Partida Rol por web

Por motivos personales, sus vidas han dado un giro en cuanto a lo que acostumbraban a hacer normalmente. No saben si para bien o para mal, pero lo que saben es que han cambiado de rumbo y eso los hace sentir bien.
Hace alrededor de dos semanas se encuentran a bordo de la "Norah's dream", al mando del Capitan Bergton. La nave tenia alrededor de 30 tripulantes, todos preparados para cumplir sus funciones de la mejor manera posible. Si había algo particular en la nave, era el espacio de carga; claramente había sido modificada para llevar mucho más de lo normal, y tenía varios compartimientos ocultos enfocados al contrabando.

Llegaron a la tripulación porque el capitán estaba iniciando una "Travesía mercantil con posibles negociaciones violentas", lo cual todos sabían muy bien que significaba. Ofreciendo sus servicios de uno u otro modo, quedaron seleccionados para tamaña tripulación.

Hoy se encuentran de viaje hacia el sur, buscando ostentosas naves con las que "comerciar". Los vigías toman turnos en el carajo y se dedican a observar durante las 24 horas del día.

La nueva tripulación de la nave en la que te encuentras es muy variada, el capitán te ha dado la orden de que, en caso de un combate con otra nave, debes dirigir los movimientos de artillería de la nave. Por lo demás, funcionas igual que cualquier tripulante y tapas los huecos que hagan falta si puedes.

El capitán te comandó la tarea de ingeniería general y mantenimiento de la nave, junto a una joven ayudante que se unió a la tripulación hace poco tiempo. Tu deber es mantener todo en su debido funcionamiento y hacer los mantenimientos necesarios para que la nave funcione bien en todo momento.

Debido a tu conocimiento del mundo pirata, has logrado acomodarte con cierta jerarquía en la nave; estas encargado de coordinar el funcionamiento general de la nave cuando el capitán no esté disponible. La mayoría se dirige a ti cuando se les presenta alguna situación difícil de resolver.

Eres el "niño" de la tripulación, todos los piratas te intentan aconsejar cuando haces algo mal, contándote de paso alguna historia que verifica lo que proponen. Tu trabajo en la nave es variado, sueles hacer todo lo que haga falta sin tener ningún puesto particular. Acatas las órdenes del capitán, o de Jack Keppler (segundo a cargo) sin problemas. De a poco te vas metiendo en el mundo nuevo que se te puso enfrente y, para tu suerte, te vas amoldando muy bien.

Te encuentras en la nave haciendo de todo un poco, eres una persona mas entre la variada población de la nave y te dedicas a cubrir todas las necesidades de la nave. Un par de veces has tenido que poner en su lugar a un par de babosos, y rápidamente el resto comprendió que contigo no hay que meterse. Hay otra chica en la tripulación, pero la ves poco, esta entre los motores la mayor parte del tiempo.

Me encuentro dando un paseo por la sala de máquinas revisando los indicadores para verificar que todo vaya correctamente. De momento está siendo un viaje bastante tranquilo y veo a la tripulación moverse aquí y allá cada uno con sus tareas. De vez en cuando le echo un ojo a la joven mecánica que pese a llevar poco tiempo me parece que tiene bastante potencial. Continúo mi trabajo mientras tarareo una musiquilla. Una de esas viejas canciones de exíto que todos conocen en las ciudades.

Se te asignó la tarea de ayudante del ingeniero en jefe de la nave, Cephas Steelsteam. El trabajo de ustedes consiste en mantener todos los motores en condiciones, lo cual lleva bastante trabajo diario, ya que debes revisar las piezas que se van desgastando y que no haya fallas durante el funcionamiento. Notaste que no eres la única muchacha en la tripulación, aunque la otra parece frágil, es sabido que puso en su lugar a un par de piratas hace unos días.

Empece el dia con pereza, lentamente me levante de la poco confortable cama de mi camarote y quedandome parado en medio de la habitacion espere, la falta de un saludo matutino me hizo recordar la realidad, no me encontraba en mi casa, si no en un barco a cientos de metros de la superficie terrestre; arrastre mis pies hasta mi baul y saque de el una toalla que se podia debatir si era blanca o negra por el hollin, aun en pijamas sali al pasillo en direccion a los baños, entre mis compañeros se podia contar con las manos a los que se bañaban diariamente gracias en parte a que, cuando se le esta dando mantenimiento continuo a las maquinas que nos mantienen a flote los mecanicos no tienen tiempo para arreglar el calentador de agua ni las tuberias, ocasiando un agradable chapuzon en agua fria y con suciedad

Despues de 15 minutos en el baño decidi que era suficiente y puse rumbo al camarote, en el camino saludaba a quien me saludara, y evitaba a los que se reian de mi por ser el unico tripulante macho con pecho lampiño, al llegar rapidamente tome mi ropa diaria del baul y me vesti, asegure que llevaba encima mis armas y sin pensar en el desayuno me dispuse a buscar al capitan; como no tenia asignado algun deber diario era comun que lo buscara para recibir ordenes

Me despierto después de una noche tranquila. La nueva tripulación de la nave no parece un total desperdicio. Mientras me levanto voy echando un vistazo a los nuevos a los que todavía no me acostumbré. Mi mala fama me precede y puede que alguno me reconozca. Sobre todo porque soy de los pocos que siempre va armaddo. En mi vida militar era el piloto de la nave y ahora soy principalmente el artillero, aunque no puedo dejar de ver el cielo y siempre que puedo paso a echarle una mano al piloto, que es comprensivo y cuando tiene que salir por cualquier motivo me deja llevar la nave.

Después de comer algo en la cocina me voy a la zona de artillería donde compruebo que todo está en orden mientras bromeo con los miembros de la tripulación que me voy encontrando.

Mis años como pirata me habían enseñado un par de cosas y una de ellas era que siempre tienes que estar pronto en cubierta para dar ejemplo a los hombres y mujeres a tu mando. Y aunque hubiese dejado atrás mi nave y mi antigua vida, no me quedaba mas que seguir dando ejemplo....Maldita sea mi estampa, de día otra vez...

Salgo como puedo de mi hamaca sin partirme la crisma...esto cada día me parece mas difícil... y vació la jarra de agua en el lavabo empezando con un rápido aseo antes de vestirme. Una vez aseado y vestido, termino de colocar las armas en su sitio me dirijo a las escaleras de cubierta. Me cruzo con los hombres de la guardia nocturna, saludando a aquellos que no parecen a punto de caer de cansancio.

Una vez en cubierta el viento hace que los restos de sueño que aun mantenía empiecen a disiparse....Que gusto volver a estar entre la nubes.... Cruzo la cubierta pasando entre los marineros que empiezan a ocupar sus puesto, dirigiendo me hasta el castillo de popa para así saludar al capitán y que así me de las órdenes del día para la tripulación.

- Jack Keppler a su servicio. ¿Que tenemos hoy, señorrrr?. Mis años como pirata aun me pasaban factura de vez en cuando con las figuras de autoridad. ¿Que ordenes hay para los hombres y mujeres de la embarcación?

El dia habia empezado como muchos otros, de hecho casi podia decirse que no habia empezado realmente, Enma como tantas noches se habia quedado dormida en el hueco en donde solia trabajar cerca del motor, esto le sucedia muchas veces cuando se quedaba dormida trabajando hasta tarde. Con el pelo muy despeinado y totalmente llena de holli ya que se habia quedado dormida junto al motor se desperto muy temprano, fue dando bandazos hacia la cocina para coger algo de desayunar, como el cocinero aun no se habia despertado cogio lo primero que vio y se lo llevo a la boca mientras caminaba medio dormida y a oscuras hacia las duchas, alli se metio con ropa y todo ya que estaba dormida y fue ahi donde se desperto, al darse cuenta que tenia toda la ropa mojada se la quito para terminar de ducharse como es debido.

Tras la ducha la joven mecanica camino desnuda por los pasillos con la ropa en la mano y los restos de comida tambien mojados pero aun asi comiendoselo, no tardo en dejar las ropas en un lugar para que se secaran mientras cogia ropa seca y se encaminaba hacia el motor vistiendose por el camino, el estar limpia no le duro mucho ya que de nuevo volvio a tirarse al suelo para ver si podia arreglar una valvula que no le gustaba demasiado como sonaba, asi empezo Enma su mañana, con sus gafas de proteccion colocadas y con sus herramientas bajo el motor como hacia casi todo el dia todos los dias

Un nuevo día entre las nubes.

Tras levantarme, más temprano que los demás, como acostumbro, me dirijo tranquilamente a asearme como es debido. La higiene personal es fundamental, no importa que me pase el día entre hombretones sudorosos. Es decir, nunca sabes cuando vas a tener que engañar a alguien, y claro, cuesta hacerlo si eres una dama maloliente.

Tras ducharme, secarme, vestirme y colocar mis tres cuchillos en el cinturón, me dirijo con gracia a la cubierta principal. Es impresionante ver el nacimiento del día desde aquí. Me apoyo en la barandilla y cierro los ojos, disfrutando del viento en la cara. De la libertad.

Eventualmente, los hombres que habitan este sitio van despertándose. Así que cuando empieza a haber más actividad en la cubierta, me muevo, y empiezo a ayudar a los demás en las tareas diarias que requiere el barco.

El día transcurre normalmente hasta que el capitan se asoma en cubierta con una sonrisa en su rostro. Mira a Chrstiam y a Kepller que se dirigían hacia donde el estaba y les hace una seña para que esperen un segundo. Luego abre la boca y un estridente vozarrón comienza a gritar

MUY BIEN MUCHACHOS! ESTAMOS A 2 MILLAS DE NUESTRO OBJETIVO, ASI QUE ABRAN LAS VELAS Y APROVECHEN EL VIENTO, CUANTO ANTES LOS ALCANCEMOS, ANTES TENDRÁN SU BOTÍN!

luego mira al timonel, que se había acercado al escuchar que el capitán estaba realizando anuncios, y le da una orden clara del rumbo al que debe dirigirse la nave.

En cuanto oigo al capitán voy corriendo hacia el timonel, para ver las cartas de navegación y el cielo, para intentar encontrar una ruta que aproveche mejor las corrientes de aire para acelerar el barco y llegar lo antes posible a nuestro objetivo.

Corro hacia la borda del barco y observo las nubes por encima y debajo de nosotros, con mis conocimientos sobre la probabilidad de grandes nubes en el area me dirijo hacia el timonel y al llegar discuto con el mientras señalo puntos en el mapa de navegacion:

- Si nos acomodamos a 1000 metros sobre la nave objetivo y seguimos este angulo de descenso, podemos lograr una gran velocidad sin forzar los motores, combinado con la cantidad de nubes y sus tamaños genera un factor sorpresa efectivo-