Partida Rol por web

El sonido del teléfono móvil de Alice interrumpe las palabras de Dieter...

-Perdona, es mi movil...

Lo cojo del bolso, mordiéndome la lengua por no poder preguntarle por la frase que ha dicho tan alegremente... Por cierto, ese tipo ya se cobró una víctima...alguien que conocí..mos. ¿Tú viste a ese loco? ¿Qué te pareció que le motivaba? ¿De quién habla? ¿Del que disparó? ¿de Sparks? ¿del que buscaba la cruz del padre de Parminder...? Pero esa aclaración tendrá que esperar.

Respondo, sin levantarme e irme, pero también sin conectar el manos libres.

-Si, Alice al habla.

Una voz que no te suena comienza a hablar algo atropelladamente al otro lado de la línea

-. Srta. Stevens... Alice Stevens?, soy Sparks, Jack Sparks. Necesito verla urgentemente... un asunto de vida o muerte... uno religioso, ya me entiende.- su voz suena apremiante -. ¿Sigue teniéndolo con usted?...-

-¿Sparks? ¿Es usted Jack Sparks?

La pregunta es retórica, y sólo intento hacer tiempo y que quiensea que esté al otro lado siga hablando. La voz no me suena de nada, pero la voz de Sparks está grabada en mi mente. Pero claro, eso sólo lo sé yo. Y él. El hombre que está al teléfono, evidentemente, no. Sólo sabe que tengo la cruz...

-¿Sparks? ¿Es usted Jack Sparks?

Mi rostro denota sorpresa, y concentración.

-. Sí, soy Sparks...- un breve silencio -. ¿Ha entendido lo que le dije?, necesito verla con urgencia... espero que siga teniendo algo que "encontró" en el Cloaks... Dígame si puedo encontrarla en esta dirección que me entrego su "agradable" mensajero...- te dice la dirección de tu casa... -. Su amigo no tiene muy buena letra...-

Y mientras tanto, Dieter acercó la mirada a Parminder. No supo cómo, pero su expresión se había vuelto amable en lugar de concentrada y sorprendida, como lo estaba antes.

- ¿Sabes algo de tu padre, Parminder? Hablé con él y parecía sinceramente preocupado. Sabes que no voy a inmiscuirme, pero si no estás completamente convencida de lo que me dijiste, tiene que estar sufriendo mucho por ti.

-Un segundo... ¿qué "agradable mensajero..."? Sparks, cuénteme directamente a qué se refiere, no le entiendo...

Hago señas a los demás, mientras pongo el audio en manos libres.

Sigo hablando al darme cuenta de que realmente es Sparks.

-Ehmmm... Oye, Sparks, cálmate. No te he reconocido en un primer momento. ¿A qué viene tanta formalidad? Vale, sé a qué te refieres, claro, pero dime qué es lo que ocurre. ¿Un asunto de vida o muerte...?

Muñeca, no estoy sobrado de peniques y esta cabina traga más rápido que la pasma los donuts. Créeme... lo sé bien. una pequeña pausa Estoy calmado... no tengo mucho tiempo. Dice con urgencia. Te diré lo que haremos. Ven sóla , es importante, hay mucha gente detrás de esto. Nos reuniremos en el interior del "Italian´s Job" dentro de dos horas, yo te encontraré allí,... es mejor que seas puntual, no hace falta que te pongas mona. No es ninguna cita. La dirección es Riverhill 24. Te estaré esperando no más de 15 minutos guapa. Es urgente.

Tras esto, la comunicación se corta bruscamente...

Me quedo mirando al profesor tras su repentina pregunta...¿aún duda de lo que le conté?, cierta decepción se refleja en mi rostro, aunque sé que sólo pretende ser amable...

Cuando iba a responder Alice coloca el manos libres en el móvil, por lo que hago un gesto con el dedo indicando que luego hablaría...

Dieter observa a Alice con ojos fijos tras escuchar la conversación que ha mantenido por teléfono.

No añade nada. Espera que Alice diga o decida algo. Es su situación, al fin y al cabo, y él no sabe nada de ese tal Sparks...

Me quedo con la boca abierta, con la respuesta asomando en ella. Pero no me ha dado tiempo, maldita sea, ha vomitado su palabrería y me ha colgado.

Levanto los ojos, y miro a los demás, uno a uno, sacudiendo la cabeza.

-Bueno... ya veis. Voy a ir, claro. ¡Joder! ¿A qué tanto misterio? ¿Por qué debo ir sola...? Pero bien, le tenemos donde queríamos, es decir... le tenemos.

Estoy molesta, por el tono, por la suficiencia. Y por que todo esto es incongruente. Cruces, sectas... y la matanza en el Cloak's.

-¿Alguna idea, alguien sabe cómo participar sin ser visto?

Me levanto, dispuesta a salir, coger el coche y acercarme allí en el plazo fijado.

Todo esto empieza a escaparse un poco de madre, una cosa es jugar a huir de casa porque hayas tenido una movida con tu padre y quieras correr a las faldas de mamá, pero otra bien diferente es ir a un sitio sin saber lo que es a encontrarse con un hombre que no conoces...

Si, se me ocurre que no debes ir a ese sitio, ¿te has vuelto loca?, no sabes nada de ese tipo, Alice, te recuerdo que podría intentar aprovecharte de tu posición y de tu dinero... la miro directamente, con preocupación.

Le devuelvo la mirada a Keira.

Pienso con intencionada calma lo que me está diciendo. El problema no es Sparks. Lo ví en acción. No, el problema es algo mucho más sutil, que se me escapa.

-Pues yo pienso ir. No vengas si no quieres, no tienes por qué. Pero hay en todo esto mucho más que un juego de intereses económicos. No creo que mi posición o mi dinero tengan nada que ver... quizá Sparks sí quiera dinero, pero, ¿por qué me salvó? ¿qué sabe de esa cruz?

La miro, aún en mi mano.

-Esperadme aquí, si no vais a venir. Y no te separes de la tuya, Parminder. No sé por qué, pero creo que trae buena suerte... por lo menos...

Dieter se quedó visiblemente boqueabierto. Se levantó cuando lo hizo Alice, pero permaneció quieto en el sitio, aún inseguro.

- ¿Estás bien segura de lo que dices? Yo no conozco de nada a ese Sparks, pero tú parece que sí, más allá del encuentro fortuito. Al menos por cómo hablas de él. Si pertenece a un grupo sectario o a una logia, no tiene por qué cumplir las mínimas normas de comportamiento. Puede hacer lo que quiera. Secuestrarte, matarte y todo lo intermedio que se te ocurra.

Yo voy contigo. Dudo mucho que me conozca y puedo sentarme allí cerca. Sé ser discreto, no te preocupes.

Cogió la chaqueta y se preparó para enfrentarse a Parminder. No quería ni oír hablar de acompañarle, ni de llevar la otra cruz con ellos. Puede ser peligroso, pequeña, pensó. Incluso dejar a las dos jóvenes en el apartamente le resultaba inquietante.

En menudo juego se estaba metiendo.

Están locos… ese gesto de ignorarla debidamente por parte del profesor no me agrada en absoluto, sabe que lo que está diciendo es una locura…me levanto del sofá mirando a los nuevos héroes, ¿Pero qué estáis diciendo?, no pienso dejar que vayáis a ese lugar, ni siquiera sabemos lo que es, o quién es realmente ese Sparks…es demasiado peligroso…aquel hombre que vi…os lo aseguro, era aterrador… una mirada de súplica buscando los ojos de Dieter, no quería volver a quedarme sola, no me perdonaría que le pasara algo…no, no debían ir…

Profesor…por favor…piense…pensad los dos…para nada es una buena idea… digo con cierta desesperación…

No vengas si no quieres...así de fácil y de sencillo, sin pensar que realmente temo por tí, no sabes nada de ese hombre por favor... ahora había cierta indignación, eramos amigas...

No puedo dejar que vayas sola a ese lugar, no entiendo como no tienes miedo después de todo lo que has vivido desde ayer... señalo la cruz... Más bien en mi opinión trae muy mala suerte...¿qué tal si te acompaño y se la devolvemos a su dueño, o por lo menos, a su último poseedor, pero no en ese lugar donde él dice...si realmente la quiere tanto, volverá a llamar... miro a Alice seria, Por lo menor no juguemos en su terreno...

Dos discusiones paralelas...dos formas diferentes de ver las cosas...cobardía contra valentía...o...¿estupidez contra sensatez?, supongo que eso siempre depende de como se mire...

Miro a Keira con cariño. Capto su preocupación, su miedo. Y el de Parminder... y su objetivo. Me sonrío por dentro, aunque ahora mismo no estoy para análisis de intenciones.

No, debo explicarme, que comprendan.

No soy ninguna loca, ni tampoco una heroína de película.

-Entiendo vuestra actitud. Pero es que vosotros no le conocéis. No estoy en peligro con él. Yo sólo estuve con él unos minutos, cierto, y la mayor parte de ellos discutiendo. Pero... no me hizo daño. Al contrario. Me salvó... ¿cómo puedo temer que quiera hacérmelo ahora? Es... posible que no sea... legal. Que busque dinero, no sé. Pero no creo que sea buena idea dejar este asunto como si tal cosa. ¡Joder! ¡Me vi enmedio de un tiroteo! Vi... morir gente.

Estoy afectada. Es evidente que no pueden entenderme, estuve allí, junto a esas personas, muriendo, desangrándose. Fué un infierno, un infierno en un instante, pero infierno a pesar de eso. Y ese Sparks estaba a mi lado, me empujó... y la bala pasó.

-No tengo ni idea de qué ocurre con esa cruz. Por qué es peligrosa. Qué quiere él, pero le he escuchado, y estaba asustado. Apurado. Y, después de todo, es suya...

La cruz curó a ese chico. Lo sé, lo hizo. Y es suya, él la llevaba. Y ahora me la reclama, y es posible que esté en peligro real, por cómo lo ha dicho.

-Se la voy a llevar...