Partida Rol por web

Echando su silla hacia atrás Vanessa se pone en pie 

-"Necesito un cigarrillo,le acompaño,Greg ¿alguien más quiere venir a tomar el aire?"-pregunta mientras mira las siluetas de los presentes

"Puto gigante loco" murmura la dulce niña sobresaltando a Vanessa

-"Ssssh,no se dicen palabrotas,niña" la regaña la mujer mientras la otra da vueltas alrededor del jardinero subiéndose la falda y haciéndole burla

En la puerta Diablo sonríe con la cabeza de Hemmens en la mano y un cuchillo goteando sangre en la otra

"Amor mío,tus deseos son órdenes para mi" se burla él sacudiendo la cabeza y llenando las paredes de sangre

- Yo iré con vosotros - dijo asomándose por debajo de la mesa. Le habia molestado sobremanera que aquel mayordomo estirado lo tratara de aquella manera, asi que pensaba acompañar al hombretón.

Extendió la mano para que alguno la ayudase a incorporarse pues aquel simple movimiento era toda una odisea para ella

Desbloqueó el móvil para poner el modo “linterna”, enfocando al resto para comprobar si estaban bien tras el repentino apagón.

- Quédense bajo la mesa.- Instó en voz alta sin dirigirse a nadie en particular, aunque al hacerlo dudó de si el asesino sabría entonces la posición exacta de todos, sobre todo si se encontraba entre ellos. ¿Llevaría algún tipo de visión nocturna? ¿Habría alguna trampa en el suelo, justo bajo la mesa, pensado para esta situación? – Y usen la luz de sus móviles.- Era una idea que desconocía si sería suficiente.

Se quedó unos segundos meditando sobre si ya había “terminado” la cena, levantándose después y mirando a los que iban a abandonar la sala. Sin decir ninguna palabra, caminó detrás de ellos, aunque su camino sería muy distinto.

Greg las miró con cara de preocupación y les dijo

"Señoritas, el terreno estará encharcado y se mancharan de barro pero si quieren venir con Greg seré feliz de enseñarle los caballos. Tenemos algunos animales fantásticos y si saben montar y el señor Butler les deja podría almohazarlos y ensillarlos para que den un paseo."

Por un instante miró a Nadia con cara confundida y finalmente dijo

"Pero será mejor que la señorita Nadia no monte, los caballos son buenos pero hay que cuidar de ese bebé...."

Mientras las mujeres discutían donde ir Greg cogió un candelabro gemelo al que había dejado en la mesa y lo encendió mientras de un aparador cogía una linterna pequeña y dos walkies. Le entregó uno al mayordomo y se encaminó a la salida junto a Nadia y Vanessa.

El servicio y Carl siguieron en la mesa mientras Wallace acompañaba a la distancia a los mecánicos improvisados. La prioridad era poner en marcha el suministro eléctrico, de eso podía depender sus vidas.

La cocinera se levantó de su sitio no sin antes dirigir una mirada de un desprecio apenas disimulado mientras cogía su plato y se sentaba al lado del mayordomo, frente a la doncella dejando a Carl en soledad y sin atender su petición de comer carne.

Tanto como el señor Butler como Gloria felicitaron a Catherine por la calidad de su pescado mientras bebían de sus copas y miraban con ansiedad al walkie-talkie esperando a que Greg les diera una buena noticia desde los establos.

Estando a oscuras y con un asesino suelto por la casa, me pareció la peor idea posible deambular por los terrenos de la isla sobretodo sin tener con qué defendernos. Además, ahora que había descartado a algunos de sus compañeros de desventuras, mis sospechas comenzaban a orientarse hacia el servicio por lo que preferí quedarme con ellos para tenerlos vigilados. Hay que mantener a tus amigos cerca, y a tus enemigos aún más cerca.

Tampoco encendí la linterna de su móvil como habían propuesto, no tenía mucha batería y no sabría cuándo podría cargarlo de nuevo.

Iluminado por el candelabro, me quedo expectante mirando el walkie esperando noticias y a cierta distancia de mis tres acompañantes.

La llegada de Catherine junto al grupo despertó sentimientos encontrados entre lo que quedaba del servicio. Por una parte la sonrisa de Gloria y por otra una mirada un tanto torva del mayordomo que aunque mostraba una cierta hostilidad latente no la manifestó con palabras. Los tres comían distraídamente cuando el walkie zumbo con la inconfundible voz de Greg

"Hemos llegado al establo, el motor está funcionando pero en algún sitio la electricidad se está perdiendo, voy a buscarla señor Butler, no le fallaré"

El mayordomo miró el walkie como si no diera crédito a lo que oía y haciendo un esfuerzo por permanecer calmado dijo

"Dese prisa"

Gloria intentó coger el comunicador para hablar con el jardinero pero el mayordomo no lo permitió haciendo que Gloria sonriera ante el nuevo juego que representaba el robar el comunicador a quien se había erigido como su nuevo jefe.

¿La electricidad se está perdiendo? Es evidente que se trata de un sabotaje, el señor Dark sigue jugando con nosotros.

Sin mucho que hacer más que esperar nuevas noticias de mis compañeros y del jardinero, me quedo intentando comer algo y observando divertido la lucha de poder por el walkie entre los empleados del servicio.

El servicio se miraba los unos a los otros con distintas expresiones, la hosquedad del mayordomo confrontaba con la risita divertida de la doncella y con la mirada preocupada de la cocinera mientras, al otro lado de la mesa, Carl les observaba divertido mientras esperaba a ver que iba a suceder. El walkie volvió a crepitar al cabo de unos segundos y la voz de Greg se hizo clara mientras repasaba con una tonada aprendida de memoria los pasos para comprobar el generador

"Primeeero se comprueba que hay gasoliiina, Segundo se comprueba que el motor se encendió, Tercero que el ruido no se ahogó, Cuarto que la batería tiene pilas...."

Y mientras Greg avanzaba en el arreglo desde los conductos del aire acondicionado, justo por el mismo sitio por donde recibían los macabros anuncios de Dark, la cabalgata de las valkyrias resonó con fuerza poniendo de manifiesto que alguna parte de la casa debía seguir teniendo suministro eléctrico.

Oh, vaya. ¿y ahora qué?

A pesar que idolatro a Wagner, el sonido de la música en el silencio de la gran casa me sobresaltó hasta el punto de levantarme de la silla con un respingo. Miro a los tres miembros del servicio para ver la reacción en sus caras, intentando buscar algo que me pueda decir si tienen algo que ver con ello.

Sigo sospechando de ellos aunque no veo como han podido poner la música estando en el comedor y vigilados por mí.