Partida Rol por web

Asiento lentamente a Jafreese al notar que está bien -eso creo, cuanto más nos alejemos de la civilización mejor...- estaba descansado y eso era algo bueno pero preferiría encontrar unos pocos recursos de ser posible.

-¿Alguien me explica qué sucedió atrás?- pregunta sin rodeos pues algo no "le cerraba" -¿Por qué tanto escándalo por unos caminantes? Sabemos que siguen el ruido y de estar callados jamás nos habrían asaltado-.

No daba nombres pero era claro que me refería a Zack en particular. Negué con la cabeza -Hey, compañero, no es culpa de nadie pero ¿Qué te está sucediendo?-.

Jafreese asiente a las palabras de Stan, gesticulando la cabeza arriba y abajo ostensiblemente, mientras mira de soslayo a Zach y añade en efecto, estábamos bajo techo, el silencio era nuestro aliado, sugiero que contestes , mientras se prepara para una posible acción física de Zach chasqueandose loa nudillos.

Una vez fuera del peligro de los mordedores Jae conduce atento a lo que pueda aparecer por la carretera mientras escucha las preguntas de sus dos compañeros a Zach. Estaba claro que la escena vivida en la casa y el barrio en particular era de lo mas rara y si sumábamos el comportamiento del hombre ante la horda lo hacia mas extraño.

Con anterioridad Zach ya les mostró como acabar con esos seres en la valla del club de golf por lo que demostraba que sabia como actuar ante ellos. Eso hacia que las acusaciones de sus compañeros fueran acertadas en principio. 

Jae estiro su brazo y cogio la mano de Jeanine para aproximarla a el. Cuando la mujer estaba cerca de el solo su mano y busco su pistola y le susurro. - Coge el arma y observa la reacción de Zach, si intenta hacer algo raro amenázale. Todas las armas de fuego esta aquí delante así que poco podrá hacer el. Pero no quiero que dañe a ninguno de los de ahí atrás si es cierto lo que están intentando decir Jafreese y Stan. En estos momentos solo podemos confiar en nosotros cinco. Dicho esto Jae sigue conduciendo sin decir nada mas, solamente escucha con atención lo que puedan decir sus compañeros y Zach mientras esta atento a la carretera.

Cuando Jafreese y Stan empiezan a cuestionar en voz alta la forma de actuar de Zack, frunzo el entrecejo extrañada.  Y más aún cuando Jae me sugiere que prepare el arma y le amenace en caso de que hiciera cualquier cosa extraña.  *¿¿que?? es que están todos majaras?? - Pegándome más a Jae le hablo susurrando para que Zack no lo note. -*¿Pero a que viene eso ahora?? que no huíamos porque nos escucharon los muertos allí dentro?? Que ha hecho Zack? tuvisteis una pelea?? - Miro atrás para ver la cara de Zack y a Stan y Jafreese que lo miran fijamente. *Oh dios, como me culpen a mí también por intentar despertar a Jafreese a golpes... esto de no dormir les está sentando muy mal !! están paranoicos!!  - A ver.. tranquilos, cualquiera se habría puesto nervioso con semejante marea de muertos ¿..no??, acaso no ladró Mimi y se rompió algo? - Comento nerviosa   -  *Ya no sé que pensar...!! - hemos vuelto a salir vivos de milagro, ahora tenemos que huir hacia el norte y intentar DORMIR -  digo sin acabar de creerme mis propias palabras - ...ok?...  *como nos encontremos otra horda de podridos ...

Nuevamente pudieron escapar a duras penas usando el furgón, casi la misma situación vivida al inicio de la noche, aunque en la anterior huyeron de vivos armados y algunos de sus compañeros del club del golf no corrieron la misma suerte que él. Los seis y la perra de Jae habían conseguido salir ilesos.

Ante la respuesta de Jafrese el enfermero respiró aliviado al ver que no le habían mordido. - Menos mal, en nuestra situación actual no sé si podría haber conseguido hacer algo. - Confesó bastante frustrado a comprobar que seguían igual que antes, aunque más cansados si cabe.

Ya alejados de la marabunta de muerte la paranoia se acentuó sobre el mecánico. Salvo Jeanine el resto estaban en contra o al menos sospecharon, Thomas simplemente no supo qué hacer o pensar al respecto. - De todas modos, sin ruido es posible que se hubiesen acercado hasta la casa, tal vez no hubiesen entrado, no obstante una cantidad como la que había en el exterior acechando, seguramente salir se complicaría bastante, y sin recursos se hubiese convertido en otra trampa. - Expuso Thomas creyendo en esa posibilidad.

Miró a un lado, miró a otro sin saber como continuar. - No le veo sentido. no creo que lo haya hecho a propósito exceptuando que quiera suicidarse convertido en comida para los infectados, y existen otros métodos más agradables. Seguramente se asustó, sería la primera vez que haya visto una horda de semejante calibre. No son habituales, de hecho yo tampoco, las había visto más pequeñas. - Dejó claro que no quería no estaba del todo conforme con la desconfianza que había en él del resto de sus compañeros exceptuando de Jeanine, postura que compartía.

¿Se estaban volviendo excesivamente paranoicos, o es que el rubio era demasiado confiado? No estaba del todo seguro. No obstante, ante saber que la abuela rusa fue un topo de Judas y que seguramente no fuese la única entendía a laperfección las razones de Jafrese, Jae y Carter, pero para Thomas otras inquietudes le asaltaron. - A mí lo que más me preocupa es que estamos como al principio, sin conseguir gran cosa y sin descansar. La gasolina tarde o temprano se agotará, y dudo que el furgón aguante más trotes como éste. - ¿Cuánto tiempo podrían seguir así? No mucho, o encontraban pronto una solución o cometerían un error irremediable.

-A ver, a ver, nadie está señalando a nadie pero por eso mismo estoy preguntando qué pasó- miró a Thomas y Jafreese y lo mismo habría hecho con los demás de no estar en la cabina.

-Comprendo que alguien se asuste pero ya hace tiempo que estamos en esta situación, los mordedores no son algo nuevo, las hordas tampoco por muy grandes que sean y sabemos cómo evitarlos. Las hordas se mueven aleatoriamente o atraidas por algo y, como no vi nada que pudiera llamar la atención de esos podridos, no creo que alguien la fuese guiando-.

Negué con la cabeza mirando otra vez a Zack -Solo quiero saber cual fue el problema y... Amigo... Sinceramente necesito saber que no te espantarás si algo está por matarme. Estamos en esto juntos, quiero estar seguro de que puedo contar con quienes me rodean. Así como Jae reaccionó rápidamente y distrajo a los que querían comerse a Jafreese, necesito saber que puedo contar con los demás-.

Al igual que Jafreese algo no le gustaba del mecánico, pero su mente no volaba alrededor de la idea de traición sino simplemente de que era un tanto cobarde. No tenía motivos para pensar que fuese un peligro*.

Jafreese escuchó a Jae, Jeanine y Thomas y relajó un poco los hombros, recordó que su entrenador siempre le dijo que no abusara de su fuerza, el boxeo era un noble deporte no un arma perdón, tenéis razón, llevo tiempo sin dormir, no me alimento como estoy acostumbrado, pero… no me negaréis que aquí algo no cuadra, mientras termina la frase asiente mirando a Stan, seguidamente con su mano derecha señala a Jae, no hace falta que os diga como ha ayudado Jae, nos lleva y nos trae, hace poco llamó atención de los mordedores para que yo pudiera escapar,, después mueve la mano hasta Thomas, nos ha curado, ayudó a explorar en la verja de salida,, sonríe levemente, un poco confiado, pero parte del equipo, a continuación se gira hacia Stan, no hay mucho que decir, tiene grandes ideas, nos ayudó a escapar de Judas, ha estado siempre on fire, después una gran sonrisa mientras señala a Jeanine, en algún momento ha pasado nerviosismo, pero también nos ayudó a salir de donde estaba Judas, y me despertó en la casa para poder sobrevivir, con la mano se toca la camiseta sobre el pecho, yo creo que he hecho mi parte, disparé a los que atacaban a la vieja rusa,, la boca se tuerce al decir vieja rusa, y he puesto de mi parte para llegar donde estamos. Hemos perdido a algunos valiosos como Eura, Rose, otros se han querido perder solos, y…, por último se gira hacia Zach, ¿Y tú? ¿Qué has hecho a parte de esconderte en una caseta? ¿Tratar de volcar la furgoneta? ¿Traernos a ese barrio? ¿Llamar la atención de una horda?, Jafreese parece desesperado por tratar de convencer a sus compañeros, se ve que no está en su mejor momento, la labia nunca fue su fuerte y su brazo derecho desea soltar un fuerte uppercut como cuando estaba subido al ring, soltarlo sin pensar en el daño que puede hacer porque está permitido, mira a Zach, levanta su mano derecha para poder tamborilear con los dedos en el aire apenas perceptiblemente, y no hace nada más.

- YA BASTA!!!! Grita Jae dando un golpe fuerte con su mano en el salpicadero de la furgoneta. Mimi all escuchar el grito de su amo empieza a ladrar pero al poco para. 

- Zach haz el favor de responder, acabemos con esta mierda. Si ocultas algo dilo antes de la cosa vaya a mas, si todo a sido un mal entendido que esto acabe ya. Jae da otro golpe. - JODER! 

Jae esta muy enfadado, esta claro que el día a sido mas que estresante y esto es lo ultimo que quiere. El tampoco confía demasiado en Zach, pero quizá este no sea el mejor momento para averiguarlo. Por otro lado quizá este fuera el mejor momento para dejar todo claro y que así todo terminara.

Zachary se limita a escuchar cada uno de los comentarios y sospechas en su contra, se recarga en medio del movimiento de la furgoneta en camino.

-Cobardía... es lo único que me ha mantenido vivo desde que el mundo se fué al diablo...- el mecánico no demuestra ninguna emoción al responder a aquel grupo de sobrevivientes. -No somos tan diferentes, al haber salvado el pellejo antes que volver por Eura y su hija, o del pequeño Jack... que ese boy scout tenga más bolas que un boxeador profesional, y que un veterinario con infulas de modelo y habilidades de taxista no me asegura que pueda confiar mi vida al haber abandonado a su suerte a un adolescente como Alex... y Stan... Stan... siempre iniciando la paranoia... Esperen... tampoco confiaban en el barrilete de Horace simplemente por sus habilidades aniquilando podridos... y podría seguir con Thomas al haber abandonado a su compañero Reing... yo también me pregunto hasta que punto puedo confiar en cada uno de ustedes... incluso a la congoleña la querían usar de carnada para brincar la cerca y  hacerla correr como alma que lleva el diablo con una jauría de "mordelones" detrás de ella para que ustedes pudieran salir...- El mecánico se recuesta en la lámina de la furgoneta colocandose la gorra mugrienta sobre el rostro. -Necesitamos dormir, la paranoia nos vuelve peligrosos...- Zach guarda silencio un momento luego vuelve a hablar con la gorra aún sobre su rostro. -Así como ustedes, yo también abandoné a un grupo de sobrevivientes hace más de un año... una horda inmensa nos atacó el campamento en la madrugada, mucha gente murió horriblemente devorada aquella vez tome una motocicleta y logré escapar sin siquiera tratar de ayudar a alguien que me brindó su hospitalidad, seguridad y que compartió el poco alimento que tenía... Gwen... Javier... Roland... todos muertos a estas alturas y yo aquí con vida con más cobardes como yo huyendo sin saber a donde... bendita la cosa...-

Si bien todo el planteo era extremadamente ridículo había algo que no le cuadraba -No estás contestando mi pregunta- dijo calmado el docente -si tienes intención de proyectar tus propias culpas en nosotros ni me interesa detenerte pero aun no me explico por qué actuaste de esa forma-.

-Aun suponiendo que admitir tu miedo diciendo "soy un cobarde" te justificara abandonar a otros para sobrevivir no lo hace a gritar así, llamando la atención de esos mordedores. Al contrario, eso parece un impulso suicida que no se condice con tu afirmación de buscar siempre salvar el propio pellejo-.

Miró a los demás dentro de la parte trasera. Sobre todo a Jafreese pues no quería que este estalle en cólera tras la instigación del mecánico -Y no compares la cobardía con no ser estúpido... Al parecer quieres hacernos pensar que lo tuyo es lo primero-.

Antes de que el mecánico hablase primero lo hicieron Stan y Jafreese, el primero para averiguar los motivos de que el Zach actuase de aquella forma que hizo alertar a aquella cuantiosa manada de devoradores de carne humana. Y el segundo con explicaciones de la utilidad de cada uno. - Gracias Jafreese. No soy ni el más listo, ni el más fuerte, y mucho menos el más valiente, pero hago lo que puedo aunque sí que me gustaría hacer más. - Dijo el rubio con tranquilidad a pesar de la tensión en el ambiente, tanta que se podía cortar hasta con un cuchillo de plástico.

Dicha tensión se acentuó ante el enfado del conductor, causando que los golpes que propinó a nadie sobresaltaran a Thomas e las dos veces. Quiso decir algo, pero no sabía el qué, así que esperó a que el mecánico respondiese, lo cuál hizo y no de la mejor manera. Sus palabras fueron hirientes, y no sería de extrañar que los ánimos no mejorase, si no más bien todo lo contrario.

Primero frunció el ceño y después paladeó un poco en búsqueda de saliva. - Puedes decir lo que quieras Zach, pero nosotros no los abandonamos, tomaron su propia decisión ignorando nuestras advertencias. - El enfermero alzó la voz, no demasiado, pero sí lo suficiente para darse cuenta que también estaba molesto, enfadado incluso. Algo inaudito viniendo de él. - Y yo nunca abandoné al grupo en que yo estaba, cuando nos quedamos unos pocos por culpa de unos malditos hijos de puta...nos separamos. - Replicó más nervioso, aquel tema le molestaba, a pesar que fue él mismo quién lo sacó a la luz. Pero es que compararlo con abandono, le tocaba la moral y mucho.

Guardó silencio un minuto, respiró hondo, principalmente para no perder el control, no le gustaba en absoluto dejarse llevar por los impulsos, y a pesar de todo lo vivido en las últimas veinticuatro horas, la tensión acumulada, sentimientos dolorosos, sed, hambre, y también miedo ya que Thomas también lo tenía, quería mantener el raciocinio y el sentido común todo lo posible.

Ya más calmado, prosiguió hablando. - La próxima vez ten más cuidado Zach, si es que quieres sobrevivir, porque es muy posible que un descuido error no lo sufras tú, si no otro, incluso varios, y por supuesto ni yo quiero ni que ninguno de vosotros sufra los míos, ni tampoco sufrir los de los demás. - Le increpó seriamente. Por como lo dijo, a Thomas le preocupaba seriamente aquello.

Y otra cosa más, todos queremos sobrevivir, no lo confundas con cobardía, ni tampoco estupidez o temeridad es lo mismo que valor. - Más tranquilo explicó su postura aunque visiblemente hastiado de como habían ido las cosas, y la discusión no es que ayudase mucho más. - Pero sí, necesitamos descanso entre otras cosas, seguramente mañana veamos las cosas en otro tono. - Seguramente lo único en que podía darle razón, el agotamiento tan intensivo que habían sufrido y no tenía intención de mitigarse en un futuro próximo, no ayudaría en nada.

Había realizado su intervención, le tocaba al resto, así que se fue a un rincón de parte trasera, no vaya a ser que el boxeador decidiese usar sus artes y le pillase de camino.

Al comienzo no hago más que sentirme totalmente de acuerdo con Zack. La cobardía me mantuvo viva, huir y correr constantemente. Contándonos que formó parte de un grupo con un tal Javier, Roland, Gwen... igual que nosotros con Charles O'Brian, Eura, la monja... -*¿Habrán muerto? - pienso en el pescador y los niños suicidas - claro que están muertos... como van a sobrevivir a eso?? Esos cabrones mataban a todo el que podían!!!  

Pero luego las acusaciones se vuelven en contra de todos, y es que todos hemos actuado en nuestra defensa propia y para nuestro beneficio.... *JODER son nuestras vidas, claro que nos importa mantener el pellejo!! - Lo que me deja una sensación extraña por dentro, desagradable. Antes de que nadie siga lanzándose miradas acusadoras y más preguntas atacándose entre ellos me giro y me asomo por la ventanilla y trato de decir firmemente- Ya vale. Parad ya de hacer lo que estéis haciendo! Si nos quisiera matar habría dejado las puertas abiertas para que entrasen y se iría corriendo a la furgoneta sin decir nada! seguro que sabe arrancar una camioneta sin llaves. Es mecánico no?? *eso les habría hecho yo si fuesen los amigos de Judas...  -Estamos cansados. Callaos todos y A DORMIR. 

-JAE- intentando cambiar de tema - cuando quieras cambiamos para que puedas dormir.  LLevas HORAS conduciendo tú esta noche - hablo visiblemente molesta con la situación, estresante tanto por fuera como por dentro de la camioneta.

¿Bolas? ¿Buscaba provocarle el mecánico? A muchos adversarios les gusta provocar en el ring, sobretodo antes de comenzar el combate, si oyeran lo que dice, o decía, Floyd Mayweather…, todos van interviniendo y por último la explosiva Jeanine en su discurso, cargado en parte de razón, Jafreese intenta calmarse, hincha el pecho y exhala el aire despacio para relajarse como hacía siempre cuando salía de su vestuario hacia el ring primero en sus comienzos en un gimnasio de barrio y luego en el Madison Square Garden, ¿Dormir? Desde luego es buena idea, pero no creo que todos debamos dormir a la vez, parece que ha acabado pero una vez más comienza a hablar atropelladamente, lo siento “Jean” pero no puedo callarme, me preocupa mucho más que abandonar un grupo, cambia el tono de voz a uno más neutro ya que todos lo hemos hecho, inciso, sus ojos buscan a Zach, puedes abandonar este cuando quieras, y vuelve a su arenga, como decía, me preocupa más lo que comenta Stan o el tratar de hacer volcar la furgoneta, creo que para eso no hay mucha explicación…, acabada su frase cruza los brazos sobre el pecho y se recuesta un poco sin dormir, también puedo conducir si lo necesitáis.

-.... - abro la boca pero no digo nada, cerrandola al cabo de pocos segundos. Miro enfadada hacia el parabrisas. Ya pararán...
Aprieto la mandíbula y trago saliva. -... Jeany.
-Mis amigos... antes, solian llamarme Jeany.
Sin decir nada más me recuesto y espero a que Jae diga si necesita cambio de conductor. Acariciando la cabeza de Mimi con el ánimo apagdo.

- Cuando salgamos de la ciudad hacemos el cambio Jeanine. No creo que sea buena idea parar en medio de la ciudad. Jae mira de reojo a la parte trasera y resopla. Es un resoplido con una mezcla de enfado, cansancio y aburrimiento por la situación. 

El modelo se guarda las ganas de decir nada mas y en un intento de romper la tensión alarga su mano hacia la radio del coche. Estaba claro que era imposible que ninguna emisora de radio estuviera en funcionamiento para poder poner algo de música, pero con un poco de suerte habría un CD de música en su interior. Jae pulsa el botón y como si fuera por arte de magia se puede escuchar la música.

Rapidamente baja el volumen para dejarlo a un volumen que solo lo puedan escuchar dentro de la furgoneta sin que el ruido alerte a los caminantes de fuera.

El mecánico se levanta ante las últimas palabras de Jafreese quitandose la gorra de su rostro, y lo mira fijamente. -Tal vez tengas razón Jafreese... creo que no debería permanecer con ustedes un momento más...- Zachary busca sus pertenencias y de la mochila saca un revólver y le quita el seguro, luego se coloca la gorra en la cabeza.

-Y tú Stan... ¿crees que estoy justificando mi estúpidez?... ó tú que piensas Thomas, ¿que soy sólo un cobarde?... ¿ó simplemente soy un loco paranóico que necesita descansar?... - Zachary Thompson sujeta a Thomas fuertemente de la camisa y le pone el revolver en la sien -Detén la camioneta Jae y cuidado con tus perras... mantenlas tranquilas  ó Thomas acompañará a Reing... los demás dejen sus armas aquí y bajen de MI camioneta, cierren la portezuela de atrás  en cuanto bajemos y tú coreano en primera quita esa horrible música, y luego deja encendida la furgo... como les he dicho... mi cobardía me ha mantenido con vida y creo que no aprecio la compañia de tipos como ustedes...-

 Por un momento pareció que la cosa se tranquilizó a pesar de que los ánimos seguían en alza de malas maneras, y de repente pasó, sin saber como, ni el motivo, especialmente lo segundo. El mecánico amenazó con un revolver a un asustado Thomas que se quedó mudo debido al miedo, incapaz de que su garganta tragase la saliva que empezó a acumularse de forma acelerada, como su corazón que primeramente se paró para después acelerarse a una velocidad de vértigo. Y sin embargo, su cuerpo fue incapaz de moverse, dejándose apresar por un lunático como si fuese un muñeco.

Cerró los ojos y se preguntó si correría la misma suerte que la pobre de Rose, o los arrojados Benjamin y Michael. Se lamentó abrir la boca, quizás por eso le había elegido a él, por sus palabras. O quizás porque aparentaba ser el más indefenso y joven de los tres que se habían quedado atrás. En cualquier modo ya no importó demasiado, ahora podía sentir las irónicas palabras del mecánico y el frío metal en su cabeza, apuntándole. Tan sencillo como que su opresor apretara un gatillo, y Thomas dejaría de respirar. Al menos sería rápido e indoloro, y no se levantaría como un infectado.

Aquello le alivió de alguna forma. Era lo máximo que se pudo permitir en optimismo en un mundo tan podrido. Y no solo por los infectados, los vivos también lo estaban, la panda de asaltantes que se encontró en primer lugar, Judas y sus hombres, y ahora el mecánico. Dispuestos a derramar sangre si hiciese falta. El ex universitario

Los labios del apresado se movieron para hablar de forma pausada.Era lo único que pudo hacer, hablar. Estaba asustado, en cualquier momento todo acabaría para él. - ¿Qué consigues con esto? Por qué tú sólo lo tendrás más difícil, lo sabes, no te digo nada nuevo. - Le preguntó en un susurro intentando estar tranquilo sin conseguirlo, obviamente, él estaba convencido de que no saldría de esa. - Además, si ceden, ¿qué garantías hay de que me dejarás ir y al resto también? - Casi se arrepintió de formularle aquella pregunta que no fue sencillo de decir. En su mente se imaginó que en el último momento alguien acabaría convertido en un cadáver.

Aquello pilló de sorpresa a Jafreese. Se olía algo y había presionado mucho a Zach... quizá demasiado y la situación tenia mala pinta, si el amenazado hubiera sido el idiota de Horace poco le hubiera importado y su famoso puño derecho hubiera hecho añicos al alfeñique de Zach.

Pero no era así, el amenazado era Thomas que había atendido a todos y en particular a Jafreese.

Así que Jafreese dice tranquilo amigo, voy a dejar muy despacio el rifle en el suelo, ¿vale? , se descuelga el Ak47 muy lentamente y lo deja reposando en el suelo de la furgoneta.

Y guarda silencio esperando una oportunidad.

Stan estaba sentado, si, pero había estado en guardia todo el tramo. Aquel revolver, sin embargo, sí que lo había tomado por sorpresa.

En ese momento Stan se dió cuenta de que el mecánico era efectivamente el tipo de estúpido más negativo para un grupo, un estúpido peligroso.

Se paró lentamente, mostrando sus palmas, que llevó a la correa del AK-47 que portaba. No había otra opción pues, si se resistían Thomas (y quizás todos) acabarían muertos. El fusil automático estaba a centímetros del suelo de la camioneta cuando el docente escuchó la pregunta del enfermero y notó que, aun en su estado de temor, hablaba con coherencia. Nada les aseguraba que Zack cumpliría, absolutamente nada.

Tomó las palabras del rehén como una declaración hacia los demás de actuar pese a cualquier consecuencia en el microsegundo en que fingía desarmarse y usó su inclinación como una especie de finta y preparación. Con el bamboleo de la camioneta ganó un pequeño paso más de distancia, encorvado, fingió ser como él, fingió ser un cobarde.

Al dejar el arma sus piernas se habían flexionado lo suficiente como para tomar impulso y Stan se decidió -lo siento- se disculpó con todos por arriesgarlos...

Y saltó hacia el arma, saltó hacia el mecánico.

[Pero su intención no era desarmar a Zack, eso sería demasiado complicado. Su táctica fue aprovechar el ángulo para tomar el brazo del arma y empujarlo contra una de las paredes internas de la camioneta. De esa forma el arma se alejaría de Thomas (alineándose con Zack o el techo) y daría una oportunidad al resto.] Es una aclaración descriptiva.
 

El engaño había funcionado, todo pasó muy rápido, saltó y sus manos rodearon tanto la muñeca del infeliz como el martillo del arma.
El revolver, la mano del mecánico y la pared de la camioneta se estrellaron entre sí con violencia. Los casi setenta kilos del docente parecían poco normalmente pero seguramente no sería la impresión que tenían los ocupantes de la parte trasera de aquel vehículo, no ahora al menos.

-TE TENGO HIJO DE PUTA- gritó Stan -TE VOY A MATAR-. La adrenalina lo había dominado mejorando sus aptitudes físicas pero no lo dejaron pensar claramente.

No gritó "Ahora Jafreese", tampoco tranquilizó a los de la cabina, no sugirió a Thomas abrirlo con el machete como a un cerdo.
Por un instante el mundo de Stan se volvió Zack, su mano, su revolver y la pared donde se apoyaba con toda su humanidad impidiendo al imbécil lastimar a sus compañeros.