Partida Rol por web

Un réquiem por Hoyt

Greenwood, Massachusetts

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15/04/2013, 15:50
John Kellemport

- ¿Tiene idea de qué tipo de tratos mantenía Freygan con esos pecaminosos malditos por Dios? - pregunto interrumpiendo al hombre. Procuro mantener un tono calmado, no quiero que se exalte más.

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15/04/2013, 16:07
Albert Johnson

—No, lo desconozco, es peligroso acercarse a esa gente teniendo en cuenta que sólo éramos dos, pero le vimos allí de vez en cuando, integrado como uno más.

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15/04/2013, 16:14
John Kellemport

- ¿Alguna vez pensaron que quizá Freygan estaba intentando atraer al buen camino a aquellos hombres? Quizá estaba integrándose con ellos para convencerles de que acudieran al psiquiátrico a recibir tratamiento... - soy un hombre que siempre piensa en todas las posibilidades y no suele dar las cosas por sentado... pero este Johnson parece un hombre de prejuicios... - Respecto a lo de que sea peligroso... ¿por qué lo dice? - por un instante me pasan por la cabeza nuestros compañeros... espero que no tengan problemas.

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15/04/2013, 16:20
Albert Johnson

—Todo es posible, ¿pero acaso se necesitan ocho años para llevar un rebaño por el buen camino? No, no, esas gentes están más allá de la redención. Se guardan de los extraños, no les gusta que se cace en su territorio, se vuelven violentos sin previo aviso y realizan ritos paganos. ¡Sus cuerpos tienen la marca del Caído!

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15/04/2013, 16:40
John Kellemport

¿Una marca? ¿Quizá algún tatuaje tribal? Puede que incluso pintura... estos pueblerinos son siempre tan supersticiosos.

- ¿Qué marca llevan? ¿Es algún símbolo? - pregunto fingiendo estar interesado. Se vuelven violentos sin previos aviso, realizan ritos paganos... quizá debamos ir a reunirnos con nuestros compañeros.

Una arruga de preocupación surca mi rostro y lanzo una mirada a Collins y Danoff.

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15/04/2013, 16:47
Albert Johnson

—Son retrasados, de cuerpos degenerados, cercanos a las bestias. Están por debajo de la perfección del Señor y cerca de las deformidades de los siervos de Satán. Es la marca de los malditos.

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15/04/2013, 16:59
Olmer Danoff

—Ud. cree que si un forastero decidiera visitar la colina ¿correría peligro, aun siendo piadoso?

Empiezo a pensar que quizá visitar la colina tranquilamente puede ser peligroso.

 

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15/04/2013, 17:07
Albert Johnson

—Eso depende de lo que Dios pueda tener preparado para él.

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15/04/2013, 17:17
John Kellemport

- Señor Collins, señor Danoff... creo que debemos dejar descansar al señor Johnson... suficiente le hemos molestado por hoy... - comento pensando ya en marcharme. En cuanto salga por la puerta tengo que hablar con mis compañeros y tenemos que decidir qué hacer, pero es mejor no hablarlo delante de este hombre.

- Señor Johnson, muchas gracias por atendernos... creo que volveremos a vernos. - afirmo mientras le acerco la mano para estrechársela. Observo por un momento a Collins y Olmer por si quieren preguntarle algo más.

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15/04/2013, 17:22
John Collins

Deformes en las colinas. Son peligrosos.

Mi gesto se tuerce al escuchar y escribir aquello. Puede que nuestros compañeros estén en serios problemas ahora mismo. 

-Estoy de acuerdo. Señor Johnson, un placer. Me alegro de que sobreviviera a ésa cosa. Sólo espero que no mate más gente-digo, estrechándole la mano. 

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15/04/2013, 17:49
Director

El señor Johnson os estrecha la mano y os previene de nuevo de los peligros de Satán. Os acompaña hasta la puerta despidiéndose en la calle. Luego vuelve al interior de su casa, seguramente a reflexionar en torno a las ideas que inundan su mente enferma. El cielo está nublado, parece que hoy lloverá de nuevo tarde o temprano.

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15/04/2013, 18:07
John Kellemport

Obsevo el cielo con expresión ceñuda... - Mal día... parece que va a llover y nuestros amigos van a estar reunidos con unos paganos locos... - ese último comentario lo suelto en un tono un tanto jocoso...

Con cierto fastidio comienzo a arrastrar una pierna detrás de la otra y me encamino hacia el hotel mientras les comento:

- ¿Creen que nuestros amigos necesitarán ayuda con esos salvajes? ¿Es mejor que vayamos a echar un vistazo por si acaso, o nos adelantamos hacia el psiquiátrico como pensábamos en un principio? -

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15/04/2013, 18:29
John Collins

-Debo coger mi escopeta, y después iremos a la colina. Todo ésto no me gusta nada. Deberíamos echar un vistazo, e ir armados-digo, con convencimiento, y algo de preocupación en la voz. 

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15/04/2013, 22:16
Olmer Danoff

—En mi opinión, las palabras Johnson carecían de sentido. Suelo creer que hasta la historia más fantasiosa tiene un ápice de verdad, por lo que en la historia de Johnson quiero creer que pudo existir el ataque, pero probablemente de alguna criatura del bosque como un oso por ejemplo. Después, el miedo, la pérdida, el dolor... algo hizo que la frágil mente del Sr. Johnson quebrara.

—Respecto a si nuestros amigos pudieran estar en peligro... no lo sé. Yo no veo peligro en una cuadrilla de paganos, pero todas las indicaciones que hemos recibido hasta ahora nos hacen ver que quizá sean unas gentes peligrosas, no por ser paganos, sino por no creer en la cvilización ni en la justicia de los hombres.

—Yo tengo a mano a mi fiel revolver, por lo que no me importaría echar una mano a nuestros colegas, sobretodo al Sr. Hoyt que es quien nos alimenta. Podríamos acercarnos con el coche y si no vemos peligro podríamos regresar e ir al manicomio, por un litro más de gasolina no va a pasar nada y en cualquier caso, podríamos advertirles de la supuesta peligrosidad de esas gentes.

 

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15/04/2013, 22:34
John Kellemport

- Estoy de acuerdo con Olmer... - afirmo contundemente. Me agacho un momento y desenfundo el revólver pequeño del calibre 22 de mi tobillera para tendérselo a Collins. - Tenga, yo llevo mi revólver habitual - digo palpando mi sobaquera - y éste otro por si acaso. Espero que no necesitemos mucho más. Ahora seremos tres hombres armados más Marlowe y el gigante de Palance. Dudo que nadie quiera enfrentarse a nosotros, sean o no paganos. - añado con una sonrisa.

Notas de juego

Si Collins acepta pillamos el coche y vamos a ver qué tal les va a nuestros compañeros... sino seguiremos parlamentando :)

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15/04/2013, 22:39
John Collins

-Muy bien. De todos modos, siguen sin gustarme ciertas cosas que ha dicho el señor Johnson-digo, con cierto tono de preocupación. De todos modos, acepto el revolver y me encamino al coche junto a los dos investigadores, esperando que a ninguno de nuestros compañeros les haya pasado nada malo. 

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16/04/2013, 00:15
Director

Asustados por el relato de Johnson y temiendo por las vidas de vuestros amigos, tomáis el coche que os ha conseguido la señora Seaforth y os encamináis hasta Stonecrest, no sin antes preguntar en el pueblo el modo de llegar, pues conocéis poco la zona. Avanzáis a la máxima velocidad que os permite el vehículo y el estado de la carretera, que es sinuosa y está húmeda y embarrada por las lluvias del día anterior.

La indicación que os han dado en el pueblo pasa por dejar el vehículo junto a un arroyo y seguir su curso a pie una milla y media —tres kilómetros—. El poblado se halla junto al río, o eso dicen los entendidos. Os cruzáis a medio camino con un camión enorme que va en dirección contraria y casi os echa de la carretera. Tras las preceptivas maldiciones llegáis al lugar indicado, el cual estáis a punto de pasaros. Aparcáis el coche en un lugar discreto y seguís el curso del río. Hay huellas frescas y bien visibles en el barro que indican inequívocamente que vuestros amigos han pasado por ahí. De hecho al rato de marcha forzada podéis verlos a lo lejos. Evitáis la tentación de llamarlos a gritos, pues revelaría vuestra posición y la suya, y desde luego nunca se sabe en tierras donde puede haber gentes hostiles. Parece que se detienen, los seguís con sigilo. Se puede vislumbrar un campamento, al cual os acercáis cada vez más. Está junto al río.

Notas de juego

Fin de la escena.