Partida Rol por web

Crónica del Heredero - Episodio II - El Ascenso.

I - Un acaudalado enemigo

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15/07/2014, 21:29
Davros Zokk

Davros entró al local como si fuese su casa, esquivando ágilmente a la muchedumbre mientras se dirigía a la barra.

Cuando vio la barra y al posadero no pudo evitar sonreír mientras éste le daba la ruidosa bienvenida.

- Bueno, bueno, bueno, ya veo que sigues teniendo la misma exquisita clientela que siempre - Contestó al posadero, dejando soltar otra risotada acorde, mientras tendía la mano para saludar.

- Aquí sigo dando guerra, tras mi última visita también pensé que no te volvería a ver, pero no se si sería por mi lengua o tu cerveza, JAJAJAJA!! Siempre es un placer venir aquí, y como muestra de ello, te he traído nuevos clientes, que estoy seguro que apreciarás si les das la oportunidad... Pulgar, te presento a Ogna, Morwing, Loose, Zanc y Allen, espero que los trates como me has tratado siempre a mi... Y también que les cobres menos, bribón, JAJAJAJA!!!- 

El bravo luchador, dejó de hablar un momento por si alguno quería comentar algo y después continuó:

- Ahora mismo tenemos algo de prisa, pero más tarde estaría encantado de tomarme algo contigo y contarnos algunas mentiras, nos gustaría alojarnos aquí, nosotros y a nuestros animales, pero ten en cuenta que yo ésta vez no dormiré en las cuadras JAJAJAJA -

- Puedes ir poniéndonos algo de beber mientras, para mi, para mis compañeros y espero que te tomes una a nuestra salud, una jarra de hidromiel, si tienes por ahí, y para vosotros lo que queráis. Y algo de comer para llevar, por favor, unos filetes de pescado en bocadillos sería perfecto - dijo mientras comenzaba a sacar unas monedas.

 

Notas de juego

Me apunto las 30po y me borro lo que cuesten las bebidas, bocadillos, habitaciones y cuadras cuando me me pases la cuenta :D.

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15/07/2014, 22:05
Pulgar - Dueño del Festín de los Mares

Pulgar saludó sonriente y asintió ante la petición de alojamiento por parte de Davros. Tomad asiento amigo donde podáis, ahora mismo os llevaré la bebida y mis famosos bocadillos de pescaditos calientes! - El posadero miró por encima de los parroquianos a ver si localizaba un sitio libre para los seis compañeros. Al no localizar ninguno gritó con su grave y poderosa voz. - Soker!! Tú! Borracho hijo de puta, levántate de esa mesa, ¿no ves que tengo buenos clientes? - EL hombre identificado como Soker, era un hombre muy mayor, marinero retirado que buscaba una muerte lenta en los brazos del alcohol. Aún vestía con los atuendos típicos de la tripulación de los barcos, sin botas y con una camisa con tantos agujeros como salidas tiene una madriguera de conejos. El hombre se levantó a duras penas y dejó la mesa libre para el grupo. Pulgar caminó orondo hasta la mesa despejada y pasó un trapo renegrido, empapado en lo que podía ser agua, sobre ella para limpiar las cenizas, espinas y demás suciedad que se había acumulado allí desde tiempos inmemoriales. A continuación depositó dos jarras de hidromiel como el que suelta dos cubos llenos de pescado y se dirigió hacia las cocinas a por los bocadillos.

Notas de juego

Alojamiento por persona/día: 7 p.p  (Incluye los establos y el forraje para los animales)

Bocadillos y jarras de hidromiel: 4 p.p en total para los 6.

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15/07/2014, 22:24
Allen Shesar

El paladín no reparó demasiado en la clientela del local, su mente estaba centrada tan solo en encontrar a Walven. Estrechó la mano del posadero y atisbó que de no ser por Davros, la cuenta hubiese sido bastante más abultada, lo cual no le gustó demasiado. Tras el saludo y buscar un asiento para recuperar las fuerzas con la, llamemos comida que Pulgar les preparó, el paladín preguntó al posadero,-Señor, en esta bulliciosa ciudad, ¿los barcos que parten de aquí tienen alguna restricción en el horario de salida?-, esperó unos segundos y pensó que podría preguntar algo más,-¿quién o quienes son los encargados de dejar partir a estos barcos?-, preguntó Allen muy interesado.

Notas de juego

Observo con minuciosidad al posadero mientras responde.

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15/07/2014, 22:25
Pulgar - Dueño del Festín de los Mares

Pulgar apartó con el hombro a otro marinero borracho que pasaba por su lado para evitar que éste chocase con él. Acto seguido devolvió la mirada al paladín y contestó mientras depositaba los bocadillos. En Athkatla tenemos un Capitán Mayor, que es quien controla todos y cada uno de los barcos que entran y salen de puerto. - Contestó extrañado de que alguien no estuviese familiarizado con ello. Como el puerto está repartido a lo largo de las dos orillas hay Capitanes de Distrito que controlan los atraques de las naves y luego lo comunican al Capitán Mayor. No hay una hora límite para abandonar el puerto si todos los papeles están en regla. Ya sabes, por si te paran los guardias cuando sales de la bocana.  Pero hijo...si has visto cómo está el tiempo, me aparece a mi que pocos barcos soltarán amarras ya.  - Contestó frotandose su enorme barriga por encima del grasiento mandil.

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15/07/2014, 22:43
Ogna

Ogna esperó pacientemente en la cola mientras Losse hablaba. No le hacía mucha gracia que se encargara el elfo lunar de lo que ella consideraba que era un don natural en ella. Pero respiró hondo y se relajó un poco con el animado ambiente de la ciudad. Decidió centrarse en poner la oreja a todas las conversaciones de la gente alrededor. A veces con sólo escuchar se podían aprender muchas cosas. Y también miraba, ¡vaya que sí! Observaba a aquellos magos que inutilizaron su bonito cinturón, el que le había dado el enano, y le hacían algo más, ¿pero qué?

Cuando el elfo acabó y les dejaron pasar, le pellizcó una nalga y le comentó jocosa.- Buen trabajo, piquito de oro.¡Adentro!- Se ajustó el cinturón y pasó las puertas.

 

- Tiradas (1)

Notas de juego

Meto a Kormack por ser anterior a que se vaya.

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15/07/2014, 23:00
Ogna

- Más vale malo conocido que bueno por conocer.- Contestó Ogna a la propuesta de Davros de ir a la taberna que conocía. Ahí dejó en duda de si lo decía por el enano o por la posada. Le venía bien descansar de las impertinencias del enano por un rato.

De camino al Festín de Los Mares Ogna miraba todo con curiosidad infantil. Aquella ciudad era "enooooorme" pero el camino por donde iban era amplio y estaba muy cuidado.

- Esto es increíble.- Se cogió del brazo de Davros que caminaba el primero por conocerse el camino. Con él del brazo sacaba la lengua a las putas, bromeando, como diciéndolas "este es mío". Además se podía despreocupar y tratar de empaparse de toda la información que emanaba la ciudad. Con un grupo semejante hasta podían caminar tranquila de noche pro las calles siendo una muchacha de aspecto frágil como era. Pero el paladín estaba tenso y eso en una ciudad así se notaba. Entendía que estuviera preocupado, era para estarlo, pero si no se tranquilizaba le iban a jugar una mala pasada. Decidió dejarlo por el momento pues el pobre ya tenía suficiente con la desaparición de su hermano. Era un trago duro, aunque si a Ogna le libraran de uno de sus hermanos para hacerlo esclavo no sabía si iría a buscarlo.

En el Festín de los Mares Ogna se sentía casi tan a gusto como Davros. Enseguida se acomodó a tomar algo y descansar los fatigados pies después de poner a buen recaudo a Dientes. De nuevo, arrugó el ceño ante la impaciencia de Allen.

Así no tío, te van a comer vivo.

No quiso ser maleducada e interrumpir así que dejó que el paladín acabara el interrogatorio mientras bebía un pequeño trago. Cuando finalizó se aproximó a éste y le propuso un plan.

- Allen, si quieres puedo acompañarte al puerto. Pero déjame a mí hablar, ¿de acuerdo? Sé manejarme por este tipo de lugares con tanta gente. Así no me pasará nada si me acompañas. Hemos tenido suerte con el tiempo, así podremos ir con calma. En una ciudad como esta perciben tu debilidad, tus prisas y se aprovechan de ello.- Intentaba hacer ver al recto paladín que si dejaba ver muy claro su impaciencia acabarían jugándosela como a un pobre incauto.

- ¡Ey, Señor!- Dijo llamando la atención del camarero.- ¿Pulgar, no es así? Davros ya nos habló de los buenos momentos que ha pasado en esta taberna que espero que podamos disfrutar nosotros también.- Pasó el brazo por los hombros del bárbaro y lo zarandeó un poco.- No sé si usted habrá cambiando en este tiempo en el que no se han visto, pero este hombre de aquí, tiene madera de héroe. Es un portento.- Pegó un codazo a Davros.- No te hagas el tímido, ¿eh? - Volvió a mirar al tabernero.-Y los otros no se quedan atrás, por supuesto. Si yo le contara...- Dejó la frase en el aire para que el tabernero se interesara por lo que ella tenía que contar.-...pero no son historias aptas para cualquiera. Hay muerte, sangre y vísceras, aunque también me sé otras.- La verdad es que últimamente había compuesto poesías algo melancólicas, las que no eran sombrías y pavorosas.- ¿Qué le parece si mientras estamos alojados en El Festín de los Mares cuento algunas de esas historias? Podría ganarme unas propinas y usted algo de clientela. A cambio podría pagarme por actuación o como dispongamos entre nosotros.

 

- Tiradas (2)

Notas de juego

Si te parece Muni, yo hablo y tú observas y me proteges.

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15/07/2014, 22:55
Zanc Piesligeros

Zanc avanzó junto a los demás mientras observaba anonadado aquella enorme ciudadela, instintivamente se pegó a la pierna de Ogna y avanzó tímidamente junto a ella mientras observaba todo un mar de gente caminando de aquí para allá, era la primera vez que el Gnomo se encontraba en una ciudad de tales dimensiones y ahora más que nunca se sentía realmente diminuto, se dio cuenta que mucha gente ni se percataba que estaba allí, así que se relajó un poco y después de unos minutos de caminar ya había soltado la pierna de Ogna y caminaba más tranquilo, ciertamente aquello le intimidaba, pero el Gnomo se caracterizaba por acoplarse rápidamente  cualquier entorno, con miradas fugaces observaba la gente que había en el lugar, con oído atento escuchaba las palabras que la gente decía y con su acostumbrado disimulo se percató de que nadie los estuviera mirando... Ciertamente encontrar a Holmar en aquella ciudad sería casi imposible, pero ahora había una inmense ciudad que pedía a gritos ser explorada por un habilidoso Gnomo y eso le emocionaba bastante.

Al llegar a la posada asintió con la cabeza ante la presentación de Davros y tomó una jarra de Hidromiel a la vez que tomaba un largo sorbo. -Ahhhhhh!, me hacia falta una buena bebida!...- Tomó un nuevo sorbo y cuando los bocadillos llegaron a la mesa tomó algunos para después saltar de su silla mientras comía animadamente, sacó unas piezas de plata y las puso sobre la mesa... -¿Puedes indicarme donde están las habitaciones?, quisiera dejar mis pertenencias y salir a conocer un poco esta gran ciudad!... - Indicó al tabernero para después girarse hacia sus compañeros. -¿Que les parece si nos vemos al anochecer nuevamente aquí? Entonces podremos decidir cómo proceder después de conocer un poco el lugar, ¿Eh?.- Informó a los demás a la vez que guiñaba un ojo, entonces se despidió de los demás y siguió al tabernero para dejar algunas de sus pertenencias en la habitación para después salir de la taberna y dar un pequeño paseo por la ciudad.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Dejo en la habitación las flechas de tamaño mediano junto con las herramientas de artesano, la manta de invierno y la bolsa de dormir. Lo demás lo llevo en la mochila y lo que llevo equipado.

Pago mi habitación y la comida que me lleve comiéndome por el camino. Descuentalas de mi Dinero máster.

Dejo una tirada nada mas para saber si sé algo de algún mercado negro o cofradía de ladrones en Athkatla.

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15/07/2014, 23:07
Kormack Quebrantahuesos
Sólo para el director

Kormack iba de aquí para ya buscando una herrería para construir sus armas.

Notas de juego

Compro un hacha de guerra enana de Gran Calidad 330 po.
2 pociones CHL 100 po.
1 gran hacha 20 po.
2 pociones de armadura de mago 100 po.

Total 550 po.

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15/07/2014, 23:38
Pulgar - Dueño del Festín de los Mares

Pulgar se cruzó de brazos para responder a las preguntas de los compañeros de Davros. Si hubiese sabido que iban a preguntar tanto les hubiese cobrado mucho más desde luego... - Ya va coño!!! - Contestaba como respuesta a los golpecitos de impaciencia que los clientes hacían con el canto de las monedas sobre la barra. Por alguna extraña razón la muchacha le había caído bien, tenía desparpajo y si podía cantar podría ser un soplo de aire fresco a su taberna. Dudaba mucho que el estado etílico de los allí  presentes les permitiese distinguir una canción de los gritos con los que se obsequiaban las prostitutas cuando discutían, pero valía la pena intentarlo. 

Está bien pequeña. Me has convencido, puedes subirte en aquella tarima y cantar o tocar algún instrumento. Pero no quiero nada de canciones sobre amoríos. ¿Entendido? Si estos malnacidos consumen más con tus canciones - dijo refiriéndose a los clientes asiduos - no os cobraré por la comida ni por la primera jarra de bebida del día, además no tendréis que pagar tampoco por vuestras monturas. Así que ya sabes, a trabajar. - Concluyó señalando una tarima de madera al fondo de la taberna donde los parroquianos apoyaban sus bebidas.

Las habitaciones están en la primera planta joven. - Indicó al gnomo.- Aquí tienes tu llave, es la segunda a la izquierda. No rompas nada o te lo cobraré a la salida. ¿Vale? Disfrutad de vuestra estancia en el Festín de los Mares! Luego te veo "gran héroe". - Se despidió jocosamente de Davros para después retornar a sus quehaceres.

 

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15/07/2014, 23:58
Allen Shesar

Allen no estaba acostumbrado a grandes ciudades y si bien es cierto que su impaciencia pudiese jugarle una mala pasada con las gentes del lugar, el engañarlo era algo muy diferente.-Agradezco tu preocupación Ogna-, dijo a la delgada chiquilla a la vez que atisbó una sonrisa en su rostro,-pero has de comprender, y creo que así lo haces, que la vida de mi hermano está en juego y debo darme toda la prisa posible para encontrarle. No podré descansar agusto hasta que llegue ese momento-, comentó intentando que la pequeña jovencita comprendiese el estado en el que se encontraba el paladín. Tras regar su garganta con lo que quiera que hubiese en aquella sucia jarra que el también sucio posadero había no menos que arrojado a la mesa como si fuésemos animales, continuó respondiendo a Ogna, -Creo que la idea de que vayamos solos no es descabellada, pero sí peligrosa, mi máxima prioridad es mi hermano pero temo que estas calles me hagan apartarme por un rato de mi misión en pos de otra de menor importancia.-, explicó Allen intentado que Ogna supiese que aunque tenía un objetivo claro no podía dejar de lado su condición de Paladín de Tyr en ningún momento.

Allen miró al grupo y les hizo una propuesta. -Qué os parece si vamos al puerto, Ogna y yo mismo en un grupo, que será el que intente recabar información, y vosotros nos seguís a distancia tanto por si hubiese problemas y no pudiese proteger a Ogna como para estar atento a miradas furtivas de personas a las que no le gustasen ciertas preguntas. ¿Qué os pensáis?-, concluyó Allen a la espera de la respuesta de sus compañeros.

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16/07/2014, 00:01
Director

Notas de juego

Resultado de diplomacia: 

Éxito absoluto.

Resultado de Reunir Información:

Muchos exiliados tezhyrianos y antiguas familias amnianas están reapareciendo en Amn, expulsados de Tezhyr por sus crímenes. La mayoría de las familias exiliadas se concentran en Esmeltaran, Keczulla y Eshpurta.

Debido a la temporada de nieves que se acerca, el trafico rodado se verá reducido casi en su totalidad y sólo el tráfico marítimo estará abierto para los capitanes de barcos más osados. Sólo hay dos tipos de Capitanes que sueltan amarras en los días que vienen, los locos y los que temen por su vida si permanecen dentro de la ciudad.

Se dice que tres trasgos llegaron hasta las puertas de la ciudad ayer por la noche. Es la primera vez que estos seres se aproximan tanto a la ciudad y se teme que sean exploradores de algún ejercito de orcos que pretenda atacar la ciudad.

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16/07/2014, 00:09
Ogna

Estrechó su pequeña mano con la del tabernero.

- Un trato es un trato caballero. Nada de amoríos entonces ¡JA!- Le hacía gracia pues ella no era nada romántica.- Si le parece esta noche puedo preparar algo. Ahora llegamos cansados del viaje.- Sin más dejó al tabernero con sus quehaceres y se centró en sus compañeros. Primero el paladín.-  Te entiendo, sólo te doy un consejo y eres libre de aceptarlo o no. Si perciben tu necesidad se aprovecharán de ello. - Reflexionó un segundo sobr eel plan puetso sobre la mesa.-Tu idea me parece mucho mejor. Yo lo que no quería era ir sola por ahí, los puertos no son buenos lugares para una dama. ¿Y vosotros qué pensais?- Dijo mirando a Davros, Losse, Morwing y Zanc que ya estaba listo para irse a su habitación.- De camino me he enterado de cosas interesantes.- Sonrió satisfecha por que la vida le hubiera dado esas orejas de soplillo con las que sus hermanos la martirizaban. Les contó que debido a la temporada de nieves que se acercaba, el trafico rodado se vería reducido casi en su totalidad y sólo el tráfico marítimo estaría abierto para los capitanes de barcos más osados.- Sólo hay dos tipos de Capitanes que sueltan amarras en los días que vienen, los locos y los que temen por su vida si permanecen dentro de la ciudad. - Miró al hechicero aguantándose la risa.- El atractivo soldado de la puerta hablaba de tres trasgos que llegaron hasta las puertas de la ciudad ayer por la noche. Es la primera vez que estos seres se aproximan tanto a la ciudad y parecen temer que sean exploradores de algún ejercito de orcos que pretenda atacar la ciudad.

Notas de juego

No pongo a Zanc proque esto sucederías tras haberse ido supongo.

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16/07/2014, 00:47
Losse

Losse, poniendo la verdad por delante, sabía que no sería difícil acceder a la ciudad. Después de todo, con sus particularidades, el grupo no era de los peores que había visto en las tierras de Faerun. Le divertía la idea de haber sido él quien abriera el paso a su compañía, y, aunque su fuerte era la naturaleza, no se le daba tan mal vivir en la ciudad.

Losse había estado brevemente en Atkathla, aunque, desde luego, la zona por la que transitaban no la conocía. Por tanto, puso a prueba sus agudos sentidos para ver qué podía captar en el aire sobre alguna conversación que pudiera llamarle la atención.

Una vez en la taberna, puso a buen recaudo su burro y decidió probar un poco de sidra de aquella taberna a la que Davros les había llevado. Sin duda alguna, había probado muchas mejores, aunque, vista la compañía que había en todo el local, no le extrañaba que fuera uno de los lugares favoritos de Davros. - Vaya sidra más simple. Espero que esta ciudad ofrezca algo mejor que lo que hay aquí. - Pero después de todo, la sidra estaba mejor que la de Oaksville, no tanto por la calidad, sino porque el enano no se encontraba con ellos. Había paz dentro de la algarabía.

Ante la propuesta de Allen, no pudo negarse. Su extrema rectitud no encajaba, para nada, con su personalidad, aunque sí los fines que perseguían. Dejaría para otro momento poder visitar algún templo de Mielikki, su gran protectora. Después de todo, visto el entusiasmo de Ogna, Zanc o Davros, parece que su estancia en Athkatla no sería corta. - Está bien, me parece buen plan. Creo que seré más útil observando que sacando palabras. -

- Tiradas (1)
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16/07/2014, 01:14
Davros Zokk

- Me parece bien, Allen, yo también os seguiré, dejemos el equipaje en las habitaciones y empecemos a husmear. -

Notas de juego

Me llevo lo puesto, el resto lo dejo en la habitación. Y lo dicho, lo que paguemos sale de mi bolsa :D.

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16/07/2014, 01:58
Morwing

Morwing mantuvo su rostro oculto bajo su capucha en todo momento desde que ingresaron en la ciudad. Se dedicó a observar detenidamente a toda la gente con la que se iba cruzando sin articular palabra con sus compañeros y sin impórtale tampoco demasiado a donde quisieran ir a recuperar fuerzas.

El hecho de que Kormack abandonase el grupo lo consideró en cierto modo imprudente ya que, lejos de conseguir recopilar información, lo más probable es que terminase metiéndose en algún lío, lo cual no le perturbaba demasiado…

Ya dentro de la posada, Morwing asentaba la cabeza ante el plan expuesto por Allen. – Me parece buena idea, pero si os parece yo os acompañaré también a ti y a Ogna

- Tiradas (1)

Notas de juego

Tirada para Conocer el efecto de la varita en la entrada

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16/07/2014, 03:50
Director

Una vez hubieron decidido la forma en la que actuarían de aquí en adelante, los compañeros fueron a las habitaciones para soltar las alforjas de los animales así como todo aquello que no necesitaban llevar encima. Cuando alcanzaron sus habitaciones pudieron comprobar en primera persona que descansar en ellas sería una tarea complicada. El ruido de las jarras golpeando las mesas, las sellas y mesas siendo arrastradas por el suelo y el murmullo de conversaciones eran tan nítido como si se estuviese durmiendo en el salón principal. Por lo demás las estancias no estaban todo lo limpias que habrían podido desear, pero eran mejor que dormir al raso.

Abandonaron la posada con aún varias horas de luz por delante que les permitiría al menos recorrer todo el muelle sur de la ciudad. En la puerta del Festín de los Mares se despidieron de Zanc quien iría por libre en la búsqueda de información, con el trato de encontrarse con ellos en la posada cuando cayese la noche.

Notas de juego

No incluyáis ni a Zanc ni a Kormack en el resto de las conversaciones.

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16/07/2014, 04:09
Director

Dejaron atrás El Festín de los Mares para dirigirse a los muelles que se extendían a lo largo de la orilla sur de la bahía. El ambiente en ellos era un frenesí de actividad pese a que la afluencia de barcos ya habían comenzado a disminuir en los días anteriores. Carros cargados con cajas de madera y sacos que contenían mercancías más exóticas provenientes de los lugares más lejanos de los reinos eran arrastrados tanto por bestias de carga como por estibadores desde los barcos a los almacenes cercanos, en donde se apilaban para hacer el posterior inventario y enviarlos a sus destinatarios finales; habiendo pasado previamente por media docena de intermediarios que elevaban el precio final en más de un cien por cien del valor original. Marineros borrachos y serenos recorrían los muelles en toda su extensión abrazados a mujeres que probablemente no eran sus esposas ya que estas compartían el estado de embriaguez, y a veces superaban, el que tenían los primeros. Gente besándose y manteniendo relaciones sexuales tras las cajas de pescado en salazón, niños corriendo y luchando con espadas de madera contra ejércitos imaginarios que los rodeaban y pescadores que lanzaban sus cañas de pescar al agua definía al barrio como una zona de contrastes donde cada paso era una imagen cargada de vida.

Cientos de barcos de todos los tamaños y calados se movían al ritmo de las olas en un movimiento ondulante que resultaba casi hipnótico. Todos permanecían con las velas arriadas, con el ancla echado y amarrados a los grandes bloques de hierro que había en tierra firme a través de gruesos cabos.

Durante el periodo de tiempo que permanecieron dentro de a posada el espesor de la nieve acumulada sobre suelos y tejados se había triplicado. En los embarcaderos, pese al continuo movimiento de personal a través de ellos, la nieve se resistía a desaparecer. Ello era debido a la corriente de aire helado proveniente del mar, la cual acentuaba el ya de por si frío reinante en el lugar. 

Allen caminaba con paso seguro flanqueado por el hechicero elfo y Ogna. A una distancia prudencial de estos, y tratando de no llamar demasiado la atención, caminaban Davros y Losse. 

 

Notas de juego

Esa es la zona en la que os vais a mover durante las próximas horas. Podéis interactuar con quien queráis.

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16/07/2014, 05:52
Zanc Piesligeros

Zanc encaminó sus pasos hacia el distrito del puente, tal y cómo le había dicho su amigo enano, era verdad que la mayor parte del tiempo era insoportable, pero de alguna manera era el que mejor le caía de todo el grupo, el pequeño Gnomo caminaba con pasos acelerados en medio de la multitud, pidiendo indicaciones a algún buen samaritano para que le guiara hasta su destino... -Vamos Kormack, espero que no hayas armado ninguno de tus acostumbrados líos- Pensaba el Gnomo mientras avanzaba y prestaba atención a los posibles rumores que estuvieran hablando todo tipo de personas.

- Tiradas (1)
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16/07/2014, 06:45
Kormack Quebrantahuesos

Kormack pasó el mediodía recorriendo los puestos de los mercaderes buscando aquellas cosas que necesitaría en los días venideros. Al no conocer bien cómo estaba distribuido el mercado se perdió media docena de veces pero al final consiguió lo que buscaba, un mercader de armas al cual le compró el acero que necesitaría para forjar un nuevo hacha. Su antiguo hacha estaba más que mellado ya y era buen momento para sustituirlo. 

No muy lejos de allí, en una tienda de campaña que recordaba a las que utilizaba cuando tenía que acampar en a la intemperie, encontró el enano a un tratante de pociones. Era un sujeto extraño que hablaba con un acento que no había escuchado en su vida. Su rostro moreno le recordaba a los orcos pero sus físico era totalmente humano. Al fin y al cabo daba igual, lo importante es que tras varias horas había conseguido obtener lo que estaba buscando y para Kormack eso era motivo de alegría.

El enano tardó largo rato en encontrar una herrería que le permitiese utilizar su fragua para forjar sus propias armas. Al final lo consiguió en una regentada por otro enano que se había trasladado a la ciudad hacía más de una veintena de años. Allí paso las horas martilleando y dando forma a su nuevo arma.

 

- Tiradas (3)

Notas de juego

Hacha de guerra enano: Fabricado.

Proceso de hacerla de Gran Calidad: 440 de 3000.

En 7 días de trabajo volverás a tirar para seguir avanzando.

Espero para moverte porque a la posada irás ya por la noche. Tengo que ver qué van a hacer el resto en el tiempo que tu estás en la herrería.

 

Coste:

100 po de las pociones de curar heridas leves.

110 po del hacha de guerra enana de Gran Calidad.

7 po del Gran Hacha

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16/07/2014, 07:12
Director

Zanc abandonó la zona sur de los barrios bajos para dirigirse a lo que los ciudadanos llamaban el distrito del puente. Esta parte de la ciudad no era un barrio como tal, pero la gente que allí vivía había desarrollado unas costumbres y una forma de vidas muy particulares. Ambos lados del puente estaban vigilados por la guardia de la ciudad que controlaba el paso de mercancías a través del puente. Los mercaderes debían pagar un derecho de paso que dependía de la cantidad y el valor de las mercancías que transportasen. El puente, era una estructura de piedra de unos trescientos pies de largo y unos treinta de ancho. Era el único paso terrestre que unía ambos extremos de la ciudad y que además impedía que barcos de gran calado remontasen hacia la parte alta del río. Sólo pequeños barcos comerciales y barcas de remo tenían permitido su paso bajo él y sus vigorosas columnas. Este flujo de comercio hacia el noreste estaba controlado por el "Gremio pequeños y medianos mercaderes" como el gnomo pudo escuchar a medida que avanzaba hacia alguna posada característica de la zona. Athkatla era una ciudad llena de engranajes y el aceite que facilitaba su movimiento eran los gremios. Los había de toda clase: zapateros, herreros, vinateros, joyeros, alfareros, carniceros... en fin, casi tantos como profesiones diversas existían dentro de la urbe.

Tras largo rato caminando Zanc encontró lo que buscaba, la taberna más representativa del barrio. La sala principal de La Corona de Cobre, que es como se llamaba, era apabullante para el que la veía por primera vez debido a su tamaño y al ruido que dentro de ella había. Decenas de mesas junto con centenares de taburetes y sillas estaban repartidas aprovechando cualquier rincón del salón. Los camareros se movían por corredores invisibles llevando bandejas de comida y bebida a cada uno de los comensales. Un gran fuego central y varias parrillas para ahumar pescado y asar carnes dominaba el centro de la sala impregnando todo a su alrededor con un humo pringoso y de un olor característico. A mano izquierda según se entraba por la puerta, un pequeño foso circular con el suelo lleno de arena y a varios pies por debajo del nivel principal daba a entender que allí los guardias no entraban a menudo. Desde la puerta ya se podía distinguir pequeños rastros de sangre en su interior y para subrayar lo anteriormente citado, varios brutos equipados con garrotes acolchados y con miradas fieras como perros de presa vigilaban que nadie se propasase más de la cuenta con las camareras o montase más escándalo de lo normal, aunque la palabra "normal" aquí solía ser traducida por "inadmisible" en cualquier otra posada de la ciudad y puede que de Amn.

En la pared más alejada existían varias puertas custodiadas también por el personal propio del establecimiento, algunas en la planta principal y otras a las que se accedía por unas escaleras de madera. De vez en cuando algún hombre era saludado por los guardianes y acto seguido le daban acceso al interior con prontitud y una ligera reverencia.

Entre todo aquel barullo podía distinguirse una barra bastante amplia en la que varios camareros servían bebidas a un ritmo endiablado y tras ellos un hombre con los brazos cruzados que escrutaba cualquier detalle del salón como un halcón localizando a la paloma que será su próxima pieza. Zanc tomó asiento de una de las mesas libres y aguardó a que Kormack quisiese aparecer. Tras aguardar durante al menos tres horas la llegada del el enano, Zanc bebió varias cervezas intentando no sobrepasarse por si tenía que recurrir a sus sentidos en caso de problemas. 

Notas de juego

Tras tres horas de espera el enano sigue sin aparecer.