Partida Rol por web

-El chico vitaminado vuelve al ruedo y practica sus movimientos con el gigante.

-No se que esta haciendo Riot, pero debería aprender a caer de una vez.

-Lo importante ahora es que el Rookie puede marcarse un tanto.

-Imposible, Riot se lo quita sin dificultad y un momento porque este parece tener algunas palabras con su actual compañero.

-Francis se huele la tostada y no quiere dejar que terminen de hablar.

-Y le sale caro el intento, Riot se lo quita como una mosca y queda a merced del hombre de 1.90.

-El combate continua fuera del ring.

-Lo dicho esta noche es día tramposos, la cabeza de Francis se estampa repetidas veces contra las escaleras.

-Aun así, reacciona lo suficiente para quitarse de encima a su rival.

-Y el arbitro no deja en su empeño de cuenta fuera del ring.

Riot escribió:

Al ser un combate 1 vs 1 la única manera de hacer trampas es que: o bien Beast tire por juego sucio para entrar y golpear o tu hagas juego sucio para meter a Beast en tu descripción de golpeo. Pero sujeto a las reglas típicas del juego sucio. Que no te vea el arbitro, etc.

Un ejemplo seria: Si te hacen pin; Beast podría tirar por interrupción para darle a Francis y librarte de la cuenta, todo con que el arbitro no le vea, para evitar tu descalificación directa.

Luchar contra alguien tan bestia y tramposo como Riot estaba poniendo de los nervios al pobre Francis, que ya de por sí era incapaz de quedarse quieto. Había perdido la sonrisa, pero no las ganas de continuar pese a que su cara estaba hecha un mapa. Se escabulló y se alborotó el pelo para ignorar el ardor que tenía en la nariz y las mejillas. El gesto no ayudó mucho, pero al menos sirvió para canalizar su frustración.

Una vez en el ring*, Francis le hizo un gesto a Riot para que se acercara.

- ¡Eh, grandullón! ¿Qué tal si te concentras en luchar contra mí y no en hablar con tu amigo? Además, te agradecería que me cuidaras un poco la cara; la necesito para muchas cosas.- sonrió y guiñó un ojo al público.- No necesitas molerme a palos para llamar mi atención, ¿sabes?- añadió con sorna.

Se acercó a su oponente y le hizo un amago para que se protegiera la cara, aprovechando para darle un rodillazo en el estómago con todas su fuerzas. Riot se dobló hacia delante y Francis se montó en su espalda de un salto, haciendo fuerza con todo su cuerpo para que cayera al suelo. Quedó encima de él, estando Riot boca abajo, y Francis le agarró ambos brazos, tiró de ellos con fuerza y le pisó la nuca con los pies. Si fuera un bestia podría romperle los brazos, pero no era su estilo.

- Cambiamos los roles un rato, ¿vale? Ahora tú eres el sumiso.- bromeó acercándose a su oído.

El árbitro se acercó y empezó a contar mientras Francis intentaba mantener a Riot en esa postura vulnerable.

Beast observo como su compañero estaba contra la cuerdas y aquel rookie estaba ensañándose con él, así que salio de su "retiro" para empujar por la espalda al arbitro quien cayo cerca de ambos luchadores. Y detrás de esté la propia bestia que golpeo con un martillazo el espinazo de Francis; quien soltó a su rival presa del dolor y la sorpresa, pero su cara se llevaría otra sorpresa cuando el pie peludo del luchador "invitado" lo planto en su cara tirándolo de espaldas al suelo.

Beast sentó a su compañero quien parecía aun ido y se retiro a su rincón antes de que el arbitro se levantara, quien a pesar de los gritos del publico y los comentaristas, no sabia que había pasado.

-El chico vitamina se ha puesto serio.

-Irreconocible, ¿Ese agarre donde estaba durante la paliza de todo su combate?

-Creo que ahora se a puesto serio.

-Pues a tardado demasiado, aunque. Riot no parece conseguir zafarse y el arbitro decide empezar a comprobar sus constantes.

-¡UN MOMENTO! Por que Beast acaba de saltar al ring ¡Y agrade al arbitro!

-Bueno entonces ya sabemos como acaba esto.

-QUE VERGÜENZA, es una noche para olvidar.

-Quien igual olvida todo es Francis, que a recibido una dura golpiza por parte del peludo, antes de marcharse de nuevo a su sitio.

-Y el arbitro se levanta sin mas, al no poder verlo, a pesar de saber que alguien le ha golpeado, debe continuar el combate, deberían revisar esas reglas.

-Bueno puede que de lo mismo, porque Riot sigue en la habitación del sueño.

-Igual que Francis, me parece que esto sera un combate a OK.

-Pero...

-¡PERO EN SERIO! ¿Por que dejaron entrar a Beast?

-Podría darte una respuesta, pero seria obvia.

-...

Riot no sólo era un bestia, sino que además era un mal perdedor. Eso pensó Francis cuando se vio arrollado por la otra bestia (ésta con apariencia acorde a su actitud) y cayó al suelo por culpa de su ataque por sorpresa. Gimió, confundido y dolorido, y buscó con la mirada a aquél que había entrado en el combate sin derecho. Frunció el ceño, molesto, y rodó por el suelo para volver a levantarse y recuperar el equilibrio después del latigazo de dolor que había notado.

Se apoyó en las cuerdas del ring, alejándose de Beast torpemente. Le escocía todo el cuerpo y tenía los músculos entumecidos. Intentó sonreír, pero la situación no le hacía ni pizca de gracia y tampoco tenía fuerzas para ello.

- Dadme un respiro, malotes.- dijo cuando por fin se le deshizo el nudo que tenía en la garganta.

Se deslizó entre las cuerdas, saliendo del ring un instante. Respiró profundamente, vigilando los movimientos de Beast, y se mantuvo tendido de las cuerdas cual camiseta arrugada al sol.

Tras el movimiento de Francis y el salve de Beast, Riot se quedó sentado en el rincón mirando como Francis intentaba reincorporarse y riéndose de él. Mientras su rival se recuperaba el tomó impulso de las cuerdas superiores y se levantó, haciendo una mueca de dolor.

-¿Creías que iba a ser tan fácil? Puto novato...¡Vamos, en pie!

- Lo que creía era que aquí iba a encontrar profesionales, no tramposos...- respondió Francis más serio de lo habitual.

Entró de nuevo en el ring y se puso en posición de combate. Estaba magullado y cansado, pero aún podía aguantar una última ronda.

Beast agitaba las cuerdas, haciendo caso omiso a las palabras de Francis.

-¡Machaca a ese petulante Riot! No es nada, ¡Es menos que nada!-Acompañaba con golpes el la lona con su zarpa, hasta que el arbitro le pidio calma, desde la distancia, por si acaso.

Riot soltó una carcajada al escuchar a Francis y sacudió la cabeza.

-Voy a tener que enseñarte cómo son las cosas por aquí.

Riot se acercó a Francis y comenzó a forcejear con él sin un resultado demasiado claro de quién iba a prevalecer, hasta que el árbitro se giró para frenar a Beast. Ese momento lo aprovechó muy bien la gran mole de luchador para tomar distancia y...

¡TREMENDA PATADA A LA ENTREPIERNA DE FRANCIS! Riot parecía más bien un jugador de fútbol americano pateando el balón que un wrestler del soberbio golpe que le ha soltado al novato en la liga. El público comienza a abuchearle sin piedad mientras Riot se pasea por el ring levantando los brazos y riendo a carcajadas, totalmente convencido de su victoria.

-Bueno esto se veía venir.

-¿Las trampas de esos dos?

-No, que Riot se recuperaría solo para poder doblegar de la manera mas contundente a su rival.

-¡Pero que dices! Si le ha plantado toda la bota en el... en la...

-Yo solo veo que Riot a aprovechado una oportunidad perfecta.

-Eres lo que no hay.

-Pues yo me veo bien...

-¡¡Overclock!! -Grito la bestia al ver saltar a Francis, mientras señalaba a ambos, para que el arbitro se girase y estuviera mas atento al combate.

Francis sintió como si un relámpago le hubiera recorrido el cuerpo entero desde las entrañas. Se arrodilló y cayó al suelo gimiendo de dolor y llevándose las manos a su zona debilitada. Apretó los dientes intentando ahogar un grito y pataleó a la vez que se cerraba como un ovillo de lana.

Los gemidos fueron cesando a medida que el dolor desaparecía. Durante un momento no supo dónde estaba ni qué se suponía que tenía que hacer. Se fue incorporando y clavó sus ojos en la nuca de Riot, que se pavoneaba mientras el público lo abucheaba como se merecía. Pocas veces alguien había conseguido que Francis se indignada y se enfadara, pero ese tipo lo había logrado con sus juegos sucios y su crueldad innecesaria. El chico ya no se sentía como en un ring, sino como en un callejón donde se daba una pelea callejero, y eso le hacía hervir la sangre. Gente como Riot convertían en vulgar un deporte entretenido y honorable.

- Eh, tú.- espetó cuando recuperó la voz, aunque habló con un tono algo más agudo que antes.- ¿No oyes al público? Estás haciendo el ridículo...- sonrió con actitud desafiante y se puso en pie de nuevo, apoyándose en las cuerdas.

Riot se quedó boquiabierto al ver que el novato se levantaba aún después del golpe que le acababa de dar. Escuchó las palabras de Francis y fue hacia el lugar donde estaba el árbitro lidiando con Beast. Apartó al oficial de un empujón y se puso a hablar con su compañero a voces.

-¡¿Pero qué mierda es esta?! ¡Este novato va dopado, esto es una pelea injusta! ¡Nadie puede soportar ese golpe sin ir hasta las cejas de algo! ¡Yo me piro!

Entonces Riot hizo ademán de salir del ring, pero el árbitro, que ya se había levantado lo retuvo para que se quedara, y ambos empezaron a forcejear con Beast como testigo.

Francis arqueó una ceja cuando Riot empezó a quejarse sobre la injusticia del combate. La ironía era tan evidente que ni siquiera hacía falta comentar sobre ella. Aprovechó esos momentos de discusión para recuperar el aliento, ponerse erguido e ignorar el dolor de todo su cuerpo.

- ¡Oye, el árbitro no tiene la culpa de que tus trampas no te sirvan!- exclamó recobrando también su sonrisa jovial y, en este caso, burlona.

Al ver que Riot se ponía violento con el árbitro, Francis se puso más serio y se acercó rápidamente a ellos dos. Empujó a su contrincante con todas sus fuerzas para apartarlo, interponiéndose en la pelea y señalándole una esquina al árbitro para que se alejara.

Su enorme oponente aún se tambaleaba por el empujón cuando Francis corrió hacia él, se le subió ágilmente encima con un salto y le rodeó el cuello con sus piernas, sentándose en sus hombros. Forcejeó para mantenerse en esta postura privilegiada, intentando que Riot no pudiera usar los brazos para nada. Cuando se presentó la oportunidad perfecta, Francis hizo un movimiento seco de cadera con el que desequilibró a la mole tramposa, haciendo que cayera de cabeza al suelo.

Él rodó por el suelo, se levantó y se rió. Se acercó a Riot, quien se cubría la cara con las manos estremeciéndose por el dolor, y le dio un besito en la frente.

- Venga, a la cama.- dijo entre risas. Luego se sentó cómodamente encima de su estómago esperando que el árbitro diera un final a ese combate.

Beast lo vio todo y no pudo mas, aquel Rookies estaba dopado, Riot debía tener razón, no puede ser como un tipo con esa complexión pudiera recuperarse de esa manera y acabar con un muro como era Riot.

Indignado Beast salto a la tercera cuerda y practico un Splash con Francis, quien queda sorprendido y planchado por parte iguales, solo para recibir después un Facebuster que aseguraba que no se moviera del lugar. Para entonces el arbitro ya estaba reclamando a Beast su presencia en el ring y amonestaba sin miedo al luchador, pero un grito de la bestia, lo puso pies en polvorosa, bajando del ring para reunirse con los comentaristas.

-Vámonos de aquí Riot, esto esta amañado. -Paso su brazo por debajo del cuerpo de su compañero para levantarlo y ayudarle a abandonar el ring. -¡ESTO NO ACABA AQUÍ! -Amenazo Beast quien recogió el cinturón de su compañero y ambos pusieron marcha al backstage, abandonando el combate.