Partida Rol por web

Sería difícil decir si fue la "maniobra de distracción" del Coronel o la propia sorpresa de la patrulla al ver al equipo SG en aquella nave lo que distrajo su atención pero la realidad es que su sorpresa le dio tiempo al SG1 de dispersarse y coger una posición privilegiada en el combate. Los continuos recovecos de la nave eran una buena opción para refugiarse y así lo hizo la Mayor Boyd. La Teniente Pratt la imitó poniendo también a salvo a Laomé de los disparos que estaban a punto de llenar el pasillo de la ha'tak.

Mientrastanto, el Coronel soltaba su discurso y el jefe de la Alianza Lucien tardó unos valiosos segundos en dar las instrucciones a sus subordinados. Aunque ahora el SG1 había ganado la iniciativa, el Coronel estaba en plena linea de fuego.

En el momento preciso, me agacho para permitir un espacio para los disparos el resto del SG1. La maniobra de distraccion habia funcionado, al menos eso me parecia, dandole oportunidad a los demas de buscar posiciones ventajosas, y mas aun, de sacar a Laome de la zona de fuego.

Pero la situacion seguia siendo comprometida para mi, muy comprometida, asi que hago mi mejor esfuerzo para saltar a un lado haciendo una pirueta al mejor estilo de un acrobata, mientras al mismo tiempo mostraba el arma que llevaba a la espalda y la acciono apuntando al soldado que tengo mas cerca...

El Coronel había actuado rápidamente para proteger a su equipo, eso había sido fácil. Ahora venía la parte más complicada: protegerse a sí mismo. Cuando vio que los demás habían sacado a Laomé de la zona de peligro intentó saltar hacia uno de los recovecos del pasadizo y disparar desde allí.

La maniobra le acercó al lateral, pero estaba lejos de tener la cobertura adecuada para seguir disparando desde allí. Sin embargo, con un disparo preciso consiguió liquidar a uno de sus enemigos, el que estaba más cerca, consiguiendo así salvar su vida. No pudo impedir sin embargo que uno de los disparos de los soldados le hiriera levemente en el hombro derecho. La herida dolía, pero aún podía mover el brazo con total libertad.

Por su parte la Teniente Pratt escondió a Laomé apartándola por completo del tiroteo y aprovechó la cobertura para apuntar hacia su objetivo. La Mayor Boyd, al no tener que preocuparse por Laomé, pudo disparar con libertad una ráfaga de proyectiles contra uno de los soldados que cayó al suelo.

Los demás disparos se perdieron en el pasadizo, pero empezó a sonar una especie de alarma en la nave que advertía la situación. Al menos eso pensó el Coronel Vargas al escuchar la palabra "kri" por los altavoces de la nave.

Dos menos penso Nick.

Se retira para cargar su arma mientras los disparos de la teniente entretienen a los soldados.

Luego vuelve a buscar un nuevo objetivo y dispara.

La alarma suena, vendran mas ...

La Mayor empieza a pensar en su próximo paso ... puede que le encuentre un nuevo uso al C4 que salvo de los anillos.

"Vaya! Le acerte!" pense en la fraccion de segundo que transcurrio al ver caer al soldado a quien le dispare e inmediatamente continue con mi movimiento de escape, aun no me encontraba precisamente a salvo, asi que le doy continuidad a mi movimiento de saltar a un lado procurando ahora rodar por el suelo, buscando llegar a algun recodeco dondetener algo de cobertura... todo ello mientras sigo disparando el zat contra los soldados enemigos...

El Coronel Vargas reaccionó rápidamente y se cubrió en un recoveco de la nave, a la derecha, unos pasos más cerca del objetivo que la Mayor Boyd. Sin embargo, su disparo sin embargo se perdió en el largo pasadizo al no tener suficiente tiempo para apuntar al objetivo.

Los disparos de la Mayor Boyd y la Teniente Pratt tampoco acertaron en el blanco. Aunque las paredes de la nave proporcionaban una cobertura excelente, también dificultaban el disparo y el combate amenazaba con eternizarse, algo que el SG1 no podía permitirse.

Mientrastanto, uno de los hombres salió corriendo en dirección contraria a la posición del SG1 y eso sólo podía significar una cosa: más problemas.

 - Tch! - Empece a apretar los dientes  con fuerza al ver como uno de los soldados se alejaba del combate, era algo que no podia permitir, aunque la alarma ya habia sonado no necesariamente el enemigo sabia lo que estaba ocurriendo exactamente, asi que aun podriamos llegar a la sala de mando... siempre y cuando el resto de los soldados enemigos no fueran avisados de nuestra posicion exacta!

- Apunten bien al enemigo y cubranme mientras me encargo de ese mensajero de Marathon - Ordeno al resto del SG-1, hablando del soldado que se alejaba haciendo una clara referencia al antiguo corredor griego que corrio 40 kilometros para llevar el mensaje de la victoria en la batalla de Marathon..."Pero esta vez el mensajero caera antes de llegar a su destino"

Saco un poco el cuerpo de la cobertura que habia obtenido y apunto con "sin prisas" al soldado que huye del combate, sin importarme el hecho de que me vuelvo un blanco mas facil, ya que espero que el resto del SG-1 se ocupe de mi cobertura y hago un disparo certero sobre el enemigo que se aleja...

El Coronel entendió que no podía permitir que ese soldado escapara. Si conseguía llevar la información hasta donde fuera que iba, no podrían salir de allí. Tomó una decisión rápida, aunque sumamente arriesgada.

Con el resto del SG1 cubriéndole, salió de su cobertura y apuntó al soldado que salía corriendo. Los disparos se sucedían a su alrededor, pero el Coronel ignoró el entornó y fijó su blanco. Sólo un militar con la experiencia del Coronel habría sido capaz de actuar con semejante sangre fría. Disparó contra su objetivo con la zat y un destelló de energía recorrió el corredor hasta impactar de lleno en el soldado, haciendo que este cayera al suelo debido a la fuerte descarga.

El Coronel dibujó una sonrisa de satisfacción en su rostro al tiempo que empezaba a pensar en volver a recuperar la cobertura. Pero fue demasiado tarde. Una descarga impactó en el hombro donde antes había recibido la herida, provocándole una severa quemadura.

Coronel!!- gritó la Mayor, que había visto como la descarga impactaba en su superior-.

Mayor ve como vuelven a dar al coronel.
Esto ya se estaba eternizando.
La Mayor apunta a la cabeza soldado que disparo al Coronel y dispara una ráfaga.
Seguidamente cambia de al segundo soldado y vuelve a disparar.
Hay que avanzar!, piensa.

Realizo mi disparo y tengo exito, he alcanzado al soldado que escapaba en busqueda de mas ayuda. Por desgracia, yo tambien fui alcanzado...

- Mald... - por un momento, la herida casi me saca un abrupto a modo de queja. Vuelvo a mi posicion protegida antes de que me puedan alcanzar nuevamente - Vamos SG1, tenemos que acabar con esto! No podemos quedarnos aqui eternamente! - Y sigo disparando.

Con la amenaza principal neutralizada, el SG1 no tuvo problemas para deshacerse de los dos soldados que quedaban. Dos disparos certeros de la Mayor Boyd y la Teniente Pratt lograron abatir al resto de sus oponentes.

El combate se había alargado durante unos segundos más de lo que habría preferido el Coronel Vargas y, en estas situaciones controlar el tiempo era esencial para salir con vida. Debían actuar rápido. Además, ya no contaban con el factor sorpresa pero podían monitorizar las conversaciones de sus oponentes a través del transmisor que había recogido la Mayor Boyd.

Parecía que la alarma se había disparado principalmente en el nivel que se econtraban ahora. Si conseguían llegar al nivel superior a tiempo, lograrían evitar el grueso de las patrullas. Además, la Teniente Pratt se mostró algo preocupada por las heridas del Coronel, quería tratar la quemadura y cubrir la herida con algo de antibiótico y darle una inyección para el dolor; aunque tardarían unos segundos más para ello...

La mayor asegura el perímetro mientras la Teniente intenta curar al Coronel.
- No podemos quedarnos mucho más tiempo aquí prosigamos hacia la Pel'tak.
La Mayor lidera la marcha, más lenta de lo que desearía. Va recordando el plano típico de la distribución de una Ha’tak. Después de pocos pasos se encuentran en una encrucijada. Se detienen en silencio, en el pasillo de la izquierda parece escucharse el avance de una patrulla. La Mayor decide tomar el corredor de la derecha. Después de avanzar un poco más la Mayor se detiene y informa:
- Tras esa esquina deberíamos encontrar los anillos que nos llevan a la planta superior, donde debería estar la Pel'tak. Es posible que encontremos piratas protegiendo esa zona.

Por fin a acabado ese combate, pero el resultado no me gusta mucho, hemos perdido el factor sorpresa y tambien la velocidad de avance.

Cuando la Tte intenta realizar curas en mi cuerpo la detengo con una mano alzada y mi expresion. Es cierto que necesito curar mis heridas y agradezco la intencion de la Tte, pero no hay tiempo para ello. Para cuando la Mayor ha regresado informando de la situacion que puede haber adelante, empiezo a soltar ordenes de manera fluida:- Tte, asegurese que los hombres de Laome suban a este nivel, que ellos nosc ubran la espalda y cuiden de Laome mientras nosotros tres vamos adelante. Que nadie se quede rezagado - Inmediatamente me dirijo a la mayor mientras avanzo al punto donde ella se encuentra:- Necesitamos rapidez y eso no podemos conseguirlo entrando en otra pelea, prepare el C4 para usarlo contra quienes puedan estar detras de esa esquina que menciona - Y ahora, con la rapidez y el sigilo que me permiten mis heridas me acerco a la esquina y me asomo momentaneamente a divisar el terreno que esta adelante.

Detrás de la esquina, la Mayor y el Coronel pueden ver una nutrida patrulla que custodia los anillos de transporte. En estos momentos parece que se activan los anillos trayendo más hombres. Al parecer, por las pocas palabras que intercanvian entre ellos, han venido a registrar el nivel después de que se disparara la alarma.

Mientras el coronel la cubre desde una posición segura, la Mayor se acerca a la esquina y tira una granada al centro de la patrulla pirata.  Seguidamente sale corriendo y se prepara con su arma junto al coronel para neutralizar a los supervivientes.

El camino estaba despejado y, al parecer, aún no había detectado su presencia. Sin embargo, no había tiempo, las patrullas habían salido de los anillos de teletransporte. La Mayor entendió perfectamente la situación. Si tenían que eliminar a todos los soldados de una vez, tenía que ser ahora. Con precisión lanzó una granada hacia la zona de los anillos, cogiendo a los solados por sorpresa. Rápidamente se volvió para cubrirse de la deflagración y esperó, en guardia, a la posible huida de alguno de ellos.

No hubo supervivientes. Los cadáveres humeantes de los soldados estaban esparcidos alrededor de los anillos. Nuevamente, el tiempo apremiaba pues podían volver a activarse en cualquier momento llevando más soldados hacia su posición.