Partida Rol por web

Bitácora del Enterprise, Fecha estelar 5027.42 En algún lugar del Cuadrante Beta

Las luces parpadean con ese color rojizo, mientras se da la alarma en toda la nave. La voz de la computadora alerta a toda la tripulación de la situación en la que se encuentra la nave Enterprise. En este momento, tras una exitosa misión en el Espacio Romulano, la nave insignia de la Federación se dispone a escapar... pero la suerte deja de sonreirle, en el peor de los momentos. La alerta roja es dada en toda la nave.

La computadora señala que hay dificultades con los propulsores y la nave no puede entrar en velocidad Warp, Ingeniería responde vagamente, mientras toda la tripulación se prepara para el enfrentamiento inminente, desde el puente de mando se observa la entrada dramática de dos naves Romulanas Aves-de-presa* a una distancia peligrosa.

Los Romulanos ahorran palabras, y de inmediato los impactos no se hacen esperar, sobre el escudo de la nave. La situación es crítica, el margen de maniobra es limitado, y como no aparezca una solución pronto, lo que sería una exitosa misión y una incuestionable victoria para la federación, seguro se tornará en una pérdida lamentable.

Cada impacto hace que la nave se sacuda. El profundo y oscuro espacio es la única salida, pero sin la posibilidad de escapar y con el escuadrón de persecución del Imperio tras de sí... habría que darle la vuelta a la situación.

"Por todo el sistema, cuando nos metimos en esto" pienso bastante nervioso. No dudaba de la capacidad del capitán y del equipo del Enterprise, pero haberse metido en el espacio Romulano... era un error. Un severo error.

El tablero había enloquecido con las señales de emergencia, los escudos disminuían, la nave se movía demasiado. Trago saliva. ¿Cuántas veces voy a tener que sentirse en peligro para pensar en un retiro anticipado? Por todos los...

-Si salgo vivo de esta, no volveré a tomar un trago en mi vida...- digo en voz alta. Seguro que nadie me pondrá atención... pero la señal de Alerta Roja me tiene de los nervios.

Leonard McCoy celebra con una pequeña y torcida sonrisa la victoria de la misión sobre espacio romulano. Pero ese gesto se torna pronto en un fruncimiento de ceño, pues habían cantado victoria antes de tiempo. La alarma así lo hacía ver, antes de que abandonaran ese cuadrante del espacio, el USS había sido atacado e interceptado por la raza traidora romulana. Él estaba inspeccionando la compleja maquinaria médica, de la que no se sentía muy orgulloso, cuando la alarma perforó sus oídos.

"Maldita sea, soy un doctor, no un soldado. ¿Qué voy a hacer yo ahora"

Fue corriendo a la sala de control, para ver si a su amigo Jim o al oficial vulcaniano se les ocurría un plan, o por si necesitaban su ayuda.

- Jim, ¿qué ocurre? ¿no podemos eludir el ataque? - dijo Leonard, preocupado - Espero que no haya heridos, aunque tendré que prepararme por si los hay.

El Primer Oficial se aferrò a la consola al sentir el primer impacto y a pesar de ello trastabillò hasta casi perder el equilibrio. Aplicò su mirada al visor azul por uos segudos al cabo de los cuales girò la cabeza y dijo:

-Nos han impactado, Capitàn. Escudos al 88% y naves enemigas recargando cañones de plasma.-

Mierda, nos atacan... justo ahora que parecía haber pasado lo peor.

La situación era crítica, la tensión podía cortarse con un cuchillo en el puente de mando.

Doctor, parece que de momento no hay heridos - informo - aunque no creo que pueda vover a decir lo mismo si continuamos mucho rato recibiendo impactos como los anteriores...

Habia ido a por un café aprovechando el cambio de turno de guardia en las comunicaciones. El vaso aún humeaba en mis manos y yo iba soplándolo para enfriarlo. No podía retrasarme en exceso en volver a mi puesto en el puente, así que trato de bebermelo cuando noto la primera sacudida fuerte de la nave.

-Mi café!- protesto. El vaso se me escapa de las manos y cae al suelo a la vez que yo pierdo parte de mi equilibrio y acabo teniendo que apoyarme contra una de aquellas paredes blanco-grisaceas de los pasillos. "Maldita sea!". Miro por unos segundos el estropicio en el suelo, reflexiono unos segundos...

"Nos habrán atacado los Romulanos? cuando dejé mi puesto para tomarme el descanso, estabamos entrando en su territorio...". Doy un paso hacia delante, sin pisar el líquido derramado y a paso rápido, casi corriendo, me dirijo hacia el Puente.

"Mi puesto es Comunicaciones, no puede ser que esté desinformada!".

Cuando por fin llego a la puerta principal que da acceso al Puente, me paro un momento, me aliso con sumo cuidado la minifaldita que forma parte de mi uniforme rojo, me resituo el pelo, respiro hondo y entro para retomar mi puesto y enterarme de que diablos está pasando...

*** Aquí sala del teletrasportador, necesitamos ayuda médica urgente, mi ayudante tras el primer impacto, se ha golpeado la cabeza, tiene una fea brecha en la cabeza. Pido tambien algo de refuerzos para la sala del transportador ***

- se escuchaba por el intercomunicador en un claro acento Inglés -

*** Mi ayudante se esta desangrando, necesito algún equipo médico en la sala del teletransportador, es urgente *** - volvía a repetir el Oficial Técnico de Seguridad de la Sala del Teletransportador -

-Capitán, es la Sala del Teletransportador, solicitan apoyo médico urgente, se trata del teniente Kyle, parece que hay problemas!- comenta mientras observa a la teniente Uhura retomar su puesto.

Un impacto más y tuco que sostenerse de su consola -Eso se ha sentido fuerte- los cañones de plasma impactaban contra el escudo, el Enterprise no iba a soportar tanto castigo si no escapaban del espacio romulano.

-Aquí Farrell desde el puente, hemos informado a enfemería, esperen asistencia, repito, esperen asistencia- responde por el comunicador.

**** De acuerdo, protegeremos la zona por si los Romulanos les da por teletransportarse, solicito tambien un equipo de seguridad, para examinar la nave por si acaso.Esperaremos no nos queda otra.Capitan sera mejor que nos largemos de esta zona o dejaran la nave reducida a escombros espaciales. ****

- dice por el intercomunicador el Teniente Kyle -

Chistine, que habiendo visto al doctor McCoy salir de la enfermería, se quedó en ella preparando las cosas por si fuera necesario salir de ella para atender a alguien, recibe la información por parte de Farrel, de que se necesitaba ayuda urgente en la sala del transportador.

- Avisen al Doctor McCoy de que voy para la sala del transportador con el equipo necesario.

Mierda, si antes lo digo... Aunque era de esperar que no tardasen mucho en aparecer los primeros heridos.

¿Cuanto tardará en descontrolarse la situación?

Las palabras de Kyle se le clavan al doctor McCoy como cuchillas afiladas. Tenía que reaccionar rápido, una vida, al menos, dependía de él. Salió del Puente de mando, para auxiliar a la persona herida, diciéndole antes a Farrel que le comunicara a Kyle que él iba para allá.

Farfullando, mitad maldiciendo por la mala suerte que tenían, la otra mitad porque ya estaba viejo para correr así, Leonard iba por los pasillos corriendo hasta alcanzar la sala del transportador. Una vez allí, se acerca a Kyle y le dice.

- ¿ qué ha pasado aquí? Solicitaste ayuda médica - al ver al ayudante de Kyle, soltó un improperio - Joder, esa herida no tiene buena pinta.

A los mandos del timonel veo con total claridad la situación que se avecina. Las naves enemigas se aproximan a velocidad alarmante y hay muy poco tiempo para reaccionar.

Aves de presa, ¡genial!- Digo desconsoladamente.- A la espera de órdenes

"Si no actuamos rápido podemos darnos por muertos..."

Andábamos con el mantenimiento de la Sala del Teletransportador, cuando la primera sacudida de Ataque Romulano, nos pillo por sorpresa, yo tuve suerte, pero mi ayudante de golpeo violentamente en la cabeza Doctor McKoy... - decía explicándose Kyle -

- Pues la herida es bastante fea - dijo examinando al herido, torciendo el morro porque parecía casi imposible su recuperación - su compañero no tuvo tanta suerte como usted.

No paraba de salir sangre de la cabeza del ayudante, si no detenía la hemorragia, pronto se desangraría. Y ni aún así las perspectivas eran muy optimistas.

Chistine llega cargada con todo lo necesario para una herida como la que la comunicaron por el intercomunicador.

Vendas, aguja e hilo quirúrgico, desinfectante, y un potente analgésico.

Cuando llega, vé al Doctor McCoy ya dispuesto a atender al paciente.

- Doctor, aquí le traigo el instrumental necesario. ¡Ey, vaya brecha! ¿Seguro que tú estás bien Kyle?

Mientras espera la respuesta, se arrodilla ante el herido, y empieza a limpiarle la herida con unas gasas y desinfectante, para que, a continuación, el doctor pueda parar la hemorragia con compresión, para después proceder al cosido.

Sería buena idea llevarlo a la enfermería, le ayudaré a llevarlo allí. - Dice Kyle, mientras que ayuda a incorporarse a su compañero -

Va que de estas sales, no has sobrevivido a Romulanos, y demás peligros en otros planetas , como para que ahora un golpe te quite por lo que tanto has luchado... - decía Kyle a su ayudante -

Mejor que le suministre algo para cortar la hemorragia, o me de algo para taparle la brecha, de esa manera lo podremos llevar sin mucha complicaciones a la enfermería, Señor Mc Koy... - le recomendaba Kyle al doctor -

Si , estoy bien Doctora Chapel, comparado con mi ayudante, yo no tengo nada, solo una herida en el hombro izquierdo, hace algo de daño, pero es una herida superficial, no se preocupe por mi, atender primero a mi ayudante... - decía con tono seguro Kyle a la doctora -

Todo aquel tumulto me devuelve a épocas pasadas. Había sufrido tanto. Algo parecido fue el preludio a la muerte de mi prometido Robert Tomlinson. Kirk oficiaba la boda, y todo era simplemente precioso. Pero un aviso hizo que todo fuera a mal. Al final, Robert murió y mi corazon con él.

Desde entonces intento no quedarme a solas con Spock. Por su culpa. Si en vez de Stiles hubiera salvado a Robert, todo hubiera sido distinto.

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Me quedo sentada en la zona de comunicaciones, viendo sin ver, escuchando sin oir realmente. Algun día Spock moriría, para entonces ella podría encontrarse con Robert de nuevo, allí arriba, en el cielo. "Oh Dios, dame fuerzas."

Camina a paso acelerado por los pasillos, viendo como gran parte de la tripulación parece perder los nervios.

- Vamos, vamos - exclama con un fingido entusiasmo - Ahora debemos permanecer unidos, saldremos de esta.

Hansen es consciente de que tan solo es un extra en este episodio piloto pero no por ello le debe faltar profesionalidad. Tan solo lamenta que no le hayan contratado con derecho a hablar por aquello de que deberían pagarle más... aunque tampoco es que le paguen mucho.

Así que Hansen se limita a estar callado y esperar a la explosión cercana para tirarse al suelo como le han dicho que haga mientras espera semi-oculto en segundo plano.