Partida Rol por web

Aprovechandome de la altura de Aquamentus,salto y le hago un gran corte transversal en su cuello, lo suficientemente profundo para que tuviese que bajar su cabeza y de esta manera fuera Zelda la que terminase con este enemigo.

Sería los años de experiencia de haber luchado,o capaz que la voluntad de la diosa fuese la que guiaba segura mi mano con la espada maestra para acabar con los enemigos.

No podía estar seguro de ello,una vez que acabamos con la criatura mire a mi amada esposa,teníamos que continuar.

El cansancio se hacía mas y mas evidente,teníamos que terminar esto antes de que mi cuerpo que se movía tuviera que ser movido a base de mi voluntad.

Teníamos que encontrar a nuestra hija y la trifuerza antes de ello.

Mientras continuamos,algo extraño paso,mi estomago comenzó a sonar del hambre que tenía.

Era verdad hacía muchas horas que no comíamos ni nos habíamos detenido para nada.

Aún así,no podíamos ni debíamos detenernos por nada.

Link ya había luchado contra aquella bestia en el pasado, así que conocia sus costumbres y debilidades.

La gran bestia reptiliana atacó lanzandose hacia adelante con la intención de partir en dos al hombre, pero este haciendo gala de unos reflejos felinos rodó hacia adelante esquivando su ataque. Con un movimiento horizontal de su brazo hizo un pequeño corte en una de las patas de la  la criatura haciendo que de la herida brotase sangre negruzca que manchó sus ropas y su rostro.

La reina aprovechando aquella maniobra corrío hacia el costado de Aquamentus con la intención de ganarle la espalda. Tensando la invisible cuerda de su arco magico hizo varios disparos hacia la criatura, su intención no era causarle demasiado daño pues la escamosa piel que la cubría hacia que los proyectiles rebotasen contra ellas, si no distraerle para que Link pudiese salir de debajo de la bestia.

El hombre saltó hacia un costado y lanzó su espada contra el vientre del monstruo hiriendolo de gravedad y haciendo que se tambalease.

Con un rápido giro de su cola atacó a la mujer que se encontraba a su espalda obligandola a retroceder pues el impacto contra el suelo lo destrozó e hizo que volaran pequeños trozos de piedra.

El impacto de una de ellas abrió un pequeño corte en su pómulo izquierdo que sangró manchando su mejilla y parte de sus ropajes.

No es demasiado profundo..., Debo seguir esquivando sus embestidas..., Si uno de sus golpes consigue alcanzarme..., Me destrozaría...

Ella sigió disparando su arco insistentemente hacia la bestia distrayendola, haciendo que está no pudiese centrarse en su objetivo.

Fue entonces cuando Link salto hacia su garganta cortando escamas y nervios. Eso hizo que bajase la cabeza, así que ella haciendo un alarde de puntería sé fijo en uno de sus ojos.

Ya eres mío... -dijo entre susurros al mismo tiempo que soltaba la cuerda.

El proyectil voló certero hasta su objetivo atravesando globo ocular y clavándose le en el cerebro.

Sin emitir sonido ninguno la bestia se quedó rígida posteriormente se desplomo en el suelo haciendo que vibrase toda la estancia.

Ha estado cerca..., Quizá la proxima vez no sea tan sencillo... -dijo entre jadeos por el esfuerzo.

Tras superar el nuevo desafío, avanzar se mantenía como la única opción para poder sacar algo en claro.

Dicho progreso os hizo llegar al final del pasillo, pero dicho trayecto culminó con una grata recompensa:

Aquella gran llave dorada debería poder abrir un acceso importante ¿quizás donde está Tetra?

Tras superar la batalla, recoger la llave y avanzar por la mazmorra el momento que tanto estabais esperando había llegado ¿por qué lo sabías? era más que evidente:

Frente a ustedes yacía una gigantesca puerta adornada con motivos escabrosos: criaturas que parecían observaros o pretendían infundir miedo.

Dicha puerta estaba cerrada, pero una gigantesca cerradura reveló que la llave anteriormente encontrada sería la clave para acceder. El final estaba cerca...

No sabìa como pero seguìa adelante ignorando el hambre y el cansancio marchando siempre adelante para que Zelda estuviese protegida.

Una vez que llegamos ante la puerta que estaba cerrada con ese gran candado por lo cual puse la llave que habiamos conseguido luego de ganar el combate contra Aquamentus,puse la llave en la cerradura para darle vuelta,con la esperanza de encontrar finalmente a Tetra y a la trifuerza.

Si bien no sabìa lo que podìa estar esperándonos detrás de aquellas enormes puertas,si sentìa como que todo estaba llegando nuevamente a su fin.

Pasara lo que pasara,aquì terminarìa todo....por el momento.

Solo podìa rezar a la diosa que cuando fuese necesario,tanto mi amada esposa como nuestra hija escaparan sanas y salvas.

Tras aquella demoníaca puerta se escondía el mal, pues cuanto más cerca estaba de ella era mas palpable la sensación de ira,tristeza y desesperanza.
Al introducir la llave en la cerradura un escalofrío recorrió el cuerpo de ambos.
Por fín amor mío..., Hemos llegado al final..., Solo espero que las indicaciones de aquella maldita bruja no fueran un engaño..., Debemos tener cuidado, pues es posible que al otro lado este al tanto de nuestra llegada..., Armémonos de valor y crucemos el umbral hacia el vientre de la bestia...

Al girar la llave estás introdujo por completo en la cerradura y una tenue luz fantasmagórica empezó a hacerse palpable entre las hojas de la puerta y ésta comenzó a abrirse lentamente...

¿Que peligro les esperaba al otro lado?

Abristeis la puerta y encontrasteis un amplio pasillo repleto de antorchas

El ambiente parecía más y más cargado según avanzabais hasta el punto de sentiros casi asfixiados... pero de repente algo escuchasteis que os hizo abrir los ojos de par en par ¿un sollozo?

Provenía del final del pasillo, o al menos eso creíais. No dudasteis en correr en dirección a aquel sonido que parecía tan familiar. 

Finalmente llegasteis a una sala circular que apenas tenía iluminación, el sollozo era cada vez más fuerte. Vuestros pasos retumbaban por los alrededores hasta que una suave voz rompió el ritmo de vuestras pisadas.

¿Pa... padre? ¿Madre? ¿Sois vosotros?

Dijo la voz entre la oscuridad de la sala.

De repente, en una esquina oscura escuchasteis unos sollozos que iban en aumento, pero lo más importante es que al iluminar más la sala pudisteis reconocer con absoluta claridad a Tetra 

¡Estaba a salvo!

Al escuchar vuestra voz se giró lentamente... su rostro estaba sucio, repleto de lágrimas.

- ¿Padre?¡Madre! - gritó mientras dejó caer algo en el suelo. Al principio no os disteis cuenta de qué era, pero su asombro llegó cuando identificasteis el objeto que vuestra hija había dejado caer para abalanzarse a vuestros brazos... ¿era la... Trifuerza?¿Qué hacía con ella?

- Lo siento, lo siento, lo siento... debéis perdonarme... yo solo... yo solo quería ser como ustedes... yo no quería... no quería... no debí escaparme... -

La reina rompe a llorar mientras abrazaba a su hija, habían sido tantas las emociones los peligros para llegar hasta aquí que el verla salen salva la emocionó sobremanera.

Gracias a las diosas...,¿Estás bien?, Creí que te perdía para siempre...

Después comenzó a besarla en la mejilla y al levantar los ojos vió la Trifuerza en el suelo. Entonces agarro el rostro de su hija entre sus manos y la miro a los ojos.

No imaginas lo que has estado a punto de provocar..., Al retirar la Trifuerza de su lugar de descanso el reino se ha vuelto a llenar de monstruos..., Me temo que es nuestra culpa por no confiar en ti..., Ahora sabes lo que debes hacer verdad ¿Tetra?..., Como futura reina de Hyrule tu deber es regresar la Trifuerza el Reino Sagrado.

Después sonrió y volvió a abrazarla.

Nosotros te ayudaremos..., Pero es necesario que comprendas por ti misma

Al ver a nuestra hija espero que Zelda termine de abrazarla para acercarme a ambas y darles un gran abrazo contenedor,dejo que mi amada esposa vuelva a ser quien le hable para luego sacar un pañuelo y limpiarle las lagrimas a Tetra,y poniendo una cara de alegrìa sonriendo le miro como diciendo ¨Tetra,hija,ya estas grande para estar llorando,eres la princesa despuès de todo,y por sobre todo eres nuestra hermosa hija,era obvio que te buscaríamos por todo el reino¨.

A continuaciòn alzo la trifuerza para que con ella pudiésemos regresar al castillo,luego cambie mi rostro a uno mas serio para como decirle a mi amada reina ¨es hora de volver a casa,vámonos¨ .

Esperaba que tanto Zelda u Tetra usaran la trifuerza para irnos antes que apareciera ese endemoniado de Ganon,luego de entregarlas a ellas saque mi escudo y la espada maestra por si las dudas el demonio intentaba atacarnos mientras intentamos huir de la mazmorra.

Como siempre era mejor estar preparado,y como mire antes a Zelda,si debìan de escapar era mejor que lo hicieran ellas,y se fueran con la trifuerza.

De repente notasteis como el llanto y sollozo de vuestra hija se iba transformando lentamente en... ¿una carcajada? Un escalofrío recorrió vuestro cuerpo cuando comprobasteis que aquella inocente criatura que teníais delante había cambiado por completo.

Sus ojos, antes claros como el mar, ahora se tornaban rojizos, y una sonrisa irónica y a la vez malvada dibujó la angelical tez.

- Malditos ilusos, al final los viejos proverbios que hablaban sobre que los planes improvisados eran más efectivos van a tener razón - con un ágil salto, algo que no era propio de las habilidades de vuestra hija, "Tetra" se apartó de vuestra posición.

- Ahora os tengo justo donde quería, a mano para acabar de un rápido golpe con los "salvadores" de Hyrule y su legado... y a la par quedarme con la Trifuerza ¿podía pedir más? - 

- Defendeos porque de no ser así no me daréis opción a divertirme - sonrió maliciosamente ¿tendríais que luchar contra vuestra propia hija?

- ¡Morid! -

Aquello no me gustaba para nada,al final tenìa razòn algo o alguien estaba usando a nuestra hija para llevar a cabo sus ambiciones malevolas.Si bien era el padre de Tetra tenìa que salvarla de aquella malvada entidad,con lagrimas en los ojos mande una plegarìa al cielo diciendo mentalmente ¨Diosa guìa mi espada para poder salvar a nuestra hija,permite que con mi ataque no la lastime y solo lastime a la entidad malvada que se encuentra dentro de ella,permite el milagro que yo se que la espada maestra puede realizar,ya lo hizo en el pasado y lo volverá a hacer ahora¨ con esa plegaría enviada mentalmente a los cielos ataque con todas mis fuerzas a nuestra amada hija.

Con la esperanza que ese golpe sea certero y acabase con la entidad malvada sin lastimar a Tetra,ahora mas que nunca confiaba en el poder de la espada maestra y tambièn confiaba en el poder de la trifuerza del valor.

No..., Es imposible... - dijo mientras su rostro iba cambiando de la incomprensión a la ira.

Maldíto seas..., ¿Si esto es lo que quieres?..., Es lo que tendrás...

Entonces con un ágil movimiento se lanzó hacia la Trifuerza que estaba aún tirada en el suelo y la recogió alzándola en el aire e interponiendola entre la espada de su marido y su "hija".

¡Nunca serán tuyas

Zelda intentó interceder entre Link y Tetra usando la Trifuerza, sin embargo su marido fue más rápido y consiguió herir a su hija, si es que realmente era ella.

La chiquilla retrocedió, con un tajo en el cuerpo que emanaba sangre, sangre real.

Ella no parecía estar dispuesta a ceder, cogió carrerilla para abalanzarse de nuevo contra ustedes.

Decididamente este no serìa un enemigo facil y luego de pensarlo detenidamente decidì que lo mejor que podìa hacer era defenderme de nuestra hija,no volverìa a lastimarla,no iba a dudar en la protecciòn de la diosa por lo que,luego de muchisimos años decido romper mi voto de silencio y que finalmente asì como algùna vez hice a Tetra y a Zelda escuchar mi voz dije:

-Amada esposa,Zelda no dudes,nuestra hija nos necesita a ambos,no solo necesita de su padre tambièn necesita de su madre,por favor,vos como descendiente de la Diosa,agarra la trifuerza mientras Tetra se concentra en mì,libera su poder para liberarla del malvado Ganon.

Dicho esto pongo mi escudo hyruleano delante para defenderme del ataque que se aproximaba agregando:

-Vamos no dudes,usa a la trifuerza de seguro que responderá tus oraciones.

Luego mirando a Tetra dije:

-Tetra,hija,soy yo,tu padre,esta bien hija,entiendo que tienes miedo pero aquì estamos tanto tu mamà como tu papà para protegerte y guiarte por el camino correcto,confía en nosotros hija,dado que ambos te amamos.

Esperaba con esto despertar el espìritu combativo de nuestra hija y luchase contra esa entidad para acabar con ella.

La reina sostuvo la Trifuerza con una de sus manos y con la otra agarró la de su marido con firmeza y cerro los ojos entonando ésta plegaria.

Diosas..., Os lo suplico..., Dadme  la fuerza para ver a través de la apariencia..., Din... ,Diosa del Poder..., Tu que del caos diste forma a la tierra oscura..., Escucha nuestra plegaria y danos el Poder para derrotar al mal que actúa en el interior de nuestra pequeña..., Farore..., Diosa del Valor...., Tu que llenaste la tierra oscura de agua y vegetación además creaste el cielo y el viento...., Dános el valor para adentrarnos en la oscuridad en busca de nuestra hija y poder regresar con ella de vuelta...., Nayru..., Diosa de la Sabiduría..., Concédenos el conocimiento para para sellar a este demonio en el reino de las sombras si dañar a Tetra...

Y esperó que sí las diosas todavía estaban observando les en alguna parte Intercediesen en este momento.

La Trifuerza comenzó a brillar en manos de sus legítimos portadores. El haz de luz fue tan intenso que Tetra tuvo que taparse el rostro con sus brazos manchados en sangre.

Ella retrocedió, paso a paso, como si esa luz fuese dañina para su ser, para su espíritu ¿estaban haciendo los reyes los correcto?

- Bastaaaa, ¡me dueleee! – gritó la chiquilla la cual no sabíais si estaba sufriendo o si por el contrario se estaba liberando.

- ¿Por qué me hacéis esto? ¿A caso ya no me queréis? ¡Soy vuestra hija! – alzó la voz en un tono amenazante.

A medida que el haz de luz era más brillante los chillidos de dolor de Tetra eran más intensos, tocaba tomar una decisión que podría marcar un antes o un después a esta batalla.