Partida Rol por web

Las flechas salen disparadas directamente a dos de los esqueletos más cercano, se cuelan entre los huecos de las costillas, y sin embargo, una explosión de energía azul explota en la jaula de las costillas y llega a cada hueso, haciendo que estos caigan inertes al suelo como si la magia que los hacia moverse hubiese sido arrancada de sus viejos huesos.

Aun así, la felicidad dura poco, pues aparecen cuatro esqueletos más reemplazando los caidos.

-No paran de venir, y se duplican, casí pareciera la leyenda de la hidra. Una vieja historia que mi padre me contaba para dormir.- Digo a mi compañero mientras preparo dos flechas más.

En el cristal refluye una luz verdosa que parece reptar por el, pero una sombre la trunca de color azul negruzco, y los esqueletos que habían caido convertidos en huesos sueltos vuelven a armarse y durante un momento un brillo verde aparece en sus cuencas vacias, pero rápidamente se oscurece como la más negra noche.

-¡Esa sombra!- Grito señalandola. -Eso es lo que está corrompiendo el cristal y usurpa su energía para manejar los esqueletos.- 

Mis ojos se llenan de furia y luz celeste y mis manos empiezan a cargar energía para desatar mi cólera en forma de relámpago...