Partida Rol por web

El Jabali recibe un rayo de la semifata, que quema su piel... Sin embargo insiste con la terquedad normal de su raza contra lo que puede ver, el guerrero.

Este sin embargo, logra desviar la poderosa embestida con su escudo en el ultimo instante!

Probablemente cuando llegase a atacar sería tarde... será mejor que me vaya ocuapando de los heridos... piensa al ver la situación que se desarrolla ante sus ojos.

Por ello, en lugar de desenvainar su espada y escudo, aprovecha la oportunidad para elevar una plegaria a Mielikki que le permita sanar las heridas de Asdrul.

Los Jabalies parece que se estan llevando una mala racha...

Kaylan 24 -4 pv, Tumbado, brazo dislocado, -4 a los ataques de ese brazo por 29 dias

Dorklem 21 -20 pv, herido

Soran: 17

Asdrul 16 -13 pv al total, herido leve

Lucios 12

Jabali 10 -67pv al total

Fae 9

Jabali 8 -63 pv al total, muerto

Nera 5 (+4 CA natural, 100 min))

Ahora solo me voy contra el jabalí y asesto mis golpes.

Una vez abatida su presa Soran se acerca de un salto para prestar ayuda a sus compañeros rodeando a otro de los salvajes puercos a la par que grita: Hoy cenamos cerdo deshuesado

El espadachin ejecuta dos soberbios ataque, penetrando agudamente en el jabali... Sin embargo, al acompañar con la otra espada, golpea un hueso del animal...Un agudo dolor estremece al guerrero, quien cae al suelo tomandose del brazo...

 El animal cae junto al el, al fin abatido... Ya solo queda uno, que Soran hiere por detras gravemente...

En un rápido movimiento Asdrul corre hacia el jabalí restante para arañarlo profundamente con una de sus garras

Finalmente, el ultimo malherido jabali, incapaz de permanecer mas tiempo aguantando... cae. Las 4 enormes masas de carne ahora yacen inmoviles en el bosque. El silencio gana por unos instantes el campo de batalla, pero finalmente, esta ha terminado.

Victoria!

-Ya ha terminado todo… Tan rápido, apenas pude asestar- dije en tono defraudado. Volteo para ver como se encontraba Kaylan.

-¿¿¿Te encuentras bien???- pregunte sin esperar respuesta y dije en voz alta –Alguien sabe curar, aquí hay uno herido-

no de los guerreros estaba en el suelo, y por como se sujetaba el brazo le habían dado un buen golpe, pero no podria hacer nada con eso,  Feledhel vió a otro de los caídos, volando hacia el hombre y bajando sólo un poco para poder llegar a él- hola bonito..- le sonrie a Dorklem con esa liviandad que siempre gozaban todos sus movimientos- Sune, preciosa Sune termina con su dolor y sus dolencias...- con su dedo indice toca al hombre. Aun estaban peleando, pero suponía que los demás del grupo seguirían con la batalla

Baja, por fin, pisando el suelo, y observa a Lucius, que pregunta por alguien que sepa curar, la semifata suspira y coloca sus manos en su cintura,  dejando a trás al que había curado.

- pues si... demoramos pocos, pero, mira cuantos destrozos...- respingó la nariz y sus ojos volvieron hacia el mal herido- ummm ninguno de mis hechizos podría curar eso, por como está el hombro- ahora estaba a su lado, observándolo con detensión- fyuu... te has desencajado el hombro, habrá que componerlo... umm ¿me dejaras?, pero debo tenerlo libre, no tardará mucho- le sonrie, cerrando los ojos y ladeando la cabeza a un lado, deberá tomar los huesos y acomodarlos, eso será tan doloroso como la misma fractura.

Soran permanece aún atento unos instantes intentando preveer la proximidad de más peligros. Mientras limpia la sangre de su estoque observa los cuerpos tendidos en la maleza, buscando signos de enajenación mental.

-"Ya tenemos claras dos cosas. Este jodido bosque no nos quiere en él y la druida no puede controlar las jodidas criaturas que en él habitan... ¿Cómo están los heridos?"

La hermosa dama que nos acompaña y que yo me empecino en no prestarle atención, ahora se me acerca volando y con su hermoso rostro dice unas palabras e intenta curar mi herida, pero esta no es un corte que suelen curarse con ese tipo de magia, este herida requería un toque más brusco. Extiendo mi cuerpo, para dejarle libre mi brazo dislocado, aguantando el dolor que me produce el mismo y me quedo esperando por su ayuda.

No es que no pueda controlar las de este bosque, es que parar a una manada de jabalíes en pleno ataque es algo muy complicado son muy toduzos y no se atienen a razones suspira es lamentable que haya tenido que terminar así... pero al menos los carnívoros del bosque tendrán alimento

se acerca a los animales muertos y está unos instantes en silencio, meditando no lo he podido evitar, pero al menos su muerte estará dentro del círculo y servirán de alimento. Mielikki cuida de sus almas..

Alguien más necesita que le curen? aunque también he de ocuparme de Asdrul, podría ayudaros a algún otro...

- mmm tan lindo que es señor Soran.. no se impaciente- alza la voz para darle un tono algo más de humor a las palabras de hombro, lo mira sobre el hombro dándole una cálida sonrisa- en fin... en fin...  vamos contigo...- vuelve hacia donde estaba Malrick, y lo sienta en el suelo, ya con el hombro despejado, pone sus manos, - veamos si Sune está de mi lado, de lo contrario, te dolerá más- le advierte antes de usar un poco de fuerza y acomodarle los huesos, estos emitirían un terrible sonido mientras volvían a su lugar.

Buscó en su mochila, y sacó un equipo de curandero, necesitaba las vendas para poder cubrir la zona lo mejor que pudiera, lástima que le fuera imposible inmovilizarlo, pero de momento intentó hacerlo, al colocar las vendas de la mejor forma, y con un pañuelo, colgó su brazo al cuello- bueno... esto ayudará mientras, si el dolor es mucho, intentaré evitarlo... por lo menos hacerlo más llevadero- le sonrie, la cercanía de ambos le permitían a la semifata observar cada uno de los rasgos del hombre, y analizarlos a profundida, los miraba con suma paciencia y preocupación, cosa que se lograba ver en sus ojos grises como días nublados.

La joven logra vendar con pericia el hombro. No mejora demasiado, pero al menos el dolor es menos molesto.

El grupo, despues de esto, escucha una voz en el aire...

-Han pasado la prueba de los animales... Pueden continuar... la muerte les espera...

La frase, dicha con esa voz tan suave y gentil, suena extraña entre los arboles. Esta vez la que la emite, aunque reconocen que es la druida de antes, no aparece a simple vista...

-"La muerte ha caminado conmigo todos los días de mi vida, ¿por qué iba a dejar de hacerlo ahora?"

Soran escupe las palabras de forma apenas inteligible sin dirigirse a nadie en particular. No le importan los jabalíes muertos y no le importa la advertencia de la "Guardiana". El guante está echado y él ya lo ha recogido.

La hermosa dama hace maravillas con sus manos, pero a pesar de todo sigue molestando. Ya he sufrido en este hombro con anterioridad y se que solo el tiempo o un poder muy grande pueden solucionar esto. Y no disponemos de ninguno de los dos, o mejor dicho, uno no sería conveniente utilizarlo y el quedarse por mucho tiempo no era la mejor solución. - Muchas gracias señorita. - Digo escuetamente, me incorporo y recojo mis armas, dejándolas en las fundas. En eso la misma voz nos dice de que la muerte nos espera y coincido con las palabras de Soran.

-Ja ja ja, que bienvenida la de la señorita- dije divertido mientras volteaba y miraba a los compañeros –Espero encontrarla de frente y ver que tan buena es con las armas… Tremenda bienvenida que nos ha dado esta- pensé.

-Ella cree que con esto de la muerte puede intimidar a cualquiera- dije en voz alta pero sin ningún destinatario. –LE ADVIERO QUE NO SOMOS CUALQUIERA!!!- Grite a todo pulmón, con las venas brotadas y los ojos llenos de la furia quedaba fuerzas a mi voluntad y musculas para superar cualquier prueba.