Partida Rol por web

El ataque le pilló completamente desprevenido. Su cuerpo golpeó con violencia un precioso armario cargado de tazones y platos a la venta, con lo que el joven terminó rodeado de trozos de madera y cerámica por igual, quedando completamente inconsciente. Cuando todo se hubo calmado y acudieron los refuerzos, y uno de los sanitarios se arrodilló junto a Max para atenderle, de repente éste abrió los ojos y estiró la mano hacia el cuello del soldado, mirándole enfurecido. Sus pupilas eran una fina línea amarillenta, y sus colmillos crecieron desmesuradamente hasta formar afiladas y peligrosas protuberancias. 

Tras unos tensos segundos, en los que el soldado no pudo más que palmear su brazo para no tener que descerrajar un tiro a quemarropa al muchacho, que éste cayó en la cuenta de cómo se encontraba la situación. Liberó la presa de su cuello y relajó la postura, disminuyendo el tamaño de su tono muscular. Una gota de sudor cayó por su frente mientras observaba el entorno, aún sentado en el suelo, comprendiendo que no había ya enemigos a los que enfrentar.

- Slampa - dejó escapar, en su sueco natal, incorporándose lentamente - Estoy bien, estoy bien. ¿Qué ha pasado con esa zorra cobarde?

Dejo sitio a los sanitarios que venian con la agente mientras esta le hacia un resumen de como estaba su madre y luego le soltaba aquella pregunta. Parpadeo varias veces, ¿en serio le estaba preguntando eso a ella? ¿Que pasa que no habia estado escuchando lo que se decian o que?

- Vale, sentencio de manera cortante va a ser la ultima vez que me repita. No. Me. Lo. Creo. dijo puntualizando cada una de las palabras de aquella frase. A ver si de una vez os entra en la cabeza. Dudo mucho que sea verdad, entre otras cosas porque aparecio ahora asi porque si. No se tu, pero yo cada vez que me ducho me suelo mirar antes y despues en el espejo y un arañazo no pasaria desapercibido, de echo AYER no lo tenia. Ademas pudo perfectamente haberlo producido cuando me jodio la camiseta con su poder de aire. Si tu que eres la agente del gobierno que supuestamente nos teneis controlados, no lo sabe, vamos listos. De verdad, de verdad, que no se podia creer aun que le hubiera hecho aquella pregunta. Acababa de demostrar lo poco profesional que era.

Ted se apartó y dejó hacer al equipo de respuesta rápida y a su jefa, metiendo la cola entre las piernas y sintiéndose un poco fuera de lugar, como cada vez que estaba en un grupo grande de gente a la que no conociera de algo.

¿Lo que he escuchado de la marca… es cierto?

"Oh venga ya"

-¿En serio? ¿En serio va a hacer est-

"Vale, va a ser la ultima vez que me repita. No. Me. Lo. Creo. A ver si de una vez os entra en la cabeza. Dudo mucho que sea verdad, entre otras cosas porque aparecio ahora asi porque si. No se tu, pero yo cada vez que me ducho me suelo mirar antes y despues en el espejo y un arañazo no pasaria desapercibido, de echo AYER no lo tenia. Ademas pudo perfectamente haberlo producido cuando me jodio la camiseta con su poder de aire. Si tu que eres la agente del gobierno que supuestamente nos teneis controlados, no lo sabe, vamos listos"

-...woah

Se quedó mirando aquello. Era una bronca. Era una bronca en toda regla, y mucho mejor de lo que él pudiera haber sacado, de aquello que parecía reproducir las peores tramas de "qué malo y qué obvio es el gobierno" de los tebeos. ¡Nadie quiere tener la sensación de vivir en algo escrito por Loeb!

-Errrrm, lo que ha dicho ella -señaló con timidez a Aura, con la garra índice- No mola. 

Alex suspira profundamente mientras saca su teléfono móvil, los agentes examinan el lugar y el que había estado atendiendo a Max se acerca con algo de precaución, entonces la mujer dice:

• Anoche hubo un altercado en Madrid… en el aeropuerto una chica que no había presentado nunca un comportamiento así de agresivo ataco indiscriminadamente a la gente del aeropuerto, pudo ser detenida pero muchas personas salieron heridas y algunas de ellas muertas, esta es la chica.

Muestra una imagen de una chica con el pelo rojo y rapado en una parte, para después pasar la imagen y mostrar una marca

• Y tenía esta marca en el mismo lugar en el que te está apareciendo a ti

Empezó a escucharse un sonido reco y rasposo, una especie de versión del grrrrrrrrrr del ronroneo de un gato, que poudieron escuchar los que estaban cerca del "chico lagarto", venía de él. El mismo que había estrechado los ojos y cuya piel había tomado en unos momento una tonalidad índigo.

-La tipa que ha secuestrado a su madre se inventa una cosa tras haberse enterado de lo de la marca, ¿¡Y TIENE EL VALOR DE ACUSARLA A ELLA!? -se giró para mirarla, los brazos extendidos hacia delante con las manos abiertas y las palmas vueltas hacia el cielo, incrédulo- ¿¡Cuál es su problema, agente Danvers!?

Sacudió la cabeza.

-O nos están escondiendo mucho... o están saltando a las peores conclusiones con un solo caso. Y hasta alguien que sólo ha dado ciencias en el instituto nada más sabe lo estúpido que es eso -gruñó- Sabe, si esto es lo que va a ofrecerle a la gente que quiere que colabore con usted... no me extraña que se les estén escondiendo. ¡Jesús!

¡Naciones Unidas!, pensó apartándose un poco hacia la puerta, para tomar el aire mientras trataba de ver dónde se había ido aquella mujer. ¿Qué estaba esperando de gente puesta por las Naciones Unidas?
 

Ya totalmente recuperado, Maximiliam escuchaba la explicación con el ceño fruncido, como si estuviera atendiendo a una compleja clase de matemáticas avanzadas en la universidad y no terminara de comprenderlo.

- El chico verde tiene razón - dijo, señalándole con un dedo y saltándose todas las normas de buena educación - No sé a ellos, pero a mí me sacaron de casa con una historia de organizaciones secretas y de que teníamos que plantar cara a gente que secuestraba mutis, y de repente la tipa mala sólo quiere proteger al mundo de gente con marcas mágicas que vuelven locos a la gente...

Negó rápidamente, alzando las cejas.

- Nos estás contando sólo la mitad de la película, guapa.

Asintio fervientemente antes ambos comentarios de los chicos. Si era cierto que Alex habia sido la mas diplomatica al acercarse a ella, pero estaba demostrando que no era de fiar en absoluto no contandoles toda la verdad. 

- A mi me conto la misma historia Max le dijo al rubiales Y bueno, no se hasta que punto esa afirmacion puede ser creible eh? La tipa me envion un maton peligroso a atacarme y luego secuestro a una persona por no decir amenzar a todas las que estaban aqui... Asi que... tampoco es una santa.

Ante el comentario de Theodore parece estar bastante molesta por lo que ha dicho, da un paso hacia delante y dice:

• ¿Disculpa? ¿Quién está acusando a quién? Simplemente estoy contemplando la posibilidad de que ambas marcas estén relacionados… si no sabes de algo mejor no abras la boca

Entonces escucha a Maximiliam y suspira profundamente para girarse y decir:

• Y ahora quienes son los que están creyendo a esa chica… esa Nadeshiko…

Suspira, parecía que en realidad le molestaba aquello que estaban diciendo en especial la acusación de Theodore, escucha a Aura y dice:

• ¿No habéis pensado que tal vez no sepamos más de lo que os hemos dicho? ¿Creéis que si supiéramos algo más de esa marca y que supiéramos que los que la tienen son peligrosos dejaríamos a los que la tengan tan libres?... pero ahora que lo decís vosotros mismos, tal vez sea buena idea que Aura nos acompañe para poder examinar mejor esa marca que tiene.

Podían ver como los soldados al menos diez se ponían alerta mirándoles a todos.

Estaba bastante enfadado como para poder razonar ahora, y a un chico de menos de 20 años términos como "disolución de responsabilidades" le parecían una mierda.

-¿Quién? ¡Usted a ella! ¡Venga, que estábamos delante!

Y ahora quienes son los que están creyendo a esa chica… esa Nadeshiko…

-Nosotros no. Por lo que sabemos se ha enterado de lo de la raya y se lo está inventando. Aquí la que ha intentado soltarlo y meter miedo no somos nosotros.

Salió del sitio a la puerta para tomar el aire. Podía no ser un científico, pero no podía soltar el equivalente de entiendes, guiño guiño y luego decir que no había hecho nada. Eso no era ser de una organización. Eso era ser.... ser un político. Y entonces notó la disrupción en el ambiente. La gente se estaba poniendo alerta. Conocía esa sensación y conocía ese olor.

Giró la cabeza.

-Oh, tiene que estar jod- bromeando.

Con una expresión chulesca, Maximiliam dio un paso, interponiéndose físicamente entre Aura y los soldados. Con una sonrisa socarrona en su rostro, con los puños apretados y un brillo especial en sus ojos.

- Tengamos la fiesta en paz. Todos - Ladeó la cabeza - A nadie le interesa que aquí empiecen a suceder cosas que la gente de a pie no ha visto nunca. Porque si no, vamos a tener a todos los medios de comunicación del país por aquí en menos de una hora.

Dedicó una mirada leve a sus compañeros, y luego a Alex.

- Estamos todos del mismo puto equipo, así que vamos a suavizar las formas - era evidente que se refería a ambos bandos de la discusión - Ya habíamos llegado al acuerdo de que Aura estaba mejor con nosotros, por ahora. Y tus chicos van a tener mucho cuidado a la hora de comprobar esa marca. ¿Qué perdemos por echar un vistazo? ¿No, pelirroja?

- Dios santo, ¿y la que va al instituto soy yo? !No dijimos que la creyesemos! Dijismos que TU tampoco nos lo contaste todo y eso siendo alguien del gobierno, no te deja en muy buen lugar. En serio, necesitaba limpiarse bien los oidos o aprender a comprender lo que decian otros.

Fruncio el ceño y se preparo para lanzar una rafaga que tumbase a todos y asi salir volando de alli como las cosas se torciesen. Ahora mismo se sentia amenazada por aquella gente que no estaba siendo lo mas razonable. De echo casi era como en las pelis, que como tenian poderes, ya eran una amenaza de cualquier manera. 

Por suerte para todos ellos el rubio se puso delante haciendo de escudo y empezo a soltar chorradas de que estaban en el mismo equipo. A lo cual miro a su espalda algo incredula, pues ella no se consideraba de parte de ningun equipo en aquel momento, sobre todo viendo que en cualquier momento iban a atacarles.

- No pienso dejar que me encierren en ningun sitio, si quieren hacer pruebas bien. Pero me niego a quedarme retenida en ningun lado. Que tengo clases y se acerca la epoca de examenes.

Alex suspira profundamente mientras se masajea la frente, mira a todos y dice:

• Lo siento mucho, pero no podemos dejar que te marches sin comprobar si eres peligrosa o no… o si lo serás… como ha dicho Maximiliano vamos a hacer unos análisis lo cual no quiere decir que te vayamos a encerrar, solo te encerraríamos si comprobamos que eres peligrosa para la gente y lo haremos también por tu propia seguridad

Los soldados seguían alerta, en especial parecían más pendientes de los que estaban siendo algo menos colaborativos, Alex suspira y dice:

• Pero aquí no podemos hacer los análisis… en la casa donde estuvimos antes tenemos equipo que podemos usar para analizar esa marca…

Mira a Theodore y añade bastante seria:

• Personalmente me da igual lo que pienses, pero mi misión es proteger a los inocentes de cualquier meta humano que pueda llegar a ser peligroso y si le ha aparecido una marca igual a la que tenía una chica que se ha dedicado a matar gente… quiero como mínimo examinar esa marca y ver si es peligrosa o no.

Dios, qué estúpido sonaba todo aquello.

Quería decir ¿por qué no sospechan también por ser mujer? los dos rasgos son igual en común como arañazos en el ombligo, pero no dijo nada. Aquello no sólo era demencial sino que era una excusa, y personalmente no iba a disculparse de nada. ¿Disculparse DE QUÉ? HABÍA OLIDO LA DISPOSICIÓN DE AMENAZA. HUBIERA DADO LA ORDEN DE QUE LES ARRESTASEN EN BASE A UN ARAÑAZO EN EL OMBLIGO QUE TENÍA EN COMÚN CON ALGUIEN Y SIN TENER IDEA DE CÓMO FUNCIONABA.

¡Jesús! ¡Europa!

-Sí, ya lo veo -dijo sin volverse aún- A ella no le parece mal. Así que no hay problema ¿no?

Para darle igual lo que pensase Ted, la agente Danvers se había rebotado súper-rápido... y se esperaba algo más de control de agentes de las naciones unidas que de veinteañeros.

- A las pruebas no me he negado, dijo girando ligeramente la cabeza hacia Ted. A lo que me niego es aque quiera encerrarme sin nada que confirme lo que la asiatica loca dijo, que de ser verdad estoy convencida de que ella misma es la que me contagio, estoy completamente segura de que el arañazo lo provoco ella. Si quiere hacer pruebas agente, dijo volviendose hacia ella, vayamos a un hospital, pida los permisos que necesite si quiere, pero a mi no me encierra. Porque eso es lo que quiere hacer lo exponga como lo exponga y ninguna bonita palabra lo va a ocultar. Ah otra cosa, el peligro es usted y sus soldados, porque hasta que llegaron ustedes, todo estaba bien. Pienselo dos veces antes de volver a joderle la vida a otro solo porque no es "normal" acompaño la palabra con el gesto como usted 

Aquello estaba marchando de mal en peor. De hecho, estaba a kilómetros de distancia de algún punto en el que todos estuvieran contentos. La mirada de Maximiliam pasaba de Aura a Ted y de vuelta a Alex alternativamente mientras escuchaba cómo discutían por datos meramente anecdóticos. No comprendía bien a los sureños. En su tierra se habría resuelto toda aquella situación de una forma mucho más rápida y educada. ¿O no era así? Él siempre se había sentido diferente a sus familiares y vecinos, y hasta que no descubrió lo que era no se dio cuenta de que no era como los demás. ¿Había empeorado la situación? ¿Había cambiado algo siquiera?

- Yo hice un trato con tu colega - señaló a Alex con un dedo huesudo y sonrió - Mientras me facilitéis el camino para rajarle la garganta a esa puta china de la guadaña, voy con vosotros. Pero tú, Aura...

Se giró hacia la pelirroja, con un deje de tristeza en la mirada.

- Esta gente quiere que vayas con ellos, y me huelo que lo harás, por las buenas o por las malas. Si es por las malas, probablemente Ted quiera ayudarte, si le quitas las escamas, tiene pinta de chico bueno - sonrió con unos dientes afilados - Así que terminarán haciéndote esas pruebas, y la única diferencia serán las posibles heridas que lleves - llevéis - de regalo. Así que venga... ¿por qué no nos dejamos todos de tonterías y zanjamos este asunto?

La cara de la pelirroja era un poema, con la boca abierta haciendo una O. Estaba alucinando con lo que decia aquel idiota.

- ¿Me... acabas de amenazar? No es que lo estuviese confirmando, sus palabras habian sido claras. Por lo que acto seguido saco su telefono movil del bolsillo de la chaqueta  y marco marco el numero de emergencias. Acabas de cargarla a lo grande majo. Ahora ya no me dejo hacer las pruebas sin un abogado que os de permiso Le respondio con una sonrisa mientras esperaba contestacion al otro lado de la linea.

La tensión se palpaba en el ambiente, Alex con los brazos cruzados dice:

• Max tiene razón, porque no colaboráis, de verdad… no sé porque veis tantas películas de conspiraciones que a la mas mínima estáis deseando que alguien del gobierno esté en vuestra contra para lo que sea…

Suspira profundamente mientras Aura llama a emergencias, tras un par de segundos alguien coge el teléfono:

• Si… dígame, emergencias en que puedo ayudarle

Alex observaba mientras los hombres armados parecían seguir bastante tensos, Alex mira a los dos chicos y dice:

• Bueno… supongo que habrá que esperar que compruebe ella misma lo que quiera… en cuanto a Death, por lo que sabemos ella tomo ayer un avión en Madrid, pero momentos antes se le vio en un pub que también fue atacado, no estoy segura porque tengo que confirmarlo, pero parece que el meta humano que se descontrolo lo detuvo ella.

Dejó escapar un resoplido. ¿Llamar a emergencias? ¿A un abogado? Joder, si esa organización trabajaba para las Naciones Unidas, se iban a merendar a todo aquello que quisiera usar Aura. Pero la dejó hacer, básicamente porque Alex parecía más que tranquila. Dirigió una mirada cómplice a los soldados en plan chicos, relajáos que aquí no va a haber tiros y se giró hacia la mujer.

- La china es una mercenaria, al menos eso me dijo tu colega - respondió, malhumorado - Pero pensaba que se encargaba de... ya sabes, "encargarse" de los problemas. ¿La chavala sólo está detenida? ¿La de la marca? Está perdiendo facultades.

Miró a Ted, se le veía muy callado, quizás sopesando las distintas opciones.

- ¿Después de echarle un ojo a la marca de la pelirroja - Daba por sentado que terminaría marchando con ellos - dónde vamos a ir? Necesitamos a más gente si queremos cazar a Death.

¿¡Qué huevos!?

-¿No lo estamos haciendo? -gruñó, aún en la puerta- Ella se ha ofrecido, y yo no necesito girarme para saber que los ha puesto en guardia. Eso no es no querer colaborar.

Para Ted no había opciones realmente: Max tenía razón en una cosa (por desgracia en aquella situación) y es que si decidían sacar a Aura por la fuerza probablemente tendría que ayudarla... y con sus capacidades podía correr rápido, pero aquello eran varios agentes preparados, él no conocía la zona, y ni siquiera era del mismo continente. Lo veía regular. Lo de "parece que estéis deseando que el gobierno les traicione" era lo más victimista que había oído en su vida. Había tenido una tía así. Tampoco era una persona agradable.

Se rascó la cabeza.

-...¿crees que va a confiar en vosotros? -preguntó, extrañado- Tiene quince años y tú -le señaló con un dedo curvo y negro- has amenazado con pegarle, y usted -señaló a Alex- no ha hecho nada más que aprovecharlo en vez de detenerle, ¡o decirle nada aunque sea!. ¡Y eso estando dispuesta a hacerse las pruebas que le quiere hacer! -le miro con los ojos abiertos de sorpresa- ¿De verdad espera que nadie confiase en usted después de eso?

Se posó la zarpa en la frente. ¡Menudo plan!

-¿Sabemos si se puede teleportar? Cuando yo la conocí (y estuvo a punto de tajarme) ayer, pareció salir de la nada y aparecer armas de la nada. ¿Pero no ha atacado a nadie? Y ha detenido un posible desastre... así que no sé cómo de fácil sería eso...

- Eh - el aviso sonó como una losa de veinte kilos cayendo contra el suelo - Vigila lo que dices. No he amenazado con pegarla, ni a ti tampoco. ¿He dicho que iba a intervenir a favor de alguno de estos bandos de mierda? No. Tengo mis propios planes.

La sonrisa de Maximiliam se había borrado del rostro y ahora miraba a Ted serio, casi desafiante. Parecía evidente que no le hacía mucha gracia lo que acababa de decir el joven norteamericano.