Partida Rol por web

Si Tatoooine era un desierto, Kavvarad era una roca. Una roca pequeña, seca y poco atractiva excepto para una corporación minera. Así lo probaba la presencia casi exclusiva de instalaciones mineras.

A pesar de su escaso atractivo, presentaba una pequeña población que había ido creciendo con el paso de los años. La minería era un trabajo duro - a pesar de que se usaban droides en gran medida -, pero estaba relativamente bien pagado. Los mineros, quienes por razones evidentes, se habían instalado en Kavvarad, se trajeron a sus familias o echaron raíces allí, creando un asentamiento de unos pocos miles de seres. Como consecuencia, comerciantes sin relación alguna con la minería, también se habían sentido atraídos estableciendo sus negocios en el poblado, dispuestos a ofrecer sus servicios a una población minera sin diversiones ni ocio en que gastar sus créditos.

El carguero ligero Ghtroc 720 Lekkuan sobrevolaba la superficie del planeta Kavvarad, en dirección al pequeño astropuerto del asentamiento.

 - ¿Cómo se llama ese... poblado? - preguntó Suta'Raz.

- Kavvarad - respondió Wulryk -. Sí, igual que el planeta - se apresuró a añadir previendo la siguiente pregunta del Twi'lek.

- ¿Igual que el planeta? - preguntó de todas maneras Suta.

- Es el único asentamiento - explicó Sidias -. Probablemente no había necesidad de romperse la cabeza buscando otro nombre diferente.

Kavvarad, el asentamiento, estaba localizado junto al enorme cráter en el que se encontraban las principales instalaciones mineras. El astropuerto de Kavvarad no era tan grande como el propio de la compañía - el cual se encontraba dentro del mismo cráter. No era necesario, ya que el tráfico de naves era escaso; sólo dedicado a los cargueros que traían los pocos pasajeros y los suministros necesarios para el asentamiento mismo.

Suta'Raz hizo que el Lekkuan se posara en la pista designada. Los motores del carguero se apagaron dejando la nave en silencio.

Ahora sólo quedaba decidir por dónde empezar.

Baker miro pensativo su destino mientras pensaba en la poco informacion que sabian sobre su destino, y eso le preocupaba, aunque la informacion del chip era util, pero Baker se daba cuenta que esta mision iba ser cualquier cosa menos facil. Una de las cosas que mas le preocupaban era como moverse sin levantar sospechas, por que una cosa era seguro no podian ir aunuciado que estaban buscado a los supervivientes de la orden, por seria como poner una diana holagrafica de 50 metros sobre sus cabezas. En ese momento le vino a la cabezo una idea, era algo que habian usado en una operacion anterior un años despues de la batalla de Yavin -podria funcionar si convenzo a los demas- penso para si.

Cuando se encontro con los demas decidio a bordar el tema -creo que para la mision tenga alguna posibilidad de exito vamos a tener que actuar de incongnito o corremos el riesgo de que la mision falle incluso antes de empezar- dice Baker con tono serio -si el tal Val siguen en el planeta (cosa que duo) lo mas probable es que los locales le conozocan, y pueden que hasta le ayuden, así no creo que le digan lo que saben al primero que venga pregunta por el, asé le he dado vueltas y creo que tengo la cobertura perfecta- afima Baker -mi idea es hacernos pasar por empleados de un bufete de abogados del nucleo a los que han encargado localizar a un testigo de un casoe del que bufete forma parte- continuo Baker con calma -y resulta que el testigo es el tal Val, así que si la gente nos ve pregunta no les extrañara y puede que incluso facilite la busqueda- a lo que añade -otra cosa Suta, podrias programar la computadota para que buscar en la holonet y en la red local cosas raras que han pasado en Kavvrad- solicita Baker al mas tecnicamente inclinado del grupo -puede que no padamos anunciar lo que buscamos publicamente en la holonet, pero todavia lo podemos usar para recolectar informacion- termina de decir Baker.

Una vez dentro de Lekkuan me retiro un rato a mis aposentos, el viaje aún iba a durar un tiempo. Me tumbo en mi cama, sin dormir pero relajando un poco los músculos y pensando en posibles problemas que puede haber en un planeta minero, no será como Kessel, pero seguro estará lleno de gente peligrosa.

Cuando avisan que estamos aproximándonoes me acerco a mis compañeros, la ciudad destino se llama Kavvarad. Miro en el ordenador de a bordo y añado a los comentarios de mis compañeros, Es el único asentamiento. Probablemente no había necesidad de romperse la cabeza buscando otro nombre diferente - respondo con una ligera sonrisa, me recuerda a la forma de trabajar del Imperio que tan bien conozco, sin buscar complicaciones.

Ahora solo quedaba empezar, Baker propone un plan, un plan bastante bueno, no tenemos algunos mucha pinta de abogados, me gusta tu plan, pero quizá habría que centrarlo en Wulryk, él si parece un abogado - seguramente para algunos podría ser incluso malo que a alguien lo definan como abogado, me sonrío, quizá podrían acompañarle un par de nosotros, serían sus guardaespaldas, este planeta puede llegar a ser peligroso, después añado, si todos vamos con él va a resultar bastante sospechoso, ni siquiera tenemos ropas que nos hagan pasar por abogados, y en cuanto nos pregunten no sabremos ni qué responder. Quizá podamos hacer las dos cosas, por un lado Wulryk y dos más a buscar a Val y por el otro Suta y otro más a buscar sucesos extraños de la Holonet.

El viaje había sido tranquilo y veloz, lo que no era extraño dada mi autoreconocida habilidad. Estiré los brazos y lekku una vez la nave estaba firme sobre la superficie.

-No me parece mala idea, Baker, para nada- me incorporé para correr a otra computadora. Esta nave era, por definición de Sidias y mía pero no me molestaba seguir buenos planes y los más adultos de la tripulación tenían aptitudes diseñándolos. Ya les diría algo si dijesen estupideces, o los ignoraría.

-Un tercer grupo- comenté mientras configuraba a la computadora para ingresar a la base de datos del planeta -podría inventar otro método, uno que lo haga venir hacia nosotros-. Los pitidos confirmaron el acceso y sonreí.

-Por ejemplo: podríamos buscar a viejos habitantes de la población porque buscamos...- miré alrededor como buscando una pista en la nave, mi lek izquierdo pegó un latigazo -¡historiadores! Eso es, un viejo humano que sepa de historia y cultura. A cambio brindaríamos algo ¿Qué puede querer un yedai?-.

Extrañamente tan parecido a Elyssar pero a la vez tan diferente. En Kavvrad todavía se notaba el ambiente colonizador, con una corporación que se encargaba de los negocios antes que una familia cuidando de sus súbditos. No había ninguna concesión a la belleza ni ningún edificio diseñado para perdurar.

-¿¡Abogado yo!? -exclamó ofendido el príncipe a la par que se llevaba la mano al pecho para auto-señalarse- Los odio... pero supongo que he tratado con suficientes para saber cómo se comportan. El señor Praxon tiene razón, puedo hacerme pasar por uno... con asuntos pendientes en Dantooine. Que me acompañe uno o dos de vosotros (uno sería más realista) y los demás, Holonet, tasca local (tal vez esté ahí mismo tomándose algo, o tiene un amigo de borracheras, o el barman tiene su cuenta pendiente). La alternativa d elos historiadores tampoco es mala, aunque muy matizable: si va alguien de vosotros, que diga que es un becario de alguna gazeta o enciclopedia o algo así, un periodista en ciernes que busca emigrados pre-ascenso del senador Palpatine al poder. Por lo que sabemos quien buscamos estaba destinado aquí antes de la implantación del Imperio. El término que deberíais utilizar es "historia oral" (testimonios de personas que no lo escriben ellas mismas, entrevistas enfocadas a la emigración desde el Núcleo, el ascenso del Imperio, algo así). Sí, puede funcionar. Buscad "viejos colonos para una entrevista de historia oral, para dar voz a los emigrados". ¿Qué os parece? -añadió al fin, pidiendo opinión, como si se le hubiera ocurrido de repente que los demás pudieran tener una.

A la par que el anciano príncipe humano desarrollaba las ideas el Twi'lek ingresaba datos en la computadora de la nave a dos lekku y exclamaba "Aham", "aha" y "si" indicando que eran buenos aspectos a tener en cuenta.

Si podía ingresar a la red planetaria (que además debía ser ínfima dado el número de habitantes) intentaría buscar humanos registrados que llegaran por esa época difusa en la que la aun no había nacido. Luego tiene una idea y hace más específica la búsqueda añadiendo que eran humanos adultos.
Hizo una pausa, atónito.

-Oiga, Baker, usted que sabe de la cosa de los yedai ¿Con cuantas décadas le nombran "Caballero"? ¿O es cosa de mérito y podría haber llegado con cinco años?-.

-La idea de los historiadores no es mala- dice pensativo Baker -podria resultar, aunque seguramente tendremos que hablar con bastante gente, seguramente sera menos llamativo que un abogado y lenvantara menos supicacias- continuo diciendo con tono serio -la mejor manera de hacerlo que es que el senador se hiciera pasar por el investigador senior y Sidias por el becario, mientras que yo y Nun seriamos los guardaespaldas y Suta nuestro trasportista- añade con gesto conciliador, a lo que añade -Sidias ¿has mirado el contenido del chip que te dio el maestro Skywalker?- pregunta con curiosidad Baker.

-Los jedis no buscaban posesiones materiales, eso si no recuerdo mal lo que me conto un compañero que servio con varios de ellos durante las guerras clon Suta, lo mas que buscaban era el saber y ayudar o el menos eso me dijo el sargento que sirvio con ellos- responde Baker a la primera prengunta de Suta -en cuanto lo de ¿a que  edad eran nombrados caballeros?- continuo Baker para responde a la segunda pregunta -pues si no recuerdo mal las historias que contaron varios veteranos de las guerras clon, por regla general los aprendices solian alcanzar el rango de caballero entre los 20 o 30 años, dependia de cada caso y de cada maestro- a lo que añade tras un instante pesativo -seguramente el tipo que buscamos tendra entre 50 o 60, puede quizas mas. Seguramente cuando le encargaron la mision debia de tener alguna experiencia (no creo que mandaran a un novato o a un aprediz a una mision en solitario), así que como dijo el mastro Skywalker seguramente estemos buscando ha alguien ya mayor- finaliza pesativo.

Con las especificaciones de Baker seguí en mi trabajo, especificando y haciendo más precisos los filtros para tener una lista más acotada de la gente que coincidía con nuestro esquivo Jedi.

-¿Que tal si decimos...?- murmuré mientras configuraba el motor de búsqueda -Si, sería buena idea- asentía y, finalmente, consideré que eran suficientes especificaciones -Si decimos que parte de los creditos conseguidos con la venta de esta recopilación serán donados a víctimas de la guerra podríamos llamar su atención ¿Verdad?- me encogí de hombros -Al menos atraeríamos gente predispuesta-.

Me incorporé y miré fuera de la nave sin descender -ahora ¿Habrá impuestos por amarra en este puerto?-.

Mientras los planes de acción se iban formando, Suta trató de buscar información que les pudiera ser de utilidad.

Kavvarad era un planeta inicialmente deshabitado. Poco antes del inicio de la guerra, tras diversas exploraciones y prospecciones, la compañía minera se había establecido para explotar sus recursos mineros. La pequeña colonia se había ido formando poco a poco con la llegada de seres atraídos por la oportunidad de trabajo, ya fuera en la minería, o en cuanto a servicios que podía ofrecerse a los mineros. Sin embargo, esencialmente, Kavvarad, no seguía siendo más que una explotación minera privada en el Borde Exterior con sus trabajadores acampados en las cercanías.

Eso significaba que no existía una representación del gobierno galáctico, actual o pasado.

La red planetaria no consistía más que en una red de noticias locales, con los añadidos periódicos de la información proporcionada por el enlace de la estación minera.

No había un censo de la población disponible, ni noticia alguna que pudiera indicar la presencia de un Jedi.

Nun escuchaba atento las propuestas de sus compañeros para infiltrarse en el planeta y dar con el jedi sin levantar sospechas. Si el caballero jedi se enteraba de que estaban detrás de él podría huir y sería más difícil, o imposible, esconderse.

-Vaya amigos, la verdad es que sois bastante imaginativos, mi único plan era ir a un bar y tratar de obtener información. Las ideas que proponéis no me parecen malas pero quizá ayudaría si antes nos informamos de la situación del planeta. Para eso en cantinas, bares y cafeterías basta con "abrir" un poco los oídos, a veces solo con eso se obtiene información de lo más jugosa. Quizá podríamos ir uno o dos de nosotros como avanzadilla a ver qué se cuece.

Nun sabía moverse por esos ambientes por eso hacía esa propuesta, tampoco le importaba el riesgo.

Escucho las propuestas del grupo y me parecen interesantes casi todas.

Creo que ir todos juntos no se si es buena idea, llamaremos más la atención que si nos separamos. Podríamos hacer dos grupos por un lado el de historiadores y por otro el de investigar en la cantina local, incluso pueden hacer de avanzadilla como dice Nun

-Bueno, que decepcionante... No tienen un servidor- dije tras constatar los resultados de la máquina -habrá que hacerlo de la forma primitiva, parece-.

Miré a los dos grupos que se habían conformado -Creo que como no tengo idea de lo que hace un Yedai, en cualquier grupo sobraría... Aunque-.

Busco entre la información periodística del planeta la zona con menos situaciones de violencia que acabaran en daños severos o muerte, si lo que le habían dicho hasta ahora era verdad esos santurrones jedi seguramente se inmiscuirían en la comunidad, cuanto menos de manera furtiva, para evitarle penares a la población.

Compartí lo encontrado con los demás y concluí -iré con quienes prefieran-. Aunque claramente prefería ir con mi amigo Sidias.

Baker escucha a los demas mienbros del equipo y finalmente dice -Bueno parece que la idea esta mas o menos clara, nos haremos pasar por unos historiadores que estan estudiando la caida de la antigua Republica y el ascenso del Imperio y que estamos buscando gente que viviera esa epoca, Wulryk hara de investigador senior y  Sidias de becario/estudiante, le acompañara Suta- dice Baker para resumir lo que hasta ahora se hablado -mientras Nun y yo pasaremos por los antros locales para ver si nos enteramos de algo util- continua resumiendo Baker -¿algo que añadir a lo dicho?- pregunta con seriedad Baker.

Finalmente las dos misiones quedan definidas. Por un lado la búsqueda de historias y por otra información.

Decidí acompañar a Wulryk así cubriría las espaldas del viejo senador. Nun'zacris y Baker optaron por ir a la cantina. Suta no parecía decidido pero no le hacía ninguna gracia enviarlo a la cantina en una misión que parecía condenada a acabar en lío, nunca sabe uno lo que puede encontrar en una cantina. Así que le dije que viniera con nosotros, tendría que vigilar a dos lo cual me daría bastante trabajo pero prefería tenerlo cerca.

Sí, una cuestión respondo a la pregunta de Baker, nosotros tenemos el holodisco, no lo olvidéis, si dais con el jedi avisarnos por el comunicador , solo teníamos un holodisco lo que podía complicar las cosas.

Antes de ir a mi juicio faltaba un pequeño detalle, Wulryk, ¿Tienes algunas ropas de sobra? le dije mientras contemplaba mi vestuario, que parecía cualquier cosa excepto las ropas de un historiador, Suta, con los comunicadores podemos grabar entrevistas? Si no...¿Tenemos algo?

Los datos de Suta eran muy interesantes, un lugar donde se haya reducido la violencia es un buen sitio para empezar a buscar a alguien. Dejaré la dialéctica en manos de Wulryk que se le da mejor.

Tomando lo poco que encontré me decanté por seguir a Sidias, al menos no iba a aburrirme o perder un diente. Entendí que era la mejor idea.

Sugiero a mi sub-grupo dirigirnos a algún centro social o médico, si es tan antiguo el jedi quizás necesite atenciones. En el camino me dispongo a leer la información acerca del accidente laboral, al ser catalogado como un acto de violencia seguramente una o más personas habían sido las causantes del suceso.

El senador parecía ducho en el tema, pero podría ayudarle.