Partida Rol por web

La teniente sonríe ante las palabras cómplices del Coronel.

- Gracias, señor, la verdad es que me muero de curiosidad por verlas...- dice con una sonrisa agradecida.

De repente el Coronel le señala una huellas, pequeñas, pero humaoides definitivamente. ¿Cómo se le habían pasado? Se siente un poco herida en su orgullo pero deja a un lado esas tonterías ante la idea de conocer por fin a alguien del planeta. A la orden del Coronel comprueba que lleve el seguro del P90 seguro y se une a él para rastrear la zona, por si hubiera más huellas o cambiaran de dirección.

- Las lecturas son normales, - explicó ya cerca del altar - sin embargo, emite un sonido. - especificó tanteando la piedra - Puede que esté hueco y haya algo debajo. - concluyó examinando el altar con cuidado.

No pensaba esperar al vaquero paranoico, ademas sino lo examinaba ella iba a hacerlo el doctor Donovan y era evidente que como buen hipocondríaco si encontraban algo raro, podría empezar a auto-enfermar.

Las lecturas se hacen más claras al acercarte al altar, lo que antes era una hipótesis basada en tus nociones sobre la interpretación de la relación señal/ruido ahora se hacen lecturas evidentes. Diminutas, pero evidentes. Parece que es una fuente de energía, la señal es muy débil para tratarse de cualquier fuente grande como un reactor de naquadah o un ZPM. Si es algo sin duda está alimentado por una batería de baja potencia... a no ser que hay algo que específicamente debilite la señal, como un recubrimiento o un aislante.

Examinas el altar minuciosamente con el tablet pero poca información más puedes obtener de él, necesitarías un equipamiento más específico, algún sistema de imagen basado en rayos X o similar para saber qué está produciendo esa señal...

- Definitivamente aquí debajo hay algo... - sentenció echando el tablet a su espalda, quedando este fijado por el contacto del velcro de la funda con el chaleco táctico - Es una fuente de energía muy débil, aunque puede que la roca interfiera en la señal. - explicó comenzando a manipular el altar en busca de mecanismos de apertura.

Había fruncido el ceño con una sonrisa de felicitación, desde luego nadie podía negar que Nick sabía lo que se hacia. Observó el gesto de Donovan mientras buscaba en el altar los mecanismos, al parecer estaba tan emocionado o más que ella. Aunque ella se esforzaba en no demostrarlo, debido al protocolo militar tan estricto que se había auto-impuesto.

- ¿Qué opina, señor? ¿Nos damos a conocer o entramos sin hacer ruido? Habrá que ir con cuidado, no sé hasta qué punto será diplomático el Dr. Donovan si es él el primero en encontrarse con quiera que sea...- la cara de la teniente transmite preocupación, es obvio que es una persona un tanto paranoica del control. Se muerde los labios nerviosa, esperando la opinión del Coronel.

Mientras examino el altar, sin mucho éxito, de repente oigo un ruido seco mas allá del umbral del templo, recordando el aviso del coronel mi mirada se desvía hacia el sonido, con cautela, no quiero alarmar a nadie y menos a la mayor.

luego me aparto del altar i captando la mirada de Niki hago un gesto con las manos i mobiendo los lavios sin hablar, con el brazo izquierdo señalo fuera y con el derecho intento indicar "de baja estatura" poniendo la mano horizontal i paralela al suelo a lo que hago descender esta.

luego sin tener claro si mi mensaje ha sido entendido o ha reforzado la idea de loco que tienen de mi me acerco cautelosamente a la salida de al ruina, 

- Omnes euge amicus

Fue distraída por el arqueólogo que le comenzó a hacer gestos estrafalarios. Desde luego era obvio que no sabía de jerga militar, aun así fue capaz de entender lo que este pretendía decirle, al parecer el buen doctor había contactado con el humanoide de baja estatura del que el coronel había informado unos hace unos instantes.

Siguió al hombre al exterior, algo decepcionada por verse interrumpida su búsqueda del ocasionante de esas lecturas de energía.

El niño parece sorprenderse de que le descubrieras pero al oirte, parece tranquilizarse aunque no se mueve de su posición.

Tuu comprehendas antiquum lingua?

- Ire adelante teniente, mantengase fuera de las ruinas y cuideme las espaldas - le digo con tranquilidad a la teniente - y no se preocupe, no estamos en peligro, de ser asi, ya lo sabriamos - sin esperar respuesta de la comunicacion con la Mayor Boyd empiezo a avanzar en direccion a la entrada de las ruinas, a donde llevan las huellas, mantengo ambas manos sobre la P90, la mano derecha dispuesta sobre el seguro del arma. "Si hay algun mal entendido, no sere yo el primero en disparar" me digo con la tranquilidad de saber que un enemigo ya habria utilizado la ventaja de la sorpresa.

Empiezo a buscar en la entrada de las ruinas y mas adentro, no solo seres vivos, sino cualquier cosa que me pueda indicar el uso de tecnologia de ocultacion...

Al acercarte puedes ver al niño, continúa escondido aunque parece decirle algo que no lo oyes...

Seguís un poco más adelante y os paráis antes de llegar a la entrada de la iglesia. Parece que la Mayor y el Dr. Donovan ya han llegado y están parados cerca de la entrada. No entendéis que están haciendo exactamente allí hasta que veis que el Dr. se acerca tranquilamente hasta unos arbustos. ¡Allí hay alguien! Podéis ver una pierna detrás de uno de los arbustos...

Y no puedo usar alguna capacidad de clase como la inspiración para encontrar algo rapidamente? XD

Observó a aquel chiquillo con curiosidad, su fisionomía y sus gestos, mientras caminaba hacia el doctor y su nuevo acompañante. Pretendía mantenerse en un segundo plano, acercándose con cautela, para no asustar al niño, aun así, necesitaba acercarse para escuchar la conversación y ser participe de en caso de que resultase interesante.

El altar requeriría una estancia prolongada y ser examinado con equipo avanzado, aun así mientras desviaba su atención a socializar con aquel chico en compañía de Donovan, continuaba planteando nuevas teorías sobre como conseguir acceder al interior del altar.