Partida Rol por web

Os darán algo de comer ahora. La cuestión es, ¿que vais hacer ahora?- os pregunta- ¿vais a largaros de aqui a proseguir la búsqueda? ¿u os quedaréis aqui?

Kevin intentó que no se notase el mazazo que le habían supuesto las noticias dadas por Guillermo y sonrió quedamente ante el comentario de su joven compañero.

   - Dada la situación, creo que lo prudente sería quedarnos aquí y pernoctar en la seguridad que proporcionan estos muros.- Respondió a la pregunta del líder de los pandilleros.- Mañana al alba podremos proseguir la búsqueda en la zona del campamento. Tal vez bajo la luz del día podamos encontrar un rastro que nos lleve tras la pista de mi hija.-

Niega con la cabeza ante las palabras de Kevin- si quieres ir al campamento allá tu. Pero te puedo asegurar que no vas a durar ni un segundo allí. Esta lleno de caminantes y creo que poco mas vais a poder sacar allí. Mas es tu decisión, no la mía.

Podréis descansar aquí. A primera hora de la mañana os levantaremos, si es lo que queréis.

No había mucho mas que hacer, por lo que el día trascurre en la residencia. Guillermo no os deja hacer mucho allí -sois sus "invitados"- por lo que pasáis el resto del día sin hacer nada, salvo charlar y pensar en que vais hacer mañana.

Os levantáis (mas bien os levantan) dos horas después de amanecer. Os habían dejado dormir algo mas, pero aún teníais mucho tiempo para realizar lo que teníais que hacer. Había dos opciones, irse de allí para buscar el rastro de la caravana (según los datos de Guillermo) o ir al campamento para intentar averiguar algo mas. Guillermo había sido bastante claro con lo último, mas él solo daba su opinión, no decidía. 

Daryl empezaba a impacientarse, aunque entendía que su compañero necesitara tiempo para tomar una difícil decisión. Esperaba que la tomase con la cabeza, pero por si acaso se acercó a hablar con él.

Miró a Kevin con aquella mirada característica de que le iba a decir algo que seguramente no le gustase, pero él era así.

- Debes tomar una decisión, y creo que sabes cuál - hizo una pausa - He venido a ayudarte y así lo haré, pero debes pensar si realmente vamos a hacer algo útil o vamos a ser pasto de esos mierdas podridos

Kevin miró a su joven compañero, sabía a que se refería y lo comprendía. En aquella empresa no solo él arriesgaba la vida, si no también la del joven Dixon. Tenía que pensar con la cabeza fría y tomar siempre la decisión adecuada para no llevarles a una muerte inútil.

   - Creo que lo mejor es seguir las indicaciones de Guillermo.- Le respondió finalmente.- Según él, cuando el campamento de refugiados cayo, un grupo numeroso de supervivientes se abrió paso por entre los caminantes y se dirigió hacia el norte saliendo de la ciudad. No sabemos si sobrevivieron, pero si mi hija esta viva solo puede estar con ellos. Una caravana de gente tan numerosa a debido dejar algún rastro, lo seguiremos y a ver donde nos lleva... ¿Te parece bien?-

Daryl asintió mientras a la par que comenzaba a recoger las pocas cosas que le acompañaban en aquél viaje. Iban a buscar a aquella joven, que no sabían si estaba viva, si estaba en aquél grupo.. si realmente fueron hacía aquella dirección, pero... ¿acaso les quedaba otra cosa que hacer? sólo podían albergar esperanza, quizás eso los mantuviese ocupados para no darse de bruces contra la puta realidad.

- Necesitaremos un coche

Vuestro coche estaba preparado y listo para comenzar de nuevo el viaje. El plan era sencillo: acercarse lo máximo posible al campamento para averiguar algo sobre el grupo que había huido, y luego seguir las indicaciones que había dicho Guillermo. 
Era algo complicado, habida cuenta de que la ciudad estaba plagada de caminantes y de obstáculos, sobretodo cada vez que os acercábais al centro.

Os dirigís hacia vuestro primer destino... sin embargo, al poco rato veis que en coche es imposible llegar hasta allí. Hay demasiados coches bloqueando la calle para poder pasar. En todo caso es factible a pie, pero eso traía sus riesgos. 

El panorama era dantesco. La ciudad era un cementerio de coches, de edificios y casas rotas.. y el silencio sólo era roto por el motor de nuestro coche y el jadear incansable de los putos caminantes. Kevin estaba empeñado en no dejar escapar ni una sola oportunidad de saber algo sobre el paradero de su hija, por mu loca y jodidamente peligrosa que fuese. ¿Acaso no haría el lo mismo? Daryl suponía que sí, por lo que continuaba sin rechistar, sino mejor se hubiese ido con el resto y no se hubiese ofrecido a acompañarlo.

Ante la situación el pequeño de los Dixon detuvo el vehículo.

- Hasta aquí nos puede llevar este trasto - dijo golpeando el volante - No se que tienes pensado, pero se que no me va a gustar un pelo - lo dijo con un tono normal, no era un reproche, ni una amenaza, simplemente un comentario.

Ciertamente su joven compañero tenía razón, no le iba a gustar lo que Kevin había pensado. Ciertamente a él tampoco le gustaba, pero ya que habían llegado hasta allí no podían tirarse atrás tan rápidamente.

   - Dale la vuelta al coche y dejémoslo preparado por si tenemos que volver y salir corriendo. – Respondió después de pensárselo durante unos instantes. – Bajaremos e intentaremos adentrarnos un poco más a pie, a la menor señal de peligro volvemos y nos largamos. Sé que es peligroso pero tenemos que asegurarnos de que la información de Guillermo era correcta. No me gustaría seguir una pista equivocada y perder días enteros siguiendo una caravana de coches inexistentes… No te preocupes, yo te cubro las espaldas, y además, si tenemos que salir corriendo es probable que los caminantes se me coman a mi primero, así que tendrás tiempo de sobra para escapar. – Bromeó sombríamente.

Daryl puso el coche según lo acordado, mirando en dirección a la huida para simplemente subir y largarse de allí al menos atisbo de problemas, pero no las tenía todas consigo. Kevin estaba desesperado, quería encontrar a su hija a toda costa, pero le preocupaba que no viese con claridad y terminasen muertos por cualquier estupidez, algo que sin duda no ayudaría a encontrarla.

Tras colocar el coche cargó la ballesta con una saeta, dispuesto a avanzar arma en mano, dado que seguro que encontrarían caminantes pronto. Miró al taxista, a su compañero de viaje.

- Estamos jodidos, pero iremos con cuidado - zanjó avanzando hacía la calle que los conduciría a Dios sabía qué

Camináis de nuevo hacia lo que era (o lo que queda) del campamento de seguridad de Atlanta, para intentar averiguar el posible destino de lo que se supone un convoy que ha salido de allí. Sin embargo, sabéis que debéis ir con cuidado: cuanto mas os adentráis en la ciudad, mas posibilidades hay de encontrar caminantes... 

Seguís avanzando, lenta y sigilosamente, utilizando la multitud de coches en la calle que os sirven de cobertura. Aquí y allá encontráis algún que otro caminante solitario que no tenéis muchas dificultades de matar en silencio o simplemente dejar atrás. Sin embargo, la cosa se complica... nada mas girar la calle os dais que no vais a poder avanzar mas: una multitud de caminantes se interpone en vuestro camino. No os han visto... pero ese lugar no es ahora un sitio seguro para quedarse.

Un gesto claro delata las intenciones de Daryl, le estaba indicando a Kevin que debían retroceder, algo que seguramente su compañero tenía claro al ver aquella marabunta de jodidos come vísceras. El plan había vuelto a joderse.. y esperaba que aquél padre desesperado lo viese, era prácticamente imposible que hubiese nadie vivo por allí.

El sureño se retiró unos pasos, pero no debían perder de vista a aquellos caminantes por si les daba por ir en su dirección, así que habló en voz muy baja cuando estuvo seguro de que no los escucharían.

- Estamos jodidos, ¿crees que encontraremos a alguien vivo por aquí? - la mirada del joven se fijó en los ojos de Kevin - O encontramos otra manera de llegar o nos rendimos a la puta realidad

Mirando a su alrededor Kevin sopesó sus opciones y finalmente maldijo entre dientes. ¿Había algo en la vida que le fuese a salir bien?

Podía verlo en los ojos de su joven compañero, adentrarse más en la ciudad sería una completa locura. SI hubiese estado solo probablemente se habría dejado llevar por su desesperación, pero no podía arriesgar la vida de Daryl de aquella manera. El chico ya había arriesgado el pellejo más que suficiente siguiéndole hasta allí.

   - Vámonos, aquí no queda nada, todo esta muerto...- Le respondió finalmente.

No les quedaba más opción que seguir las indicaciones que les había dado Guillermo para poder ir tras la caravana. Aquella era la última esperanza de encontrar a su hija con vida…

No teníais muchas mas opciones que retroceder... al fin y al cabo, era imposible entrar sin pasar desapercibidos. Ahora solo quedaba salir de la ciudad y seguir buscando el convoy que quizás salió de allí o no. 

Retrocedéis de nuevo hacia vuestro coche, utilizando las mismas tácticas de sigilo, caminar despacio y ocultarse. Al poco rato llegáis ha vuestro vehículo, el cual desgraciadamente tiene visita: siete caminantes se encuentran alrededor del mismo.

- ¡Joder! - se quejó Daryl de forma callada y mordiéndose el labio -Si disparamos aquí estamos muertos, no creo que mi ballesta sea tan rápida cómo para matar a los siete sin ser vistos - miraba a Kevin esperando algún otro plan. Podían esperar que se fueran o intentar atacarlos por la espalda... pero espero a ver que decía el taxista.

Los zombies se mantenían en la zona, ajenos a vuestra presencia, pero no parecía que fueran a moverse de allí.