Partida Rol por web

The North Stands (CDHyF)

Alrededores de Bosquespeso

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02/05/2020, 01:06
Director

Mañana del 2 del mes I, año 212 después de la Conquista de Aegon Targaryen

Posada cercana a Bosquespeso

 

Al despuntar el alba, un fuerte revuelo agitó el campamento. Hombres y monturas iban de un lado a otro para asumir su lugar en la formación antes de iniciar la marcha a través del angosto camino del bosque. Apenas eran cinco las millas que separaban Bosquespeso de la costa, y por ello los exploradores enviados antes del amanecer no tardaron en volver con respuestas.

Pese a todo ello, la bastarda de la Isla del Oso no marcha con ellos rumbo hacia la costa. A fin de cuentas, ha preferido realizar su camino de vuelta por su cuenta, aunque ello suponga esperar algunas horas dado que el camino está ocupado por la hueste norteña.

Siguiendo el camino que se aleja en dirección al norte se ubica una posada en una intersección, señalando los diferentes destinos a los que llevan los senderos que parten hacia los puntos cardinales. Aunque no hay caballos o carros en el exterior ni hay viajeros en las mesas de su patio, la posada se encuentra abierta, pues hay algunas personas realizando sus quehaceres diarios.

Ante la incertidumbre que supone una batalla, quizá lo mejor sea hacer tiempo o recabar información, pues comenzar el viaje a ciegas podría ser una decisión fatal. A fin de cuentas, esos bosques son profundos y desconocidos para Jonelle.

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02/05/2020, 10:12
Jonelle Nieve

El problema de ser bastarda y haberse criado entre nobles tenía su consecuencia. Jonelle no debía esperar un trato honorable por parte de los Glover, eso estaba claro, a pesar de que hubiera sido la elegida por su tío para llevar aquel comunicado al señor de la región, pero tampoco soportaba las humillaciones, y en un día habían sido las suficientes como para albergar rencor por aquella casa y no desearles ningún bien ni a su señor ni a su familia. Y sí, podía decirse que la mujer estaba celosa por la vida que podía haber tenido y que jamás le llegaría, ya con su treintena encima estaba claro que moriría peleando, soltera y sin gloria.

Ella era valiente, no le daba miedo aventurarse sola en el camino, así fue como llegó a las tierras de los Glover desde la Isla del Oso y si podía hacer la ida, sin dudar, también haría la vuelta.

Su caminar le llevaría hasta la intersección, donde había una posada. No había desayunado, y no le vendría mal una hogaza de pan rebajada con cerveza, eso y algunas directrices para poder llegar lo más cerca posible de su hogar, en la costa, quizás los barcoluengos hubieran abandonado las aguas próximas al continente, al fin y al cabo el ataque era ahora más al norte. Bosqueespeso era una zona difícil de transitar y a la mínima podría perderse.

- Buen día... Busco un desayuno ligero, pan, jamón y cerveza..., y una hogaza para el camino... - pidió la mujer una vez entrase en la posada y se acercase a la barra. Observó si había algún alma allí dentro y se centró en su labor de preguntar -... ¿Hay algún sendero seguro para poder atajar desde aquí hacia la Isla del Oso?.... - No se andó con rodeos, estaba deseando llegar a su hogar y dejar atrás a los malnacidos de los Glover y sus putos vasallos.

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02/05/2020, 15:12
Norteño

El interior de la posada se encuentra completamente vacío. No hay nadie en las sólidas mesas de madera y en la chimenea apenas humean las apagadas brasas del día anterior. Dentro hay un hombre encorvado tratando de reparar la pata de un taburete, mientras que junto a la barra hay una mujer de buena estatura preparando una modesta cantidad de alimentos para la comida del día. 

Buenos días, no esperábamos mucha clientela hoy — Saluda con amabilidad, pues probablemente seas la única clienta del día. Esta deja pronto lo que está haciendo para preparar aquello que se le ha pedido.

La pregunta es respondida desde una de las esquinas de la barra. — No hay senderos seguros últimamente por aquí. Hace un par de días desaparecieron unos mercaderes que se dirigían hacia allí, me lo digo Pete el marino cuando pasó por aquí para refugiarse en Bosquespeso. — Advierte con tranquilidad — Y para ir a la isla necesitarás un barco, Pete suele llevar mercancías hacia allí todas las semanas, pero el señor prohibió el tráfico por seguridad, y no le falta razón. 

Quizá los pescadores, pero los que no se han unido al ejército estarán escondidos en el bosque hasta que pase todo... — Comenta mientras sirve una jarra de cerveza de un barril. — ¿Qué hay tan urgente en Isla del Oso como para jugarse el tipo con la que está cayendo? — Indaga poniendo la jarra sobre la barra.

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02/05/2020, 15:30
Jonelle Nieve

La tabernera se movió con presteza para servirle, rompiendo el silencio una voz que se encontraba en una de las esquinas del lugar. No había senderos seguros y estaba cortado el comercio marítimo. Por supuesto, ¿qué necesidad tenían los de la Isla para obtener productos de exportación? El Norte los trataba como apestados y en vez de darles recursos para seguir luchando, les impedían poder avituallarse correctamente. Maldito fuera Lord Glover.

- Agradezco su información... - estaba claro que debía buscar pescadores en el jodido bosque si quería regresar a casa, o simplemente dirigirse a la costa y emboscar enemigos durante un tiempo -...La Isla del Oso es mi hogar,  la tierra que juré proteger y donde voy a morir - y no ese asqueroso territorio que actualmente pisaba

La mujer se fijó en el tipo que le daba la información, atenta a sus rasgos -...Vos no huís... ¿os preparáis para luchar?

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04/05/2020, 23:39
Norteño

La mujer no oculta ahora un vistazo de arriba abajo a la forastera, esbozando una sonrisa de tenue admiración. — Ya me parecía a mi, con todas esas armas...al final van a ser ciertas las historias que cuentan — menciona en alusión a las mujeres de la Isla del Oso.

Pero...probablemente mueras antes de llegar ¿Por qué no esperas a que el Guardián y el señor pongan fin a todo este asunto?  — Aconseja preparando la hogaza de pan. — Parece ser que hoy va a haber una batalla — Confiesa con un deje de seguridad.

¿Huir? Tengo a los dos mayores en la hueste del señor, precisamente para que no tengamos que huir — Añade con orgullo. — Además, el castillo está cerca, si hay malas noticias, no quieran los Antiguos, preparamos el carro y nos vamos. — Comenta con forzado optimismo, alejando cualquier preocupación de su mente. A fin de cuentas, sus hijos han partido al combate.

 

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05/05/2020, 08:36
Jonelle Nieve

- Bueno, hay historias que son ciertas y otras que no, según la lengua que las narre.... - fue la respuesta a la mujer cuando hizo alusión a los rumores, estaba convencida de que pronto los peores comentarios sobre ella llegarían a tabernas como la que actualmente pisaba -...No puedo esperar a que este asunto se allane, las tierras de mi señor precisan todos los brazos disponibles, tantos como enemigos surcan últimamente las aguas....

Parecía que los jodidos "calamares" estaban en todas partes y, aunque le gustaría pensar que si atacaban tan adentro en el continente sus islas estuvieran fuera de peligro,  sabía que eso no podía darlo por hecho. Debía regresar.

- Sí, los soldados están preparándose... - afirma Jonelle mientras esperaba pacientemente su desayuno y el pan que sería su almuerzo. No quería contrariar a la mujer pero la pregunta que hizo no iba referida a sus hijos. Aquella mujer era como las demás del continente, se hacían llamar norteñas con orgullo pero no defendían su hogar. No, la tabernera no huía pero tampoco luchaba, dejaría que sus hijos lo hicieran por ella.... ¿cuántas manos perdían los Glover por no dar armas a las féminas de la región? Incluso la peor de ellas podía matar en un momento dado un enemigo. Pero se guardaría su opinión, cada vez que abría la boca le llovían los problemas.

- Espero que las noticias os sean propicias y que vuestros hijos luchen con valentía.... - le deseó, era lo más correcto que podía decir en ese momento. No pedía vida para sus descendientes, si debían morir que fuera con valentía y honor, es lo que ella desearía como madre...¿O quizás no?... Difícil saberlo cuando no habías parido.

Jonelle pensó que su mejor opción cuando acabase en aquella posada era o aventurarse en el bosque y buscar entre la gente escondida alguien que le guiara, o avanzar a la par que el ejército de los Glover lo hacía, pero sin mezclarse con este, aunque pasara hambre ya no compartiría más pan con ellos. Decidió que lo mejor era lo primero, aventurarse a los bosques, al fin y al cabo, sabía orientarse.

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07/05/2020, 22:55
Norteño

La mujer se encoge de hombros, pues no se le ocurre ningún consejo para la obstinación de la bastarda. A fin de cuentas poco más puede decir tras confirmar que las rutas habituales se encuentran cerradas y la mayoría de navegantes refugiados a la espera de mejores circunstancias. — Os deseo suerte entonces — Comenta finalmente con una sonrisa amable mientras termina de preparar lo solicitado.

¡Claro que lo harán! Son jóvenes y fuertes, y les he entrenado yo ¡Y también el maestro Forrester! — Apunta con orgullo el hombre que, hasta el momento, permanecía callado. Ese comentario, así como el brillo de su mirada, no dejan lugar a dudas de que se trata del padre. Pese a los tiempos que corren, los norteños de la región al menos se muestran optimistas y decididos a afrontar la amenaza, lo cual dice mucho de su carácter.

Antes de poder añadir nada más, una niña pequeña, de no más de diez días del nombre, cruza el umbral de la puerta con toda confianza. En su pequeña mano juguetea alegremente con un abalorio, el cual llama rápidamente la atención de su madre. — ¿Qué es eso Darla? — Pregunta con gesto inquisitivo. — ¿De quién es? — La niña muestra el collar a su madre, pero no lo suelta, pues parece haberse encaprichado de ello. — Por el camino pasa mucha gente y es normal que se pierdan cosas — Aclara a Jonelle con una sonrisa la tabernera.

La niña hace una infantil negación con la cabeza al oír eso.

Notas de juego

Una tirada de observación fácil (6) diría mucho más del abalorio.

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08/05/2020, 10:47
Jonelle Nieve

Jonelle asintió con la cabeza a la mujer, que alguien te deseara suerte en aquellos tiempos que corrían era una clara señal de cortesía. La tabernera continuaba preparando su pedido cuando la voz de un varón resonó, denotando orgullo al hablar de sus hijos y mencionando al maestro de armas del torreón.

- Un gran hombre Forrester... - dijo Jonelle con total convicción, el trato que había recibido de él era inmejorable y la bastarda le respetaba por ello, además que denotaba más inteligencia con sus palabras que todo el resto del salón de los Glover concentrado -... no dudo que serán grandes guerreros y alcanzarán gloria en el combate, el maestro de armas es alguien excepcional, sabe guiar a quienes tiene a cargo... -y si Lord Glover tuviera dos dedos de frente podría haberle usado para conseguir dos brazos más, los de la bastarda, pero la prepotencia de los poderosos frente al nacimiento determinaba que no consideraba útil a la mujer, aunque supiera manejar el hacha mejor que muchos de los suyos las espadas.

Aparecía una niña pequeña en el umbral de la puerta, y ella llamó la atención de Jonelle puesto que tenía un abalorio entre las manos, un adorno que llamó la atención de la bastarda, que lo observó con detenimiento a pesar de la distancia.

- Parece ser que la pequeña no lo ha encontrado por el suelo... - comenta Jonelle al ver la negación de la niña, seguramente lo hubiera robado o se lo hubieran entregado para transmitir un mensaje, pero eso no era de su incumbencia, si lo cogió ilícitamente ya se encargarían sus padres de educarla, si debía entregar un comunicado, seguramente no sería a su persona, últimamente no tenía en auge su popularidad -...Es hermoso... ¿me permites verlo de cerca?... - si la joven aceptaba lo miraría, si no... pues esperaría su pedido y se marcharía, tampoco estaba por perder mucho más el tiempo.

- Tiradas (1)
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08/05/2020, 17:47
Norteño

Visiblemente cohibida, la niña accede a mostrar el abalorio, aunque aún lo tiene sujeto, como si temiera que se lo fueran a quitar. A primera vista parece un collar o una pulsera cuyo hilo se ha roto, provocando así su pérdida al caer al suelo. Las cuentas de pasta vítrea de azul verdoso se alternan con conchas de pequeños moluscos finamente perforadas. La pieza más destacable es una pequeña talla de madera gris. La talla, aunque pequeña, resalta algunos atributos de la figura. En ella se aprecia un hombre con larga barba y corona sentado en un trono, en su mano derecha sostiene lo que parece una antorcha y en la diestra una aguja de tejer.

No hay duda de que se trata de un amuleto, o al menos una joya de moderado valor. Aun así, el estilo no es de la clase que luciría un norteño.

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08/05/2020, 18:39
Jonelle Nieve

Jonelle mira la talla acercando su rostro a ésta, no quiso finalmente cogerla, estaba claro de que la niña sentía temor de que se la quitaran y no estaba dispuesta a crear trifulca por aquella pieza, a pesar de que le daba mucha información la joya sobre el problema que había en la región.

- Pequeña, me gustaría comprarte la talla por 20 peniques, ¿aceptarías el cambio?... - le pregunta la mujer de buenos modos a la jovencita -.. y si me llevas al sitio donde lo has encontrado, te daré cinco peniques más... ¿quieres hacer el trato?... -esperó con paciencia su respuesta

Las cuentas con conchas de moluscos eran algo muy distante al estilo norteño, típico de las islas aunque no reconocía la talla como algo de su hogar. La imagen tampoco asemejaba al dios ahogado de los krakens pues solían representarle con tridente, le desconcertaba la antorcha y la aguja de tejer, pero sin duda había alguien por aquellos bosques a modo de avanzadilla, quizás un explorador, no lo sabía.

Durante unos instantes consideró qué hacer. Ya se había expuesto al ridículo muchas veces, no daría la alarma a nadie si no había claros motivos al respecto. Lo mejor investigar el origen del abalorio, y si no había suerte, pues comenzaría su camino de partida, iba a ser largo y posiblemente peligroso, cuanto antes llegase a la costa mejor sería para ella.

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08/05/2020, 23:43
Norteño

Pese al capricho infantil, la propuesta de Jonelle parece convencer a la niña, pues tiene entendido que el dinero es algo propio de los adultos y que ella no tiene, resultando mucho más tentador. Además de ello, la madre le asiente con la cabeza y una sonrisa, pues 20 peniques por algo encontrado en el suelo es una suma más que razonable. — Podrás quedarte con la mitad y comprar algo en el mercado — Añade la madre, despejando con esta posibilidad cualquier duda en la niña. — Vale — accede tendiendo el colgante a Jonelle, manteniendo la mano extendida para recibir el dinero.

¡Ah! y son cinco peniques por la hogaza y el desayuno  — Recuerda la mujer.

Ante la posibilidad de una ganancia mayor, la niña accede a llevar a Jonelle al lugar del hallazgo. Este no se encuentra muy lejos, apenas a unos pocos minutos. El lugar no es otro sino el otro lado del camino, donde el bosque se extiende en toda su plenitud. — Estaba aquí — Señala la niña, mostrando un punto del suelo como cualquier otro. Lo único especial, a primera vista, son las raíces de un roble que sobresalen de la tierra. Cualquiera podría tropezar con ellas, de hecho, la difusa huella de una mano se aprecia en el terreno.

Notas de juego

Retirado el dinero, total 3 estrellas de cobre (24 peniques) y 6 peniques, a no ser que quieras tongar a la niña pero xd

Tirada de percepción o supervivencia, dificultad moderada (9)

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09/05/2020, 09:56
Jonelle Nieve

Habían llegado a un trato y Jonelle pagó el dinero acordado a la niña y a la madre, tanto por el abalorio como por los alimentos que se llevaría. Desayunó de buena gana en la taberna antes de comenzar la marcha al lado de la jovencita, encaminándose al punto donde aquella joya fue encontrada.

- Alguien tropezó con las raíces... - estimó la mujer observando la huella de la mano, buscando otros rastros que pudieran encaminarle hacia el dueño del objeto perdido -... ¿No viste nada particularmente extraño? ¿oíste voces aquí? ¿Acentos quizás extranjeros?....

Jonelle le dio a la cría el resto del dinero acordado, podría estafar a un tabernero, a un guerrero, o a un señor, pero jamás a un crío. El código moral de la mujer se basaba en que los enfrentamientos se efectuaran siempre entre iguales. Robar a una jovencita no tenía nada de honorable, era como pelear con hacha contra un imberbe con una rama, le daría vergüenza una contienda de tamaño desequilibrio.

Jonelle no dejaba de mirar al suelo, como si los rastros que pudieran haber en el mismo le dieran una información adicional para poder comprender qué demonios hacía allí un abalorio de conchas de moluscos tan lejos de la costa. Si no hubiera sido por la guerra, habría dado por hecho de que era un objeto de mercader, pero en la situación en la que estaban, solo podía pensar en espionaje

- Tiradas (1)

Notas de juego

jajajaja... No Jonelle no estafaría a la niña....XD

Supervivencia con +1B por rastrear

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09/05/2020, 11:26
Director

Un vistazo detallado por los alrededores permite a Jonelle dar con lo que parece un rastro de varias huellas. Aunque ligeramente borradas por el viento que arrastra hojas y maleza, puede apreciar pisadas en el suelo que provienen desde el Norte. En algún momento estas se detuvieron en un punto anterior al lugar donde se encontró la niña el collar. 

Bajo unos arbustos se produce movimiento, saliendo de su interior un pequeño zorro que al mirar a Jonelle esta puede percibir que tiene el hocico completamente manchado de sangre. Al esfumarse el zorro, descubres entre los arbustos los cadáveres de dos hombres. Sus ropajes, aunque sucios y castigados, poseen decoraciones y son de buena factura. Uno de los cuerpos incluso viste un caro abrigo de pieles. Ambos cuerpos están degollados y deliberadamente ocultados.

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09/05/2020, 11:53
Jonelle Nieve

- Niña ve a buscar a Aden Forrester, dile que Jonelle Nieve tiene que hablar con él urgentemente y tráelo hasta aquí... Si lo haces bien, es posible que ayudes mucho a tu señor y puede que sepan recompensarte....- fue lo primero que le dijo a la joven cuando encontró los cadáveres, tapándolos para no alterar a la cría, impidiéndole que viera aquel destrozo causado por sólo los dioses sabían quien.

La guerrera esperó a que la muchacha se marchara para descubrir los cuerpos y registrarlos buscando las pertenencias de esos tipos, quizás anhelando conocer algo más de ellos, su procedencia, si llevan algún escrito, la cantidad de venados que portan, insignias o emblemas, o algo que el supuesto asesino hubiera dejado en el suelo sin querer. Volvió a mirar las cuentas con conchas tras eso, pensando, dubitativa.

- Muy bueno chupándole el culo al señor del norte Lord Glover, pero muy inútil protegiendo tu propio territorio... - se dice a sí misma la mujer en voz baja -... Me entran ganas de largarme y dejaros con el problema, al fin y al cabo es lo que os merecéis...

Para hacer tiempo peinaría la zona alrededor de los cadáveres, moviéndose en círculos, en busca de alguna pista adicional, estaba intentando ser muy meticulosa en su labor.

El hecho de avisar a Forrester y no a Lagobarro fue una decisión sencilla, el primero era amable y un hombre de honor. El segundo un trapero, según pudo ver con el tema de las apuestas cuando se reunieron en la cena, le pisó la idea y se llevó el beneficio. Pues ahora pagaría su falta de buena fe, ¿no era él el encargado de dar seguridad en esas tierras?... Pues el maestro de armas sabría de buena tinta de que no hacía bien su trabajo.

Posiblemente Lagobarro no supiera que con tan pequeña acción había perdido una amistad. Jonelle Nieve era rencorosa, en su Isla el orgullo era importante y haría pagar cada afrenta a cada uno de los que en un momento se burlaron de ella. Quizás un mes, o dos meses, puede que años, pero algo estaba claro, ella no olvidaba.

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09/05/2020, 12:19
Norteño

Al cabo de un rato, se escuchan pasos acercándose en la misma dirección por la que has venido. No tardan en aparecer dos figuras masculinas, el dueño de la posada y un muchacho bastante joven. El primero porta un hacha de cortar leña mientras que el segundo sostiene una horca de madera en sus manos. — Forrester se ha ido esta mañana con el señor, como casi todos los hombres de armas — Comenta el posadero con preocupación.

¿Qué está pasando aquí? — Pregunta con desconfianza

Notas de juego

Para todo eso, Percepción, dificultad 9.

Respecto a Forrester, me mola la idea de mandarle a buscar pero está ahora mismo a 10 millas de aquí con el agua un poco al cuello asi que...te he traído otra cosa (?

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09/05/2020, 13:39
Jonelle Nieve

Había registrado los cadáveres pero no había encontrado nada que le pareciera interesante ni digno de mención. Escuchó pasos detrás suya y se giró, observando al dueño de la posada, el padre de la chica, y un joven que seguramente fuera su hijo.

- Pues si Forrester no está, tendréis que informar en el torreón de que ha habido un asesinato en las tierras del señor... Alguien ha escondido aquí dos cadáveres... - dijo llanamente la mujer moviendo los arbustos a un lado, dejándolos ver -...El abalorio que portaba vuestra hija tiene adornos de conchas, es algo poco común en la zona norte, pero sí de las regiones de costa...

La mujer se incorpora del suelo y mira con soberana tranquilidad al posadero. Había un asesino en la tierra de los Glover, pero no habría sido tan inútil el señor de no haber dejado varios soldados apostados para la defensa del lugar. Fuera como fuese, ella había hecho su parte comunicando el problema a los lugareños, que procediesen como en gana les viniera.

- Tiradas (1)

Notas de juego

No hay problema....XD..., cierto es que con esa distancia y en tiempo de guerra no sería lógico que el maestro de armas fuera a atender a una bastarda y menos por un problema menor. En cualquier caso el alguacil se haría cargo de los asesinatos...^^

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09/05/2020, 14:39
Norteño

¿Un asesinato? — El hombre se inquieta, si bien mantiene la compostura. Revelar los cadáveres hace que el más joven se sobresalte, pues probablemente no haya visto un muerto en toda su vida y un asesinato no es plato fácil de digerir.

A esos hombres los conozco...desaparecieron hace algunos días, son comerciantes conocidos en la región. — Explica con un evidente tono de intranquilidad.

Ante la suposición de Jonelle, el hombre se esfuerza en hacer memoria, pues probablemente ha podido ver el abalorio durante el intercambio. — Aquí tenemos costa, pero era bastante rara esa talla — Sugiere. — Estos hombres llevan muertos muy poco tiempo, el asesino no tiene que estar lejos. ¡Hay que dar la alarma! ¡Avisar a la señora o a los guardias del torreón!

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09/05/2020, 14:57
Jonelle Nieve

- No un asesinato, dos para ser exactos... - responde la mujer ante la evidencia del hecho, prestando atención a las informaciones que le daba el tabernero, un par de mercaderes eran aquellos difuntos hombres y su asesino no debiera estar muy lejos -...Os sugiero que abráis bien los ojos en vuestra taberna por si llegaran desconocidos...

¿Avisar ella a la señora que se asemejaba a un molesto perro faldero cuando hablaba? Ni ganas, aunque por la poca disposición del hombre, parecía que nadie daría a conocer ese maldito encuentro.

- Avisaré a los guardias del torreón antes de mi marcha... - anunció ella completamente molesta. Las gentes de esas tierras eran inútiles hasta para hacer una labor tan sencilla.

Jonelle no podía evitar sentir repulsión ante las gentes que vivían en la región de los Glover, estaba comenzando incluso a pensar que si le complicaban mucho la existencia, largarse de allí y dejar a cada cual con su destino. Tomarse tantas molestias por alguien que te había echado de las tierras era de caballeros, y estaba claro de que ella no pertenecía a tan noble casta. El rencor aún hervía en su sangre.

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09/05/2020, 17:58
Guerrero Norteño

Tú eres una guerrera, mejor que vayas tú. Yo no puedo abandonar a mi familia y mi posada — Dice el hombre antes de volver rápidamente por donde ha venido. Al cabo de un rato, cuando Jonelle pasa junto a la posada de vuelta a Bosquespeso puede escuchar el ruido de la puerta al cerrarse y atrancarse desde el interior.

No lleva demasiado tiempo retornar al pueblo, apenas unos diez minutos. Aunque el campamento del ejército sigue en pie, únicamente lo guardan unos pocos soldados y sirvientes atendiendo sus ocupaciones. En las calles del pueblo todo se desarrolla como en un día normal, hombres y mujeres realizan sus quehaceres diarios, pero puede apreciarse una evidente ausencia de varones en edad de combatir

En la puerta del primer nivel de la empalizada, flanqueada por dos torres cuadradas de madera, hay media docena de hombres haciendo guardia. Sin embargo, si bien dos de ellos vigilan de pie y otro observa desde la torre, el resto están sentados a la sombra que proyectan las torres jugando a los dados. Al ver a Jonelle, estos alzan su mirada del juego para fijarse en ella. — ¿Se te ha olvidado algo? No puedo dejarte pasar — Comenta el que está al mando, un hombre que sí tiene aspecto de soldado curtido a diferencia de casi todos los otros. 

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09/05/2020, 18:07
Director

Notas de juego

Necesaria una intriga simple.

El guardia tiene una Defensa en Intrigas de 8 y una actitud de Rechazo (modificador de tirada +1 engaño, -2 persuasión).