Partida Rol por web

Todo lo que pueda ocurrir en la alianza y sus alrededores.

Hace ya dos dias que partieron tus sodales para negociar con el conde de Yaroslav. La verdad es que en una alianza tan pequeña su ausencia se nota, sobre todo la de Irina, pues ahora teneis que encargaros vosotros de la comida, menos mal que un sencillo Muto Imagorem es suficiente como para engañar a vuestras papilas gustativas, pues las artes culinarias no son vuestro fuerte.

Pasas los dias constrruyendo el gematorium con las piedras que traiste de la cantera, el trabajo no es demasiado duro, pero te empeñas en hacerlo lo mas perfecto posible, por lo que te demoras puliendo las piedras y colocandolas lo mejor que puedes.

Ya cayendo la tarde un pequeño grito ahogado a tus espaldas te sorprende. Al girarte descubres a un joven, con aspecto de campesino local, que te señala con el dedo, los ojos como platos y la boca abierta.

Te percatas de que quiza sea tu aspecto, o el hecho de que levantas con suma facilidad una piedra de mas de cien kilos con la mano izquierda, o que tu ayudante sea una estatua animada....o quizas la combinacion de todas ellas, lo que ha generado en el joven su estupefaccion.

La repentina aparicion del joven resulta para ti demasiado desconcertante, la verdad es que estabais muy acostumbrados a la soledad del bosque, pero ahora que piensas en ello llegar hasta vuestra alianza solo requiere un minimo esfuero. Seguir el camino dentro del bosque y desviarse por el camino que vosotros mismos habeis ido perfilando a base de ir y volver con el carro y cosas. Diriase que con seguir el camino mas usado se llega directamente hasta las puertas de la alianza.

Ninguno a sido vuestro esfuerzo en intentar ocultar vuestra existencia.

Deberia haber pensado en ellos cuando Ligero nos econtro con tanta facilidad.

Bueno....la impresion a sido la suficiente como para que la concentracion que requeria mantener la piedra se desvanezca. Por lo que esta empieza a caer.

(Aqui haces algo de especificado abajo).

Tras el traspies te giras de nuevo hacia donde se encontraba el joven, intentando poner la mejor de tus sonrisas y levantando la mano derecha a mano de saludo. No te da tiempo para saludar, pues ahora ves tras el a otro joven que ya se aleja a gran velocidad mientras el primero, ya repuesto de su estupefaccion empiza a correr hacia el mismo lugar al que se dirije el segundo.

(La distancia a la que se encuentren dependera de lo que ocurra con la piedra).

El constructor, consciente de lo peligroso que son los accidentes con sillares, opta por apartarse de la trayectoria de la piedra con un ligero saltito para poner espacio de por medio. Obviamente esto reduce considerablemente la posibilidad de hacer nada en relación a los visitantes, pero primero es lo primero.

La situación, por otra parte, tampoco es terrible y podría haber sido mucho más comprometida, como que los compañeros hubieran estado presentes, acabando con sus tapaderas "mundanas". Parece poco probable que los chicos vuelvan con una multitud armada de palos, horcas y antorchas. De hecho, lograr un número significativo de personas en estos parajes ya tendría mérito...

Definitivamente tendrá que comentarlo cuando vuelvan sus compañeros.

Tengo que acordarme de darle instrucciones a Petrus para que me avise si llega alguien por el camino mientras no me ayude en algo...

Albus se aparte para evitar que la piedra le produzca daño alguno. Aguanta la respiracion cuando ve caer la piedra hacia el gematorium....si cae sobre la obra una piedra de mas de cien kilos puede originar destrozos considerables.

El constructor respira tranquilo cuando ve que la piedra cae justo al lado de la obra, a un escaso centimetro de la misma.

Por suerte la gran cantidad de follaje y humus del suelo amortigua la caida de la piedra de forma que esta se posa en el suelo, con gran estruendo y vuelo de hojarasca, pero intacta. Al menos no tendra que pulir otra piedra.

Al girarse hacia los extraños estos ya han ganado bastante ventaja y Albus decide dejarles huir. La verdad es que por su edad y condicion social no cree que puedan significar problema alguno. Quizas pase a engrosar la lista de leyendas que seguramente se cuentan sobre el bosque.