Partida Rol por web

Notaste como la doctora estaba gratamente sorprendida por tu comportamiento.

- Vaya, veo que para ti es bastante importante averiguar el orígen de tus capacidades. Aunque parezca mentira muchos han decidido resignarse o incluso disfrutar de esos sin más preocupaciones, quizás más que nada porque saben que ahora tienen una principal premisa: sobrevivir ¿no opinas igual?.

La mujer con delicadeza colocó su mano en tu hombro y te dio un ligero apretón a modo de confianza.

- Yo no tengo respuestas y creeme que me encantaría tenerlas, pero soy consciente que ni tu ni yo somos lo suficientemente importantes como para encontrarlas por nosotros mismos - dicho aquello se retiró de ti hasta buscar algo en unos cajones.

- Toma, esta pastilla te aliviará cualquier dolor de cabeza, es un antiinflamatorio... y si sigues teniendo problemas para dormir podré facilitarte algún tranquilizante ¿lo ves bien? -

 Escuchaste como la doctora se alejaba de ti para seguidamente oír el sonido de un grifo abrirse, al parecer se estaba lavando las manos como acto de que había concluido.

- Yo he acabado por mi parte, necesito que te quedes reposando unos 15 minutos para que haga el medicamento efecto, así que por desgracia debes ser paciente - La doctora pasó por última vez su mano por tu cabeza en un signo de amistad y cariño.

- Una vez que pase ese tiempo podrás irte de nuevo con tus amigos, en una semana tendrás que venir para que me cuentas qué tal va evolucionando todo ¿de acuerdo? - Tras aquellas palabras se despidió finalmente de ti, según se alejaba notabas que el efecto anestésico que te otorgaba la Doctora iba debilitándose, pero era algo que tenías que superar. Estaba claro que las consultas no podían ser demasiado largas ya que probablemente hubiese ya alguien esperando para ser atendido.

-Si, la verdad que es importante.  No sé por qué, quizás se deba a mi necesidad de comprender, si hubiese sido un poco más listo seguramente hoy usaría una bata blanca- sonrió divertido por la idea de verse como un científico -Pero lo cierto es que, aunque seguí otro camino, siempre progresé en base al entendimiento.  Del arte marcial en un primer momento, de mis rivales luego.  Era un peleador estudioso, veía peleas y videos de mis rivales buscando sus puntos fuertes y débiles.  Quizás esté tratando de hacer lo mismo con esto.  No sé, en una de esas estas jaquecas se deban a darle tantas vueltas al asunto-  Tomó el medicamento que le entregó la mujer y la despidió mientras se quedaba allí esperando el tiempo que le habían pedido

Corey aceptó con gusto el sandwich, el cuál fue comiendo lentamente. Por el otro lado, la cerveza rubia a penas duro unos segundos.

El policía se tomó un momento para observar su entorno una vez más, prestando atención a los detalles del lugar y a las personas presentes, teniendo cuidado de que no lo sorprendan.

-A lo mejor se sobrepasó un poco con el positivismo dijo el joven mientras se acomodaba en su silla -Cuando estés listo, veamos como van las cosas afuera del comedor.

Miro la copa y el sandwich y pensó si tomarlo o no, el es muy escrupuloso y no come ni acerca a su boca lo que cree que no está limpio. Al ver a Corey tomar su cerveza, lo hizo tan deseoso que se la acabo en apenas unos segundos que el pelo negro se sorprendió,  tomo un poco del vino y no pudo resistir tomarlo de un golpe.    Porque no... descansamos, antes de... investigar Corey?.   Dijo el asiático, mientras lo miraba a los ojos y apenas tomo un pellizco del sandwich y con cara de asco.   Esto ... es asqueroso... y lleno de grasa, No se a quien le gustara esto pero esa mujer... perdió la elegancia al servirme esto... ni que fuera muerto hambre.  (No se que me ocurre, pero con el, me siento bien.... y nunca me agrado la compañía de nadie, ni si quiera de las mujeres que corteja va. .. no se que me ocurre  Desvío el rostro algo confuso como pensativo  

De repente, el altavoz de megafonía que estaba repartido en todos los lugares de la base se activó:

Se ruega por favor que los siguientes miembros acudan a la sala de mando.

Corey

Moq

Ryo

Repito, se ruega la presencia de los siguientes miembros en la sala de mando.

Corey

Moq

Ryo

Gracias.

Finalmente la conexión se cortó. La voz era femenina ¿Se trataba de un llamamiento de Beverly?

Había pensado entrenar, quizás aquello le permitiese dormir bien al menos aquella noche, pero la voz del altoparlante sonó y sabía lo que aquello significaba.  Se puso en marcha, al trote, muchas veces aquello era exagerado, pero era la manera que tenía para lidiar con su ansiedad.

Yo estoy desde el principio Solo le espero a el para no hacer todo yo 

El altavoz cortó la charla entre Ryo y Corey. -¿Será de rutina o habrá ocurrido algo? pensó en voz alta el policía

el joven se levantó de la silla, miró a Ryo y habló -Bueno...se terminó nuestro descanso.  Vamos a ver para que nos necesitan. 

luego esperó a que Ryo se prepare, para así ambos dirigirse a la reunión.

Una vez en camino, Corey volvió a hablarle a su compañero -Parece que tendremos un nuevo integrante en el grupo, Moq, Ojala tenga poderes tan impresionantes como los que tenía Ariel. ¿También escapó de Panacea con nosotros? 

Segundo más tarde, se cruzaron con aquel luchador, quien por suerte era del mismo equipo.

Asintió el joven peli negro a lo anunciado por megáfono,  mirando así a su compañero que con decisión decidió levantarse del sitio, y caminar hacia donde los mandaron.   No se Corey? .... solo espero que nos dejen dormir... lo necesitamos.   En ese momento se puso a pensar y echo recuerdos atrás de su compañera y de como le echo cara al doctor ese, Ryo estaba agradecido y no la olvidaría y con decisión aprieta su puño por fallar la última vez con sus poderes y no poder proteger a nadie .

Moq estaba allí, esperando cuando vió llegar a otros dos tipos, los había visto con anterioridad, pero nunca había tratado con ellos.  Lleva unos jeans claros, cinturón negro de cuero con una hebilla plateada y zapatillas nike, eran negras con la suela y el logo color naranja.  La remera que le cubría el torso también era negra, de mangas cortas con puños anaranjados y un dibujo en el mismo color.  De su cuello pendía una cadena de plata y en el bolsillo derecho de su pantalón llevaba un pequeño reproductor de música con auriculares de cable naranja que, en ese momento, se escondían por el interior del cuello de la remera.

Su postura era recta y caminaba con un porte recio producto de su continuo entrenamiento.  Era un tipo grande de 1.90 metros y 120 kilogramos de peso.

Al acudir al punto de encuentro, Corey y Ryo se encontraron con aquel luchador -Bueno, parece que ya estamos todos. Dijo el joven en un tono seguro, como si conociera a aquellas personas desde hace años. -Ah, mi nombre es Corey, y el es Ryo se presentó mirando a los ojos a Moq.

Corey era alto, de pelo corto y joven de edad. Tenía complexión de atleta gracias a su entrenamiento, no tanto por el que le daba el trabajo de policía, sino más bien por el que hacía en su tiempo libre. 

No poseía musculatura particularmente imponente, y mucho menos al lado de Marcos. Viste unos jean de color oscuro y una camisa color gris.

El policía rápidamente se cruzó de brazos con una posición de seguridad, un movimiento bastante característico de su persona, junto a observar su entorno por demás y hacer muchas preguntas.

Caminando por el largo pasillo junto a Corey, a lo lejos del pasillo que se hacía más corto a medida caminaban hasta pasarlo, una silueta enorme y fornido se hacía más visible hasta terminar por ver a aquel bestia hombre, alto y lleno de músculo con cara de pocos amigos. Ryo una vez quedando en frente del, no pudo contenerse y ponerse algo defensivo y mirando serio dando un paso hacia atrás de Corey.

Se.. supone que eres un compa..ñero? Que mierda esta pasando! 

Siendo tan impulsivo, llevado por la locura le respondió con reproche al gigante. Ryo era un joven de menos de 25 años de cabello negro lacio con un leve flequillo que ocultaba su frente, era de tez morena pálida y sus rasgos fáciles eran finos y delicados con grande ojos para ser asiático y carnosos labios. Media 1.70 de estatura pero pesaba unos 50-55 kilos, su cuerpo era tan delgado como una mujer y vestía con un pantalón negro algo desgastado por todo lo que había pasado, con una camisa blanca de botones metida por dentro de su parte inferior siendo esta aun desgastada y rota por algunas zonas.

Moq dejó pasar el comentario del chino, en otro momento quizás hubiese hecho una broma, pero si el tipo había pasado por algo similar a lo que había pasado él su mente también podría estar hecha añicos.

-Marcos- dijo mientras tendía la mano a los recién llegados

De repente la puerta se abrió, allí encontrasteis a Beb, vuestra "jefa", acompañada de Larion, aquel tipo fornido que ha participado prácticamente en todas las misiones de rescate ¿se trataría el llamamiento de algo parecido?

- Muchas gracias por acudir compañeros, y más cuando algunos de ustedes no lleváis ni 24 horas en la base, pero se trata de algo importante - comentó intentando mantener la calma.

- Para luchar en una guerra hay que saber cuando alguien puede luchar y cuando no puede hacerlo. Tenemos grandes planes para ustedes sin embargo ahora mismo tenéis capacidades que no todos podéis explotar al máximo - En ese momento, el compañero de Beb negó con la cabeza pausadamente.

- Larion cree que no seréis capaces de participar en una misión, piensa que aún estáis verdes, pero yo os quiero zambullir en la piscina para que seas personas de provecho, si habéis sobrevivido a un secuestro, estáis preparados para salvar personas ¿algo que alegar? -

Marcos negó con la cabeza.  -Estoy aquí por eso.  Para colaborar en salvar personas así que...- No tenía mucho más que agregar así que no lo hizo.  Tenía otra motivación, por supuesto, acabar con la vida del viejo hijo de puta que dirigía toda aquella carnicería a la que había sido sometido era uno de sus principales motivos para estar allí, pero prefería guardar silencio sobre ese punto, al menos de momento.

-Larion está equivocado, estamos listos. exclamó Corey -¿Cuál es la misión? El joven policía quería ayudar, no quería que nadie mas pasara por lo que El,Ryo, y muchos otros pasaron. 

Poco tiempo atrás fueron salvados, y ahora el joven quería salvar a quienes estaban cautivos en Panacea.

Directamente paso de la mirada ofensiva del grandullón pues no le gustaba la tensión que había en el lugar. La doctora aparece y nos ofrece una misión dándonos un equipo como los 3 unidos y eso le incomodo al peli negro,   para el, estar con Corey era suficiente, no necesitaba a nadie más pero algo le molesto mucho más y no se pudo callar. - Misión?  es consciente de que acabamos de venir y ni si quiera llevamos 12 h de sueño?  Son Conscientes!!  o que!!   Lo dijo a gritos pues era muy impulsivo y con mucho carácter.