Partida Rol por web

Aguardo las órdenes de mi Sargento, listo para atacar cuando me digan.

-Dejen las cajas aquí escondidas, Hratu, daremos una vuelta discreta por los alrededores para ver si encuentrmos algun explorador más.-

-Avancen hasta encontrar una posición a cubierto, francotiradores, todos apuntando al arma pesada y a su dueño, el resto, a los dos de al lado, sin ninguna duda hay más en las tiendas así que cuando acaben con ellos, estén todos preparados para disparar a lo que salga.-

-Hratu y yo rodearemos el lugar y les pillaremos por la retaguardia, cuando oigan dos clicks en la radio será el momento de empezar a disparar.-

-De todas maneras sargento, si ve algo que les ha alertado o lo decide así por otro motivo dé comienzo el ataque.- Y una vez dadas estas órdenes, Dakon se quita la pesada armadura que nunca le gustó y con ropajes bastante más discretos hace una seña a Hratu para que le siga a a la espesura, para tratar de rodear ese emplazamiento.-

Musito un a la orden sargento antes de ponerme en movimiento. Chicos y chicas, iré hacia el sur y buscaré posición sobre el edificio en esa dirección.

Sé que no destaco por mi discreción así que me muevo alejado del campamento enemigo hacia el sur (parte inferior del dibujo - mapa) para tener ángulo de tiro sobre un edificio y los guardias. Procuro andar con calma, agachado. Solo de vez en cuando levanto la vista para tomar la referencia de lo que se ve y siempre intento dejar árboles entre mis objetivos y yo.

En cuanto esté a una distancia prudencial preparo el rifle y oculto tras un tronco grueso espero la señal de ataque.

HERBERT:

- Preparo el rifle blaster mientras avanzo despacio sin hacer ruido, buscando una posición de tiro contra los que están más retrasados.

Al oir la posicion de Baalik en el campo de batalla, Sarah supo inmediatamente que ella debía ir al norte.- Copiado. yo me dirijo al norte.- Susurró Sarah.

Como Baalik, ella también llebaba su blaster ligero de repetición por lo que si querían combinar su fuego y conseguir un buen ángulo del mismo, debía ir al norte.

Como su compañero, ella tampoco andaba muy sigilosamente y menos con aquel traje. Por lo que decidió retirarse un poco al Oeste, para luego subir al norte y acercarse al este y así conseguir una buena posición de disparo.

Ante las órdenes de Dakon, Dakker asiente y comienza a bordear toda la zona en la que se encuentra el enemigo. Se mueve con una sombra, en absoluto silencio y siguiendo a su sargento

     Tras exponer la disposición de la base el sargento Dakon impartió sus ordenes, por pura costumbre, R'all esperó unos instantes la confirmación de la orden por parte de su sargento. Al no recibirla, consideró que el que calla otorga y se puso en marcha: su posición avanzada compensaría esos segundos perdidos.

Aqui Nexu, bordearé el campamento por la linde sur hacia la retaguardia, ¿fijamos punto de encuentro?

Con absoluto sigilo, mientras esperaba respuesta, comenzó a caminar con el fusil frente a si presto a disparar a la primera cosa que se moviera. Tal y como era su costumbre, se movia entre las zonas de vegetación mas densa, tratando de camuflarse en ella como un depredador acechando a su presa.

Rusty asiente ante las ordenes de Dakon. "Entendido sargento. Va siendo hora de que empieze la diversion"
dicho esto, se interna entre los arboles para conseguir una posicion franca con respecto a el centinela del arma pesada.
"Rusty en posicion y listo para disaparar" susurra por el comunicador

Con el maximo silencio posible, iniciais el despliegue alrededor de la posicion enemiga. Aunque en un principio parece que los soldados enemigos no se percatan de vuestra presencia, veis como de repente el soldado del arma pesada se pone alerta y llama a uno de sus compañeros

Escuchais claramente como hablan (apenas disimulan)
- Eh Rot, creo que e visto algo moviendose en el bosque. Id a echar un ojo.
el otro soldado se acerca y otea el bosque.- Estas seguro? lo veo muy tranquilo.
- Me da igual lo que pienses! cojed vuestros rifles y echad un ojo por los alrededores
Los dos soldados que patrullaban, cogen unos fusiles blaster, y se adentran en el bosque con unas linternas

HERBERT:

Me congelo en mi posición en cuanto oigo hablar a los guardias. Apunto con el rifle a la expectativa de ser descubierto antes de abrir fuego.

Coultier es un buen oficial, sabe dar órdenes. Breech únicamente asiente. En cuanto a su pelotón, ya saben moverse como una máquina bien engrasa. Antes de moverse, no obstante, añade una última observación.

-No os lancéis al ataque, mantened las coberturas hasta que todo quede en calma. Un búnker es un mal lugar para luchar. Esperad a que salgan. Y luego los haremos salir. Lucha ahí dentro sería un suicidio.- Dicho lo cual, se junta con su grupo. Se dividen, rodeando el lugar. Breech, por su parte, hace lo propio. Sigue a Sarah, su número dos, bosque adentro, aunque se hecha al suelo en cuanto escucha a los dos guardias. Se meten bosque adentro. Y eso es malo. Si los descubren, todo se irá al cuerno. Abre un canal cerrado de radio, para Nexu.

-Cuidado, peligro cerca.- Dice, únicamente. Prepara una granada, dejando con cuidado el rifle. En cuanto el asalto empieza, por una razón u otra, lanzará las granadas hacia los búnkeres. Con suerte, a los guardias les entrará el pánico.

-Solo espero que realmente ahí no haya Sith.- Dice, por lo bajo, de forma casi inaudible, como si fuerza una plegaria.

Desde detrás del tronco oigo las voces de los enemigos, la sopresa está a punto de irse al traste así que me preparo. Arrodillado para poder apuntar con rapidez libero el seguro del arma y escucho el movimiento de los imperiales para saber por qué lado del tronco debo asomarme si se acercan.

Sarah, parapetada detrás de una roca, en la que ha posado su blaster ligero, apunta hacia el blanco marcado. A su lado, el saregento imparte las últimas órdenos.

Pero en ese momento, algo sucede. Parece como si les hubieran visto. Si no actuaban rápido, la sorpresa se les iría al garete.- Lo tengo en mi mirilla sargento, cuando quieras lo liquido.- Dijo la soldado en un susurro a su sargento, sin dejar de mirar por la mirilla el soldado encargado del blaster pesado de repetición, esperando la señal de ataque.

-El tipo de la torreta es cosa de Coultier.- Dijo Breech, susurrando, a Sarah. -Pero no lo pierdas. Asegura el tiro. Si nos descubre alguien, les vuelas la tapa de los sesos.- Breech seguía observando la situación, sin moverse demasiado, tratando de pasar lo más inadvertido posible, pero con el bláster bien sujeto, listo para dar cobertura o liquidar, y con la granada en la otra, listo para armar jaleo.