate, a Atenea y al Santuario, le enseñó a leer, escribir, distintos idiomas, geografía, historia, y demás disciplinas. Paradógicamente, el cuarto momento que marcó la vida de Lucio fue separarse de su maestro. Sentía que en esos pocos días había crecido años, que redescubría a su modo lo que Arthas le había enseñado al suyo.

La imagen del Santuario era imponente. A Lucio el corazón le latía con fuerza solo por saber que se encontraba a pasos de su destino, que conseguiría una armadura a la cual estaba ligado por cuestiones que iban más allá de lo terrenal, y que con ella lucharía por la paz y la justicia en la Tierra, y para proteger a la diosa. ¡Qué  orgullosos se sentirían Filippo y Arthas al verlo! No defraudaría su confianza. Junto a él habían varios muchachos más que parecían estar en una situación similar a la suya.

Un hombre alto y flaco de nombre Eleas invitó al grupo a seguirlo, evitando cualquier tipo de preguntas. Todos iban callados y Lucio, conciente de su falta de habilidades sociales, permaneció callado también, no quería parecer desubicado ni molestar a nadie. Comenzó a silbar, sin embargo, imitando el canto de los pájaros, y varios de ellos se acercaron a él y se posaron sobre sus hombros y brazos. De ese modo al menos se sentía más acompañado.

A quien ni los pájaros acompañaban era una niña que iba junto al grupo, pero manteniendo cierta distancia. Lucio se sorprendió al verla, pues no tenía aspecto de sirvienta y caminaba junto a los otros aspirantes a caballeros. Nadie se acercaba a hablar con ella y ella tampoco intentaba integrarse, quizás avergonzada por ser la única mujer. Lucio se retrasó unos pasos con respecto al resto de los jóvenes para poder hablar con la muchacha.

_Hola -le dijo sonriente-. ¿Eres tú también una aspirante a caballero? Porque si es así podrías unirte a nosotros. Claro, si quieres, quizás querías estar sola y yo solo estoy siendo un entrometido. Lo lamento -concluyó, apartando la mirada, pensando en si había hecho lo correcto al acercarse a ella-.

 

Notas de juego

Post ejemplar: Buen post!: 1pt 

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02/04/2011, 15:09
Souga Raoh

 

Souga se encontraba   por el camino, más adelante en lo alto, observando a los recién llegados al santuario, con los puños apretados conteniendo la excitación se preguntaba si alguno de ellos sería lo suficientemente fuerte para lograr llegar al objetivo de la armadura.

El viento golpeaba en su rostro haciendo que su cabello ondeara como una bandera mientras los recuerdos inundaban su memoria. Su primer recuerdo llegaba de cuando apenas era un niño de pecho y las criadas corrian para atraparlo, solo que en aquella oportunidad no fue una criada con quien se topó sino con el caballero de plata Altar quien le devolvió una sonrisa y unas palabras “Corre, juega y diviértete Souga, porque pronto comenzará tu entrenamiento y no tendremos miramientos para contigo”, en aquel entonces su corta edad no le dejo comprender las palabras, pero su significado tomo forma 3 años más tarde cuando se oficializo que Altar sería su maestro y desde ese momento dejaría de vivir en el santuario para vivir en la  villa con una criada hasta que sea  demostrado que era digno de volver a pisar el templo sagrado.

Muchos años pasaron desde ese momento, duro fue el entrenamiento, no solo con Hokuto, sino con todos los demás maestros que se acercaban a la villa a darle lecciones en secreto, lecciones que lo llevaron a ser hoy el muchacho que es y poder luchar por una de las armaduras de bronce en principio como comienzo de un largo camino hasta la preciada armadura dorada.

Hokuto, el más duro de todos sus maestros, el más exigente y el  que más esperaba logros de su parte, un día llego a la  villa y le anuncio que el momento había llegado y desde entonces el entrenamiento se llevó en el santuario tanto con Altar como con los demás caballeros del santuario, desde ese día un entrenamiento exhaustivo y duro cayó sobre Souga, y ahora, pasados ya dos años otros muchachos llegan para cumplir con su destino, para luchar al igual que él por el derecho de una armadura, el camino de ascenso comenzaba.

Una sonrisa se dibujó en su rostro porque al recordar que Hokuto le menciono que alguno de ellos eran discípulos de otros caballeros, esto lo reconfortaba, era indicio de que podrían ser dignos adversarios o compañeros de batalla, el lugar en el que se posicionaran solo lo determinaría el paso del tiempo, en lo que a su destino se  refería, ya estaba escrito.

-: Bienvenidos al santuario…

Hablo en un tono leve, más como una reflexión personal que con motivos de interacción, aún lejos, allí en el camino, se encontraban los aspirante y si el sol no los molestaba podrían ver su esbelta silueta en el horizonte.

Notas de juego

Post ejemplar: Buen post!: 1pt  

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02/04/2011, 17:55
Reyhan

 Algo retraído por la magnificencia del lugar escucho las palabras del joven aspirante las cuales me sacan de mi estado reflexivo.

Muchas gracias, te lo agradezco.

Algo tímida asiento con el rostro ante la invitación del muchacho y camino un poco mas junta a los otros aspirantes a caballero.

Tenia claras las reglas del santuario y como hasta el momento ninguna mujer era digna de portar armadura alguna. Al final solo me quedaba la fuerza y esperanza de que no era yo la que había previsto esto, el mismo destino se encargó de hablar en palabras complejas a mi maestro y comunicarle mi futuro. Cada vez retumbaban en mis oídos sus palabras en ese momento de trance.

Va a ser un duro caminar.

Notas de juego

Solo para estar claros.

Pensamientos en cursiva.

las cosas expresadas en negrilla.

Susurros negrilla y cursiva.

Y lo relatado escrito normal.

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02/04/2011, 22:13
Lucio

La niña asintió con la cabeza ante la invitación de Lucio, y efectivamente se acercó más al resto del grupo. Lucio estaba desconcertado. No sabía si ella lo había tomado como un compromiso, porque si bien lo hizo, ni siquiera le dirigió la palabra.

Al parecer también en el Santuario hay gente rara -pensó Lucio, y encogiéndose de hombros, siguió jugando con las aves que estaban con él-.

Notas de juego

Mi pensamiento es en negrita. Cuando susurre algo lo aclararé en el post.

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03/04/2011, 16:09
Sadalsuud

Un extraño nos saludaba apenas llegamos, su silueta era ligeramente dibujada por el efecto del sol sobre la cima del edificio frente a nosotros, amablemente el extraño nos saludaba a todos a lo que respondí con un frío pero educado gracias sonó de mi boca, al mirar a mi alrededor, veo a los demás jóvenes aspirantes a armaduras caminando soñadores y llenos de esperanzas y expectativas, seguramente como yo, me acerco al hombre que nos acaba de saludar quien se ha unido a nosotros - Mucho gusto, mi nombre es Sadalsuud, discípulo de Deneb, aspirante a Corona Austral, te agradezco la recepción que nos has dado, ¿quién eres? - mi mano se extendía hacia él firme y segura, queriendo demostrar mi voluntad por una pequeña interacción social que quizá ayudara a suavizar la tensión de la espera en la que nos encontramos

Notas de juego

Te pasaste con el video Will, en la oficina no lo había podido ver :p

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03/04/2011, 16:59
Aioras

 

 

 

 

Y por fin el santuario.Aquello parecía realmente majestuoso realmente prometedor.

Por un momento acudió a su mente el recuerdo de su antigua vida.

Unos padres sin rostro muertos años atrás ,una vida de pillaje ,hambre y penurias.

Recordó cuando fue capturado y enviado como esclavo,los años habían pasado ,nunca se adapto a esa vida su carácter fogoso y su temple le había hecho recibir múltiples amenazas y palizas ,el ultimo resultado fue el castigo de las fieras.
Abandonado a su suerte en el bosque rodeado de múltiples animales,la noche era fría y el bosque peligroso ,encontró una profunda cueva,allí esperaba poder resguardarse,estaba herido y la sangre brotaba de sus heridas.

Pero no estaba solo unos ojos oscuros y de fuego aparecieron allí entre penumbras un león había erigido la cueva como suya,el corazón comenzo a bombear en su interior .

Que podía hacer frente al rey de las bestias que le esperaba mas que la muerte fria y rápida,agazapado el animal eligió su momento.
Pero entonces se escucho,una triste melodía que penetraba en la cueva ,como un rayo de arco iris.

Dulce y cálida ,llegaba hasta lo mas hondo de su ser ,y la bestia se calmo ,entonces lo conoció .

Decía ser un caballero de Atenea un miembro de una orden que guardaba la paz y la justicia en el mundo.Me dijo que pronto alguien vendría en mi ayuda ,de un fardo extrajo algo parecía una lira como la suya y me la regalo .
Practica sin descanso y llegara el momento que lo entenderás..

Aquellas fueron sus palabras,conseguí salir de allí ,encontré una familia en un pueblo que me adopto,pues no podían tener hijos,meses después un extraño apareció decía ser un aprendiz de caballero quería portar la armadura de sagitario el me entreno,sin descanso.

Pronto conseguí entenderlo cuando el cosmos el infinito sentido exploto en mi,la lira me acompañaba dentro y fuera de la batalla , sus notas ,su cálida y pacifica melodía hacia vibrar el cosmos en mi al compás de la música .
Si ,había amansado mi fiera interior ,controlada y apaciguada solo saldrai cuando los verdaderos enemigos de Atenea ,volvieran a amenazar estas tierras.

MI mentor desapareció un día y jamas volví a saber de el ,volvía al santuario,nunca podre agradecerle todo lo que aprendí no solo del universo sino de mi propio interior,de mi corazón.

Y enfrente mía se abría un nuevo destino,una nueva oportunidad ,no debería desaprovecharla,haría honor a todo aquel que había depositado tantas esperanzas en mi .

El león había despertado que temblara el mal...

Notas de juego

Post ejemplar: Buen post! Por favor, la proxima vez no todo en negritas: 1pt  

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03/04/2011, 16:56
Souga Raoh

Una vez más cerca de su posición uno de los  recien llegados lo saluda con afectucidad, al parecer el viento habia hecho llegar su susurro a sus oídos, bajo de la elevación en la que se encontraba y estrecho con fuerza la mano de Sadalsuud correspondiendo en la misma magnitud de fuerza, no más, no menos.

-:Oídos finos posees para poder oir me susurro al viento. Soy Souga, Souga Raoh.

Su mirada paso por los rostros de todos los llegados para guardarlos en el recuerdo, ya que muchos no terminarían su entrenamiento o no llegarían por diversos motivos a su meta, muchos aspiraban a las armaduras pero solo los mejores preparados llegaban.

-: Sean todos bienvenidos, Eleas terminará de enseñarles el camino y si me lo permite yo los acompañaré.

Su rostro no mostraba signos de ningún sentimiento, pero sin embargo en las palabras se podía apreciar un tono expectante.

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04/04/2011, 00:44
Lucio

Un joven que ya estaba en el Santuario les daba la bienvenida.

_Gracias por la bienvenida Souga Raoh, y gusto en conocerte. ¿Tú vives aquí? ¿Eres un caballero?

Lucio estaba ansioso. Si bien ese niño parecía de la misma edad del resto, si les daba la bienvenida era porque vivía allí, y por lo tanto probablemente fuera un caballero, el primero que Lucio conocía.

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04/04/2011, 02:38
Artemias

Mientras los demás hablaban y se conocían yo solo esperaba que Eleas nos dijera como continuar, camine hacia un costado para posarme con los brazos cruzados contra una columna.

“Ciertamente todos están muy emocionados y parecen ser prometedores, hablan entre ellos como si fuesen amigos, pero pronto solo algunos de nosotros quedaran, quizás muchos mueran o queden en el camino, tener sentimientos hacia ellos es una perdida de tiempo, solo se hará mas difícil para ellos al combatir…la chica me da un poco de pena, será maltratada y quizás nunca la acepten, pero no por eso seré blando con ella.

Estoy seguro de mi sueño y no me importa alcanzarlo a cualquier costo”

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04/04/2011, 02:50
Souga Raoh

Souga se acomodo junto a Eleas mientras otro de los recien llegados le saludaba y atosigaba con preguntas.

-: Tranquilo, tranquilo, Eleas les mostrara como manejarse aquí, a pesar de que vivo en este lugar esa no es mi tarea, y antes de que preguntes cual es mi tarea te dire que consite en vencer a todos mis oponentes sean estos caballeros de bronce, plata, oro o algún otro aspirante, el objetivo es ganar mi derecho a la armadura.

Habiendo dejado claro su lugar ante la pregunta, miro a Eleas para saber si este aprobaba o no su comportamiento, su tiempo de descanso de estaba agotando y seguramente pronto el los maestro mandaria a llamar por él para continuar con el entrenamiento, pero hasta entonces seguiría con el grupo para conocer más a sus contrincantes, si es que alguno de ellos aspiraba a la misma armadura que él.

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04/04/2011, 04:01
Lucio

El comportamiento de ese muchacho ya no era raro, como el de muchas otras personas que Lucio había conocido desde el comienzo de su viaje. No, ese era el comportamiento de una persona soberbia que se comportaba agresivamente con los demás de manera gratuita y sin necesidad. De haberlo escuchado antes ni siquiera lo hubiera confundido con un caballero. Los caballeros eran otra clase de personas, al menos eso le había explicado su maestro. Sintió el impulso de enfrentarlo en ese mismo momento, pero se detuvo a tiempo. No quería problemas a tan poco de su llegada. Además quizás herir su orgullo podría ser más efectivo que herir su cuerpo.

_Oh, así que tu tarea en el Santuario es vencer a todos... -respondió Lucio con aire pensativo-. Muy bien, ¿pero cual sería la pena por no cumplirla? Porque si por ser derrotado la pena es tu expulsión de aquí, después de hacerte morder un poco de polvo cuando nos toque enfrentarnos puedo recomendarte algunos lugares muy bellos para continuar con tu vida, donde quizás puedas encontrar tareas más acordes a tu persona.

Todo eso Lucio lo dijo con un tono muy inocente, como si realmente le preocupara el futuro de Souga. Solo esperaba la risa de alguno de los muchachos para sentirse completamente satisfecho.

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04/04/2011, 04:40
Artemias

Artemias solo sonrío de costado y cerro sus ojos al escuchar el comentario de Lucio.

“Quizás el sea el primero en estar en mi lista de personas que no me caen mal y a las cuales hablarle”

El muchacho tenia agallas sin duda, pero todavía había un largo camino por recorrer, solo esperaba que las indicaciones no se tarden tanto y los jóvenes empiecen a impacientarse, aunque si alguno era derrotado antes de empezar tanto mejor para el, seria al fin y al cabo menos competencia y la oportunidad de ver las habilidades de cada uno…

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04/04/2011, 04:50
Reyhan

Una delicada sonrisa se desdibuja bajo el pensativo rostro que llevaba en este momento. Comprender como eran el resto de caballeros era una habilidad que tenia que desarrollar, tenia completamente claro que estudiar al resto me serviría en un futuro, y tal vez en uno no muy distante.

Es un buen chico. Solo esta jugando. Vamos a ver como Souga responde a su pregunta.

No muchas personas eran serenas, don que desde nacimiento llevo a cuestas por lo que no desespero tan fácilmente como muchos. Probablemente al ser hombre, respondería de forma engreída por haber jugado el muchacho un poco con su ego. Todo podía pasar.

Hay que tener paciencia y saber responder ante cualquier situación. Vamos a ver como a una prueba tan simple responde el lugareño.

Camino con el resto observando divertida la interacción entre los muchachos.

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04/04/2011, 05:03
Souga Raoh

Al parecer el comentario de Souga no habia caido bien al muchacho hecho que no supo comprender, creia que todos habian llegado allí con el objetivo de ganar su armadura, miro a Eleas con cara de  no comprender y luego al muchacho.

-: Si en algún momento el destino cruza nuestro camino en combate recordare tus palabras, porque la unica manera en la que me dare por vencido sera cuando mi cuerpo ya no responda a mi voluntad. Ahora dime algo, no enfrentarias a quien sea sin importar quien sea, si esa persona se interpone entre tu y tu preciado objetivo, tu razón de existir, o sea, el motivo por el cual has venido a este lugar. Porque creo que mi tarea es la misma que la de todos ustedes.

Miro al muchacho directo a los ojos tratando de concentar toda la atención de este en él para que prestara mayor atención a la siguiente frase.

-: O.....si debieras enfrentarte con un caballero de oro para saciar tu anhelo por poseer una armadura, ¿no intentarás vencerlo?

Planteada la incognita realizo un movimento de cabeza hacia Eleas en una especie de saludo de despedida.

-: Creo que mejor dejo que se familiaricen con el lugar mas tranquilos, mi maestro debe estar buscandome, asi que debo retirarme.

Miro a todos nuevamente para poder recordar sus rostros más adelante, se despidio con un nuevo gesto de saludo y se separo del grupo adentrandose en el santuario.