Partida Rol por web

ULI parecía seguir trasteando en la terminal, al parecer deseaba encontrar algo con tantas ganas que había pasado por alto toda conversaciones humana hasta que su segundo mejor amigo y simplemente por cercanía: IBM hablo y dijo cosas o mas bien puso mensajes que sin duda eran bastante extraños.

-Bueno, sin duda esto es inusual. -Comento al fin la aspiradora dándose la vuelta y caminando hasta la zona de las armas. -Sin duda, mi ordenador cuántico. -Llamado así en cariñoso homenaje a Cuantikó, su diseñador, que nada tenia que ver con el termino matemático. -Me dice que este mensaje solo habrá causado nuevas muertes y he de decir que lo dicho por Tatsumaki es cierto, por lo menos a lo que mi presencia se refiere.-Ademas sabiendo que ella hablo a su favor y los humanos gustan de devolver ese tipo de favores.

-Pero también creo correcto mencionar que mientras estuvimos a oscuras, ella o alguien usando servomotores de alteración vocal, fingió ser la Oficial de Tercera Tatsumaki del futuro dándome un mensaje de aviso. Nunca pudiendo ver el artífice del mensaje, si fue la Oficial u otra persona. -ULI busco en la estantería una pequeña arma EMP y otra de pistola con munición letal que guardo dentro de su cuerpo, para sacar nuevamente sus manos e ir a la terminal para justificar la extracción de dichas armas.

-Si vamos a movernos, creo necesario sellar esta sala para evitar nuevas sustracciones no programadas.-Concluyo el robot, mientras le daba un repaso final a la terminal del sitio.

Yo como ya dije no quiero ningún arma, soy pacifista y no me interesa en absoluto matar a nadie, ni siquiera para protegerme a mi misma. Además, de todas forma no sabría usarla y casi de seguro que acabaría disparándome a mi misma.

ARC-78 aún se encontraba armada y esperando órdenes antes de proseguir.

. . .

Sotod y Obe llegan a la armería, donde se encontraba ARC-78 armada con sables laser; Revay, Tatsumaki y U.L.I. teniendo problemas a la hora de manipular las cámaras de vigilancia.

Al llegar a la sala, se sorprendió la de gente viva que había. - Damas, caballeros y robots. Esperamos no interrumpir nada, solo veníamos a por algunos explosivos, pequeños, no os preocupéis, es solo para abrir algunas puertas... Con el corte de electricidad pues obviamente las cosas van mal...

Intentó mantener las distancias con los demás, sobretodo de ARC que iba armada. - No queremos líos, solo recoger nuestras cosas e irnos. Nosotros acabamos con Eren, concretamente Lynette... Aunque ella no lo ha logrado. - suspiró al decir esto último, con gran tristeza. - Solo queremos nuestras pertenencias personales y seguir con nuestras vidas, lejos de aquí, podéis hacer con esta nave y lo que hay dentro lo que gustéis. - Ahora dirigió su mirada directamente a Tatsumaki, la capitana en funciones. - Tú has organizado todo esto, hemos hecho lo que querías, creo que nos merecemos al menos lo que pido ¿no?

- ¿Yo? - Me quedo sorprendida de que "todo el mundo" crea más a una voz salida de la nave que nos está obligando a matarnos que a su jefa de ingeniería y ahora capitana.

- Yo no he organizado nada de nada. Cómo les decía a ellos no se nada de todo esto. De todas formas contadme vuestro plan y os ayudaré en todo lo que pueda como ingeniera jefe de esta nuestra nave, aunque también he de decirles que todas las decisiones militares y de seguridad las he delegado en Revay. -

La cara de ULI se dibujaban rayos y nubes negras mientras aporreaba el teclado cada vez mas fuera de control. -Sera posible... Esto con CAS no pasaba, maldito IBM... -A alguien debía culpar de su propia incompetencia.

Pero la llegada de aquellas dos personas exigiendo explosivos, llamo su capacidad interactiva de atención girándose a su posición. -¿Explosivos? Imposible, eso puede hacer que la nave se despresurice y acabemos todos perdidos en el espacio o lo que es peor muertos. -Sí, el también tenia ese concepto en su programación primaria. -Si lo que quieren es abrir puertas, tal vez yo mismo les sirva de ayuda, pero tendrán que ser mas específicos y detallar acciones e intenciones. -Ahora sus ojos volvían a ser esos dos puntos negros eternos en aquella pantalla.

Aprieto algo mas fuerte la pistola que tenía entre las manos y miro a la puerta mientras esta se abre para al ver quien venía relajar nuevamente la postura.

- Esto facilita las cosas -estando de acuerdo con la palabras dichas por U.L.I me pongo en mitad del camino entre Sotod y los explosivos- Sabes como han estado las cosas hasta ahora, no podemos fiarnos de nadie así sin mas. Aunque consigáis vuestros efectos personales dudo que podáis abandonar la nave hasta tocar tierra firme, hagamos un trato... solo tenéis que esperar, en cuanto lleguemos a nuestro destino no voy a impedir que hagáis nada hasta entonces solo esperad ¿de acuerdo? Queremos reunir a toda la tripulación restante, a excepción de Menudi que se ha encerrado desde que el capitán se suicido, si estamos todos juntos aunque quede alguien con intenciones hostiles no se atreverá a hacer nada sobretodo estando Arc y yo presentes. Si estáis de acuerdo podemos ir de inmediato al puente de mando.

Aunque trataba de mediar con ellos y mis palabras podía parecer amables en otro contexto mi natural cara de cero emoción hacía que perdiera ese efecto por completo, además de que como casi siempre mis ojos a la vista de otros daban una mala impresión bastante notoria. Ni siquiera yo sabía que había visto el capi en mi.

La verdad es que los explosivos si que eran algo... Bestias. Contestó al pequeño robot de limpieza, con dotes de hacker que desconocía. - Simplemente con entrar al famoso despacho, pues ahí tengo algunas de mis cosas y después tanto a la habitación de Obe como la mía, sobra, no necesitamos nada más. - inquirió Sotod.

Escuchó a Revay hablar y decidió contestarle. - Podríamos usar una de las naves para escapar de aquí, sinceramente no sabemos si donde vais puede ser peligroso para nosotros dos. Tampoco nos importa mucho, siempre y cuando no vayamos. - suspiró. - Hemos estados encerrados, para nuestra desgracia, con Menudi, Ayana, Lyenette y Eren todo este tiempo, si bien Eren ha estado amenazándonos todo el rato con matarnos, al final logramos acabar con él, después de escapar de Ingeniería Superior, pero a un gran coste. Lynette tenía sangre venenosa al contacto con el aire y tras... Enfrentarse a Eren, acabó con todos los presentes, Obe y yo escapamos por los pelos. - hablaba con cierta pesadez, se notaba que le había dolido mucho la perdida de Lyentte. - También estaba presente Morgan cuando logramos escapar de Ingeniería Superior, pero no creo que haya sobrevivido, después de todo, quien necesitara oxígeno para vivir habría muerto por el veneno.

Miró ahora con seriedad a todos los demás. - Mientras hemos estado encerrados, ha muerto muchísima gente, demasiada. Y no sabemos a manos de quien, es por ello que no podemos confiar al cien por cien en vosotros. Al igual que vosotros tampoco en nosotros. Debemos ser los últimos supervivientes de esta nave, quitando al gordo seboso del cabrón de Menudi, al que tanto le gusta encerrar gente y no veo la necesidad de alargar la tensión entre nosotros. Si cogemos nuestras cosas, una de las naves y nos vamos, ya no habrán dudas entre ninguno de los presentes y por ende, vosotros podréis llegar a vuestro destino en paz y nosotros al nuestro.

Yo sólo opinaré sobre temas de ingeniería, así que he de pronunciarme en cuanto a la estabilidad y buen funcionamiento de la nave, así como al uso de los explosivos.

La estabilidad de la nave es esencial para llegar a destino, sea el que sea, necesitamos a cierto número de personas con ciertas capacidades para que esto funcione, así que queramos o no, nos necesitamos los unos a otros.

En cuanto al uso de los explosivos, me parece que no acabo de entender el propósito de usarlos ¿Me lo podéis explicar más detenidamente?

Para abrir puertas cerradas. Es lo que hicimos en ingeniería superior y funciono bien. Pero si U.L.I. puede abrirlas sin hacerlas explotar, mejor que mejor. - contestó Sotod a Tatsumaki. - Yo no puedo aportar mucho a la nave, solo servía como lazo de unión entre todos los tripulantes, pero si Obe decide quedarse, él si que puede resultaros de utilidad. ¿Qué dices compañero?

 Obe, por su parte, estaba pálido como una lápida y se lo notaba con pocas ganas de hablar. Como si acabase de ver un fantasma. A un par de fantasmas. Cuando surgió el conflicto de intereses respecto de seguir a su compañero Sotod en el escape a través de una de las naves y las ordenes de su superiora Tatsumaki, el ingeniero se vio en la necesidad de hablar para apaciguar lo que en primera instancia parecía un acto de rebeldía.

- Eh, y-yo... nosotros... la situación está muy complicada, jefa. Realmente, siento que estoy vivo aquí y ahora de pura casualidad. Es decir, luego de la muerte de Octavio, pareciera evidente que estar parado en el lugar equivocado en el momento equivocado te lleva a la muerte. No quiero morir; aunque supongo que es un sentimiento compartido por todos los presentes. Solo... quería saber si, en caso de que me lo permitiese, pudiera renunciar a mis funciones e irme con Sotod de sentirme incapaz de seguir como ingeniero eléctrico principal.

 El hombre tragó saliva, temeroso. No se sentía a gusto con lo que estaba pasando, ni con la forma en la que lidiaba con la situación. Hacía rato que no se sentía a gusto con la mayoría de las cosas que le pasaban y las decisiones que tomaba, de hecho.

Me apena profundamente desprenderme de dos valioso tripulantes como ustedes, pero si es lo que desean yo no lo impediré, sin embargo firmarán los dos su baja inmediata, así como un pagaré por el equipo que sustraigan de la nave para irse. Bueno, un pagaré no, más bien un "devolveré en perfectas condiciones", también hará falta de cara a la empresa una exención de responsabilidades hacia mi persona y un documento que acredite que bajo su propia decisión personal abandonaron la nave...

Me encogí de hombros sin mucho mas que objetar si estaban dispuestos a hacer eso no veía razón para oponerme realmente.

- Como queráis... aunque me preocupa el estado del despacho. Arc, la anterior tu acabo varada en el espacio ¿no? Y dijiste que estaba en el despacho ¿como paso y es seguro ir a él ahora? -no había pasado por alto las palabras de Sotod ¿así que ninguno de los dos era humanos? mi mirada sobre el a partir de ahora ex-asistente ejecutivo era sin duda una llena de sospechas pero mientras abandonaran la nave no tendría problemas- Aunque hay algo que si me gustaría saber ¿cual es la situación respecto a Menudi? De momento tengo pensado dejarlo a su suerte en Ingeniería Superior donde no molesta pero si es peligroso lo iré a detener de inmediato. Sin importar el como.

 La mueca de tristeza del ingeniero era evidente. Se sentía mal por estar pidiendo aquello en ese momento. Pero tenía que pensar en sus hijos, en la vida en la Tierra... e incluso en Karen. Nunca había apreciado tanto a su ex-mujer hasta que estuvo tan cerca de la muerte.

- Lo que usted me pida lo haré, jefa... Quiero decirle que ha sido un honor haber trabajado bajo su mando. Y que me apena hacer esto, pero... tengo familia en la Tierra. Gracias por entender.

 Obe hace una pequeña reverencia; costumbre propia de un japones avergonzado. Luego, atiende a la pregunta de Revay.

- En cuanto a Menudi... para mi es peligroso. Pero no lo detendría. Mientras no lo molesten, seguirá con sus cosas y no dará más problemas.

ARC-78 escuchó atentamente todo lo que tenían que comentar; pese a que las órdenes que tenía la joven eran distintas a las que ella tenía en mente, decidió seguir su corazón, o quizás seguir las últimas palabras de alguien que al final resultó ser una persona muy importante para ella. Con un rápido movimiento con la espada, atacó a Tatsumaki, la actual capitana.

-El murió por tu culpa. -Dijo.