Partida Rol por web

Clack!

Aquel sonido no traería nada bueno, cuando observador levanto la vista luego de presionar con uno de sus pies una baldosa, el sonido de una especie de ventilador comenzó a proyectarse hasta que otro sonido como un estruendo reboto por todo el lugar. Un fuerte dolor en el pecho y luego un golpe contra una de las paredes.

El cuerpo del justiciero yacía sobre el frio suelo, pese a que había aguantado el dolor se manifestaba dejándole por algunos segundos recuperar el aliento. Observador se empujó hacia arriba, lentamente se colocó de pie mientras su mano derecha se posicionaba sobre el disparo que aquella trampa le había propinado de forma certera.

-No se molesten… estoy bien- Si pudieran verle la cara detrás de la máscara, sabrían que esas palabras venían acompañadas de una cara de culo de aquellas.

Toraño no tuvo opcion a hacer nada, la situacion paso tan rapida que cuando quiso darse cuenta, sus compañeros ya estaban intentando recuperarse.

-No podemos avanzar asi, si el suelo es peligroso, deberiamos de avanzar por el aire, puedo intentar avanzar poco a poco sin tocar el suelo ni el techo y ver que hay mas adelante

- No hombre, tron- protesto.- Es una base robotica de toda la puta vida, tendrá trampas activadas por baldosas, rayos laser, microfonos y todo tipo de pijadas. Alguién os ha dejado entrar por algo, igual que a nosotros. Si quisieran liquidarnos ya nos habrían matado. Lo mejor será que el señor caracuero aquí presente se pase el minijuego de hackear y no la cague y así ya podemos seguir.

Me ha dolido.

Aprieto los ojos por la quemazón, mi rostro se frunce y quedo mirando la parte superior de mi pantorrilla, donde una fea marca rojiza empieza a amoratarse sin que pueda hacer nada. Compungida miro con incredulidad a Observador ¿Por qué ha sido tan descuidado?

- Pues yo no estoy bien -respondo ofuscada a Observador ante su falta de empatía- ¿Cómo vas a andar por un lugar como este sin tomar las precauciones necesarias? Pudiste terminar la vida de uno de nosotros- intento ponerme de pie sin tocar nada más que la baldosa en la que he caído. Agradezco el gesto de Bastión de preguntar cómo estábamos, al menos alguien mantenía la cordura en la sala. Me levanto lentamente sin apoyar del todo la pierna herida en el suelo. 

Escucho a Enlace - No lo sé, pero si se te ha ocurrido algo Enlace, inténtalo- me quedo callada un rato pensando la forma en que Chafakra intenta protegerla. ¿Será que...? ladeo la cabeza y miro al niño sin modales. Bueno, hay cosas que aún no entiendo de los humanos.

Cuando veo levitar a Toraño y hablar me quedo en silencio, recién me acuerdo que existe. Claro, él podía volar, si ya lo había hecho antes en el helicóptero. Me cruzo de brazos, he apoyado la pierna en el suelo y comprobado que no hay dolor. Solo una sensación de quemazón, he tenido suerte.

- Oye Toraño, pues como no nos hagas volar a todos. Seguimos igual.

Observador ahora ya al tanto de las trampas volvió a caminar con cuidado hasta llegar a los tableros, los miro por aproximadamente dos minutos sin moverse como si intentara comenzar a pensar como la máquina que se había apoderado de este lugar, algunos recuerdos volvieron de varios años atrás. El pecho aun dolía pero el traje había absorbido el daño y por lo menos estaba con vida, no recordaba cuando ansiaba esa dosis de adrenalina.

-Bien lo intentare nuevamente-

Intento reunir la mayor parte de información y desactivar las trampas por lo menos de esa zona y la siguiente a la que tuvieran que ingresar, si necesitaba algo más lo haría con tiempo y no con una puta maquina asesina mordiéndole los talones.

-Creo que lo logre- aguardo en silencio esperando que algo saliera de la nada, mientras copiaba parte de la informacion y la mandaba al aerodeslizador.

Observador avanza, esta vez con mayores precauciones, por la sala, pisando con cuidado. Llega hasta el panel y comienza a pulsar combinaciones de teclas, causando un incesante pitido intermitente cada vez que trata de accionar comandos diversos con la esperanza de que alguno de ellos le confiera la llave de la puerta. Finalmente, uno de ellos suena diferente al resto, y acciona la exclusa que tenéis delante, la puerta de salida, que se abre con un fuerte sonido hidráulico.

Salís por ella, accediendo a una intersección de corredores. Hay uno frente a vosotros, y otro más a cada lado, formando un ángulo de noventa grados respecto al primero. Los corredores laterales avanzan varias decenas de metros antes de perderse, ya que discurren en lo que parece una trayectoria circular, o al menos ligeramente curva. En cambio, el corredor frente a vosotros discurre en línea completamente recta, finalizando a unos cincuenta metros en una exclusa de gran tamaño y aparentemente resistente.

Las paredes junto a la puerta comienzan a moverse, liberando placas de metal y descomponiendo cables y planchas en diversas formas, que comienzan a reunirse en un punto frente a la puerta. Todos los que estábais allí recordáis el modo en que Duna se os apareció en el túnel, antes de hacer caer el lago sobre vosotros. Parece que esto sea una manifestación parecida, aunque más lenta ¿Con qué propósito?

Al desviar la mirada hacia el corredor de la derecha, ambos llegáis a detectar un movimiento, algo parecido a un trozo de tela blanca desapareciendo por una puerta lateral situada en la pared de la izquierda de dicho corredor, a unos veinte metros de distancia de vuestra posición.

-¿Que demonios pasa?- pensó para sus adentros mientras lanzaba furtivas miradas a diestro y siniestro. Aquella demostración de control sobre la base ,ya había sido presenciada por sus ojos mas ,aun la sorprendía. pero lo que le sorprendía mas era que el resto de sus compañeros semejaban estar tanto o mas sorprendidos que ella ya que ninguno parecía reaccionar.-¿ A que esperan?- pensó a la par que , inconscientemente, volvía sobre sus pasos para arrinconarse en una de las metálicas esquinas del pasillo.

Con un montón de ideas en su mente, Enlace no estaba segura de si envalentonarse y actuar en consecuencia o si  quedarse tras el enorme cuerpo de Bastión a la espera de que nuevo peligro tenia preparado la base de Iberia Inc. De repente, una fugaz idea se caló en su mente.-¿Por que no volver a conectar con la mente de Duna?-

Sin dudarlo, Enlace se concentró en buscar la consciencia de Duna e intentar enlazarse con ella,quizás así conseguiría mas información o evitar que  los masacrase.

-Que funcione...que funcione...-susurró al tiempo que cerraba sus ojos y se concentraba...

- ¡Eh!- grito- ¡Ven aquí me cago en la ostia!- sigo, aludiendo a la figura que se escurre. Al mismo tiempo estiro mi cuello para, sin tocar nada, llegar a ver que hay al doblar la esquina.- ¡Me tenéis hasta los putos huevos ya, joder!

Si, el hablador de Chafakra también le había visto.

Observador desenfundo su arma y apunto en la dirección del movimiento, estuvo a punto de lanzarse tras la tela blanca  pero se detuvo. Reviso el cuarto con cuidado una vez por las trampas, tras un minuto o más encendió tras tocar en un lateral de su casco la visión infrarroja.

-Tu dildo de goma,- Se referia a Chafakra -vamos a por esa cosa-

Instintivamente movió su corpachón para formar una barrera de carne y metal entre la naciente representación de Duna y el resto del grupo, cubriendo principalmente la pequeña Enlace. Plantó el escudo en el suelo con un sonoro clank y afianzó las piernas, preparándose para lo que pudiera venir.

- Lo siento Duna, pero esta vez no. - Y viendo que los demás ya estaba tomando posiciones y decisiones, apuntó una de sus manazas hacia la figura que se estaba componiendo y se concentró para tratar de alterar la gravedad en el punto en que se estaban arremolinando las piezas para evitar que estas llegaran a formar el cuerpo de su letal anfitriona. Hasta que habló Observador, rompiendo su concentración con esa soez expresión. Tomó aire, farfulló bajo el poblado bigote y trató de serenarse y concentrarse de nuevo antes de que fuera demasiado tarde.

¡Maldita sea! Las paredes se contraen...

En el acto entiendo lo que hace observador, al menos tuvo la precaución de buscar cualquier otro tipo de trampa en la sala. Bastión se posiciona y protege la salida del grupo.

Me muevo hacia la salida junto a Enlace y Chafa.

- Es ella -digo- lo esta haciendo, pero podría aplastarnos si se lo propusiera. Hay algo que está sucediendo, o nos llevará a donde ella quiera o alguien la está controlando.

Te concentras en las mentes pensantes de las cercanías. Inmediatamente te llega un rumor lejano. Más que lejano, imposible de determinar su procedencia, pues parece estar en todas partes, a tu alrededor, como si la mente estuviera expandida por todo el lugar. Quizás sea exactamente eso, pero el caso es que logras contactar con esa mente, solo que el mensaje que te llega a través suyo te pone los pelos de punta.

...huid, por favor ¡¡Huid!! No puedo resistirme, me controla, me tiene a su merced... ¡¡Huid, o tendré que mataros!!

Bastión se concentra en controlar la gravedad en el lugar donde las piezas y cables tratan de conformar una figura humanoide, pero la lejanía o los nervios de la situación hacen que su poder no tenga efecto alguno, para su frustración. La figura sigue formándose.

Un crujido advierte de lo que va a acontecer, pero nadie tiene tiempo de actuar. Una placa del techo sobre Bastión y Toraño se desprende, y al caer se ve que tiene sobre ella varias planchas y un chorro de metal líquido ejerciendo un inmenso empuje sobre ella. Bastión apenas tiene tiempo para hacer más que contemplar cómo la plancha cae sobre su compañero, aplastándole bajo toneladas de metal.

El impacto es tal, que Enlace se sobresalta por él y por el contacto que trata de mantener. Chafakra, Icantia y Observador detienen un instante su carrera al verlo, una mole aplastando el cuerpo del que hasta hace un instante era su compañero. Muerto, irremediablemente.

Observó inmóvil como el techo se desplomaba sobre su compañero antes de que pudiera reaccionar para evitarlo. Hubiera podido apartarlo de los escombros, empujarlo de la trayectoria de las placas o cubrirlo con su escudo. Hubiera podido alterar la gravedad para hacer flotar el metal o golpearlo con su fuerza sobrehumana. Hubiera podido hacer muchas cosas para salvar la vida de Toraño, pero no tuvo tiempo de hacer nada, no reaccionó a tiempo.

Estaba horrorizado y furioso a partes iguales. Furioso consigo mismo, con el gobierno que los había llevado allí abajo sin haberles dado entrenamiento alguno y sobretodo furioso con Duna. Habían ido allí a ayudar... Y ahora su compañero estaba muerto. Muerto por su culpa.

Reaccionó de forma explosiva. Con un rugido nacido de lo más profundo de sus entrañas lanzó el pesado escudo de metal contra la forma recién creada de Duna, multiplicando exponencialmente la velocidad de este al modificar la gravedad y disminuir así la fricción del proyectil improvisado.

Y apenas el escudo abandonó su mano, empezó a correr hacia Duna, dispuesto a arrollarla en caso de que evitara el impacto o consiguiera sobrevivir a este.

El espectáculo dantesco que se había dibujado ante los ojos de la joven Enlace fue suficiente como para perder la concentración que tanto le había costado conseguir. Un grito ahogado salió de su boca abierta,mas no hubo sonido que lo acompañase. Los aterrados ojos siguieron la transformación del metal de la estancia en la figura humanoide, que miraba al grupo con inertes pupilas.

Incapaz de dejar de temblar, ya que el miedo se había adueñado de su cuerpo; intentó parar sin éxito a la enorme mole que era bastión. Sintiendo como de sus ojos resbalaban salinas lágrimas, consiguió escupir una frase:

- No es Duna...No es Duna...-

- ¡La hostia puta!- exclamo, sorprendido.- ¡Que nosotros venimos aquí de buenas, joder!- le grito a la figura metálica.- Y encima lo has puesto todo perdido, hija de puta- añade, al ver los restos de grasa de motor y cachitos de cerebro salplicando la estáncia. Pero fuera quien fuera que se había escurrido por el lateral era quien estaba detrás de esto. Cualquiera lo sabía, un gran monsturo de metal con varias transformaciones  era un clasico de boss final. Se lo cargarían sólo para descubrir que era el principio de una trama más complicada. Ja, a mi no me la dan con queso, joder.

Ignorando al figura metálica, me dirigí hacia el lugar dónde había visto escabullirse la figura.

- Aguantad esta puta aquí, creo que tengo algo.

Observador quedo inmóvil al ver lo sucedido pero tras un par de segundos reacciono – Balas explosivas – El arma hizo un cambio interno cambiando el tipo de munición, y apunto sin más disparando dos veces contra la criatura metálica. – Maldito engendro…- escupió las palabras antes de apretar el gatillo. Quizas ya estaba hasta los huevos en tan poco tiempo de este lugar o simplemente disparaba contra la criatura por mero placer.

En plena carrera me detengo sin pensar, estoy anonadada por lo que estoy presenciando. Tiene que ser un mal sueño, no se supone que vea perder a un camarada en el primer día y que no hiciera algo por ayudarle. 

¿Es así como terminó ella?

Me quedo helada observando el cuerpo de Toraño ser aplastado, como quien aplasta una simple mosca, un incordio, nada.

No puedo desaparecer aquí. Ella esta esperando que la encuentre y solo yo puedo encontrarla.

Avanzo algunos pasos siguiendo el camino, solo para lograr ver como Bastión reacciona ante la muerte de Toraño y carga contra la figura metálica de Duna. ¿Por que es Duna, no?

Observador dispara dos veces y no se porque siento que es inútil lo que ambos hacen. Miro a enlace y alzo la voz hacia ellos.

- Debemos marchar para poder hacer algo. ¡Es una locura lo que intentan! Creo que lo que menos querría es que todos quedemos sepultados aquí abajo sin haber hecho nada. -me daba rabia decirlo, ni siquiera sabia si quedaba algo de el para poder llevarlo a su familia.

Nada.

De pronto me senti muy enojada conmigo misma, debía llegar al agua para poder ayudar.