Partida Rol por web

Un castillo en la montaña

Habitaciones

Cargando editor
01/04/2015, 15:23
Benjamin Foster

Nunca había tardado tanto en vestirme. Lo hago con parsimonia, lento, con la mente en otra parte. Pienso en todo lo que nos espera, en la incertidumbre, en lo que dejamos atrás. Son cosas que no sabemos si podremos recuperar. ¿Y si nunca regresamos? ¿Y si, incluso triunfando, nos vemos atrapados allí sin poder volver? Se os exigirá mucho, me dijo ese oscuro reflejo de mí mismo en las cuevas.

Y cuanto más pienso en el dolor que podemos padecer, más me centro en Liz. Es curioso, antes era bastante cobarde, sólo temía por mí mismo. Ahora no temo por mí, o al menos no como antes. ¿Es esto el valor? No lo creo. Sigo teniendo miedo. Ahora temo por ella, por mi novia, por lo que pueda pasarle, por lo que todo esto pueda hacerla sufrir.

La puerta del baño se abre, y Elizabeth sale con un albornoz. Comienza a caminar hacia mí mientras me termino de poner la camiseta, y me fijo en sus ojos enrojecidos. Mis temores hechos realidad. Ha estado llorando. Me abraza, sin decir una palabra, y noto que lo hace con mucha más fuerza de lo habitual.

Tsss... Tranquila... -Respondo a su abrazo con palabras de apoyo y mis propios brazos- Puedes llorar, si quieres, no hay nada malo en ello... -Acaricio su pelo mientras le doy un beso en el cuello- Y tampoco es tarde para echarte atrás, si no estás segura. Nadie podría reprochartelo... -Me separo un poco, poniendo mis manos a ambos lados de su rostro, con gesto decidido- Pero si decides seguir adelante con esto, te juro que haré todo lo que esté en mi mano para que volvamos con éxito y puedas regresar con los tuyos. -Le doy un tierno beso en los labios- Palabra de dragón. -Termino, sonriendo.

Cargando editor
01/04/2015, 21:16
Elizabeth Freeman

Mi novio me abrazó después de que yo lo hiciera, tratando de tranquilizarme, de apoyarme, y es que había notado que había estado llorando. Al acariciarme y besar mi cuello me recordó la posibilidad de echarnos atrás, pero antes de poder recordarle que no era eso lo que quería, tomó mi rostro entre sus manos, prometiéndome que si quería ir a donde fuera que nos dirigiéramos, haría todo lo posible para que pudiéramos regresar.

Regresar con los míos.

Sí, quería eso, pero parte de “los míos”, también iba conmigo. Ahora Ben, Benjamin Foster, era parte de los míos. Mi madre, mi padre, Ashley… Ellos se quedarían aquí y podrían seguir con sus vidas. ¿Pero qué sería de Ben si fallábamos? ¿Qué sería de todos los que son como nosotros?

Me dio un suave beso, antes de darme su palabra, palabra de dragón. Sus palabras y sonrisa me impulsaron también a sonreír, para después tomar sus manos de mi cara y llevarlas abajo, sosteniéndolas con las mías.

-En ese caso, tendré que creerte. – bromeé, dándole un beso en la mejilla, tras lo cual me puse algo más seria. – No dudo en enfrentarme a esto, pero temo lo que pueda pasar, eso es todo. Quiero regresar, pero sobretodo quiero que se solucione todo este entuerto, hay demasiado en juego. – apreté sus manos.  – Y no, no quiero llorar. – le sonreí. – Quiero vestirme y cenar con mi novio, eso es lo que quiero. – asentí sonriente.

Cargando editor
02/04/2015, 07:58
Benjamin Foster

Con nuestras manís entrelazadas, me confiesa sus sentimientos, sus anhelos y sus miedos. Yo también tengo miedo, por ella principalmente pero sobre todo por el futuro. Nuestro futuro. Se que el camino que vamos a emprender podría ser de no retorno, aunque el sacrificio sea de lo más loable. Como ella misma dice, hay mucho en juego.

Llevo nuestras manos a mi rostro, besando las suyas. Cenar, es un buen plan para este momento. Para mas adelante se me ocurren otros mejores. O en mejores condiciones.

Algún día te llevaré a cenar a un restaurante elegante. -Le prometo, sonriendo- Yo iré con traje, y tú llevarás un precioso vestido largo, y todo el mundo dejará lo que esté haciendo y se girará para verte. Habrá música agradable, comeremos, beberemos y reiremos, y bailaremos agarrados. Y será sólo la primera de muchas citas maravillosas. -Me acerco para darle un tierno beso en los labios- Cuando volvamos, ¿de acuerdo? La primera de toda una vida de citas maravillosas...

Cargando editor
02/04/2015, 12:45
Elizabeth Freeman

Ben besó mis manos con delicadeza, para después de ello hacerme otra promesa. En realidad más que una promesa era una declaración de intenciones que selló con un beso, ya que no le bastaba con una velada maravillosa y me prometía muchas más.

Pensar en ese posible futuro podía resultar algo triste, pero no, no podíamos dejarnos llevar por eso. Pensar en ese posible futuro, un futuro juntos, viviéndolo como quisiéramos, era un motivo más para ser fuertes.

-Me gusta esa idea, pero… ¿Podríamos suprimir la parte en la que todo el mundo me mira? Acabaré pensando que te gusta avergonzarme. – le sonreí y di otro de aquellos cortos pero tiernos besos. – Sería una bonita novedad, hasta ahora no he tenido una cita decente. Si yo te contara… - reí.

Solté suavemente sus manos y le di la espalda, caminando hacia el armario mientras le hablaba.

-Pero sabes que una cita contigo ya será maravillosa de por sí, ¿No? – dije con un rostro sonrojado que mi novio no podía ver. – No hay nada más especial que tú.

Dije mientras me quitaba el albornoz y lo dejaba caer al suelo, antes de refugiarme tras las puertas del armario abierto para empezar a vestirme.

Cargando editor
02/04/2015, 16:20
Benjamin Foster

Tiene gracia que diga que parece que me guste avergonzarla, porque en el fondo no va desencaminada. No es que me guste hacerlo, pero adoro ese gesto tímido que hace cuando el rubor se adueña de su rostro. Supongo que su timidez es una de las cosas que me cautivan de ella.

Oh, no, pero esa parte de la cita es im-pres-cin-di-ble. -Señalo divertido mientras se aleja hacia el armario. Cuando veo que se va a desprender del albornoz, cojo el jersey que tenía preparado sobre la cama y me giro para darle la espalda. Ya la he visto desnuda, y desde luego que quiero volver a hacerlo, pero no considero justo disfrutar de su belleza sin ropa mientras yo estoy vestido- Ahora eres tú quien quiere avergonzarme... -Admito mientras me ruborizo con sus halagos- ...pero no te servirá de nada, todos te van a mirar igualmente. -Digo continuando la broma- A pesar de lo que digas, lo único que tengo de especial... -Me acerco al armario por un costado, hasta situarme en un lateral de forma que lo único que me separa de Elizabeth sea la puerta abierta. Golpeo la madera, como si fuera la puerta de un cuarto para cuyo acceso esté pidiendo permiso, y espero a que asone su rostro antes de seguir- ...es a la mejor novia del mundo.

Cargando editor
02/04/2015, 17:08
Elizabeth Freeman

Sonreía mientras me ponía la ropa interior, escuchando a Ben decir que era yo quien quería avergonzarle. En realidad no era lo que pretendía, pero tampoco me hubiera importado volver a ver su cara ruborizada. Estaba tan guapo así…

Continuó hablando, mientras subía los pantalones por mis piernas, y tomaba la cinturilla para abrochármela. Estaba a punto de atar aquellos botones cuando tocó la puerta del armario, como si de una puerta cualquiera se tratara, y me asomé por esta para verle.

Me ruboricé irremediablemente con sus palabras, dándole un rápido beso en los labios, aún sin salir de detrás de la puerta.

-Sí, te gusta avergonzarme, esto lo deja claro. – reí, volviendo a meterme tras la puerta, y me abroché el pantalón, tras lo que cogí un polo del armario y me lo puse antes de mostrarme ante él. – Lo único especial… Eso de las escamitas también es bastante especial, ¿No? – bromeé, para agacharme y terminar de calzarme. – Cuando quieras nos vamos. – le sonreí tomándole de la mano.

Cargando editor
02/04/2015, 17:32
Elizabeth Freeman

Notas de juego

Ben y Liz salen.

Cargando editor
05/04/2015, 13:16
Elizabeth Freeman

Notas de juego

Ben y Liz entran.

Cargando editor
05/04/2015, 23:29
Benjamin Foster

Regresamos a nuestra habitación sin que la búsqueda en la biblioteca haya aclarado demasiado. Tan sólo hemos logrado acotar la búsqueda un poco, reduciendo las posibilidades a tres, pero sin sacar nada en claro de ninguna de ellas. Con más tiempo, seguro que podríamos averiguar la verdad tras la naturaleza de Elizabeth, pero tiempo es precisamente lo que no tenemos.

Bueno, al menos ahora tenemos tres nombres. -Digo tratando de animar a mi novia- Banshee, bruja, o hada. De la primera no se nada, la verdad, pero si fueras una bruja significaría que puedes hacer magia, ¿no? Hechizos y conjuros, y cosas así... ¿Volar sobre una escoba? -Sonrío tratando de sacar algo de humor al asunto, pero entonces me pongo algo más serio, acercándome a ella y dándole un abrazo- Seas lo que seas, yo seré tu dragón, y tú mi tesoro... -Le susurro- Pero ahora será mejor irse a dormir. Nos espera una gran aventura, y hay que estar descansados. Y la afrontaremos y superaremos, ¿vale? Juntos. Siempre juntos...

Cargando editor
05/04/2015, 23:48
Elizabeth Freeman

Sonreí ante su intento de animarme, apretándole contra mí cuando me abrazó y me recordó que afrontaríamos juntos lo que nos esperaba. No sólo afrontarlo, sino también superarlo.

-Siempre juntos… - repetí en un susurro, con mi cabeza apoyada en él.

Entonces le miré, y nos quedamos así unos segundos, quietos, abrazados, simplemente mirándonos a los ojos. Terminamos dándonos un suave y tierno beso, separándonos únicamente para cambiarnos y meternos en la cama, donde nuestros cuerpos volverían a reencontrarse, cayendo juntos en un profundo sueño.