Partida Rol por web

Jainas medita las palabras de Tharlatos.

- Tal vez tenga razón. Ignoro si podemos atraer a seres peligrosos nocturnos. Siempre podríamos levantar unas rocas en torno a la hoguera para amortiguar su brillo lejano ¿Que os parece?

Mientras Jainas, Razar y Thartalos discutían sobre si hacer fuego o no me quite la tienda de campaña de la espalda y la empece a montar. Al de unos minutos ya tenia mi pequeña tienda de campaña montada. Como estos tres seguían discutiendo sobre si era mejor hacer fuego o no decidí coger un par de cuerdas de las que llevaba encima para hacer un par de lazos y usarlos como trampa.

-Voy a colocar estas trampas por algún lado, vuelvo en un momento.- dije a Salomon

Tenia que alejarme una distancia mínima para poner las trampas, ya que tampoco quería que los ruidos o la luz alertasen a los animales.

Si haces un lazo y lo colocas a la altura de la cabeza de un conejo en uno de los caminos, puede que captures uno si se queda atrapado en el.

Las trampas listas, el fuego oculto y todos durmiendo plácidamente, la noche avanza. Sin embargo a media noche, un gran crujido os despierta a todos de un salto.

El suelo se resquebraja rápidamente a vuestros pies y antes de que podáis hacer nada se hunde con vosotros hacia la montaña. Apenas veis nada porque es de noche, la luz de la luna alumbra lo mínimo para ver que las paredes son de piedra natural y que no es una trampa, pero tampoco lo suficiente como para saber que hay abajo.

Tras un medio minuti cayendo, os frenáis en seco sobre una supericie acuosa en la que podéis recomponeros un poco más del susto. Ninguno hace pié y está todo demasiado oscuro como para ver absolutamente nada de donde estáis. 

"A... aghf!!!" digo intentando nadar a la desesperada.

Cojo algo de aire, y me toco la capa

"L... LUZ!" intento conjurar "¡Salamón! ¡Más Lu...! glugluglu ¡Mas Luz!"

El elfo intenta nadar hasta la superficie, mientras intenta orientarse en la caverna, esperando a que se haga la luz para tomar una decisión.

Esestatais totododos bibien ?, pregunta a sus compañeros...

Voy nadando hasta Razar para ayudarlo a mantenerse a flote.

-Yo te ayudo a mantenerte a flote. Tharlatos, ayuda al enano. No creo que pueda estar mucho a flote. Y sobre la luz... Digamos que es muy racista pensar que por que sea Aasimar tenga luz!

"A.. auf...." intento apoyarme en el bueno de Salamón "B... bueno, para eso estamos los amigos. Para cubrirnos" digo mientras trato de hacer lo más importante para mi en este momento: ¡Seguir respirando!

Intento extender la capa por la superficie, dándole con la mano.

En este momento pienso en Evan, y en lo mucho que me gustaría haberle comprado un flotador. Eso, o uno de esos botes mágicos

Jainas no es buena nadadora y se esfuerza en mantenerse a flote. Oye chapoteos y voces de sus compañeros, lo cual la alivia al saber que están vivos. El problema es que no ve nada y no dispone opción alguna de encender su farol en semejante situación.

- Chicos! Alguna manera de iluminar esto? - Repentinamente escucha a Razar conjurar y obtienen cierta iluminación. Estan, al parecer, en un lago subterraneo. Puede ver como sus compañeros comienzan a moverse buscando un lugar donde salir del agua. Pero ella no sabe si será capaz. Bastante tiene con no hundirse.

El elfo, que es un gran chapoteador, intenta ayudar a Jainas y al enano mientras espera a que la instancia se ilumine para decidir que curso de acción tomar.

La luz de Razar y la visión de oscuridad de Salomon ayudan a encontrar una salida de esa zona. Es un pequeño lago natural formado en lo mas hondo de la grieta, y desemboca en una cavidad en la pared de la cueva.

Ayudo a mis compañeros menos nadadores, a llegar a la grieta de salida. Porpor aqui. Me pongo a buscar las caracteristicas del sitio, por si puedo adivinar si el derrumbe ha sido fortuito o hay otras causas

Habeis caído como 1km y medio. No llegas a ver la parte superior con claridad, aunque tengas un 25 en mazmorras no te sirve para mucho. Aún así te responderé, y te diré que ha sido porque la zona de arriba era muy fina y no estaba preparada para aguantar el peso de 6 fornidos luchadores.

Como cualquier cosa con un mínimo de amor a la vida y un instinto básico de supervivencia, intento nadar hacia la salida. Podremos huir mejor, si. Pero no sin aire ¡Y nadar con unos brazos escuchimizados, y una coraza, es dificil!

Cansada y mojada, Jainas llega a la rocosa orilla con la ayuda del elfo.

- Gracias Thar. Tendré que inventar algo para este tipo de contingencias... y algo tengo en mente - se dejó caer al suelo, jadeando un poco. Posteriormente busca entre sus enseres de mago el farol. Afortunadamente, aunque empapado por fuera, es hermético por dentro. Con la yesca logra crear una chispa que enciende el aceite, añadiendo mas luz al entorno.

- Repongámonos unos instantes antes de continuar hacia la grieta - propone.

Caminando por la cueva, guiados por los que ven en la oscuridad e iluminados por la capa de razar, el grupo llega a una abertura natural e iluminada por cristales blancos.

Ésta abertura es una cúpula, y hay otros dos túneles, uno a la derecha y otro a la izquierda de el túnel por el que habéis entrado. No se aprecian huellas porque el suelo es roca viva y tampoco se escuchan ruidos.

Jainas observa detenidamente los cristales blancos, intentando identificar que tipo de mineral es "¿Cuarzo? No lo veo claro". se arrodilla y coge uno desprendido, en el suelo "Luego lo examino con mas detenimiento" Posteriormente sigue a sus compañeros hasta la bifurcación.

No sabiendo que camino tomar se le ocurre algo tan simple como chuparse un dedo y exponerlo entre ambos corredores, a la espera de si logra sentir alguna corriente de aire y desde donde.

El mineral te es desconocido. Te recuerda a la forma del cuarzo, sin embargo emite brillo en la oscuridad.

Hay corriente de aire en ambos tuenes, que viene de la abertura que habeis provocado.

Vaya, menudas cuebas tan raras... pensaba mientras lo miraba todo bien. 

Me sorprende unos cristales  brillando. Sobre todo en esta tiera TAN virgen.

"Hey Azula ¿Estás bien?" le pregunto a la compañera Hada, una vez que tengo suficiente aire en los pulmones: Con tanta armadura, no estaba en condición de salvar a nadie.

Luego, extiendo la mano hacia las rocas y le echo un vistazo. Una plegaria a Hildegar para que pueda revelar si son rocas mágicas o no

- Pueden funcionar bien como faroles, amigos. Desprenden luz propia. Tal vez no estaría de mas que cada uno cogiéramos una muestra - comenta Jainas mientras juguetea con una del tamaño de un puño. Mira por el suelo y observa otro pedazo desprendido de un tamaño similar al de su mano y lo coge, metiéndolo en su bandolera - Antorcha de repuesto, por si acaso. ¡Y seguro que estas brillan bajo el agua!