Partida Rol por web

Parece que va a dar una palmada en el aire pero no lo hace.

- Sí - dice - Mucho trabajo, muchas cosas. Pero pocas - dice casi sin detenerse entre las palabras. Se ajusta las gafas de nuevo. 

Cuando le hablas parece dudar y alarga su mano para tocar los papeles aunque no los toca y recoge la mano.

- 5 Millones - dice ajustándose de nuevo las gafas - Esos son muchos millones. Bueno pocos. Pero mucho dinero - dice corrigiéndose sobre la marcha. - Un banco suizo.. - dice - Esos son.. esos son complicados - dice torciendo un poco el gesto- Y no olvidan una afrenta - dice con misterio - Guardan sus secretos con celo.  Es su mayor publicidad. Es un reto - dice y ves que se esboza una sonrisa en su rostro. Tras unos segundos de silencio asiente repetidas veces. - Primero debemos buscar un sitio - dice alzando una mano y poniéndose en pie de golpe  - Será interesante - dice y se frota las manos pero la sonrisa no desaparece de su rostro.

Ya es mediodía. Han pasado de las 13h. Habéis pasado la mañana separados y tanto Luke como Mark se encuentran fuera de la oficina. Está abierta y cuando entran ven que Marion está sentada en su escritorio con Heinz de pie al lado. Heinz parece que está haciendo gestos con la mano pero cuando entráis se lleva las manos a la espalda rápidamente y abre los ojos. 

- Chiiiicos - dice estirando mucho las vocales y se acerca a vosotros. Por un momento parece que os va a dar un abrazo o algo pero al final retrocede. - Me alegro de veros. Esta tarde podré ayudaros. Creo que ya podré salir de casa - dice y se agacha un poco para después subir a la parte de arriba de la oficina donde guardas sus cosas. Pasan unos pocos segundos hasta que le ois volver de nuevo - Marion. Seguimos hablando luego - dice siempre con ese halo de  misterio que le caracteriza.

Saludo con un gesto de la mano a Luke y Mark cuando entran y después contemplo divertida a Heinz. Cuando se dirige a mí asiento con la cabeza. - Sí. Encontraremos un sitio. 

Cojo de nuevo el móvil de encima de la mesa y mando un mensaje a Ian:

Ya están todos aquí. Ven en cuanto puedas ;).

Después me giro hacia los recién llegados y me pongo en pie. - Clark estará a punto de llegar. Bueno, ¿dónde queréis comer? Había pensado que podíamos coger algo para llevar y comer aquí o en casa mientras os explico... - Hago un gesto hacia mi mesa, que está llena de papeles con distintas marcas de rotuladores de diferentes colores y flechas que unen unas cosas con otras. - Bueno, todo. - Me encojo de hombros mientras levanto la mirada. - Aunque también podemos ir a algún sitio y os hago un resumen si lo preferís.

Me guardo el teléfono en el bolsillo de la chaqueta y le doy unos golpecitos desde fuera, cojo la plaquita con su nombre, para despedirme de ella y luego dejarla con cuidado. De camino al ascensor ya voy respondiendo al mensaje, quiero ver si me da tiempo de pasarme por la comisaría.

Ian: 13:30 Oficina, perfecto.

¿Esta mujer no sabe salir de la oficina? Pensé que iríamos a comer por ahí. Bueno igual se me ocurre algo de camino...

Me alegra ver a Heinz fuera de la habitación por fin... y vestido -compruebo sorprendido.

Tampoco deja de sorprenderme que haya salido de casa, aunque lo haya hecho para ir a la oficina nada más...

Asiento cuando pasa a mi lado orgulloso como un padre de su hijo tras un examen de ingles como este**

Sigo con la mirada a Heinz hasta que se pierde al doblar la esquina.

Bravo Marion. No se como lo has conseguido pero sigue haciéndolo.

Ante su pregunta me encojo de hombros. No me apetecía volver a mi aburrida vigilancia. estaba convencido de que nada iba a sacar de esos dos investigadores.

Esperamos a Ian y nos pones al día. Estoy deseando saber qué tienes que decir.

¿Os hace una incursión al Burguer Shot?

Las primeras palabras de Mark hacen que una sonrisa orgullosa se dibuje en mis labios y asiento levemente con la cabeza. Después tamborileo sobre la mesa con los dedos mientras miro el móvil, esperando alguna respuesta por parte de Ian. Aunque tal vez en lugar de responder directamente aparece.

- El Burguer Shot estará genial. - Afirmo, dejando el teléfono de nuevo en la mesa. Empiezo a recoger los papeles en lo que esperamos, preparando para llevarme los que me hagan falta para explicar lo que he descubierto.

Escucho a mis compañeros, manteniéndome en silencio. Desde que he llegado no he dicho nada. Un leve gesto de cabeza para saludar a mis compañeros mientras en mi cabeza no hago más que pensar qué estará pasando. Mis ojos están clavados en el horizonte, concentrando mi mente. Por un segundo, hasta se me pasa cuando Heinz se va, pero no salgo de mi ensimismamiento. No puedo evitar pensar en los dos días de vigilancia que parece que no han servido de mucho. Sin embargo, Marion no suelta prensa. Tampoco presiono.

Mis compañeros proponen ir a comer a algún sitio mientras discutimos el plan a seguir. No digo nada. Me da igual dónde comer la verdad. Quiero saber qué ocurre. Pero sigo sin abrir la boca. Cuando se deciden por el Burger Shot y me miran, como preguntando por mi opinión, simplemente me encojo de hombros. "Voto en blanco" parezco estar diciendo.

Aún falta Ian...

Dejas atrás EasyWater con la sensación del trabajo bien hecho. Coges tu bici y pones rumbo a la comisaría del Jefe Hopkins. Por suerte te pilla de camino. 

El tráfico de la ciudad es infernal y con la bici te da la sensación incluso de avanzar más rápido que aquellos que optan por el coche. Una moto. Esa sería también una buena opción. 

Llegas a la comisaría y aparcas la bici. La candas a pesar de dejarla enfrente de la comisaría. Recuerdas Chicago perfectamente y una bici sin candado es un riesgo innecesario. Entras en la comisaría  y solicitas hablar con el jefe Hopkin. No tardan en enviarte a su despacho donde lo encuentras trabajando en un montón de cosas. Tiene un gran número de expedientes encima de la mesa sin duda de muy divesos casos. Cuando entras levanta la mirada y sonríe.

- Ian. - dice - No esperaba verte tan pronto. Sigues igual de hiperactivo que cuando eras... bueno.. - dice con cierta nostalgia. - Aquí tienes - te dice tendiéndote el informe - Mejor. Así puedo devolverlo esta tarde y no preguntarán demasiado. La administración.. - dice y se encoge de hombros. 

En el informe tienes la evaluación de todos los proyectos presentados y el veredicto del jurado. También encuentras el informe de  Leivan Dolpher en el que alerta al jurado de la irregularidad que supone el cambio de proyecto con el plazo casi vencido. A pesar de este informe  el proyecto de Hidronet que ves evaluado es el segundo entregado según lo que lees unos minutos antes del cierre del plazo. No hay rastro del primer proyecto, si es que lo hubo  pues sólo el informe del interventor lo menciona. Lees el veredicto y por lo que parece el proyecto de EasyWater y el de Hidronet tenían prácticamente los mismos puntos con el de EasyWater un poco por encima. Al parecer ante la práctica igualdad entre ambos proyectos se decidió que merecía más la confianza Hidronet pues había trabajado con éxito antes para la ciudad. Memorizas todo lo que puedes y le devuelves el informe al jefe Hopkin para ponerte en marcha de nuevo a la  oficina. 

Has tardado un rato en leer el informe y en tratar de memorizarlo. Llegas a la oficina casi a las 2 de la tarde y allí están tus compañeros, Marion, Luke y Mark. Por los ruidos parece que Heinz está arriba de la oficina.

En cuanto mencionáis el BurgerShot escucháis como Heinz rumia desde las escaleras. Sea lo que sea que esté haciendo allí arriba no le ha impedido tener una oreja puesta en vuestras conversaciones. Todos sabéis lo que opina de la comida que no haya "cocinado" él. Aunque le oís rumiar tampoco dice mucho. 

Tras unos segundos de incertidumbre Marion recibe un mensaje de Ian. 

Ian: 13:30 Oficina, perfecto.

No queda mucho para que de esa hora así que decidís esperar a que llegue el que falta. Heinz tampoco parece estar preparado para salir de momento. Mientras Marion recoge sus cosas Luke y Mark aguardan pacientemente. Cuando son casi las dos de la tarde aparece Ian por la puerta de la oficina. Casi a la vez Heinz baja las escaleras mientras se acaricia la barriga. Está listo para ir a comer.

Os montáis en el coche de Mark con vuestros enseres personales y ponéis rumbo al BurgerShot.

El tráfico de la ciudad parece que no disminuye lo más mínimo y os cuesta un poco más de lo normal llegar al establecimiento de comida... rápida. Una vez llegáis allí Mark aparca y salís del coche. Los 5 juntos entráis en el coche aunque no es que disfrutéis del espacio vital suficiente, sobretodo los de la parte trasera. 

Marion había ido de copiloto y los tres chicos atrás mientras Mark conducía. Nada más aparcar Heinz sale del coche casi de golpe y da dos vueltas sobre si mismo cuando ya está fuera. 

- Joder Mark, tenías que haber dado dos vueltas como te dije. Ahora cualquier sabe a dónde hemos venido - dice alzando las manos como si fuera lo más obvio del mundo. Heinz acostumbraba siempre a ir a los sitios dando rodeos e insistía normalmente en su importancia. Aunque fueran rodeos de una o dos horas.

Sonrío al ver a Heinz actuar de forma... bueno... de forma Heinz. Casi siempre era divertido observar sus multiples taras. Lo cierto es que las disfrutaba hasta que dejaba de hacerlo. Al salir doy tres vueltas al coche corriendo.

No te preocupes Heinz... si nos encuentran les llevo tres vueltas de ventaja -guiño un ojo y le sonrío ufano- Jamás nos alcanzarán.

Por si acaso, doy una cuarta vuelta andando. Ahora sí - le digo confidente -cuatro vueltas... son cuatro.

Aún a riesgo de tener que cumplir con ello añado. La próxima vez cocinas tú. Sabía que eso lo tendría ocupado pensando en las múltiples posibilidades y sobretodo en las múltiples formas de experimentar con nosotros... y eso siempre le ponía de buen humor.

Entremos pues, a esta hora no debiera ser complicado conseguir mesa para los cinco.

El olor a fritanga asalta mis fosas nasales. Olía a gloriosas delicias de pollo empanadas, a aceitosas y azucaradas burguer donuts, a alitas picantes, a carne a la parrilla y a puro y duro colesterol.

Me encanta el olor del napalm por la mañana -digo citando la mítica película Apocalipsis Now.

Sabía que Marion tenía cosas importantes que contarnos, nunca nos reunia si no era por algo importante. Con esto en mente solo pude girarme a ella y comentar -Me importa poco si lo que tienes que decirnos es importante o no. Sólo por esto ha valido la pena dejar a vigilancia y por verte claro -Le guiño un ojo para que sepa que no todo lo digo de verdad.. ¿o sí?

Salgo del coche algo mareado, me gusta la ventanilla, pero ir en medio también tiene sus ventajas en las curvas cerradas... Todavía tengo el contrato firmado bajo el brazo, ya que nada más llegar a la oficina, sólo me dio tiempo de dejar la bicicleta y fui arrastrado al coche. No me arriesgo a dejar estos documentos en el vehículo, así que me lo llevo dentro de la fiesta del colesterol a donde hemos venido.

Con el tiempo que hace, yo hubiera propuesto una comida ligera en el parque y para poder hablar sin posibles intromisiones. Pero acabo de llegar y no me gusta que me cuelguen el cartel de mandón que tenía en el instituto. Seguro que tenían algún menu para gente que no quiere llegar a los 120 kilos en los próximos meses.

Bajo del coche con una carpeta donde he metido mis anotaciones y no puedo evitar una carcajada al escuchar a Heinz y ver a Mark correteando alrededor del coche. Joder, es que los tíos son como críos. Siempre. 

- ¿Qué tal ha ido tu reunión, Clark? Parece que te ha comido la lengua el gato. - Comento con cierto tono socarrón hacia Ian mientras entro en el local detrás de Mark.

Con su broma pongo los ojos en blanco y me río antes de responder. - Creo que es importante. Pero tendremos que comprobarlo. - Me dirijo entonces al mostrador para pedir un menú grande de cheeseburguer con extra de bacon. 

Mientras los demás piden busco una mesa lo suficientemente grande para todos y mis papeles y me siento a esperar que estemos todos. 

Heinz hace gestos con la mano y sonríe. Como si supiera algo que desconocéis. Después de sonreir durante unos segundos avanza hacia el mostrador y empieza a volver loco al pobre trabajador. Tras discutir algo del origen de los ingredientes y del precio y tras hacerle reescribir 3 veces el pedido acaba encargando lo mismo que Marion y recoge su bandeja para ir a sentarse en la mesa. Sin dejar de sonreir.

Hago mi pedido, una Spicy Chiplote -*bien picante por favor* guiño a la cajera. *Faltaría más* -responde.

Es una mujer mujer. De las de verdad. Salta a la vista que no usa una talla pequeña en ninguna parte de su cuerpo. Tiene donde agarrar. Debería de pasar más a menudo por el local...

Me acerco a la mesa con mi bandeja.

Marion -digo mientras introduzco un par de patatas en mi boca -creo que te estas haciendo la interesante. Sonrio.

A mi me parece estupendo, no me malinterpretes. Siempre es un placer comer con mis amigos. Además... creo que os tengo a todos aquí reunidos. *Joder tíos* ¡Cómo me gusta esto!

Cuando por fin llega Ian, Heinz baja corriendo las escaleras desde donde parece haber estado agazapado, escuchando nuestra conversación. O falta de ella. Heinz nunca va a cambiar.

Bajamos a la calle, y cuando me dirijo a mi coche, me veo arrastrado al coche de Mark con el resto de mis compañeros. Mark, por ser el conductor disfruta de la suave conducción de su clásico, mientras Marion va a su derecha, dispuesta a disfrutar de las ventajas de no tener que compartir la estrecha parte de atrás. Cojo la ventanilla, justo detrás de Marion, donde puedo entrar sin quejarme demasiado. Soy un hombre corpulento, fruto de los años de entrenamiento militar. Por suerte, ni Ian, ni mucho menos Heinz son especialmente grandes, por lo que, pese a todo, podemos entrar sin demasiados esfuerzos en la parte trasera del Impala. No es nada cómodo ir con tanta gente y preferiría haber ido en mi coche, pero uno no siempre puede elegir.

Llegamos al BurgerShot y Heinz se baja como una exalación del coche mientras grita a Mark por no haber dado varias vueltas para evitar a cualquiera que nos haya seguido. Evito ponerme paranoico y darle la razón a Heinz. De momento no estamos muy metidos en la investigación, pero es verdad que debiéramos ser más discretos. Uno nunca sabe quién está mirando.

Entro en el establecimiento y espero mi turno. Sólo Ian no ha pedido aún. Pido una hamburguesa doble mientras miro con sonrisa socarrona a la mujer que me atiende. No por nada, pero la mirada que le ha echado Mark me ha hecho gracia. Estoy seguro de que la camarera piensa que soy un imbecil. Puede que tenga razón.

Con mi grasienta hamburguese, mis grasientas patatas y mi, espero que no sea grasienta, cerveza me dispongo a disfrutar del pequeña agape de bajo precio que nos disponemos a tomar. En la mesa, Mark acusa a Marion de hacerse la interesante, mientras mastica un par de patatas. Lo cierto es que su cruel comentario no deja de tener cierto punto de realidad.

Sí, vamos Marion, suéltalo. Por si acaso las noticias no son buenas, no pierdo la oportunidad de darle un buen mordisco a mi hamburguesa. Deliciosa. Puedo notar la grasilla por la comisura de mis labios. Me limpio con una servilleta. Por suerte, el servilletero está lleno. Lo voy a necesitar.

Antes de entrar, cediendo el paso a la única dama del grupo, le contesto encogiéndome de hombros.

- Todo bien el líneas generales, después que nos cuentes cosas, quizás tenga una cosilla que decir, pero tampoco es muy importante- una vez dentro miro frunciendo el ceño los carteles de comida. No tengo muchas ganas de hablar de negocios en un Burguer. Esperaré a oir lo que se tiene que decir, pero estoy un poco disgustado con la elección, sin embargo gracias a mis dotes diplomáticas no lo demuestro en absoluto.

Pido una ensalada de pollo y agua. Y espero que Marion nos cuente, en tan agradable entorno, que ha descubierto. Joder cubiertos de plástico, los odio por dos.

Heinz apoya los brazos  en la mesa dejando la bandeja entre ellos. Hace gestos acaparando la atención y pidiendo silencio. Parece que va a hablar pero decide coger su bebida y dar un sonoro sorbo.

Luego mira a vuestro alrededor con cierto descaro. Se levanta y observa para luego sentarse de nuevo. 

Come tranquilo. Pocos segundos después levanta la vista.

- Oh..perdón.. perdón.. era para asegurarme.. sí.. adelante.. - dice mirando a Marion con cierto brillo en los ojos. Luego mira de reojo los papeles de Ian, parece interesado. Aunque no dice nada.

Mis labios se estiran en una sonrisa maliciosa ante la acusación de Mark y Luke. Probablemente están bromeando y no se dan cuenta realmente de la razón que tienen con ella. Pero supongo que ya me he hecho de rogar lo suficiente, así que tras dar un buen bocado de mi hamburguesa, hago sitio en la mesa para sacar mi carpeta y algunos papeles. 

- Veamos. - Empiezo tras tragar y dar un sorbo de mi bebida. - Estuve rastreando las cuentas de los miembros del departamento de I+D de EasyWater. También la de cónyuges y familiares cercanos. No hay nada turbio en ellas, ninguno parece estar viviendo por encima de sus posibilidades. - Hago una pequeña pausa dramática. - Pero sí lo hay en las cuentas de otra persona. Theodore Jackson, el fundador de EasyWater. Tiene más gastos que ingresos y varias deudas en forma de créditos. Su economía no parece ser demasiado solvente. Y no debemos olvidar que la empresa no empezó a despuntar hasta que entró Williams a la empresa. Sin ella EasyWater no habría llegado donde está ahora. 

Me encojo de hombros y continúo hablando. - Después estuve hackeando la web de Hidronet, es más difícil que la de EasyWater y hay mucha más información. Se nota que es una empresa de otro nivel. Pero nada a lo que no pueda hacerle frente. - Agrego con una pizca de fanfarronería. - Entre mucha paja encontré una transferencia de cinco millones escondida y relacionada con la sucursal de Chicago y el proyecto de aguas. - Llegado este punto señalo uno de los papeles llenos de cifras que he impreso y voy siguiendo con el dedo el camino de esa transferencia, marcada en verde. - Mirad aquí y aquí... Perdí la transferencia al llegar a un banco suizo, el Hottinger et Cie. Todavía no he podido colarme en él, pero es cuestión de tiempo. - Miro a Heinz y le guiño un ojo. - Pronto averiguaremos dónde va esa transferencia. 

Hago una pequeña pausa. - Me pregunto si Vittio realmente confía en Jackson, o si lo está encubriendo al darnos la pista del departamento de I+D. En todo caso, creo que las pistas apuntan más hacia él que hacia sus empleados. Puedo seguir vigilando sus cuentas, pero estoy bastante segura de que están limpios en ese sentido. ¿Qué os parece? - Termino finalmente mirando sobre todo a Mark y Luke, que son los expertos en el trabajo de campo. - ¿Deberíamos cambiar el curso de acción?